POV’S DEIDARA
Tsk, ese niño malcriado burlándose de mí sólo porque supo mi nombre antes de que yo supiera el de él y todavía me llama dobe, maldito.
Como sea, Itachi ni siquiera pudo terminar de hablar con él, ya sabíamos los problemas que vendrían si su padre se enteraba que habíamos hablado con su querido hijo aunque hubiese sido sólo un momento.
La verdad es que tenía bastante rencor hacia Fugaku Uchiha, ese hombre era un maldito. Había matado a mi padre, me había dejado a mi suerte, nos había quitado las empresas Kurama y había obligado a mi madre y a mi hermano a vivir ocultos.
Me había enterado de que Naruto ya había empezado con sus propios planes y yo estaba orgulloso de eso. Pronto íbamos a empezar con el plan y yo moría porque Naruto y mi familia supieran que yo no estaba muerto, seguía aquí, ayudándoles desde lejos.
Desde chico viví en un orfanato y solo un tipo venía a verme, él siempre metió cizaña en mí para que odiase a mi familia. Sin embargo, un día Itachi llegó para sacarme del orfanato y me reveló toda la verdad, era un buen chico, pero era un Uchiha y no sabía si confiar en él o no.
Al paso del tiempo me fui encariñando y es que Itachi soportaba todo lo que yo hacía, eran muchos desastres, siempre fui así, hiperactivo. Explotaba todo y es que me encantaban las explosiones, así que Itachi optó por comprarme un aviario porque yo adoraba las aves. Para mí, ellas eran libertad, con ellas podía imaginar que mi felicidad junto a mi familia era posible y las palabras de Itachi no eran mentiras, quería pensar que él lo lograría.
Poco a poco fui creciendo y madurando, Itachi me dio la oportunidad de salir al mundo, así que estudié la carrera de abogado e hice mi propio despacho. Le compré a una casa a la familia de mi madre, sin embargo Kakashi les dijo que había sido él porque todavía no podían saber que yo estaba vivo.
Habían pasado ya algunos días desde la llamada de Sasuke y al fin íbamos a llevar a cabo el plan. Nos reunimos los cinco y tomamos un avión privado hacia Japón. Yo estaba muy nervioso porque sería el primero en infiltrarme, sin embargo Itachi tomó mi mano apretándola un poco y me sonrió dándome confianza, como siempre lo hacía.
Llegamos a Japón y todos estaban menos Naruto, mi madre no me reconoció y yo me tuve que aguantar las ganas de abrazarla. Nos invitaron a la sala y Kakashi dijo que ya era momento.
- Kushina, ¿recuerdas al hijo que tuviste hace algunos años? –Dijo Kakashi y yo me moría de los nervios-.
- ¿Deidara? –Dijo desviando la mirada- Sí, le recuerdo. Murió poco tiempo después de haber nacido.
- No, Kushina. Me alegra decirte que él no murió, Fugaku lo mandó a un orfanato y hoy, está aquí entre nosotros –Dijo sonriendo e inmediatamente mi madre volteó a verme-. Disculpa que no te hayamos dicho antes, pero no podíamos.
- Hijo –Dijo llorando y corriendo hacia mí para darme un puñetazo en la cabeza y después abrazarme-, ¿cómo pudiste no decirme nada?
- Ma… mamá, me estás asfixiando –Le dije casi desmayándome, Kakashi tenía razón, mi madre tenía una vitalidad increíble-.
- Disculpa, hijo –Dijo separándose y sonriendo-. Pensé que te había perdido y el saber que no pude cuidarte… -Dijo sin continuar porque empezó a llorar y yo sonreí-.
- Madre, tú lo hiciste perfectamente bien, todos estos años. Y ahora, estamos los tres juntos y mi padre… él no está en cuerpo, pero sé que su presencia está con nosotros –Le dije abrazándole y soltando unas cuantas lágrimas-.
- Hijo –Me dijo correspondiendo mi abrazo y así estuvimos por unos segundos hasta que se separó-. Pero ahora también es tiempo de recuperar nuestra vida y demostrar quienes somos –Dijo sonriendo-.
- Entonces permítanme explicar el plan –Dijo Itachi sonriendo-.
- Sí –Dijo mi madre sentándose a mi lado-.
- Bien, empecemos. Deidara entrará primero, él se hará pasar como un abogado que estará del lado de Fugaku, le ayudará con unos trámites que tiene que hacer. Le cambiamos el nombre y todos los datos para que mi padre no se diese cuenta, así, él podría engañarle sin dificultades. Una vez dentro se ayudará de Kakashi. Los dos juntos nos pasarán todos los datos necesarios, Fugaku tendrá una reunión pronto con sus demás socios, por lo que sabemos. De ese modo podremos saber contra quién nos enfrentamos y qué tanto poder tienen.
- En segundo plano entrará Hashirama. Fugaku le admira y apuesto que no rechazará para nada la oferta de hacer negocios con él. Hashirama será una llave importante para entrar a su guarida. Esto es un poco arriesgado pero es algo brillante: Hashirama firmará un contrato en donde él comparte sus empresas con las empresas Kurama y Fugaku comparte sus empresas con las de Hashirama.
- Entonces ahí entra Orochimaru. Ya que las empresas sean de Hashirama y las de él sean de Fugaku, Orochimaru hará un “fraude” en donde les quite las empresas a los dos como venganza a lo que mi padre hizo. Mi padre no se quedará con los brazos cruzados y entonces recurrirá a su abogado Deidara para demandar a Orochimaru. Así que él entrará nuevamente y perderá el caso a propósito, porque según él no habrá evidencia alguna.
- Sin embargo, Fugaku podría comprar al juez y ahí entraré yo, seré el juez del caso y con nuestras fuerzas él no podrá hacerme nada. En ese momento Hashirama traicionará a Fugaku y declarará en contra de él.
- ¿Y cuándo entra Naruto? –Dijo mi madre muy seria-.
- Él ya entró desde hace tiempo. Es asistente de mi hermano ¿no? Le sacará toda la información y junto con mi madre reunirán pruebas, así demostraremos el asesinato de Minato y el fraude cometido por mi padre.
- Itachi… Gracias por ayudarnos, tu padre… -Iba a seguir mi mamá pero Itachi le interrumpió-.
- Mi padre inundó su corazón en la avaricia. Él ya no es el mismo de antes, así que haré esto con todo, porque le quiero y sé que si sigue así acabará solo –Dijo sonriendo, aunque yo conocía muy bien a Itachi y supe lo que sentía en ese momento-.
- Itachi, aquí también tienes una familia, porque ahora eso somos –Dije sonriendo mientras los demás también sonreían, hasta Orochimaru, porque era verdad, ya todos éramos una familia-.
- Yo también los quiero como a una familia, espero y acepten a tres integrantes más, mis hermanos y mi madre.
- Ellos ya son de la familia –Dije sonriendo y él también sonrío, esta vez, lo hizo sinceramente-.
Después de eso me acomodé en la habitación que era para Itachi y yo. Hashirama tenía su propia habitación igual que Orochimaru.
Por lo que me dijeron, Naruto llegaría al día siguiente de una reunión, así que desde mañana iba a empezar nuestro plan, al fin estaríamos en nuestro lugar, el de siempre.
FIN POV’S DEIDARA