Y tal vez era por eso que lo amaba, Henry había sido su felicidad durante mucho tiempo, incluso cuando aún estaba con ese chico que anteriormente lo había hecho sufrir, ZhouMi siempre se había mantenido al margen debido a eso pero cuando lo vio solo y al borde del suicidio decidió no ocultarse más y dejarse ver, dejarse ver lo suficiente como para ser el rayo de luz que Henry necesitaba al momento, su perseverancia dio resultados cuando Henry le confesó sus sentimientos correspondiendo a los suyos que por mucho tiempo habían estado ocultos, Y la razón por la cual lo amaba era simple, por la sencilla razón de que Henry era diferente, diferente en todo. Henry solía salir en las mañanas a alimentar a los perros callejeros del parque, cuidaba a las palomas y era voluntario en el refugio de niños, Henry era casi un ángel. Por lo mismo nunca había dudado de él, nunca.
No podía creerlo, no podía, no quería creer, Después de escuchar voces en la entrada, creyó haber escuchado las llaves de Henry pero nunca entró, salió a buscarlo siguiendo la voz que se le hacía más familiar, camino y camino hasta aquel parque donde todo había empezado, logró ver a Henry, a Henry en brazos de otra persona.
Se acercó lentamente sin ser visto, quería verlo, quería ver la cara de la persona que le arrebataba lo que era suyo. Cuando se acercó lo suficiente agudizó la vista, de pronto había olvidado que era de madrugada, había olvidado el frío que hacía por las mañanas, había olvidado que estaban en un lugar público, Olvido todo, absolutamente todo cuando se dio cuenta que la persona que estaba con Henry…era Hangeng.
Casi podía escuchar su corazón rompiéndose en mil pedazos, Henry, su amado Henry estaba frente a él, Frente a sus ojos, en brazos de otro chico, chico que justamente era su casi hermano, su mejor amigo, Hangeng. De repente todos esos recuerdos donde le pedía consejos, las salidas, las pláticas… ¡Las pláticas!, había olvidado ese momento, nunca le pudo preguntar, aquel día en la fiesta cuando Donghae y EunHyuk hablaron de eso…
-Debe ser difícil para Henry-se detuvo… ¿Por qué tendría que ser difícil?
-Si…después de tanto tiempo reencontrarse de esa manera
-Ya lo creo, yo no podría con la pesadez de tener a mi novio y mi ex viviendo conmigo
-Aunque Hangeng es un buen tipo…lastimó a Henry en el pasado.
Claro, ¡por supuesto!, había tenido la respuesta siempre frente a sus ojos pero nunca había querido notarla. Muchos recuerdos comenzaron a aparecer en su mente, tal vez demasiados.
-ZhouMi
-Dime Henry
-¿Se puede querer a dos personas a la vez?
-No lo creo, ya que si quieres mucho mucho a una no podrías ser capaz de querer a otra por encima de ella, ¿o sí?
-Supongo que tienes razón
-¿Por qué la pregunta?
-Solo preguntaba, no es nada
Sonrió para sí mismo, que ironía, hablándole indirectamente de lo que hacía y el sin sospechar nada, incluso Hannie a veces se delataba. Ambos lo hacían.
-Hannie
-¿Sucede algo?
-Últimamente has estado muy agitado, ¿te sucede algo?
-No, ¿agitado? No yo no-Hannie evitaba cruzar las miradas con Mimi
-¿Seguro?, soy tu amigo puedes confiar en mi
-No me pasa nada, si fuera así te lo contaría
Sujeto su cabeza entre sus manos, de un momento a otro comenzaba a doler, miró a Henry, aún estaba ahí con Hannie, se sonreían y miraban, salió de su escondite avanzando lentamente a la pareja frente a él, su mirada se volvió obscura y fría, avanzaba sin hacer ruido, lento, para no ser escuchado.
Sabía que estaba mal, Sabia que no era correcto, mas sin embargo, no podía evitar hacerlo, Hannie era su vida, su primer amor, el amor que sintió y siente por él, es algo que nunca logró extinguir de su corazón, porque a pesar del tiempo que pasó, de lo que pasó entre los dos, de la vida que vive ahora, Hannie siempre supo cómo afrontar la situación.
