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Amor de reyes por Kirauchiha

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Edmund había vagado alrededor de la casa por un tiempo hasta que finalmente había encontrado Eustace y Reepicheep hablando juntos en el comedor. Se sentó junto a ellos, agradecido por la distracción de sus propios pensamientos deprimentes, y cuando Eustace había sonreído a él Edmund había regresado la sonrisa, con gratitud,

No había visto a Caspian de nuevo hasta la hora del almuerzo cuando el Rey había entrado en la habitación con Drinian. Edmund no había sido capaz de mirar a Caspian, todavía se sentía tan mal por todo el incidente horrible de la mañana, pero cuando lo hizo, Caspian parecía el mismo de siempre. No había habido mucha conversación sobre la comiday4; todos habían estado preocupando por el largo tiempo transcurrido desde que Lucy había subido las escaleras.

Edmund estaba empezando a preguntarse qué pasaría si subía las escaleras en busca de su hermana cuando todos escucharon una conmoción afuera y Lucy entró por la puerta. Por un momento, el corazón de Edmund saltó de miedo pero estaba sonriendo y riendo, y cuando ella salió corriendo todos la siguieron hacia el jardín y se enfrentaron a uno de los lugares más extraños que habían visto nunca. Incluso Edmund se rio de los Monopies.

Después de eso, se habían sentado y Lucy les habían dicho acerca de lo que había pasado, cómo había visto Aslan y se reunió con el Mago, que ella creía que era realmente bastante agradable. Eventualmente todos ellos subieron a su encuentro y tuvieron una magnífica comida de todas sus cosas favoritas para comer, pero mientras se sentaba al lado de Caspian en la mesa grande y escuchaba la charla del Mago, Edmund se dio cuenta de que no se estaba divirtiendo.

Su mente sigue preocupado por lo que había sucedido ese día, en la mirada de dolor en los ojos de Caspian y repitiendo las palabras que le había dicho. ¿Acaso Caspian realmente se sentía como el pequeño secreto sucio de Edmund? ¿Era así como Edmund estaba haciendolo sentir? Si lo era entonces Edmund no veía cómo podría enfrentar alguna vez Caspian solo de nuevo.

Y todo era debido a este estúpido miedo que tenía, de que nadie se entere de ellos, que se hizo aún más estúpido por el hecho de que dos personas habían descubierto y nada terrible había sucedido. Pero aun así, sólo parecía estar empeorando. Si su reacción por la mañana le había enseñado algo, era que tenía que encontrar alguna manera de deshacerse de él antes de que lastimara de nuevo a Caspian.

Edmund se quedó mirando la mesa, mirando a Caspian con la mano apoyada sobre el mantel. Sabía lo que tenía que hacer. La única manera de deshacerse del miedo era eliminar la causa, lo sabía, pero no era una cosa fácil de hacer. El corazón le latía en su pecho y él casi se sentía débil. Respiró hondo y miró alrededor de la mesa, todo el mundo estaba viendo al Mago, escuchándolo hablar. Edmund cerró los ojos por un momento y contó hasta diez, obligándose a calmarse. Cuando abrió los ojos de nuevo, lo primero que vio fue que la mano de Caspian siguia descansando sobre la mesa, y sin dejarse ningún pensamiento más allá, Edmund deslizó su mano hacia adelante y se apoyó tentativamente en la parte superior deslizando sus dedos en la palma de Caspian

Por un momento, la mano de Caspian estaba muy quieta bajo la de Edmund y Edmund podía sentir la tensión en el cuerpo sentado a su lado. Luego, lentamente, los dedos de Caspian  pasaron a través de los dedos de Edmund hasta que apretaba la mano de Edmund con firmeza. Edmund dejó escapar el aliento que ni siquiera se había dado cuenta de que había estado conteniendo y giró la cabeza para mirar a Caspian.

Edmund se encontró con los ojos de Caspian y su expresión parecía custodiado y cauteloso pero cuando le dedicó una sonrisa tímida y apretó la mano suavemente, levantó la mirada y Edmund fue recompensado con la sonrisa que nunca dejaba de aumentar su ritmo cardíaco. Lo hizo ahora y Edmund sintió su mano temblar en Caspian. El calor comenzó a subir en el rostro de Edmund y su boca se sentía demasiado seca, y rápidamente desvió la mirada, tratando de alcanzar su vaso de agua con su mano libre.

