Habían pasado varias semanas difíciles al princio llenas de roces y diferencias que ya eran bastantes extraños proveniendo de Hyoga y Shun, pues quienes los conocían desde hace tiempo y conocían su relación se sentían extrañados de las peleas que solían tener... A veces por cosas mínimas, pero por fortuna no duraban mucho por el amor que entre ambos jóvenes existía.
Tras un día más de clases Hyoga y Shun regresaron juntos y cada quien a su casa, estando en su habitación después de la cena el rubio recordó algo importante de repente: al día siguiente caería 9 de septiembre... Había algo especial ese día, hasta que finalmente dio con la respuesta: ese día era el cumpleaños de Shun. Lo recordó con alegría, quería hacerle un regalo especial, pues cumpliría la mayoría de edad y debía ser algo sumamente importante, Hyoga no lo pensó demasiado, pues el regalo ya lo tenía pensado, solo iba a necesitar la ayuda de sus amigos para llevar a cabo la sorpresa sin que estos supieran sobre qué tipo de regalo tenía planeado darle el ojiazul a su conejito.
Shun actuaba con normalidad aquel día, ni siquiera su familia le mencionó nada sobre su cumpleaños, esto se debía a qué Hyoga había llamado a Ikki comentándole que estaba planeando algo especial para el peliverde pero iba a necesitar de su ayuda y la de sus padres, como? Simplemente callando, no debían mencionar algo que en ese momento pudiera descubrir Shun.
Hyoga no hablo con el menor por el resto de la tarde, estaba bastante ocupado y gracias a Seiya y Shiryu la carga de trabajo disminuyó respecto a los preparativos, la familia del ojiazul debía entretenerlo con cualquier pretexto con tal de no buscar a Hyoga ese día, Shun se molestó porque quería verlo, pero con cualquier excusa le impidieron salir.
Ikki se puede saber porque no me dejan ir a buscar a Hyoga? Se enojo conmigo acaso? Te dijo algo que no debo saber? -el menor interrogaba a su hermano no queriendo escuchar una respuesta negativa- pequeño tranquilo, no se trata de eso, solo digamos que podrás ver a Hyoga, pero en un rato más -Ikki se moría por soltar la lengua, pero le resultaba ciertamente tierno ver a su hermano haciendo berrinche por no ver al rubio o de porqué tanto pretexto para no verlo-
Al pasar varias horas el rubio llamo a casa de su novio esperando que cualquier miembro de la familia respondiera excepto él- diga? -respondió el padre del peliverde- entiendo... Está bien, nos vemos en un rato, estaremos allá en 10 minutos -dicho esto el adulto colgó el teléfono y convocó a una pequeña junta familiar con Ikki y si esposa respecto a reunirse con Hyoga sin que Shun lo sospechara-
De acuerdo, es hora de salir, hijo puedes ir por tu hermano? Dile que necesitamos salir a un mandado -sugirio su madre tratando de buscar un pretexto convincente. El mayor accedió y paso siguiente el ojiazul se reunió con su familia en la sala, le dijeron que necesitaban salir todos juntos a atender un asunto familiar e irían todos, incluyéndolo a él.
La familia salió rumbo a encontrarse con el rubio, Ikki se adelantó para serciorarse de que el rubio no hubiera fallado en nada. Con la afirmación segura de este y varios amigos reunidos los padres llevaron a paso lento a Shun hasta encontrarse con todos reunidos.
Sorpresa!! Sorpresa!! -gritaron todos los presentes sorprendiendo a Shun, quien se alegro mucho de ver a sus queridos amigos presentes, hasta su familia estaba junta y solo faltaba alguien importante: su novio-
Hyoga pensaste en esto para mí? -dijo Shun emocionado- claro que sí, como podría olvidar un día tan importante como tú cumpleaños -le regalo una sonrisa y una mirada tierna mientras tomaba sus manos y las besaba-
La fiesta aunque sencilla fue algo muy bello y significativo pues todo los invitados habían ayudado a armarla. Un momento crucial había llegado, y Hyoga tomando aire dio pequeños golpes a su copa después de hacer un brindis a salud del cumpleañero, tenía que hacer un anuncio, mismo del que necesitaría la atención de todos los presentes.
Hyoga le pidió a Shun que se acercara a él, tenía que decirle algo importante: Shun, durante estos años de noviazgo que hemos tenido, debo decirte que a pesar de las diferencias que hemos presentado últimamente las hemos sobrellevado y no hemos dejado que nada rompa nuestra preciada relación, eres lo más especial en mi vida y deseo estar siempre compartiendo lo dulce y lo amargo, lo bueno y lo malo -para sorpresa del peliverde y los presentes Hyoga se hinco y sacó una pequeña cajita de su bolsillo- sé que aún nos faltan unos cuantos años, menos de hecho ahora que has cumplido 18 años.. pero en verdad estoy ansioso por decirte esto desde hace mucho: Shun... Me concederías el honor.. -abrio la cajita- de que seas mi esposo? -Hyoga mostró que en la cajita había un anillo de compromiso, al verlo Shun casi se desplomaba de lo mucho que le temblaban las rodillas y sus ojos estaban vidriosos aguantando las lágrimas que amenazaban con salir. Los padres de Shun y hasta Ikki estaban impactados y algunos sorprendidos por semejante sorpresa, a todos; incluyendo a su familia, les causaba mucha ansiedad el conocer la respuesta del ojiazul, sus amigos lo animaban a darle el sí insistentemente, sin necesidad de las palabras e insistencia de sus amigos Shun sin contener la alegría que sentía en ese momento le dijo sin pensarlo que sí, sí aceptaba.
Tras colocarle el anillo sus amigos aplaudieron y silvaron de la alegría, la pareja se abrazó y besó sintiéndose felices de próximamente cumplir su deseo de estar siempre juntos.
En otra parte Camus deambulaba por las calles aún pensando en su próximo paso a seguir para ganarse a Hyoga, desconociendo totalmente que éste acababa de comprometerse con Shun en futuro matrimonio, en cuanto el peliazul se llegase a enterar de la noticia, sería capaz de impedir esa boda, aquella declaración de Hyoga debía ser celosamente resguardada, pues no quería que rumores se corrieran por toda la universidad, ya que se arriesgaría a qué su acosador se enterara y de una u otra forma los perjudicara.
Hyoga se mantenía con la esperanza de que Camus jamás supiera ese secreto y finalmente podría darle final a las diferencias con Shun gracias a su futura unión, la cual esperaba se llevarán a cabo sin nada que se interpusiera en el camino.
Aunque eso estaba; quizás, lejos de suceder.