-Regresa conmigo-Hannie aún le tomaba de las mejillas juntando sus frentes dejando cercanos ambos rostros.
-Pero Hannie…ZhouMi
-Regresa conmigo
-Yo…
-Así que esto era eh-La voz a sus espaldas les hizo romper el ambiente que se había creado a su alrededor, ambos voltearon y con la sorpresa reflejada en el rostro viendo la cara de tristeza, enojo y desesperación de ZhouMi, cayeron en cuenta de que se había acabado el tiempo.
-¡ZhouMi! No es…no es lo que piensas…puedo explicarlo-Henry habló asustado aun en brazos de Hannie observando como ZhouMi sonreía de una manera sínica
-Henry ya no hagamos el tonto, sé que lo amas, ¡sé que lo amas tanto como para lastimarme!, confiaba en ti Henry…
-ZhouMi no…yo…
-¡Confiaba en ti maldita sea!
El alto comenzaba a llorar de la conmoción, no sabía si llorar, gritar o hacer todo al mismo tiempo, estaba perdiendo los estribos y lo que era peor era que en ningún momento Henry soltaba a Hangeng y viceversa.
-¿Hace cuánto tiempo que me mienten?
-¿Qué?
-¿¡Hace cuanto que están juntos a mis espaldas!?
Henry miró a Hangeng, ¿estaría bien decirle?, decirle que desde aquel momento en el que Henry bajó por la escalera encarando a Hannie en su sala había caído de nuevo, ¿que desde aquella noche en la que Hannie había reparado su laptop había comenzado todo?
-¿Hace cuánto?
Hannie suspiró como no queriendo la cosa, era ahora o nunca, ya no tenían tiempo, ya no tenían excusas, ya solo quedaba…decir la verdad.
-Desde que lo volví a ver, desde que me abriste la puerta de tu casa…desde que Henry bajó por la escalera…desde que…lo escuché tocar de nuevo…desde aquel entonces nosotros…-Hannie habló con seguridad, mirando fijamente a Henry mientras lo decía
-Espera… ¿tocar de nuevo?-ZhouMi agregó confundido mirando a Hannie por unos segundos para después observar a Henry-¿Tocaste el violín para el apenas lo viste y nunca para mí en estos años?
-Pero es que…ZhouMi él…el me dio el violín hace años, él es…por él aprendí a tocar violín, yo solo…
-Lo entiendo…mientras estabas conmigo solo pensabas en él, mientras yo daba todo tu no dabas nada, ¿tú nunca me amaste cierto?
-ZhouMi…
-Henry dime la verdad, ¿acaso todo el tiempo que estuvimos juntos no valió para nada?
-ZhouMi, yo te aprecio en verdad, yo te quiero pero…
-No me amas…
-¡Si te amo!
-¡Pero no tanto como a él!
-ZhouMi…
-Kibum tenía razón…algo me ocultabas ¡y era él!
-Espera ¿Kibum? ¿Kim Kibum?-Hangeng miró a ZhouMi, ¿estaba hablando de KiBummie?, el mismo chico con el que había vivido en China… ¿ese Kibum?
-¿lo conoces?
-No lo sé, tal vez
-¿¡Que acaso no hay nadie que no conozcas!?
-Lo lamento
Ahora los tres guardaron silencio, en ese momento ninguno sabía que decir, uno estaba en shock, confundido y un poco aturdido, otro estaba enojado, triste, frustrado, y el ultimo estaba sorprendido.
-¿No vas a decir nada Henry?-Henry lo miró, observándolo a los ojos por primera vez en toda la noche, tembló un poco, estaba asustado, realmente asustado, tomó la mano de Hannie y la apretó con fuerza, necesitaba sentirse seguro, quería sentirse seguro.
-No es que no te quiera…es que…
-¿Sabes qué?...Llámame cuando te decidas, no pienso escuchar tus patéticas excusas esta vez
ZhouMi mostró su espalda y caminó de regreso a casa. Henry solamente podía verlo alejarse, Hannie se mantuvo en silencio un buen rato.
-Henry…-dijo dulcemente mientras que con su mano izquierda le acariciaba el brazo para calmarlo-Creo que…hoy no deberías ir a casa-Sentenció
Henry solo se limitó a asentir para después girarse a verlo. Sus ojos proyectaban lo confundido que estaba por dentro, todo el dolor y la agonía, la frustración de no saber qué hacer le inundaba todo el cuerpo.
