Había tanta decadencia en aquel lugar, cuando todos lo vieron se quedaron sorprendidos, pasmados, la emoción recorría sus venas….
—¿Y bien quien primero? — pregunto Kisa.
—Ok, Chicos como sabrán esta pintura es muy importante — Kirishima fue el primero en hablar— nos dividieron en grupos para buscarla, ahora si son tan amables, tu, tu, tu — después mucho dividendo al fin pudieron quedar los grupos.
—¿Qué hacemos si la encontramos? — pregunto Chiaki, ante esto Kirishima lo pensó detenidamente.
—Avisan— todos asintieron, bueno casi todos, cada uno camino en dirección a los dos lugares más importantes del pueblo, a su alrededor, las casas de madera parecía hermosas.
En dos diferentes direcciones todos esperaban encontrar aunque sea resto de la pintura, los primeros en llegar a su destino fueron Kisa, Chiaki, Shinobu junto a Miyagi y Yukina, los cinco miraron atentamente el ayuntamiento.
—A sí que aquí una vez estuvo el alcalde de Hallen—Hill — menciono Chiaki.
—Bueno sea como sea hay que apresurarnos— Shinobu comenzó caminar hacia el edificio.
Todos lo siguieron, el lugar era bastante amplia, al parecer los muebles a un seguían ahí, probablemente algunos servían más que otros, siguieron caminando, al entrar habían varias habitaciones.
—Bien por aquí…— antes de que pudieran dividirse para buscar la pintura, la madera rechinante los sorprendió.
—¿Qué no se supone que esta deshabitado? — pregunto Miyagi con algo de miedo.
—A si es, así que silencio, puede ser Ijuuin y sus secuaces — aseguro Shinobu.
Con algo de precaución, los cinco subieron por las escaleras que conectaban con el segundo piso, al estar arriba se dieron cuenta de que el lugar era un redondo, en medio la oficina central, a lado dos habitaciones correspondiente a aquello que una vez ayudaron a gobernar el pueblo.
—¿Hay alguien aquí? — pregunto Chiaki con fuerza, mas no obtuvieron respuesta.
—Sigamos adelante — ante esto los tres sacaron sus armas, los otros dos los seguían no muy de cerca, observaron el interior del ayuntamiento, ni pensar que alguna vez fue un pueblo productivo, nunca habían visitado ese tipo de lugares.
Observaron como aquello asesinos se aventuraron uno a cada habitación, cuando estuvieron los tres dentro de la habitación correspondiente, sin saber cómo las puertas se cerraron.
—¡Oigan los de afuera más les vale que dejen de jugar! — Grito Shinobu desde su habitación, no se escucho sonido alguno, de pronto vio como todo era sumergido en una gran obscuridad — pero que…
Mientras tanto afuera los dos se quedaron pasmados al ver lo que sucedería.
—¿Yukina tui crees en los fantasmas? — pregunto Miyagi mientras se acercaba.
—De pende, creo que ahora si — decía mientras se acercaba mas, antes de poder tocar la puerta una voz se escuchó como un susurro.
—“¿Por qué?” — Se escuchaba.—“Por que salvarlos” — seguía susurrando.
—¿Escuchaste eso?, Dime que si y que no es la edad — pregunto a su compañera.
—Si no es la edad — mencionaba mientras se quedaron paralizados.
—“Váyanse” — decía l voz.
—¿Y que pasara con los que están encerrados? — pregunto Valiente mente Yukina.
—“Son asesinos, deben morir” —aseguro la voz.
—¿Pero qué…? — ambos se quedaron sorprendidos.
—“¿Por qué salvarlo?, ellos son malos” — decía suavemente.—“¿Por qué?”
—Bueno no importa si son asesinos, nos han ayudado — Yukina seguía en su intento de convencer a la voz.
—“Mataron personas, la vida no es un juego” — la voz tenía razón, pero no podían dársela— “Sin corazón”.
—No estamos aquí para juzgar a nadie, queremos la pintura — Miyagi comenzaba a irritarse, ¿Quién se creía esa voz para juzgar? , aunque fuera cierto.
—“La pintura”— no se ecuo nada— “Lo que buscan no está aquí” — sorpresa—
—¿Qué? — dijeron a l mismo tiempo….
