[Minato]
Veía al pequeño Sasuke dormido a mi lado, su pecho subía y bajaba calmado dejando a entender que dormía profundamente, realmente es un niño muy hermoso, toda una joya para la familia Uchiha al igual que su hermano. Su hermano, es imposible olvidar aquella petición que me hizo Sasuke, ¿Ver a Itachi? No creo lograr eso, al menos no por ahora.
Itachi es pertenencia de mi hijo mayor Deidara, y él es muy posesivo con respecto a Itachi, es como un maldito niño con su peluche preferido que no suelta por nada del mundo incluso acepto que Itachi fuera a la universidad con la condición de que él mismo iría con él para asegurarse que nadie le pudiera ni siquiera le tocara el más mínimo de sus cabellos. A veces agradezco eso de Itachi, de no ser por él mi hijo aún se estaría negando a ir a una universidad solamente por estar encaprichado con la idea de hacerse caso del territorio que le corresponde con todo el conocimiento que ya sabe, es tan terco y obstinado como su madre.
Kushina, recordarla me hace sonreír. Que mi pequeño azabache sienta celos hacia mi esposa es adorable si tan solo supiera que no me voy a divorciar de ella, ¿Nunca han escuchado que no importa cuántas amantes tenga un hombre, él jamás dejara a su esposa? Pues es cierto, amo a Kushina, es la mujer de mi vida, me enamoré de ella desde que éramos unos niños, la he cuidado y amado desde siempre,es mi mujer, la madre de mis hermosos hijos. Sasuke es solo un pasatiempo una vez que tenga 18 años lo mandaré a la universidad y que se largué de mi vida, yo no soy como Deidara, no, yo solo quiero a mi hermoso azabache porque es mi mascota pero no se preocupen, no soy tan cruel ya les dije que lo dejaría en la universidad para que al menos pueda hacer bien su vida con todos sus estudios completos, al menos no me da tanto problema con eso, es un mocoso inteligente y según dicen en la escuela es de los mejores promedios para tener la edad que tiene, es adorable.
Aún recuerdo ese día cuando su miserable padre rogaba para que no lo matara, asqueroso hombre ni siquiera pudo respetar a sus hijos me daba asco, iba a matarlo de una vez pero con tan solo recordar el rostro hermoso de mi azabache fue imposible negarme a quedarme con ese niño tan vulnerable y tierno, ahora mírenlo, parece toda una prostituta para tener 13 años lo adoró y me vuelve loco en la cama, es tan pequeño y apretado que me encanta, me gustaría dejarlo así de apretado pero con solo pensar en que tendré a mi hermoso azabache lleno de semen pidiendo más y más mientras me mira con esos ojos negros brillantes tan preciosos que tiene, maldición la polla se me pone dura de imaginarlo.
– Papi... – Esa es otra cosa que me vuelve loco, cuando me llama de esa forma, maldición es tan irresistible que es su maldita culpa que me comporte así.
Sasuke se sentó en la cama y me miró mientras se frotaba los ojos, tenía una hermosa sonrisa pequeña que no pude evitar darle un beso en los labios, él solo me abrazo y volvió a cerrar los ojos, me dio los buenos días cómo le he enseñado y que bueno que lo cumple porque en este momento lo necesito.
Mi hermoso azabache fue bajando poco a poco dejando pequeños besos en mi pecho hasta llegar a mi miembro, dios, voy a arder en el infierno por haberle enseñado a un niño este tipo de cosas pero no me importa, mi Sasuke es perfecto y da unas mamadas como dios manda, como su boca es pequeña parece que se ahogara por el tamaño que no es por presumir pero estoy bien dotado. Miro a mi hermoso azabache lamiendo, chupando, incluso dando leves mordiscos que provocan todo un placer en mi interior, maldición es la mejor maldita mamada que me han dado, si sigue así al paso de los años se convertirá en todo un puto, mi maldito puto.
Cuando terminó su trabajo me miró abriendo la boca, hacía eso para asegurarme que lo había tragado todo y me hizo sonreír. Me levanté de la cama, me puse un pantalón y mire a Sasuke haciendo lo mismo, le extendi la mano y él no dudó en tomarla, fuimos a la cocina, él mismo fue a la alacena, tomo un cereal y luego saco la leche de la nevera.