-¿Crees que el…pueda…perdonarme?
Hannie lo miró, primero sin entender pero después mostró una cara amable, sonriendo apenas, le pasó un brazo por los hombros reconfortándolo.
-Lo hará…ZhouMi, el…te ama
El resto del camino había estado callado. Aún si abría la boca no sabría qué decir. Llegaron al departamento de Hannie en silencio, Henry entro primero y tomo asiento en la sala de estar aun con los ojos perdidos. Hannie cerró la puerta tras de sí mirando a Henry sin expresión. Sintió un dolor en su pecho, de alguna manera, él había sido el responsable, él había orillado a Henry a esa situación. Se acercó de manera lenta y se arrodillo frente a Henry, este no pareció darse cuenta hasta que una mano de Hangeng tocó su mejilla con suavidad.
Se miraron un buen rato antes de decir algo. El silencio ahora era su amigo, mas sin embargo era un agradable silencio y no un silencio incómodo. Tal vez, para Henry, todo era agradable si era con Hangeng.
-Lo lamento
Henry lo miró sin entender. ¿Acaso le estaba pidiendo perdón?, ¿pero por qué?
-Lamento haberte orillado a esto, sabía que estabas con él y aun así me metí entre ustedes, aun así…te obligué a esto, aun así…Henry yo…
Henry lo acalló con un beso, uno suave y tierno. Lo miró comprendiendo la situación y embozó una pequeña sonrisa.
-No es tu culpa, ¿Recuerdas lo que me dijiste el otro día?-Hannie lo miró sin comprender- Estamos…
-…Juntos en esto
Ambos sonrieron. Esa sonrisa fue lo único que necesitaban para liberar todo el estrés de esa noche. Sin darse cuenta ya estaban besándose en la sala, sin darse cuenta ya estaban en el dormitorio principal, sin darse cuenta ya estaban desnudos uno sobre el otro, sin darse cuenta Henry ya estaba gritando el nombre de Hangeng y Sin darse cuenta ya habían caído dormidos ante la obscuridad de la noche.
-¿Seguro que estarás bien si te dejo solo?
Se encontraban frente a la puerta de la casa de Henry. No sabían si ZhouMi aun dormía o lo estaría esperando en el comedor. Las manos de Henry temblaban de nervios, Hannie lo había acompañado mas no iba a entrar. Esa mañana la calle estaba desierta, ni siquiera el del pan había pasado siendo no más de las 10 am.
-Seguro que si
Le sonrió para tranquilizarlo pero al parecer no convenció mucho a Hangeng.
-Ten el celular a la mano por si acaso me necesitas
Se alejó a paso lento en dirección a su trabajo, ya venía siendo hora en que lo volviera a abrir.
Henry suspiró cuando lo vio dar vuelta en la esquina, miró al frente, a su casa. Introdujo la llave en la cerradura y cuando escuchó el Clic indicando que la cerradura se abría sintió escalofríos por todo su cuerpo, entró lentamente y sin hacer ruido, observó cómo estaba todo, al parecer seguía todo normal. Avanzó rumbo a las escaleras pensando que tal vez ZhouMi seguía durmiendo pero se detuvo ante el primer peldaño y lentamente dio la vuelta.
De pié sobre la alfombra de la sala estaba ZhouMi, mirándolo como si esperara algo de él. Henry tembló, era la primera vez que Mimi lo miraba de esa manera tan fría.
-ZhouMi…
Dijo en un susurro apenas audible, pudo sentir como las lágrimas se arremolinaban en sus ojos negándose a caer.
-Solo vengo a decirte algo Henry
Henry calló como por arte de magia y ZhouMi se enderezó mirándolo a los ojos.
-Te amo y no pienso renunciar a ti ¿entiendes? Así mi oponente sea alguien tan fuerte como Hangeng no te dejaré ir.
La sorpresa estaba presente en el rostro de Henry, vio como ZhouMi se acercaba y en un rápido movimiento le robaba un beso en los labios.
-Voy a respetar tu decisión, pero hasta entonces…viviré con Kibum, el vecino.