Sin embargo, alguien se encontraba algo calmado esperando que todo fuera una broma de mal gusto.
—Ah, Estos chicos ¿Qué planearan? — se preguntaba Kisa algo preocupado, nos e podía escuchar nada , sin saber por qué comenzó a husmear por el lugar, fue entonces que se percato, en la pared había algo parecido a sangre — no podía verlo bien, en su búsqueda por encontrar algo para ver encontró una vieja lámpara , solo esperaba que sirviera.
Al encenderla, con algo de dificultad ya que no podía encender el encendedor.
—Oh qué bueno que siempre cargo con esta cosa — al voltear a ver lo que decía, quedo sorprendidos, su cuerpo no se podía mover, — eso es mentira...— sin quererlo soltó la lámpara, al quebrarse l cristal donde estaba las llamas tomaron como presa una especie de mantel que estaba por ahí, las llamas comenzaron a crecer, comenzaron a hacerse más grandes…
Sin embargo nadie se percató de ello, en la sala de afuera, seguían intentando discutir, sin saber cómo, Yukina junto a Miyagi comenzaron a retroceder, las palabras de aquella voz le hicieron ver lo que en todo el viaje no habían querido ver.
—“Norteleza, fue su culpa, tu hermano murió en sus manos y lo sabes” — Yukina no quería recordar eso, eso era historia, no tendría que buscar venganza, pero sabia quienes fueron los culpables, siempre lo supo, pero jamás hizo nada — “Fue su culpa, el murió por su culpa, ¿Por qué salvarlo?”
—Yukina no lo escuches— Miyagi también lo sabía, no quería que eso pasara , sabía que él había sufrido mucho , como policía que era , debía haberlo sabido, debía saber que algo andaba mal , pero nada pudo evitar que sucediera.
—“¿Realmente vale la pena salvarlo?” — Ambos retrocedían— “Ellos son los malos” — seguía hablando.
Estaba sorprendido, no podía creerlo, Chiaki bajo lentamente su arma, enfrente suyo estaba esa persona, esos grande cristales, daban la luz necesaria para verlo, era tan irreal.
—Tu…. ¿Estás bien? — camino lentamente, quería lo, quería saber que era real, se acerco a tocar su hombro pero cuando iba hacerlo aquel volteo dejándolo sorprendido….
Mientras tanto en el centro de aquel lugar, una batalla interna se generaba, Miyagi no sabía que decir, Yukina no sabía que sentir.
—“Es lo normal querer venganza” — decía la voz, no podían decir nada, si sabían algo es que tal vez cuando terminara este caso, Ellos fuera condenados a pasar el resto de sus vidas en prisión, realmente Yukina quería hacer justicia, pero aún no entendía muy bien que había en su interior.
Al otro lado de aquel lugar, otro grupo se encontraba en aprietos, la casa era realmente hermosa, de dos pisos, algo espacios, el color de la madera a pesar de los años aun no desgastaba del todo, tal parecía una obra de arte, mas no se animaba a entrar porque al llegar tres personas los estaban esperando.
—¿Qué no se alegran de verme? — pregunto mientras se levantaba.
—Ijuuin, Takahiro y Risako — no estaba sorprendido, pero en el fondo sabia que eso pasaría.
—Misaki — Takahiro hablo, mas Misaki no respondió, Risako miro a su alrededor, al parecer su querido hermano no estaba con ellos.
—¿Y bien discutimos? — Ijuuin sonreía — ¿Dónde está la pintura? — pregunto desafiante.
—¿De qué hablas?, Tu llegaste primero y no la as buscado — pregunto atónito Ritsu.
—Lo hice… pero mis hombres dicen que hay fantasmas, bola de miedosos, ¿Qué les puede pasar? — Se preguntaba. — A demás ya entramos en esta casa no hay nada— menciono.
—Pues si tú no sabes nosotros menos — respondió Kirishima, Todos e lo quedaron viendo hasta que lo escucharon, ese sonido era de una explosión y no de una cualquiera.
Miraron atónitos la escena, al parecer había fuego por toso lados, después se escuchó un disparo, miraron atónitos, el lugar comenzaba a incendiarse.
—¿Qué está pasando? — se preguntaban todos, tal vez el final estaba pronto a llegar….