– ¿Tienes escuela hoy? – me senté frente a él y lo vi comiendo feliz, con ese brillo en los ojos que me encanta tanto.
– Nop. – seguía comiendo rápido. – Pensé que tal vez tú podrías... – bajo la mirada, conozco esa mirada, quiere que salgamos. – Bueno... Quiero ir al cine contigo papi... – ¿Cómo puedo decirle que no a esos ojos suplicantes? – Hoy estrenan una nueva película y la quiero ver contigo... –
– Está bien mi amor, iremos al cine. – Tengo que darles leves gustos por si no puedo traerle a Itachi como tanto me pidió. –
[Sasuke]
¡La película fue fantástica!
Adoro pasar tiempo con Minato, es tan lindo cómo me quiere tanto y acepta tener estas salidas conmigo, confío tanto en él que estoy seguro que pronto me dejara ver a mi hermano, eso también me hace tan feliz... Ver a Itachi después de tanto tiempo... ¡Estoy tan contento!
– Sabes papi, estoy muy feliz el día de hoy. – lo abrace y él me acarició el cabello.
Mi hermoso amado de cabello rubio... Cerré los ojos disfrutando las caricias que estaba recibiendo en mi cabello, en serio amo tanto a Minato.
– Me alegra que estés feliz, haría todo para que estés feliz. – No pude evitar verlo a los ojos. – Está noche vendrá la persona que te dije. – ¿La persona? Oh ya recuerdo, debe ser esa que vendrá para el trío... Aún me da miedo eso, no sé qué es, o sea, si sé que vamos a hacer pero no sé cómo lo vamos a hacer.
– Está bien... Confío en ti. – Claro que confío en mi papi, él nunca permitiría que alguien extraño venga y me haga daño, confío en que todo saldrá bien y seré bueno... Haré todo lo que me digan que haga para que mi papi se sienta feliz conmigo. –
El día de hoy fue tan lindo y tranquilo, después del cine fuimos al parque y luego comimos algo en un puesto de comida. Ahora estoy en mi habitación descanso un poco, cuando llegamos mi amado me dijo que tenía que salir a hacer unas cosas y que cuando volvería ya estaría con esa persona, ya me di un baño, dormí un poco y ahora estoy terminando la tarea que tenía pendiente, es fácil así que estoy seguro que cuando llegue Minato ya habré terminado.
[Naruto]
Por más que trate y trate jamás voy a poder estar con Hinata, no lo entiendo realmente lo intento y no es porque sea fea, no, ella es hermosa y tiene un cuerpo que cualquier mujer mataría, Ah maldición. Me levanté de la cama y me vesti, debía ir con mi padre al parecer iba a llevarme a un lugar que me ayudaría con este problema.
– ¿Ya te vas? – mire a Hinata que se sentaba en la cama cubriéndose el pecho con las sábanas. Le sonreí y asentí con la cabeza, ella es tan adorable.
Hinata es mi novia porque mi madre me lo pidió, no quería verla triste así que acepte. Ya era suficiente con la decepción que tuvo cuando se enteró que no iba a tener nietos por parte de Deidara, no entendí porque ella se sintió tan decepcionada de él si me lo preguntan prefiero que mi hermano sea gay a que sea un maldito drogadicto e Itachi tampoco es tan malo, es agradable y gracias a él ahora mi hermano estudia en una universidad pero supongo que mi madre no logra verlo.
– Tengo una reunión con mi padre dentro de una hora, nos vemos mañana. – Me acerque a ella y le di un beso en la frente. – Nos vemos. –
Termine de arreglarme y salí de su apartamento, a veces me siento mal por ella ¿Saben? Ella luce tan enamorada y feliz cuando estamos juntos pero yo... No estoy enamorado de ella, la veo más como para matar el momento pero en cosas de pereja no me complace del todo, algún día le diré que no la amo porque ella no merece todo esto, no merece que la ilusione de esta manera, no merece a un idiota como yo, no merece sufrir tanto. Le pase un mensaje a mi padre para avisarle que ya iba en camino a su casa de prostitutas, aquella casa que está al centro de la ciudad donde mete a vivir a sus juguetes hasta que se cansa de ellos, sé sobre esa casa y sus amantes desde que tengo 17 años cuando mi padre me la presto un tiempo para pasar el rato con uno de esos "amores" de la adolescencia además a veces van allá algunos mafiosos cuando no tienen nada que hacer. Mafiosos... La mafia de mi padre es de gran poder tiene un gran terriorio, mi hermano se quedó con el territorio del sur porque es el mayor pero no es problema para mi, sé que en algún momento a mi me tocará la parte de mi padre y me encanta porque el territorio que maneja mi padre es el que tiene más poder, más que el que maneja Deidara solo es cuestión de tiempo.
