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Yuki se despertó lentamente…estaba cansado y seguía con las ganas de matar a la mocosa que los había estafado.
- Shuichi – miró al lado de su cama y se encontró con el mencionado catante, que dormía como si el mundo se fuese a acabar.
- Mmhg… - abrió los ojos y sonrió – Yuki…buenos días.
- Buenos días Shuichi – sin querer esbozó una dulce sonrisita.
- Yuki…me has sonreído – se le lanzó encima y abrazó al escritor.
- ¡¡¡Si vuelves a hacer eso…te partiré la cara ¿¿¿Oíste???!!!
- Yuki…lo siento – se separa de él y le ayuda a levantarse.
(Shuichi: lo tumbó en la cama… - Lily: que tierno ^¬^)
Yuki negó con la cabeza y lo despeinó con una de sus manos.
- Yuki…estás muy tierno el día de hoy…me sonríes y ahora me acaricias la cabeza… ¿Quién eres? Y ¿Qué le hiciste a mi Yuki?
- Shuichi… - *^^ se aguanta las ganas de golpear al cantante.
- Respóndeme – se acerca peligrosamente al escritor.
- Soy yo idiota!!!
- Yuki – lo abraza – ese si es mi Yuki…
- Quítate de… ¡¡Encima!!
- Lo siento – se levanta - ¿Quieres que te haga el desayuno?
- Prefiero que no…cocinas horrible y, siempre que lo haces, terminas todo cortado y dañado.
- ¡¡Si!! Y Yuki que me pone curitas - ^^
- Eres raro - ///¬¬
El escritor se levantó y se fue al baño.
Shuichi sonrió y se fue a la cocina.
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Eran algo de las 2:30 p.m., llamaron a la puerta.
- Yuki…voy a abrir – Shuichi se levantó de la mesa y corrió hasta la puerta. La abrió lentamente y vio a cierta chica con una pequeña canasta en sus manos.
- Hola, venía disculparme por ser tan mala con ustedes – la chica sonrió y le entregó la canasta al cantante.
Yuki salió de la cocina y fue a ver porque Shuichi se trabada tanto. Se acercó a la entrada y casi le da un infarto cuando se encuentra con la “agradable” visita.
- ¡¡¡TU!!!
- Buenas tardes Yuki san…esto…yo solo quería…pedirle disculpas por todo lo que he hecho y…
- No te creo – se dio la vuelta.
- Pero – la chica se lanzó al suelo hecha un mar de lágrimas.
- ¡Yuki! – Shuichi se agachó y abrazó a Rushia que seguía llorando y cada vez con más ganas – que malo eres…solo es una niña. (Shuichi: del demonio pero niña al fin y al cabo xD)
- Aaagh! De acuerdo – se voltea y se acerca – te perdono. ¿Feliz?
- Ssi – solloza.
(Shuichi: xD – Lucía: es una gran actriz… - Lily: nos sentimos orgullosas – Rushia: a callar…no cuenten la historia trío de locas – Shuichi, Lucía, Lily: si señora =.=)
- ¿Quieres pasar a tomar algo? – Shuichi le sonrió.
- Me encantaría - ^^
- Pues…ahora que te perdoné… ¡Fuera de mi casa!
- Yuki san…no seas tan malo…yo solo…yo solo – comienza a llorar otra vez.
- ¡¡Yuki!! ¿Cuándo entenderás que solo es una niña?
- Lo siento mocosa del mal - *¬¬
- No hay problema…ya estoy bien – se limpia las lágrimas y corre a abrazar a Yuki - ¿Qué te parece si eres mi sensei en escritura?
- Ni aunque me pagaras – intenta soltarse del agarre pero, no lo consigue.
(Shuichi: esto me lleva a una conversación con mi oka chan de…”¿De que se tratarán las novelas de Yuki?...Repuesta…no hace falta decirlo)
- Vamos…no soy tan mala escritora – comienza a lloriquear.
- De acuerdo – se saca los lentes y se frota las sienes - ¿Tienes a mano alguna de tus historias?
- Claro – saca de no se donde un carpeta y se la alcanza al rubio.
Shuichi miró divertido la cara de Yuki, era como de temor y…asco.
- ¿Qué es? – preguntó curioso el catante.
- Yaoi – dijo resignado el escritor.
- Si y… ¿Qué te parece Eiri sensei?
- No me digas Eiri sensei – ò.ó
- Lo siento y?
- La redacción es buena…el contenido…asusta – la mira fríamente y le lanza la carpeta.
- Oye! – alcanza la carpeta en el aire.
- ¡Ahora vete niña! – Yuki la mira de manera despectiva, entra en la casa y deja la carpeta en uno de los sofás y, sale de la casa
– Adiós Yuki sensei.
