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Celda número 23 por kiauchiha

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Notas del capitulo: Todos los personajes de Naruto pertenecen a Masashi Kishimoto.

Aquí va otro capi. Espero que os guste.
Sasuke abrió sus ojos nada más oír el ruido de la puerta al cerrarse, quedando de nuevo la celda en completo silencio. Había mantenido sus ojos cerrados durante toda la visita. No tenía ningún interés en nada que le pudiera decir el rubio. No había nada que pudiera hacer para cambiar su estado actual y, francamente, todo eso a él le traía sin cuidado.

Era plenamente consciente de lo que estaba arriesgando cuando se alió con Madara y no le importó. No le interesó el hecho de que arrastrara al mundo ninja a otra guerra, no pensó en cuántas vidas inocentes se cobraría por el camino… su único propósito era vengar la muerte de Itachi y matar a Danzou. Fuera de eso, nada le importaba.

Siempre tuvo claros sus objetivos, si bien nunca antes había sido tan egoísta como para no pensar en los demás. Cuando a los doce años dejó Konoha para irse con Orochimaru, no lo hizo cegado por el odio y las ansias de poder. Estaban ahí, era cierto, pero no fue lo único.

Vivía día a día preparándose para en un futuro matar a su propio hermano, una idea de por sí demasiado sombría y tétrica para un alguien que era apenas un niño. El periodo en que convivió en el equipo siete con sus compañeros… fue un lapsus, una ilusión, como si el tiempo hubiera parado por un momento para regalarle pequeños instantes de felicidad, para permitirle sentir de nuevo el cariño de personas que se preocupaban por él. No era cierto lo que le había dicho Orochimaru, en Konoha también hubiera podido progresar, hacerse más fuerte… hubiera mejorado lo suficiente como para en un futuro acabar con Itachi.

Pero los habría arrastrado a ellos, a Naruto, a Sakura, a Kakashi… incluso al resto de su generación de genins que poco a poco estrechaban lazos entre ellos… No podía permitirlo. Itachi pertenecía a Akatsuki, asociación que perseguía a Naruto para matarle. No iba a quedarse para en un futuro arrastrar a las nuevas personas que eran importantes para él a una muerte segura.

Por eso se fue. Eligió alejarse de todos, que lo odiaran, que pensaran que los había traicionado, antes de pasar de nuevo por el dolor de perder a las personas que quería frente a sus ojos. Ellos se cuidarían entre sí, no le necesitaban para nada.

Aunque hubo un pequeño fallo en su plan, por supuesto. Naruto… siempre Naruto. El rubio cabezota que no entendía nunca nada. O que entendía demasiado bien… quién sabía. El estúpido dobe siempre estuvo tras sus pasos, incansable, persiguiéndole fuera a donde fuera, siempre insistiendo para que volviera, siempre rogándole que regresara con él… Y se sintió bien, alagado, contento de que alguien se acordara todavía de él. Naruto le dio esperanzas, le llevó a pensar que en un futuro, tras acabar con Itachi, podría volver a la aldea y ser perdonado, recuperar esos lazos, como lo llamaba el rubio, que había conseguido tejer en sus años genin y hacerlos más fuertes… empezar una nueva vida.

Pero todo se fue al traste cuando supo la verdad. La rabia lo consumió cuando descubrió todo de boca de Madara. De alguna forma Itachi había pasado de ser el loco-desquiciado-asesino-de-su-clan a su querido nii-san, el único que siempre le había querido y que hizo lo imposible por cuidarle, por mantenerlo a salvo. No pudo soportarlo, pensar en todo lo que tuvo que soportar su aniki y saberse autor de su muerte…

Ese día algo se rompió en él. Supo que había sido un iluso, por pensar que las cosas volverían a estar bien alguna vez. Aun si nunca hubiera sabido la verdad, desde el momento en que Itachi cayó muerto a sus pies había condenado su alma. Hacía mucho tiempo que se había separado del camino de la luz y vagaba por el sendero de las sombras, con la rabia y el dolor como únicos acompañantes. Así pues, dejó que el odio y la rabia lo consumieran.

Si alguna vez tuvo la intención de volver a Konoha, lo olvidó. Si todavía tenía algún recuerdo de sus años felices en el equipo siete, los borró. Si todavía tenía algún lazo con ese rubio que le seguía a todas partes, lo ignoró. Se lanzó de lleno a su venganza y pasó por encima de todo en su afán por matar a Danzou. Cualquiera que se cruzase en su camino sería su enemigo, fuera quien fuera.