Una vez que llegue a la casa y dejé mi auto en frente, no debo tardarme tanto en esto como para guardar el auto en el garaje de seguro me va a dar un sermón sobre que debería hacer o algo así que fastidio. Una vez dentro vi a mi padre en el medio de la sala esperándome con una sonrisa en sus labios, conozco esa mirada y les puedo decir que esto será más que un sermón, maldición no quiero estar aquí tanto tiempo.
– Hijo que bueno que llegas, por un momento pensé que no ibas a venir. – maldición, esto tardará más de lo normal.
– Solo tarde 30 minutos no es para tanto. – Suspiré y me crucé de brazos. – ¿Que sucede padre? –
– Ven conmigo, quiero mostrarte algo. – Empezó a caminar hacia el pasillo.
Lo seguí en silencio, fuimos hasta la última habitación me resultó extraño que todo estuviera tan tranquilo, entonces lo entendí. Cuando entramos a la habitación pude ver a un pequeño niño de piel blanca y cabello oscuro que dormía tranquilamente en la cama, mire a mi padre quien aún seguía con esa sonrisa en su rostro algo en esa sonrisa me daba cierto asco, ¿Será que ese niño es lo que pienso?
– ¿Que es eso padre? –
– No hagas tanto ruido, ¿No vez que está dormido? – acercó su dedo a sus labios dándome a entender que hiciera silencio, mi padre fue con el niño y le acarició la espalda suavemente para que se despertara. – Sasuke despierta... – El niño abrió los ojos y... Demonios, tenía unos hermosos y brillantes ojos oscuros que no pude dejar de mirar.
– ¿Papi? ¡Papi! – "Papi" maldición, es eso lo que estaba pensando. Ese niño que debía tener entre 10 años y que abrazaba a mi padre es mi hermano, de seguro debe ser con alguna de las prostitutas con las que ha estado. Dios, si mamá se entera va a enloquecer.
– ¿No te parece adorable? – Mi padre abrazaba al niño mientras le acariciaba la espalda fue entonces cuando el niño se dio cuenta de mi existencia en esta habitación y me miraba con sorpresa. – Sasuke, él es mi hijo menor. –
– Padre, ¿Que es todo esto? – Ya me estoy hartando, si me va a decir lo que parece obvio entonces que lo haga de una vez. Mi padre le susurró algo al oído al niño y él solo asintió poniéndose de pie en la cama, solamente está vestido con un interior ajustado color blanco muy simple.
– Mi... Mi nombre es Sasuke, soy pertenencia de mi amado Minato Namikaze. – Se fue acercando a mi lento moviendo las caderas. – Tengo 13 años y yo... – se acercó lo suficientemente como para ponerse de puntas y abrazar mi cuello. – Yo debo tener sexo con usted... – No tuve chance de quitarme a este niño de encima cuando terminó de cortar la distancia que quedaba entre nosotros con un beso, uno muy húmedo.
¿A que demonios se refería con "Pertenencia" y acerca del sexo? ¿Acaso está bromeando? Este mocoso ni siquiera debe saber que es eso. ¡¿Y por que demonios sigo besando a este niño?! Maldición besa como un experto, sabe usar su lengua. No quiere soltar mis labios y yo no quiero soltar los suyos, son suaves, húmedos y con un leve sabor a fresa, no puedo creer que lo seguí besando hasta que el niño se quedó sin aliento y se separó lentamente de mis labios.
– ¿Lo hice bien...? – Miro mis ojos mientras se mordía el labio, es tan jodidamente adorable que no pude evitar darle otro beso esta vez más fuerte y demandante.
