Login
Amor Yaoi
Fanfics yaoi en español

—No me desampares— por Yukimura_Takano

[Reviews - 4]   LISTA DE CAPITULOS
- Tamaño del texto +

Notas del capitulo:

gracias por todo el apoyo que me hayan dado en este fanfic!

el final esta aqui, y espero que lo disfruten... me tomo un poco de tiepo idearlo, por lo que espero que les gustara y que le diera la conplucion que esperaban en la historia (la cual es de las cosas mas adorables que creo haber escrito para un final jejeje)

pongan en la caja de comentarias que tal les parecio... saludos y nos veemos en otro producto de mi imaginacion amantes de lo ajeno :P

Se sorprendió al ver sus alas totalmente nuevas... no pensaba en sentirse tan divinizado con un ángel, aún no se puede creer en lo que se convirtió esto.

—en efecto, el amor es el mejor sentimiento que los humanos pueden experimentar, creo que nosotros debemos de aprender a comprender todos los tipos de amor, en toda la extensión de la palabra.

El azabache volteo a donde el semi sorprendido mocoso lo observaba, sonrió mientras veía esa expresión bastante graciosa.

—como ves y como te dije, si... he querido a tu bisabuelo mucho... morí porque estaba seriamente loco de amor por él, pero... no se trata de él, se trata de que ahora, yo... estoy enamorado de ti; a pesar de que, pudiste amar a Aoba, yo siento algo especial desde que te cuide, desde que te vi crecer, desde que conocí de verdad a esa persona. —Sonrió mientras alborotaba su cabello—. Después de todo, yo te amo de verdad.

—Koujaku. —Era la primera vez que mencionaba su nombre,a lo cual prestó especial atención—. Yo quiero decirte algo también.

— ¿qué es?

Pronto, cuando estaba a punto de hablar,  fue empujado con fuerza para a un lado. Todo fue muy rápido, tan pronto como sintió el suelo, vio como la lanza iba a toda velocidad hacia el cuerpo del menor, atravesándolo en medio de su cuerpo. Sucedió tan pronto que ni tiempo le dio de parpadear.

—ah... ¿Noiz?

Fue rápido hacia él, y descubrió que su pecho estaba atravesado completamente por la filosa arma. El menor se  estremecía de dolor, su expresión fue puramente de pánico y extremo sufrimiento.

—Eres... un ángel y aun así no te diste cuenta de eso... —Noiz escupió un poco de sangre, mientras hacía una media sonrisa.

—Espera... ¡no puedes morir así!

—Por fin... conozco el... dolor... Es horrible...

Koujaku comenzó a llorar mientras sostenía su mano.

—Si... es una sensación nada placentera...

—Kou... jaku... a pesar de que, por 19 años, no sentía nada... hiciste, inconscientemente, que no me sintiera solo... Comencé a descubrir que eso se llama... querer a una persona. —apretó su mano, gimiendo fuertemente de dolor—.es la primera vez que siento, esto tan fuerte.

—por favor, no quiero que sigas hablando... harás que te duela más... —sonrió, aun con la tristeza a lo que da—.

—viejo... deja de estar llorando por mi... no te preocupes, vive por tu cuenta todo lo que da tu existencia.

—Pero... te voy a extrañar tanto... —tomo su rostro y con un triste beso se despidió de su rubio, dejando de besarlo cuando sus labios comenzaron a sentirse fríos... una escena hermosa: cerró sus ojos con una sonrisa, eso lo hizo llorar más.

—JAJAJA, OTRA VEZ ROMEO SACRIFICANDOSE POR SU JULIETA.

Volteo rápido a verlo, en efecto, la sombra negra se asomaba justo donde estaba antes la lanza; el ángel estaba amenazando a su superior con un cuchillo... eso le causó entre cólera y enojo.

— ¡maldita sea! Tú, ¡¿trataste de ayudarme y ahora lo matas a él?! —Se levantó viéndolos con reto—.

—mi querido Koujaku... eres bastante tonto, ¿me parece que aún no sabes quién soy? —se quita la capucha que cubría toda su cara, lo vio...

¿Quién era? Era el mismo tipo que le degolló, el tipo que principalmente le declaro la pena de muerte, quien más le criticaba... Era ese bastardo.

