Login
Amor Yaoi
Fanfics yaoi en español

Sorpresas del Futuro por Yadira xD

[Reviews - 101]   LISTA DE CAPITULOS
- Tamaño del texto +

Notas del capitulo:

Hola a todos!!!

 

Como no me quiero ir por la tangente jajaja 

 

Aqui les traigo este ultimo capitulo. Espero de verdad que les haya gustado esta loca trama. Aun estoy pensando en si hago como oneshot las historias de cada una de las parejas pero aun no sé jajajaja

 

Gracias a todos los que siguieron capitulo a capitulo este fic n_n 

 

Nos leeremos en la proxima y de nuevo MIL GRACIAS!!! por todos sus comentarios, los cuales hacen que me den más ganas de escribir xD

Rigel corrió a abrazar a su padre, el cual la recibió con los brazos abiertos pero aun con ese semblante de enojo enmarcando su rostro. Lyra no era tan valiente como para hacer lo mismo que su hermana pequeña, así que no tuvo otro remedio que, invocar “el modo planta”, y quedarse fija en el suelo viendo como su padre se acercaba a ella con su hermana en brazos.

 

-Hablaremos en casa.- Lyra sintió un estremecimiento por todo su cuerpo, ¿y decían que los Slytherin eran los sangre fría y daban miedo? Quizás era cierto lo que decía papá y cada Gryffindor tenía un poco de Slytherin en ellos. Para muestra bastaba con ver al padre de Blay, quien había armado el plan de su vida para atrapar al tío Sev.  

 

Lyra sintió una mirada en ella y fue cuando su mirada conecto con la de su primo Blay, este pronuncio algo en voz baja y de inmediato sonrió. Lyra cayó en la cuenta y le lanzo una mirada irritada, odiaba que el estúpido de su primo tuviera el poder de la legeremancia y oclumancia… ¿Cómo un idiota como él, podía dominar tan poderosa magia oscura? Claro, todo era porque su papá era uno de los oclumánticos y  legeremántico más poderosos del mundo mágico, después del padre de Harry.

 

Lyra fue interrumpida de sus pensamientos sobre como matar a su primo cuando escucho la voz del papá de Harry.

 

-Creo que es tiempo de que regresemos a nuestro tiempo, antes de que le dé algo a mi pobre Tom.- el susodicho estaba aún muy enojado con los mocosos y sobre todo con su hijo.

 

Dumbledore se levantó y camino hacia los del futuro con su sonrisa alegre y un puñado de dulces de limón.- ¿Gustan?

 

-No, gracias.- dijeron los adultos al unísono. El director sonrió al ver que aparte de más civilizados, se habían vuelto más amables y educados. Era algo bueno ver que sus alumnos y hasta su profesor eran adultos felices, con una familia disfuncional pero felices al fin.

 

-¿ Y cómo volverán, Jovencitos?.- pregunto el director y Tom hizo una mueca. Ya era un hombre hecho y derecho, Ministro de magia de Londres, padre de familia y aun ese viejo lo trataba como un chiquillo.

 

James sonrió al ver la mueca de su esposo.- Usaremos un portal que creamos para venir aquí, empleando el gira tiempo y un poco de magia (mucha magia oscura).- contesto Remus, el cual tenía a Draco agarrado del brazo tal cual niño regañado.

 

-En ese caso, es tiempo entonces.- El Director sonrió y observo como el ahora no tan joven Bartemius Crouch Jr., hacia unos diagramas en el centro, a continuación un Tom aun enojado se colocaba en el centro y empezaba a decir algo en voz baja, pero el director supuso que eran conjuros de magia oscura. Aun pasado el tiempo, una serpiente siempre sigue siendo una y los Slytherin eran muy bien conocidos por manejar la magia oscura como unos maestros.

 

Al momento de que el padre de Harry culmino con los conjuros, el diagrama empezó a brillar y a continuación Sirius coloco el gira tiempo en el centro de este.

