(Universo 2, E10, 51 años desde el nacimiento de los hijos de Junuem)
La lluvia había cesado y a Simona la inundaba el olor de la tierra mojada, era algo agradable en comparación con el saturante hedor de la sangre y carne quemada, producto de una pequeña riña entre Jano y unos hombres que habían ido a tomar sus cabezas. Tras la lluvia, un aire frío los hizo estremecer, por lo que Simona, Jano y compañía tuvieron que buscar refugio en la ciudad más cercana que vieron, esa ciudad era Dynami, ciudad en la que se había llevado a cabo la matanza de los Cannatela, sabiendo esto, fueron directo hacia la gran mansión azul que se encontraba justo en el centro de la ciudad. Cuando llegaron a su destino, Simona se paró en frente de la puerta y miró una vez más de arriba a abajo la mansión, como tratando de saber si estaba habitada por alguien o no.
—¿Podríamos entrar ya? Necesito ir al baño con urgencia —pidió Casper Benzai, el único aparte de Simona y Jano que tenía un poder.
—Jano, abre la puerta —ordenó Simona.
Jano envolvió su puño con electricidad, tomó impulso y luego de golpear la puerta, la derribó—. Casper, corre al baño.
—¡Lo haré de inmediato! —exclamó éste mientras corría en busca de uno.
Sin embargo, apenas los demás terminaron de cruzar la puerta, escucharon a Casper gritar. Todos corrieron hacia la dirección de la que provenía el grito y vieron a dos chicos pelinegros de pie, mirando con enojo a Casper, quien yacía en suelo con ambas manos sobre su abdomen, todo parecía indicar que había sido golpeado por uno de ellos dos. Uno de los chicos, quien no era otro más que Tahiel, caminó hacia ellos a la vez que Jano se colocaba delante de Simona.
—¿Quién demonios les dijo que podían entrar a mi casa?
—¿Tu casa? —preguntó Simona y arqueó una ceja—. ¿Eres un sobreviviente de los Cannatela?
Tahiel frunció el ceño—. No. Está casa ya no les pertenece a esos bastardos, ahora es de mi propiedad.
Simona olfateó el aire—. ¿No te sientes incómodo con el asqueroso hedor que despiden todas las paredes de esta casa? Todo el lugar huele a sangre, ¿por qué harías de tu casa un lugar tan desagradable como este?
—Ese es mi problema, estúpida.
Ella forzó una sonrisa mientras apretaba los puños—… ¿Cómo acabas de llamarme, pequeña mierdecilla?
—Cálmate, Simona —pidió Jano, tratando de evitar que ella se lanzara hacia ese chico para pelear.
—¿Simona…? —preguntó el joven con sorpresa, y un rostro mucho más amable apareció en él—. ¿Ustedes son los famosos asesinos de familias de clase alta?
Simona sonrió con malicia—. Sí, ahora estarás al tanto de lo peligrosos que somos, si sabes lo que te conviene, lárgate de aquí.
—¡Tan genial~! —exclamó Tahiel mientras sus ojos se iluminaban—. ¡Los he admirado desde hace mucho tiempo! —Volteó a ver al chico a su lado, quien era más delgado y pequeño que él, le hizo una señal con la mano para que se acercara y luego los dos se pusieron de rodillas—. ¡Por favor déjenos unirnos a ustedes, señora Simona Aboulker, señor Jano Mintzberg!
—… ¡Ja! ¿¡Qué demonios!? —gruñó ella y señaló a Casper—. ¿Por qué debería dejar que se nos unan luego de golpear a uno de mis compañeros?
—¡Discúlpenos por favor! —Tahiel le dio un codazo a su amigo de ojos verdes—. Anda, tú también discúlpate.
—Perdón —dijo en voz baja.
—Nosotros no sabíamos que el enclenque era parte de ustedes —continuó Tahiel—, como los rumores solo hablan de la señora Aboulker y del señor Mintzberg.