Edmund tomó un sorbo y luego se arriesgó a mirar alrededor de la mesa. Se encontró primero con los ojos de Eustace, vio la sonrisa de aprobación en su cara y se sintió extrañamente tentado a tirar su vaso de agua en la cara de Eustace. Junto a Eustace estaba Drinian, y Edmund tomó un momento antes de mirar a la cara del capitán pero Drinian observaba a Caspian, y su expresión era la misma mirada en silencio complacido de que él tenía siempre que el tiempo estaba en calma y justa.

Reepicheep estaba enfrascado en una conversación con el Mago, que estaba en el otro lado del anciano. Finalmente encontró Lucy, mirando a sus manos entrelazadas con una mirada de completo asombro. Edmund miró sin aliento y esperó, y finalmente su mirada se levantó y se encontró con la suya y luego para su asombro, ella se rió en voz alta. Edmund sintió que su boca se abrió en shock y Lucy se echó a reír de nuevo.

De repente el Mago interrumpió lo que había estado diciendo a Reepicheep y miró rápidamente alrededor de la mesa, sonriendo a todos ellos.

-Se está haciendo un poco tarde -dijo gratamente -Y joven reina Lucy ha tenido un día ajetreado.

Miró a Lucy en la diversión y ella tuvo la decencia de parecer avergonzada de sí misma.

-Sugiero que todos nos retiramos para la noche. Espero que todos ustedes duerman bien.

Edmund estaba aturdido cuando se levantaron de la mesa y bajaron las escaleras, pero ni por un momento solto la mano de Caspian. En lugar parecía como si agarre firme de Caspian fuera lo único que lo mantenía de pie. Lucy estaba delante de ellos y de vez en cuando volteaba la cabeza y miraba a Edmund

Cuando llegaron al pasillo que conducía a sus habitaciones, Caspian soltó la mano de Edmund y se inclinó para susurrarle al oido.

-Vuelvo en un momento -susurró y desapareció en la dirección opuesta.

Edmund se desvió hacia la puerta de su dormitorio, donde se encontró con Lucy esperándolo, y tomó un profundo y calmante aliento.

-Así que, Edmund- dijo Lucy, mirándolo con los ojos muy abiertos -¿Por qué demonios estabas sosteniendo la mano de Caspian?

En cierto modo, eso era peor de lo que había pensado que sería porque realmente no tenía idea de qué decirle.

-Quiero decir, podrías tener gérmenes- dijo Lucy, y luego frunció el ceño -Por supuesto- continuó como para sí misma - Eres un niño. Pero aun así, debes tener más cuidado, Ed.

Edmund la miró con confusión.

-Edmund, pareces tonto- dijo Lucy, sus ojos ahora miraba por encima del hombro y levanto la voz -Realmente creo que será mejor no dormir solo en tu habitación esta noche. Creo que se necesita un acompañante

-Lucy…- Edmund finalmente encontró su voz en un grito de incredulidad, pero antes de que pudiera decir nada más  sintió el movimiento detrás de él y una mano firme sobre su cintura.

-Reina Lucy- dijo Caspian –Si no dejas de molestar a tu hermano de esta manera indecorosa Te llevaré fuera y dormirá ahí

-Oh, bueno -Lucy se encogió de hombros y Edmund vio que estaba realmente haciendo pucheros. Entonces ella lo miró y sonrió.

-Honestamente, Ed, eres un idiota a veces. Siento haberme reído por lo que paso arriba, pero me mirabas con una mirada de terror en tu cara que no podía evitarlo. ¿De verdad crees que no estaría feliz por ti, mi estúpido hermano querido? -De repente, ella bostezó -Estoy alegre y cansada ya sabes. Buenas noches

Y con un gesto de la mano se despidio. Edmund dio un paso para seguirla, pero en lugar de eso, se encontró siendo arrastrado a través de su puerta de la habitación por Caspian.

-Voy a matarla- le dijo en serio.

-No, no lo harás- respondió Caspian riendo -No creo que sería prudente. No tenía ni idea de que pudiera ser un diablo

-Mmm - Edmund murmuró. No estaba seguro lo que pensaba Lucy, pero Caspian había dejado de reír y miraba a Edmund con la intención que fuera difícil para Edmund pensar.