Le puse las manos en las caderas mientras lo acercaba más a mi cuerpo, no sé qué tiene este niño que me hace querer besarlo sin control hasta que me di cuenta de lo que hacia. Estoy besando a un maldito niño de 13 años, ¡¿Que diablos me sucede?! Rompí ese beso y lo aleje de mi, mire a mi padre que solo le hizo un gesto a Sasuke para que se acercara y eso fue lo que hizo sentándose en sus piernas.
– ¿No te parece lindo? – Mi padre acomodo a Sasuke para quitarle el interior y abrirle las piernas. – Mi pequeño y dulce azabache da unos besos deliciosos. – el niño movió la cabeza para poder recibir los besos que mi padre le estaba dando en el cuello, tenía un lindo sonrojo en sus mejillas hasta que hizo un gesto que fue como un maldito botón de encendido para mi. Mi padre empezó a masturbarlo y el niño hacia unos gestos muy adorables, soltando gemidos que terminaron de ponerme duro algo que ni siquiera Hinata logra hacer en tan poco tiempo.
– Sasuke ve y ayuda a Naruto con su problema. –
[Sasuke]
Naruto... ¡Naruto no me cabe en la boca! Estoy haciendo mi mayor esfuerzo para no ahogarme y con algunas lágrimas saliendo de mis ojos por las arcadas que me ha provocado varias veces además de que hala fuerte mi cabello creo que es cuando lo hago bien, él me aterra un poco pero... También provoca un cosquilleo en mi estómago que me gusta mucho. No es mi amado Minato pero si me gusta demasiado casi siento que lo estoy engañando...
– Bebé. – Intente mirar a Minato que me hablaba pero era difícil así que solo logro asentir un poco para que supiera que si estoy escuchándolo. – No tengas miedo. – Sentí sus manos en mi espalda bajando lento hasta mi trasero. – Te amo... – Y con esas simples palabras logro que estuviera tan relajado que hasta se me había olvidado lo que tenía en la boca.
Fue cuando sentí una corriente en mi espalda baja seguido de varios movientos fuertes, por fin tenía una droga dentro del cuerpo. Mi amado papi estaba dentro de mi moviéndose varias veces y gracias a esos movientos también pude hacerle mejor el trabajo a Naruto... Nuca antes había hecho algo así, recibir tanto... Me sentía tan especial, tan amado hasta que senti un dulce néctar en mi boca y mi rostro, lo que había en mi boca lo trague pero me lamentaba un poco por dejar algunos residuos recorrer mis labios, no era justo! Ese néctar era tan dulce y delicioso que tenía que tomarlo todo...
– Parece que lo disfrutas, hijo. – Ahora por fin era libre de gemir como debía para que mi papi entendiera que si me gustaba y que quería más. – ¿Por que no vienes? Hay suficiente espacio? – ¿Espacio? ¿A que se refiere...?
Veía borroso unos ojos azules que no eran como los de mi papi pero eran más lindos, eran un azul tan lindo y brillante... Luego unos labios buscaron los míos, buscaron mi lengua, buscaron hasta el más mínimo espacio dentro de mi boca para poder marcarla, correspondi con gusto porque era un beso tan delicioso, tan dulce que hasta cuándo bajo para besarme el cuello seguía sintiendo ese hermoso sabor dulce. Gemi fuerte cuando esas manos estaban jugando con mi pecho, me pellizcaban y me acariciaban eran tan suaves.
– Sasuke. – Su voz... Su voz era hermosa. – ¿Quieres esto? Te puede doler. – Asentí varias veces con la cabeza y busque nuevamente sus labios que me recibieron tan bien.
Algo se estaba moviendo dentro de mi, no era solo mi papi que también me daba besos en el cuello y estaba jugando con mi miembro, era algo más. Fue cuando senti un horrible dolor en mi trasero, un dolor que me quemaba, un dolor que me desgarraba que hizo que rápidamente abriera los ojos bien y viera a Naruto muy cerca de mi cuerpo y agarrando mis caderas junto con mi papi, ni podía creerlo... Mi papi y Naruto estaban dentro de mi, los dos cabían dentro de mi, los dos se empezaron a mover dentro de mi, se movían hasta cuando el dolor que sentía fue reemplazado con placer, no sentía mis piernas pero no me importaba solo sentía en roce de mi papi y Naruto, solo sentía sus besos, solo sentia placer, solo sentía que quería continuar.