—tu... Ryuhou

—venía a darle el golpe final a tu parejita, que ahora estará lejos de ti... una escoria menos. —Con locura total rio maniáticamente—.

—perdónenme todo por lo que haré... —saco la lanza y corrió rápido; las alas le daban un impulso impresionante que de una sola estocada le dio justo donde debería estar el corazón—. Un alma podrida debe pudrirse para siempre.

—no importa, mi trabajo ha terminado. —Aun con su sonrisa maniática cayó rendido en el piso—.

Si, también el ángel que se así el malo huyó recién vio la violencia del acto. El azabache, rendido totalmente, fue a recoger el cuerpo de Noiz, el cual cargó hasta donde estaba el anciano, sus ojos estaban lagrimeando sin parar.

—puede... ¿hacer algo para salvarle?

—... me temo que yo no puedo hacer esas cosas.

Cayó con fuerza al piso, llorando aún más, sintiendo el peso que cargaba se aligeraba poco a poco: estaba destrozado, lo estaba perdiendo... y él, no podía hacer nada más a él.

—las personas que llegan a hacer el bien, sufren por las personas que no agradecen su deber.

— ¿eh...? —Alzo su vista hasta la luz cegadora, que hizo una forma de una mujer—.

—siendo una persona que a pesar de tener sangre en sus manos, lo hace por las personas que ama... no le teme al sacrificio por el beneficio ajeno.

—eres...?

—me entristece saber que por culpa de no entender el verdadero significado de mi palabra hacen sufrir a mi creación. Mis propios súbditos hacen el mal intencionalmente, igual los que hacen mi palabra... siento lastima por los que hacen el mal creyendo que hacen el bien.

—por favor, ayúdame... prefiero renunciar a mis alas, a todo... pero quiero que viva, que vivamos... juntos... sé que es egoísta, pero, yo amo esta alma desde que tengo recuerdos. —se encontraba desvaneciendo más, casi sin ver su cuerpo y sintiendo cada vez menos lo que tenía en brazos—.

—tienes mucho valor, eso lo agradezco mucho. Tendrás tu recompensa, después de todo, es parte mi culpa.

Se acercó hacia el, tocando su frente. Una ventisca movió su cabello dejándose llevar por este, evaporándose, deshaciéndose como espuma de mar con una total tranquilidad.

...

“día 10000

El día final... si, podría decirse que he tenido una gran aventura como vida, he amado a dos personas, me convertí en un ser divino, y hasta en uno intangible: la verdad he hecho muchas cosas. Para ser sincero... me hubiera gustado solo tener una sola vida; sufrí mucho, ame demasiado, me perdonaron demasiados, mate a otros tantos... pero, al menos conserve la única promesa que perduró hasta morir cada uno de las personas a las que me uní, amarlas a todas”.

...

Unos niños jugueteaban en las flores que caían, era una salida entre familias por lo que parecía. Todos y cada uno de los niños jugaban y reían juntos, pero un niño, rubio, ojos esmeraldas, piel blanca... estaba recargado en el árbol más grande y viejo, viendo como los demás jugaban.

—oye, qué haces aquí? —un chico grande, de ojos rojos, cabellos negros y un tono de piel más moreno se le acercó... destacaba de él que era más alto que el pequeño rubio—. No deberías jugar con los demás? Parece que se están divirtiendo mucho y te noto aburrido.

—no... Puedo.

— ¿y porque no?

—porque me cuesta trabajo hablar con las personas. —hablaba bajito, pero claro—.

— ¡pero si estás hablando conmigo!

—aun así, no sé qué piensen de mí.

—Bueno, te propongo algo... —extendió su manita hacia él y lo miro—. Yo jugaré contigo... no te juzgaré ni nada, y te defenderé de quien te diga mal, ¿está bien?

—... —miro con algo de desconfianza la mano que se ofrecía—.

—vamos, no pasa nada con intentarlo...

De nuevo lo miro, y con un poco de miedo, colocó su mano en la de él, caminando juntos hacia donde se encontraban los demás chicos: sus manos, sostenidas con fuerza, nunca se separaban... estarían así hasta el final de la velada, que con dificultad se separaban mutuamente, pero el destino los uniría, lo haría para siempre porque siempre estaba presente la leyenda:

Juntos para siempre...


Si quieres dejar un comentario al autor debes login (registrase).