-Yo sé que fue difícil para ti, Edmund -dijo en voz baja Caspian –No te arrepientes, ¿verdad?

A pesar de que todavía había algunas cosas de las que no estaba seguro, no se arrepentía de lo que había hecho

-No -dijo, casi sin aliento -Sólo lamento que te he hecho daño esta mañana

Entonces Caspian dio un paso adelante y tomando la mano de Edmund la llevó a los labios, sus ojos nunca dejaron de mirar a Edmund. Edmund sintió la presión de los labios de Caspian y le dio un pequeño grito de asombro, sorprendido por la acción extrañamente formal de Caspian. Se movió nerviosamente y Caspian sonrió. Por un momento, pensó que Caspian diría algo, pero entonces el rey dio una pequeña sacudida de cabeza y soltó la mano de Edmund.

-Así que ... eh ... ¿ A dónde desapareciste de todos modos?-Preguntó Edmund, ansioso por poner fin al silencio que parecía demasiado pesado.

Edmund sonrió y respiró rápida de alivio.

-Me fui a la cocina para conseguir esto -dijo Caspian, mostrando una pequeña vasija de aceite.

-Oh - Edmund respiraba, sintiendo el calor inunda inmediatamente sus mejillas. Cerró los ojos por un momento con deseo y no con desesperación, y no por primera vez. Cuando abrió los ojos Caspian le tenido una mano a él.

-Ven aquí, Edmund - dijo Caspian en voz baja, y Edmund deslizo sus brazos alrededor de la cintura de Caspian y levantando su rostro para satisfacer el suave beso

El beso no se fue suave por mucho tiempo. En muy poco tiempo era profundo y desordenado, Edmund se había perdido en el por completo. No fue hasta que sintió la presión en la parte posterior de sus piernas que se dio cuenta de que Caspian lo había estado moviendo lentamente hacia la cama. Edmund se dejó caer sobre ella cuando Caspian tiró de la túnica de Edmund sobre su cabeza y luego rápidamente se quitó su propia. Edmund pasó una mano acariciante sobre el estómago musculoso de Caspian y cuando él lo siguió con sus labios oyó gemir Caspian por encima de él.

El sonido hizo que el deseo quemara en su cuerpo caliente y duro, y él apretó la cadera de Caspian con avidez mientras tiraba de la manguera de Caspian hasta las rodillas. Cuando el montaje de Caspian saltó libre, Edmund tomó profundamente su boca y tarareó con placer.

Caspian volvió a gemir y sus manos estaban en el pelo de Edmund pasando sus dedos por el cuero cabelludo de Edmund mientras empujaba lentamente en la boca de Edmund.

Edmund pasó la lengua a lo largo del eje de Caspian y escuchó gritos de asombro del rey con placer creciente y excitación. Podía sentir su dureza y un peso pesado entre sus piernas,  gemía suavemente contra el estómago de Caspian, llegando hasta tocarse, pero antes de que pudiera hacer algo una mano fuerte agarro su muñeca y fue presionado con firmeza sobre la cama. Caspian lo presionó fuertemente contra el colchón y luego tomó los labios de Edmund en un rápido beso duro.

-No puedo tener suficiente de tu hermosa boca -Caspian le susurró al oído cuando Edmund trató de empujar a sí mismo contra lo que tenia presionando entre sus piernas.

Los ojos de Edmund se abrieron con sorpresa.

-Qué?

Caspian levantó la cabeza y sus ojos se encontraron con los de Edmunds.

-Ya me has oído -dijo. -Ya te he dicho antes que eres atractivo, pero no creo que tengas alguna idea de lo impresionante que realmente eres - Él sonrió cuando Edmund se retorció de vergüenza- Es particularmente encantador cuando estás debajo de mí así, con tus piernas separadas a mi alrededor

Y, por supuesto, el rostro de Edmund, ardió. Miró a Caspian con resentimiento, pero antes de que pudiera decir nada labios de Caspian estaban de vuelta, exigentes y posesivos, y Edmund se derritió, como siempre lo hacía cuando Caspian lo besaba de esa manera. Su cuerpo se relajó y suspiró en la boca de Caspian, sintiendo las olas de calor que comenzaban a subir.