—Pónganse de pie —les ordenó Jano.
Y así lo hicieron.
Jano se cruzó de brazos—. Seguimos sin escuchar su respuesta, ¿por qué deberíamos aceptarlos? —cuestionó con severidad—. Ambos no son más que unos niños, todos nuestros compañeros tiene una fuerza sorprendente y les sobra experiencia en batallas, ¿qué hay de ustedes?
Tahiel tragó saliva, pero enderezó la espalda y su rostro se llenó de determinación—. Es cierto que podemos parecer débiles, pero les aseguro que podemos ser de utilidad, podemos serlo más que el enclenque al que derribamos.
—Sí, Casper puede ser débil en términos de fuerza —concordó Simona—, pero el posee el poder de leer las mentes, es un poder muy útil para obtener información.
El rostro de Tahiel volvió a iluminarse—. ¡Genial~…! Pero, en realidad, nosotros también tenemos poderes.
Simona frunció el ceño—. ¿Si sabes que hablo en serio?
—¡Yo también lo hago! Nos presentaré, mi nombre es Tahiel Roger, y el chico a mi lado es Bastián. Bastián es increíblemente fuerte, si se lo propone, puede partir ésta mansión por la mitad de un solo golpe.
—Debe ser una broma, no puedes estar diciendo la verdad —dijo Simona con incredulidad.
—No es ninguna broma —aseguró Casper desde el suelo—, el niño dice la verdad.
Tahiel lo miró—. El enclenque no luce como alguien confiable, pero al menos parece que es honesto.
—¡Te defendí, ¿y así me agradeces?! Mejor dime dónde está el puto baño.
—Por allá. —Señaló una dirección y luego volvió a mirar hacia Simona y Jano—. En cuanto a mí, tengo dos poderes, pero uno de ellos no lo controlo bien, si tratara de mostrárselos, terminaría por matarlos y es lo que menos quiero —dijo haciendo una sonrisa tímida—. El otro poder no sirve para pelear, pero creo que es muy útil, cuando conocí a Bastián, él parecía muy conmocionado cuando me vio usarlo. Yo puedo manipular a las personas.
—¿Manipularlas? —preguntó Jano.
Tahiel asintió—… Estoy bastante seguro de que no podría usar mi poder en la señora Aboulker o en el señor Mintzberg, pero puedo hacerlo con cualquier otro. Por ejemplo~ —, miró en la dirección por la que Casper se había ido corriendo—… digamos que yo quiero que el enclenque que está en el baño me quiera tanto como a un hermano, puedo hacer que él lo piense en unos cuantos segundos.
—Pff, quiero ver eso —musitó Simona—, Casper debe de estar resentido con ustedes por el golpe que le dieron.
Unos minutos después, Casper regresó del baño y se percató de que las miradas de todos estaban puestas en él—. ¿Q-qué…?
Tahiel se acercó a él—. Casper Benzai, a partir de ahora, tú me consideraras tan importante como un hermano.
—¿Qué mierda? —Hizo una mueca de asco—. No, no quiero.
—Tienes que hacerlo, porque te dije dónde estaba el baño.
—… Hum —, sonrió con cariño—, bien, a partir de ahora puedes llamarme hermano.
Tahiel le regresó la sonrisa y luego ambos se entrelazaron la mano para formalizar su hermandad.
En palabras de Simona, el poder de Tahiel es la capacidad de convencer a las personas de hacer o pensar algo con los argumentos más absurdos posibles, cualquier cosa que Tahiel diga, los demás lo verán como un gran y conmovedor discurso que vale la pensar tomar a consideración, con un poder como ese, Simona creyó que si él quería, le sería fácil convencer al mundo entero de obedecerlo y seguir sus órdenes, él podría ser el único villano capaz de dominar el mundo… pero luego de un tiempo de conocerlo tras dejarlo unirse a ellos, Simona se dio cuenta de que Tahiel no deseaba nada de eso.