Y lo irónico es que lo había conseguido. Había matado a Danzou y visto con sus propios ojos cómo Madara exterminaba pueblo tras pueblo sin levantar un dedo por impedirlo. Había participado en masacres, en asesinato de familias, niños, gente inocente que nada tenía que ver con la guerra sólo por órdenes de Madara, igual que un títere bajo las manos de su dueño. Estaba vacío, no sentía, no oía, no veía.

Estaba con su líder el día que los rodearon cinco de los Kages de la Alianza. El resto de sus acompañantes, ninjas renegados y su propio equipo Taka, fueron reducidos en un momento, quedando sólo Madara y él en pie. No los vencieron fácilmente, pues aun sólo siendo dos, eran Uchiha y ninjas muy capaces. Pero al final fueron sometidos. Su misión era proteger a Madara, el que parecía ser objetivo principal, y en uno de los ataques, vio cómo el Uchiha mayor se descuidaba y tres jutsus mortales se dirigían sin remedio hacia él. En ese instante no lo pensó, simplemente actuó y se puso entre su líder y los ataques, sabiendo que sería su propia muerte.

Pero, cómo no, el idiota de Naruto tenía que volver a intervenir en ese instante. El Uzumaki era uno de los cinco que estaban atacándolos, si bien no había parado de intentar convencerle para que se entregara y volviera con él a casa. “¿A qué casa?” se preguntaba el moreno cínicamente. El ya no tenía hogar, ya no pertenecía a ningún sitio. Lo mejor era darlo todo en esa última lucha e intentar morir como un ninja. Por lo menos moriría como había vivido, luchando.

Sasuke se había situado frente a Madara para protegerlo y al momento se vio envuelto en los brazos de Naruto que los desapareció a ambos para volver a aparecerlos tras la línea de los Kages.

- ¿Qué mierda te crees que haces, Sasuke? – le había susurrado con furia todavía con sus brazos alrededor del moreno. - ¿Te quieres suicidar o qué? – los ojos del rubio eran de un rojo brillante y destilaban una rabia increíble.

El moreno, si bien sorprendido, se separó con un brusco ademán y echando una ojeada hacia Madara, comprobó que el otro no había tenido tanta suerte y el ataque le había golpeado de pleno, matándolo en el instante. Sabiéndose perdido, no perdió oportunidad y mirando por última vez a Naruto, desapareció del lugar en medio de unas llamas, sorprendido porque el rubio no hiciera ademán de impedírselo y se limitara a observarlo todavía con ojos destellantes de furia.

Desde entonces había estado escapando, escondiéndose de todos los shinobis que le buscaban, vagando de pueblo en pueblo oculto bajo jutsus de transformación. Pasaron dos años hasta que le consiguieron atrapar en el país de la Niebla. Francamente, estaba harto de la vida tan insulsa que llevaba, así que tampoco luchó con mucho ahínco. Tras tres semanas en la prisión del país, fue llevado a Konoha en un intercambio de rehenes, donde le habían trasladado a la celda que ocupaba ahora mismo en espera de su juicio.

No pudo decir que se sorprendiera de la visita del rubio. Si no había desistido de perseguirlo después de tantos años, dos años como prófugo no iban a hacerle cambiar de idea. Pero ya no le interesaba nada de lo que pudiera ofrecerle. No había nada de lo que pudiera decir Naruto que pudiera importarle. Le condenarían a muerte por sus acciones, estaba más que seguro, o en el mejor de los casos a cadena perpetua en esa asquerosa celda. Y siendo francos, prefería la muerte a estar atrapado para toda la vida en esa miserable cárcel. Ya se aseguraría él de hacerlos enfurecer debidamente en el juicio para que hicieran bien su trabajo. Se preguntaba qué habría después de la muerte. ¿Volvería a ver a su hermano? ¿Volvería a encontrarse con Itachi…?

“Vendré mañana a verte” resonaron las últimas palabras de Naruto en su cabeza…

- Demasiado tarde… - musitó inaudiblemente mientras esbozaba una sonrisa triste. – Llegas demasiado tarde… Naruto.
Notas finales: Muchas gracias por todos los reviews!!

Disfrutad!! ^^

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