- Adiós Rushia chan – antes de que la chica le pudiera responder a Shuichi, Yuki le cerró la puerta con un portazo en la cara.
- Esa mocosa – murmuró y agarró a Shuichi por lo hombros.
- Yuki – alcanza a susurrar - ¿Qué pasa?
- Pasa…que esa carpetita contenía una y mil maneras de “torturarte” Shuichi – lo aprisiona contra la pared - …gracias al cielo que la mocosa esa se ha ido – le da un beso en los labios.
- Mmm – empuja un poco al escritor – Yuki…déjame! - se suelta del agarre.
- ¿De verdad quieres que te suelte? – sonríe de manera ácida.
- Ah! – su mente se puso en blanco y se volteó con temor para clavar sus ojos en los de su amante –. En realidad…no quiero – lo abraza - …adelante Yuki, haz lo que quieras hacer conmigo… - sonríe de manera maliciosa.
- Si, si, solo no te me pegues como lapa – lo aparta un poco.
El escritor tiró a su amante hasta el sofá y lo tumbó en el.
Lanzó la carpeta bajo la mesa del televisor y comenzó a desvestir a Shuichi.
El pelirosa se agarró de los hombros de su amante, hasta que este metió descaradamente la mano en sus pantalones.
Yuki agarró el, aún dormido miembro de Shuichi, y comenzó a acariciarlo y masturbarlo. Escuchó con deleite los gemidos del pelirosa, que lo encendían cada vez más y lo hacían actuar más violentamente, sobre todo cuando le agarró los pezones.
(Shuichi: eso duele ///=.= - Lucía: ¿Tú que sabes? ¬¬ - Shuichi: más de lo que crees xD – Lucía: O_O)
- Yuki – gimió - …se más delicado – sentenció con temor.
(Shuichi: ///=.= esto me trae recuerdos que no quiero, ni deseo recordar…si los incomodo me avisan nee? xD)
- Como quieras – mordió con fuerza uno de los pezones de Shuichi, este le enterró las uñas en los hombros y gimió con fuerza…
- ¡¡Yuki!! – gritó.
- Esto decía la historia – sonríe de forma maliciosa - …lo otro – le muerde el cuello hasta dejarle una marca.
- ¡¡Ya basta!! – se quita al escritor de encima.
- Ni lo sueñes – se molesta - …estoy a mil y tu quieres parar – se sienta.
Shuichi sonrió maliciosamente y se agachó para quedar a la altura del miembro de Eiri. Lo extrajo del pantalón y comenzó a lamerlo y a darle pequeñas mordiditas.
El escritor jadeó y miró atentamente los movimientos de su amante, se complació al darse cuenta de que ya no lo hacía tan mal como antes.
Soltó la erección de Yuki cuando se dio cuenta de que ya estaba bastante excitado. Se sacó los pantalones y dejó que su amante le agarrara los muslos y metiera 2 de sus dedos en su estrecha entrada. Se tensó un poco agarró con fuerza los hombros del rubio, dejó la vista perdida en un punto inexistente y dejó que Yuki hiciera lo que quisiera con su cuerpo.
Cuando notó que Shuichi ya estaba listo lo atrajo contra su cuerpo y lo sentó despacio en sus piernas para penetrarlo. Se fue abriendo paso de a poco, Shuichi con la vista pedía que fuera lento, pero él le agarró de las caderas y los sentó de una en su miembro, penetrándolo completamente.
El pelirosa gritó y sintió como Yuki lo iba moviendo de a poco. Y antes de que pudiera acostumbrarse a aquella invasión, sintió que Yuki lo acostaba en el sofá con las piernas abiertas y salía lentamente de su interior, para luego entrar de nuevo con fuerza.
Siguieron un ritmo brusco, en el cual Yuki siempre era el que lo imponía. Cuando sintió que ya estaba por terminar vio que Shu estallaba entre ambos y se apretaba un poco, haciendo sentir a su miembro de maravilla, ya que el orgasmo significaba que inconscientemente Shuichi apretaría sus paredes contra la erección de Yuki.
El rubio aumentó aún más la velocidad y eyaculó por completo en la entrada del cantante.
Shuichi gritó y agarró a su amante, el que estaba bañado por una espesa capa de perlado sudor.
Yuki salió lentamente del cuerpo de Shuichi y se recostó en el sofá, Shuichi se acomodó a su lado y le sonrió.
- Yuki…te quiero.
- Esa niña tiene buenas ocurrencias – dijo ignorando las palabras de Shuichi - …le diré que publique sus cochinadas – sonríe rodeando a Shu con un brazo.