Tahiel tenía una pequeña obsesión con una idealizada imagen de familia, y como él no tenía una familia real, quería construir una usando su poder. Había una mujer ciega de 43 años viviendo en la mansión además de Tahiel y Bastián, nadie sabía exactamente quién era y de dónde provenía, pero ella consideraba a Tahiel como su hijo y él también la llamaba «mamá». Esa mujer, fue la primera pieza de la familia que Tahiel tuvo en mente. En cuanto a Bastián, él no hablaba mucho y solo se movía cuando Tahiel lo quería, al principio Simona pensó que él sería un «hermano» de Tahiel, pero luego supo que para él, Bastián no era más que alguien con quien se vio obligado a convivir por ciertas circunstancias, o al menos eso fue lo que entendió Simona.
—A mí me agradan mucho la señora Aboulker y el señor Mintzberg —le confesó Tahiel a Simona luego de hablarle de su relación con Bastián—. Me gustaría que ustedes formaran parte de mi familia.
Simona se estremeció de miedo.
Tahiel sonrió—. Me gustaría que ustedes fueran mis hermanos mayores, sería tan fácil usar mi poder en ustedes para que así fuera… pero no puedo hacerlo.
«¿Por qué no puede hacerlo? ¿No quiere obligarnos a pensar en él como un hermano porque nos respeta? ¿Quiere que lo queramos de verdad?», se preguntó Simona. Pero no, no era eso, simplemente, era que no podía hacerlo, él era incapaz de usar su poder en ellos.
Tahiel solía ser muy celoso con su «mamá», no dejaba que nadie además de él se acercara o hablara con ella, pero estando bajo el mismo techo, Simona y Jano no pudieron evitar por completo el contacto con esa mujer, había veces en las que la veían caminando cerca de ellos, pero siempre se limitaron a observarla en silencio, porque la realidad es que querían ser cautelosos con Tahiel y no hacerlo enojar.
Pero luego de pensar y meditarlo un poco, Simona y Jano notaron que la «mamá» de Tahiel y Bastián tenías rasgos muy parecidos, el mismo tono de verde en sus ojos, la manera en la que sus ojos lucían un poco caídos, la nariz redonda, los labios delgados, la piel ligeramente morena, pensándolo bien, ellos eran demasiado parecidos. Entonces, comenzaron a especular sobre si en realidad la «mamá» de Tahiel era en realidad la mamá de Bastián, y él había usado su poder para usurpar el lugar de Bastián como el hijo de la señora. Ambos trataron de ya no pensar mucho en eso, no era su problema y no querían meterse en problemas con Tahiel, además de que se habían dado cuenta de que Casper y todos sus demás compañeros, aunque seguían siguiendo órdenes de Simona, estaban del lado de Tahiel, algunos manipulados por su poder y otros por temor a ser manipulados.
(Universo 2, E10, 52 años desde el nacimiento de los hijos de Junuem)
Un año después, luego del asesinato de una familia rica en la ciudad Nero, Tahiel regresó a su mansión al lado de Bastián y de un joven de cabellera rubia y ojos azules, a quien acababan de conocer. Tahiel no le dio muchas explicaciones a Simona, solo lo presentó como Ilhan Duarte, el nuevo miembro que trabajaría exclusivamente para él, y cuando Simona se acercó a Ilhan para preguntarle sobre la razón por la que decidió unírseles, él dijo que era el fan número uno de Tahiel, y que le parecía un honor que Tahiel lo hubiera dejado estar a su lado al saber que tenía el poder de manipular el agua.