El beso pareció durar mucho tiempo, en constante cambio, a veces lento y pesado, a veces suave y tierno y a veces duro con pasión, hasta Edmund sintió como si toda su atención fue la sensación de la boca de Caspian contra la suya

Finalmente Caspian se alejó, y Edmund cerró los ojos por un momento, cuando sintió que su manguera estaba siendo arrebatada. Sintió como Caspian se sentaba en la cama junto a él y lo alcanzó, pasando la mano lentamente por el pecho de Caspian y viendo los músculos que se movían bajo sus dedos. Caspian se inclinó sobre él, su mano paso suavemente por la nuca de Edmund y rozó sus labios lentamente sobre los suyos, y Edmund jadeó contra ellos. Después de unos pocos besos  Edmund estaba jadeando contra la garganta de Caspian

Las palabras estaban formandose en la mente de Edmund cuando sintió el movimiento de la mano de Caspian, deslizándose sobre su erección y bajar aún más para presionar contra la entrada de su cuerpo.

Edmund extendió sus piernas, al momento en el que el dedo de Caspian empujaba dentro de él.

Edmund arqueó la espalda cuando Caspian pulso rápidamente en un segundo dedo. Caspian le dio más tiempo para adaptarse a esto, pero la mano de Caspian estaba bien aceitada y la ligera quemadura pasó rápidamente, dejando Edmund temblando de deseo y necesidad.

-¿Quieres ir más lejos?

La voz de Caspian estaba cargada de tensión y Edmund lo miró y vio que los ojos que estaban viendo estaban lleno de una emoción que hizo que a Edmund le recorriera escalofrío. Una ola de calor parecía creando tensión en el estómago de Edmund, de repente haciéndole sentir demasiado calor. Se esforzó por tomar una respiración profunda y se preguntó si este intenso sentimiento era lujuria quería sentirlo todo.

-Sí -dijo en voz baja.

Caspian sonrió, sus dedos comenzaron a moverse profundamente dentro de Edmund, empujando lentamente, y  Edmund arqueo la espalda de nuevo como un gemido gutural que escapó de sus labios. Sintió los dientes de Caspian raspar a lo largo de su garganta mordiendo suavemente, oyó susurrar algo, pero no podía distinguir las palabras. Miró hacia arriba, curioso, pero Caspian ya se estaba alejando para arrodillarse entre los muslos de Edmund.

Edmund observó como Caspian vertió más aceite en su mano y lo utilizó para cubrir la erección que parecía mucho más grande que sus dedos. Se mordió el labio pero Edmund no pudo detener el pequeño sonido ansioso de que se escapó de él y Caspian lo miró rápidamente

-Estoy bien -susurró Edmund-Sólo...

Caspian pasó una mano tranquilizadora junto al muslo de Edmund y asintió.

-Lo sé, voy a ir poco a poco -dijo, mientras su mano alcanzó eje de Edmund y comenzó a acariciarlo suavemente. Avanzó y Edmund sintió la presión en su entrada y se quedó sin aliento. Se obligó a relajarse cuando Caspian presiono lentamente de nuevo hacia delante

Caspian sintió dentro de él, la presión de una quemadura severa que hacía difícil no empujar. Al mismo tiempo, algo acerca de tener a Caspian sobre él y dentro de él hizo a Edmund querer tenerlo aún más cerca. Cerró los ojos, tratando de ordenar el revoltijo de pensamientos en su cabeza.

Pero entonces Caspian dio un pequeño empuje de sus caderas, y todos los pensamientos confusos de Edmund se perdieron haciendo que su cuerpo se sienta caliente y pesado.

-Oh - respiró.

-Abre los ojos, Edmund - susurró Caspian -Mírame y dime si es bueno."

Otro empuje más profundo, Edmund tenía la espalda sobre las almohadas y sus manos retorciéndose en las sábanas.

-Edmund, dime que te gusta- susurró de nuevo Caspian, y Edmund sintió los dedos de Caspian presionando en sus caderas, agarrándole con fuerza mientras comenzó a presionar más firmemente.

Edmund abrió los ojos y cuando encontró la mirada de Caspian parecía como si se estuviera conteniendo, se separó, y se acercó y sacó Caspian hacia abajo, serpenteando sus brazos alrededor del cuello del Rey y deleitándose con el peso de su cuerpo

-Sí, oh dios es tan bueno, te sientes muy, muy bueno- Edmund sabía que estaba balbuceando salvajemente-Realmente es... no creo... oh dios

Los labios Caspian inmediatamente lo tomaron su en un profundo beso lento, que parecía coincidir con los golpes en el cuerpo de Edmund. Edmund gimió en ella

Vagamente, se preguntó si no debería estar avergonzado de su reacción completamente abandonada a lo que estaban haciendo, sino una parte más fuerte de él sólo quería...