No quiero que se detengan, no quiero que se alejen de mi, estaba empezando a sentir cansancio pero no quería detenerme, creo que incluso deje de moverme porque mi papi y Naruto eran los que agarraban fuerte mis caderas y me ayudaba a saltar hasta que senti como una parte de mi se iba y manchaba el cuerpo de Naruto, fue hermoso... Fue hermoso incluso el ardor que sentí cuando algo caliente estaba dentro de mi y me llenaba hasta lo más mínimo.
Me sentí vacío cuando esas dos personas salieron y se pusieron frente a mi para poder verme... Creo que me veo lindo porque ambos tenían una hermosa sonrisa en sus labios, creo que... Ya puedo dormir, no lo sé pero todo está muy oscuro de repente.
[Minato]
Después de acostar a Sasuke en la cama salí de la habitación con Naruto, maldición ¿Por que no se me había ocurrido esto antes? Fue increíble y me hermoso azabache se comportó tan lindo, gemía como todo un puto, se movía como un experto, su rostro cuando todo termino fue algo a lo que debí tomarle una fotografía al igual que a su pequeña entrada que dejaba salir los restos de semen. Ahora puedo irme tranquilo un mes por la satisfacción que siento y además el pequeño Sasuke puede volver a ser apretado nuevamente, lo estiramos demasiado.
– ¿Me vas a explicar? – Naruto estaba frente a mi cruzado de brazos con una expresión seria, a mi no me engaña mi hijo, sé que también se siente completamente satisfecho gracias a mi lindo azabache.
– Él es Sasuke Uchiha. – Por su expresión puedo adivinar que ya sabe que sucede después de todo él sabe bien que sucedió con respecto a Itachi Uchiha que fue algo similar a esto. Saque un cigarrillo de uno de los cajones de la sala y empecé a fumarlo.
– Estás enfermo. Ese niño es menor, ni siquiera Deidara fue tan cruel como para hacerse cargo de Itachi tan joven. –
– ¿En serio te parece que estoy enfermo? Tu también acabas de coger con ese mocoso, admítelo, te encantó. – Sonreí cuando Naruto bajo la mirada, sabe que tengo razón. – ¿O que? ¿Me dirás qué con tu supuesta novia sentiste lo que acabas de sentir con ese mocoso de 13 años? –
– No está bien. – Me miro molesto. – Ese niño debe estar en una escuela, jugar con niños de su edad, estar con sus padres. –
– Él va a la escuela, no soy tan cruel. Además, sus padres no lo querían por eso me lo dieron como pago de una apuesta. –
– Le estas haciendo un mal a ese niño, ¿Que le dirás cuándo te aburras de él? –
– Nada, se irá y punto. – Le di una calada a mi cigarrillo y mire hacia la habitación donde dormía Sasuke. – Y si no quiere aceptarlo entonces lo mataré. – Solté una leve risa.
Naruto estaba tan molesto, ¿Que quería que le dijera? ¿Que me quedaré con Sasuke toda la vida? No gracias, no me interesa eso.
– Me largo padre, debo ver a Deidara. Llámame dejes de ser alguien tan asqueroso. – recogió sus cosas y empezó a caminar.
– Naruto. – Se detuvo aún dándome la espalda. – Si quieres seguir teniendo sexo real puedes venir, no podré venir un tiempo ya sabes que pronto será el cumpleaños de tu madre. –
No dijo nada solamente siguió caminando hasta que salió de la casa, él sabía que había firmado su sentencia de muerte cuando me había dicho que Hinata no lo complacía, yo solo quiero ayudarlo a tener el mejor sexo de su vida después de todo soy su padres y debo ayudar. Será mejor que recoja mis cosas y me vaya de una vez también, le prometí a Kushina que llegaría temprano, no sería la primera vez que dejó a Sasuke después de tener sexo con él, solamente basta con dejarle un mensaje diciendo que tuve una reunión de emergencia y se lo cree.