Luego de la llegada de Ilhan, el poder de ellos se incrementó aún más y sus nombres fueron escuchados en más lugares, empezaron a circular rumores del todo desagradables y grotescos de ellos, el número de personas que querían oponerse a ellos y matarlos disminuyó, y el número de quienes querían unírseles aumentó, muchos solo querían usar el nombre de Tahiel, Simona y Jano para causar miedo y hacer barbaridades sin que nadie tratara de hacer algo, y pronto comenzaron a verlos como una organización de criminales que además de asesinar a las familias ricas, robaban, secuestraban y torturaban a quien fuera a cambio de dinero, cosa que de hecho no era verdad.
—Oye, y entonces, ¿al final por qué Tahiel no podía manipular a Simona y Jano? —te has de preguntar.
Cierto, que bueno que me lo recordaste. Simona descubrió una «diferencia» entre Bastián y la «mamá» de Tahiel que la llevó a deducir la respuesta a tu pregunta, y es que, por la forma tan fiel y obediente en que actuaba Bastián, daba a entender que estaba totalmente adiestrado por el poder de Tahiel, aunque esto de hecho no era así, pero bueno, Simona en un principio supuso que la «mamá» de Tahiel también había sido afectada por su poder, pero luego de escuchar una conversación entre él y, sorpresivamente, Casper, descubrió que la señora de nombre Nayla no podía ser afectada por tal poder.
—Puedo manipular a las personas de la manera que me plazca —explicó Tahiel—, pero no puedo manipular a las personas con las que estoy muy apegado emocionalmente, lo descubrí con ella; traté muchas veces de hacer que me viera como parte de su familia, pero nunca funcionó porque la quiero mucho. Cuando escuché hablar de la señora Aboulker y el señor Mintzberg, me di cuenta que muchos los ven como unos héroes, yo también lo hago, los admiro con todo el corazón, soy su fan número uno, por eso quiero hacerlos parte de mi familia… pero al desear eso, al tenerles estimación, me he vuelto incapaz de usar mi poder en ellos…
Aunque ojo, Tahiel nunca mencionó el nombre de la señora Nayla, solo que Simona pensó que estaba hablando de ella. Entonces era eso, Tahiel no podía usar su poder en Simona y Jano porque los admiraba. Sabiendo que realmente Tahiel no podía usar su poder en ellos, Simona comenzó a considerar la posibilidad de huir y alejarse de alguien tan peligroso como él… sin embargo, el día que lo intentó, Jano fue detenido por Ilhan y Bastián, sólo la suma de la fuerza de esos dos podía igualarse a la fuerza de Jano incrementada con el poder de Simona. Tahiel se sintió muy herido por su intento de huida, pero continuó creyendo que con el tiempo podría ganarse el cariño de ellos dos, así que decidió tomar totalmente el control de la organización para que se rindieran y no volvieran a intentar escapar. Así fue como nació REVENISH.
—¿Y por qué REVENISH? —te estarás preguntando.
Tahiel había escuchado de Casper la historia de venganza de Simona, sabía que ella quería vengar al amor de su vida, René, y buscaba a un niño que podía conceder deseos. Así que, aconsejado por Casper, tomó dos palabras en inglés: Revenge (Venganza) y Wish (Deseo). Las unió y salió REVENISH. Para él sonaba más genial que VENGASEO o DESENGANZA.
(Universo 2, E10, 53 años desde el nacimiento de los hijos de Junuem)
Cuatro meses después, Tahiel salió de la mansión junto con Ilhan y Casper, dejando a Bastián en la mansión para asegurarse de que Simona y Jano no trataran de escapar, no había un motivo en sí para su salida, pero un recién llegado le había contado que el pueblo de dónde provenía, había un mercado en el que se vendía toda clase de comida, era un mercado bastante grande y era tan famoso que se abarrotada de gente cada día. Cómo te has de imaginar, ese mercado es el mismo en el que yo trabajaba con el supervisor, aunque en ese momento yo todavía no lo conocía, yo apenas era un niño de 5 años que ilusamente seguía esperando recibir un poco de cariño por parte de su madre. Y unas horas después de su partida, Tahiel regresó a la mansión con alguien nuevo, ese alguien era la señora Miriam.