-... Más - jadeó mientras se separó de los labios de Caspian -Por favor... más

Caspian gimió contra la garganta de Edmund

-Edmund ... estoy tratando de ser amable ...

Edmund negó con la cabeza, sus dedos se clavaban en las caderas de Caspian mientras intentaba acercarlo más.

-No, no me importa…- Edmund meneo la cabeza buscando la manera de decirle a Caspian lo que quería. Su mente voló a la memoria del cuento indecente del Caballero hace mucho tiempoy4; la lengua que había usado había parecido tan chocante, pero ahora...

-Sólo... -respiró hondo –hazme tuyo

Caspian se quedó callado por  unos momentos y Edmund se preguntó, con el corazón encogido, si es que había ido demasiado lejos, pero luego sintió las manos de Caspian deslizarse bajo su espalda para agarrar sus hombros con fuerza y el fuerte roce de los dientes a lo largo de su garganta. Un momento después Caspian empujo en él otra vez, pero esta vez más duro, contundente que le robó el aliento

-Dilo otra vez. -Las palabras fueron un susurro caliente en el oído de Edmund, seguido de una lengua aún más caliente.

-hazme tuyo- dijo Edmund sin aliento y cerró los ojos, esperando.

Caspian empujó hacia él, tan profundo que los dedos del pie de Edmund se rizaron de felicidad que se extendió por todo su cuerpo. Como continuaron los empujes, Edmund aturdido se preguntó cómo podía sentirse tan bien.

-Dilo -La voz de Caspian sonaba áspera y sin aliento. -Dime cómo lo quieres

El estómago de Edmund volcó en el entusiasmo en el deseo y la necesidad de que pudiera escuchar claramente la voz de Caspian.

-Oh dios - gimió cuando una ola de calor inundado a través de él

-Oh, sí - Las palabras fueron seguidas por un beso posesivo. Podía sentir las manos de Caspian agarrando sus hombros, apoyando el cuerpo de Edmund en cada golpe fuerte que Caspian hacía. El calor y el placer eran placenteros pero aún Edmund querían más y gimió en la boca de Caspian, con las manos apretando en la espalda del rey

De repente, la boca de Caspian se separó de Edmund y se levantó a sí mismo sobre sus codos.

-Tocate- dijo Caspian. Edmund abrió los ojos y frunció el ceño en confusión pero la nota de la orden en su voz hizo que el estómago de Edmund tambalearse con el entusiasmo de nuevo. Se agachó y el primer tirón de su mano sobre su erección hacía que sus ojos rodaran de nuevo en la cabeza como una sacudida de puro éxtasis que parecía ir a través de su cuerpo.

-Oh, sí, se siente bien, ¿no es así, el amor?- dijo Caspian, su voz llena de tensión y algo más que Edmund no podía descifrar. - Y va a ser aún mejor

Edmund no podía encontrar la fuerza para hablar, ni siquiera para decir que Caspian que tenía razón, que cada golpe de su mano estaban construyendo el placer como si estuviera fuera de control. Quería que nunca termina, al mismo tiempo que sentía que no podía aguantar mucho más, y lo hizo con una mezcla de felicidad pero extraño de alivio y lamento que fue arrastrado hacia el orgasmo más intenso que jamás había experimentado.

Su cuerpo se sentía pesado con la alegría y él gimió suavemente como últimos, estocadas profundas y lentas de Caspian enviaron réplicas de felicidad en todo su cuerpo.

Oyó la risa ahogada de Caspian y se retorció en vergüenza.

-Lo siento -murmuró él, luchando por mantener los ojos abiertos.

Caspian se rió de nuevo y luego se desplazó suavemente de Edmund, pero aun así el ligero pinchazo a medida que su eje se liberó del cuerpo de Edmund hizo Edmund jadear.

-Voy a dejar que pase esta vez -dijo Caspian, -Después de todo, no conseguiste dormir mucho anoche

El murmullo al oído continuó pero Edmund estaba demasiado cansado para concentrarse en él y un momento después estaba profundamente dormido.

 


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