 

-Bien, todo terminado. Ahora todos en el centro, pero no vayan a tocar el estúpido artefacto. Si lo hacen, quien sabe en que era o tiempo terminemos. ¿Entendieron todos?.

 

-¡Ay Tom! Lo haces ver como si fuéramos unos atolondrados.- James cruzo los brazos, haciendo más notoria su barriguita. Tom lo regreso a ver con una ceja elevada y bufó.- Quizás tú no, pero otros si.- y regreso a ver a su heredero, al de Sirius, al de Malfoy… Para ser más concisos, regreso a ver a todos los hijos de sus amigos.

 

Jodidos mocosos, pero ya verán lo que les espera cuando lleguemos a nuestra época. Ni Merlín mismo los va a poder ayudar.- estos eran los pensamientos de Tom, mientras sonreía sádicamente, haciendo que los pobres corderos temblaran de miedo.

 

Todos tuvieron cuidado al entrar al diagrama, en especial los más jóvenes, ya que no querían que la de por si, poca paciencia que caracterizaba al señor Riddle cayera sobre ellos, de nuevo.

 

Cuando ya estaban a dentro de este y se decidían a irse, una voz los detuvo.- ¿De verdad, ya se van?.- el dueño de esa voz era el líder de los merodeadores, James.

 

Fue ese el momento en el que los adultos recién llegados prestaron mayor atención a sus homólogos del pasado. Todos se miraban, los del pasado con extrañes y confusión, mientras los del futuro con asombro, hasta cierto sentido era algo raro de presenciar. Verte en tu forma de adolecente era algo que ni en sueños pensaron volver hacer.

 

Tom hizo una mueca mental viendo a la versión más joven de su esposo. Tenía cara de menso… aun la tenía, pero sin duda alguna amaba esa cara de menso. Agradecía desde el fondo de su negro corazón el haber encontrado a su James y haberle cambiado el modo de ver el mundo. Si ese extravagante, cuatro ojo, revoltoso, líder de una panda de idiotas no hubiera entrado en su vida, sin duda, se hubiera convertido en un monstruo lleno de odio.

 

James miro a la versión joven de Tom y sonrió con calidez al recordar todo lo que hizo para conquistar a esa serpiente testaruda y llegar hasta conocer la verdadera felicidad.

 

Remus sonrió a la versión joven de su esposo y a la suya. Les deseaba suerte ya que desde ahora iban a tener que luchar para poder llegar a estar juntos, a la sociedad, a sus familias, a la maldición que el acarreaba.

 

Bill le guiño un ojo a Regulus, el cual se puso rojo como un tomate. Algo muy raro en el siempre sereno Reg. A las versiones jóvenes de sus padres les dio una ligera inclinación de cabeza y sonrió, haciendo que estos sonrieran de regreso a su hijo.

 

Bartemius miro a Peter y sonrió con ironía. Ahí estaba el hombre que ni un sus más locos sueños, pensó que llegaría amar tanto. Él único que ama y amara para siempre.- Fino ad allora, il mio amore.- Las palabras dejaron a un Barty del pasado con la boca abierta y a un Peter con los ojos totalmente abiertos.

 

Severus se sentía incómodo con la mirada que le estaba lanzando el Black del futuro, estaba totalmente rojo y nervioso. Por otro lado, Sirius se estaba comiendo a la versión más joven de su esposo. Y miro con enojo a su versión joven. Aun no le cabía en la cabeza que no haya caído por él en el momento que lo vio, en cambio le había hecho todas las bromas que se le vinieron a la cabeza. Sirius sonrió interiormente, viendo cómo se teñían de un rojo carmesí las mejillas de su Sev, este era la cosita más sexy y gruñona del mundo, y lo amaba.

 

-Es tiempo de irnos.- dijo James con una sonrisa.- no podemos interferir en el pasado más de lo que ya hemos hecho.

