EL MUNDO:
“Ataca sin piedad la nueva Fiebre Yaónica”
País del Fuego. El cáncer pasó de moda, el sida también y la gripe porcina no dio la talla. Un nuevo virus ha infectado la mayor parte de las villas ocultas, estamos hablando de la Fiebre Yaónica, prima hermana de la Fiebre Mal Pensada y la cual se piensa es el resultado de una mutación de la Fiebre Yaoi corriente.
Según los expertos, éste nuevo tipo de virus se contagia de manera muy diferente a la Fiebre Yaoi a la que estamos acostumbrados, no es necesario que el shinobi tenga relación o escuche hablar incesantemente a una Kunoichi fan del género y portadora de la peste, basta con prender el televisor y sintonizar los nuevos cartoons para niños, como “Isla de Mutantes”, “Bob Toronja” o “Las maricas desgracias de Flapjack”, los cuales a pesar de no parecerlo están cargados de mariconerias en toda la extensión de la palabra.
El virus también se pega por contacto sexual, si eres hombre corres con el riesgo de que algún amigo contagiado te meta más que el yaoi cuando te agaches a recoger el jabón en las duchas del centro de ninjas.
Los científicos aseguran que hasta los momentos no existe cura para semejante mal, opinando que en menos de lo que canta un gallo nos encontraremos todos cantando y bailando el “numa numa” en sitios como youtube (cosa que ya ha pasado).
Entre los síntomas de la Fiebre Yaónica se pueden mencionar:
- Cuando al mirar tu serie heterosexual favorita notas que los protagonistas hombres algo sexual entre ellos se traen en mente.
- Desconfías cuando tu sensei se va al bosque con tu rival/amigo y no te llevan.
- Al pedir ramen en el Ichiraku pides que “te metan los huevos”.
- La fiebre no mide sexo, en el caso de ser kunoichi le insistes a tu pareja si ésta es hombre que te la meta por detrás para supuestamente cambiar la rutina y secretamente saber como lo hacen tus parejas yaois predilectas (recomiendo el uso de lubricantes).
- Si en el momento de una batalla tu enemigo expresa “Me has excitado” tú piensas:
a) Has dado la talla como oponente.
b) Él quiere hacerlo contigo.
(En el caso de responder “b” es un síntoma de que tienes la temida fiebre y debes tratarte de inmediato, de contestar “a” estás en la etapa de negación o eres un shinobi demasiado inocente, bueno con P para decirle mejor)
- De tener que hacer pareja con uno de tus dos compañeros de equipo para una misión, dejas de lado a la sexy kunoichi médico que tiene un cuerpo de infarto, por irte tras del rabo del ninja de los ojos azules con la excusa tonta de que “cuidarás que no arruine la misión”.
- Has encontrado una nueva y erógena zona para enterrarle un kunai a tu contrincante.
- Piensas que el apellido Sabaku no, en castellano tiene doble sentido si no sabes ni papa del idioma japonés.
- Al ver el cuerpo inerte del que fue tu objetivo no te preguntas cual fue su último pensamiento, te preguntas si hubiera aceptado tu proposición de hacerte una felación a cambio por conservar su vida.
Existen más síntomas que hay que tener en cuenta, pero los mencionados son los más comunes entre los shinobis portadores del virus. He aquí las medidas que deben adoptar los Kages de todas las aldeas ocultas, así como todos los habitantes de las respectivas villas:
- Cancelar las series televisivas: “Rick and Steve”, Line of Beuty”, “Dr House”, Nick/Tup”, entre otras donde los protagos o son gays o lo ocultan sin éxito alguno.
- Prohibir los chistes y burlas de temática homosexual, así como los juegos que ameriten pensar e imaginar yaoi.
- Si se presiente poseer alguno de los síntomas, cortar toda relación con fan yaoi girls y borrar el contacto del Messenger que te envía invitaciones de aquella página www.clubyaoi.com
- Formar equipos compuestos por: Una sensei, un shinobi, una kunoichi y una perra o cualquier otro animal parlante hembra (Nada de dos hombres en un mismo equipo ni de animales macho, se han advertido casos de yaoi zoofílico).
- Mandar a quemar los últimos vestigios de la temporada de Haku y Zabuza, así como borrar del mapa la escena del primer beso entre Naruto y Sasuke (Medida ya tomada por los ejecutivos de Cartoon Network).
Se recomienda también no hablar del tamaño de los bíceps, ni del tamaño del miembro (por muy grande que éste sea) más que para asuntos de ligues con hermosas y virginales señoritas, ya que al hacerlo con personas del mismo sexo se desatarán pensamientos raros. Así que de ser hombre, despídase de una vez de las competencias de orina y aguante hasta llegar a casa en vez de compartir un antihigiénico y contagioso arbusto público, para de éste modo evitar que alguno de los hemisferios del cerebro envíe inconscientemente señales para mirar por el rabillo del ojo como se levanta la tripita de al lado.
Artículo hecho por: Kiba Inuzuka