Y lo vio salir, vio como la puerta se cerraba a sus espaldas y fue entonces que se dio cuenta de que faltaban sus cosas. Todas, todas sus cosas…
Subió rápidamente la escalera, subió hasta el ático y ahí se encerró. Prendió la luz y pudo vislumbrar las cajas que el mismo había subido años atrás. Se acercó a una en especial, al frente de esta se podía ver como con letras negras de plumón grueso enmarcaban su nombre “Hannie” .
Retiró el polvo lentamente ensuciándose las manos. Quitó la tapa y suspiró al ver el contenido.
Ahí guardaba las fotos y todo aquello que le había dicho a Hannie que había tirado. Nunca pudo deshacerse de ellas, No podía, simplemente no podía. Entre sus manos tomó una de aquellas fotos mientras recordaba lo que había pasado el día que la tomaron, fue pasando una a una hasta que se encontró a si mismo llorando.
Sonrió ante la idea del pasado, se vio a sí mismo en aquellos días donde Hannie y el solían divertirse con lo que sea. Pero después recordó a ZhouMi y sus salidas espontaneas, ambas situaciones completamente diferentes pero ambas igualmente divertidas.
Volvió a guardar todo y durante unos minutos se mantuvo sentado a un lado de la caja.
El sol de la mañana iluminó el parque. El lugar estaba vacío, solo se escuchaban las risas de dos muchachos.
-Oye…basta
Henry tomó su estómago que le dolía, él no había parado de hacerle cosquillas toda la mañana
-Te lo mereces, me hiciste esperar todo este tiempo
El chico volvió a abalanzarse al más pequeño sacándole aún más risas. Lo miró a los ojos con una mirada que hace mucho no le dedicaba. Se fue acercando lentamente hasta que juntó sus labios con los de él.
-Henry… ¿te arrepientes?
Este lo miró confundido
-¿por qué? ¿Por haberte escogido?
-Sí, digo…tú y él…ustedes bueno, tenían una historia y yo…
Henry lo calló con un beso, recordando aquel día…
Hannie lo miraba. Henry le había citado en ese lugar, en aquel banco en el parque. El viento soplaba como siempre y el sol brillaba de la misma manera. Hannie fue el primero en decir algo.
-Entonces…no me escogiste
Henry sonrió tristemente sin mirarlo
-Hay cosas que uno simplemente tiene que dejar ir…Hankyung-lo miró-Tú eres una de ellas.
Ninguno dijo nada durante un par de minutos. Hangeng se limitó a sonreír y a mirarlo dulcemente.
-Te comprendo.
-Hannie yo…es que…entre él y yo, hay algo que…
-Descuida…lo entiendo Henry
Henry lo observó levantarse y pararse frente a él.
-¿Te vas?
-Por el momento, debo ir a trabajar ¿recuerdas?
Henry sonrió al igual que Hankyung y se levantó para abrazarlo.
-¿Seremos amigos después de esto?
-Por supuesto Henry, aunque tal vez regrese a China-Henry dejó de abrazarlo y lo miró a los ojos-Heechul me necesita, regresaré lo prometo
-Hannie, gracias
-¿Por qué?
-Por todo
Fue entonces que Hangeng entendió, soltó a Henry y con un gesto de mano se despidió, le dio un beso en la mejilla y le sonrió como solía hacerlo
-Saluda a ZhouMi de mi parte y dile que…cuando me perdone, quisiera que sigamos siendo amigos…como antes.
Ese día Hannie se alejó a paso lento, no fue la última vez que lo vio, pero tampoco lo ha visto tan seguido desde entonces. ZhouMi volvió a ser el mismo e incluso perdonó a Hangeng, aunque ya no quiere verlo tan seguido como antes, sus heridas aún son recientes. Henry y él solían pasear todos los días en aquel parque, Heechul y Siwon habían regresado a China y mandaban cartas todos los lunes. Henry sonrió feliz. Porque era feliz.
-¿Henry?...¿te arrepientes?-ZhouMi volvió a preguntar al ver que el otro callaba. Henry lo miró con amor en los ojos mientras le hablaba.
-No…no me arrepiento. Eres mi presente y quiero que seas mi futuro. Juntos…por siempre.