 

Draco agarro la mano con fuerza de su papá, se sentía triste al tener que decirle adiós a las versiones jóvenes de sus padres.- Todo estará bien, cachorro.- Remus le sonrió a su primogénito y este le devolvió la sonrisa.

 

-Adiós padres, tengan el consuelo que su primogénito es el hombre más sensual del mundo.- Blay sonrió, ganándose un gruñido por parte de Draco y Lyra.

 

-Cuando nos hayamos ido, ustedes olvidaran todo lo que ha pasado.- Tom les informo.

 

-¿QUÉ? No pude ser eso posible.- El James del pasado se sintió histérico, por fin tenía a su Tom con él y le decían que lo iba a perder.

 

-No pueden hacer eso, nosotros por fin estamos juntos.- Lily dijo las palabras con un nudo en la garganta.

 

Sus homólogos del pasado y sus amigos tenían una cara de tristeza absoluta. Remus sonrió.- No estén tristes, las cosas deben pasar como se supone que pasaron.

 

-Pero y si nosotros no…

 

Sirius cortó lo que iba a decir su versión joven.- Si, no recordaran nada de lo que ha pasado en estas horas, porque nada en la vida es sencillo ni fácil. Y ustedes mismos deben luchar para alcanzar esa felicidad.

 

-Si realmente se aman, llegaran a estar juntos. No se rindan y luchen por lo que quieren.- James le guiño el ojo a su versión joven.

 

Los chicos del pasado se pusieron nerviosos al ver como los del futuro iban desapareciendo con una sonrisa en los labios.- No, esperen. Aún tenemos muchas cosas que preguntar.

 

Lo último que vieron fueron las sonrisas de los chicos del futuro, y después todo se volvió negro.

 

 

 

Dos semanas después…

 

Era una mañana de lo más normal en Hogwarts; en el Gran Comedor se escuchaban las charlas y risas de los alumnos de las cuatro casas.

 

Los Slytherin intercalaban el tiempo al hablar y comer, los Gryffindor más que hablar, gritaban, los Hufflepuff reían mientras que los Ravenclaw mantenían una amena plática.

 

Este era un buen día, el sol había salido y las clases se habían suspendió por mandato del director Albus Percival Wulfric Brian Dumbledore, o para acortar, el viejo loco.

 

Por lo que en estos momentos, todos los alumnos, maestros y trabajadores de Hogwarts, se encontraban disfrutando del día libre.

 

Hace dos semanas, todos los que se encontraban en el Gran Comedor habían sufrido un desmayo masivo y al despertar nadie se acordaba de nada.

 

Según lo que les dijeron fue que alguien había entrado a la escuela y los había puesto a dormir a todos. Los profesores revisaron hasta el último rincón de Hogwarts en conjunto con el ministerio, sin encontrar nada raro o fuera de lo normal. Por lo que el incidente paso a ser olvidado rápidamente.

 

Y todos volvieron a sus vidas diarias, los Slytherin se peleaban con los Gryffindor, los Ravenclaw pasaban sus días en la biblioteca y los Hufflepuff volvían a sus alegres mañanas, dejando atrás ese raro incidente.

 

 

 

O casi todos…

 

Dumbledore veía con una sonrisa en su boca la diatriba de sus alumnos, recordando lo que en un futuro les esperaba. Y a él, teniendo como alumnos a los hijos de sus ahora alumnos. Miro a su profesor de DCAO y le sonrió, haciendo que este solo alzara una ceja y lo ignorara olímpicamente. Miro a los merodeadores que miraban con disimulo y sonrisas en sus caras a la mesa de las serpientes. Miro hacia la mesa de los Hufflepuff y capto la mirada de uno de sus alumnos que le dirigía a una alumna en Slytherin.

 

Si, la vida era divertida y el futuro prometedor.

 

 

 

 

Notas finales:

Nos leeremos en la proxima y reitero mi agradecimiento por haber leido este loco fic :) 


Si quieres dejar un comentario al autor debes login (registrase).