[Naruto]
¿Que demonios le sucede a mi padre? ¿Volver para tener sexo con ese niño? Es un demente. Si admito que fue el mejor sexo que he tenido en años, ni siquiera cuando estuve en esa orgía en la universidad disfruté tanto como disfruté el cuerpo de Sasuke, es tan frágil y delicioso incluso me fue inevitable dejarle marcas en su piel tan blanca de seguro le quedarán por dos días, si parece un puto pero igual no me parece correcto que mi padre le haya arrebatado la felicidad de ser un niño normal a Sasuke, él no merece eso, ¿Vivir encerrado desde que está con mi padre desarrollando alguna clase de síndrome de Estocolmo? Por dios, ese niño está mal por culpa de mi padre, ese niño merece estar con su familia, ese niño merece una vida normal y de alguna forma u otra yo se la voy a dar, así tenga que ponerme en contra de mi padre.
Iré directamente a hablar con Itachi sobre esto, es su hermano mayor que de seguro no ha visto a ese niño desde que está viviendo con Deidara, tal vez podría convencerlo de ayudar a Sasuke y dejarlo vivir con ellos al menos hasta que sea mayor de edad y pueda independizarse o que sé yo, lo que sea mientras aún se pueda ayudar a ese niño.
Cuando llegue a mi apartamento fui a la cocina para hacerme algo de ramen instantáneo, sé que tengo dinero para tener más que solo ramen pero es que esto es una delicia que no puedo dejar de comer, es mi debilidad. Pero por alguna extraña razón no puedo dejar de pensar en Sasuke mientras estoy comiendo, no puedo dejar de pensar en sus ojos, en sus labios... En lo lindo que me resulta, maldición ahora yo también estoy mal, es un jodido niño de 13 años por amor a Dios.
En definitiva mi familia está loca y yo no me quedo atrás, no puedo creer que piense en ese mocoso de cabello oscuro, yo tengo novia, tengo 26 años y no quiero ir a prisión por andar con un mocoso. Termine de comer y fui a darme un baño, de tanto pensar hasta se me quitaron las ganas de ir a ver a Deidara, incluso termine pensando en la propuesta de mi padre. ¿Ir a esa casa y tener sexo con Sasuke? No, ni muerto, no me importa cuán lindo, adorable, sensual... Un experto en mamadas, ¡Maldita sea Naruto, ¿En que diablos estás pensando?! ¡Es un maldito niño! ¿Cuantas veces vas a repetirlo? Por más excitante que suena la idea de tener a ese lindo pelinegro solamente para mi, tenerlo rogando solo por mi y hacer lo que quiera sin el problema de que hay alguien más en la habitación... ¡No puedes!
Pero recordar la mirada tan inocente que tenía Sasuke con el rostro lleno de mi semen fue... Fue placentero, más cuando lamió sus labios. Sin darme cuenta ya tengo una ereccion, quizás... Si entienda un poco a mi padre con respecto a tener a Sasuke. Sigo pensando que ese niño merece algo mejor que ser un simple muñeco ¿Bien? Me haré cargo de mi problema y para ser sinceros no creo que piense en Hinata mientras lo hago.
Cuando salí del baño ya con la cabeza fría y la calentura controlada tome mi teléfono, ya no iré para que Deidara así que al menos llamaré. Me tiré a la cama y busque el número de mi hermano.
– ¿Diga? – Eso fue rápido, debe estar echado en la cama.
– Dei pásame a Itachi. –
– ¿Que? No, ¿Para que quieres hablar con él? – Demonios debí pedirlo de otra forma, Deidara y sus estúpidos celos sin sentido.
– Tengo que hablar con él, al menos pon el altavoz sé que lo tienes al lado además si no fuera importante no estaría llamándote. – escuché un suspiro y suave la voz de Itachi preguntando que sucedía.
– Está bien Naruto, espero que sí sea importante. –
– ¿Naruto? ¿Que sucede? – Era la voz de Itachi, no era de esperarse que sonara algo dudoso después de todo caso nadie podía hablarle por mi hermano. –
– Hoy fui a ver a mi padre, dijo que tenía algo importante que mostrarme y... Itachi no entres en pánico. –
– Habla de una vez Naruto, me estás aburriendo. – Será mejor que cierres la boca Naruto.
– Mi padre tiene a Sasuke. –
Amor Yaoi
Fanfics yaoi en español