En el lugar el silencio reino nadie podía creer las palabras mencionadas por ese rubio, pues era tan poco creíble que aquel modelo y famoso empresario con una belleza que nadie podía negar estuviera enamorado de aquel secretario que se veía tan simple, si lo veían juntos eran dos polos opuestos
_y a la que pertenezco cuerpo y alma_ agrego con una sonrisa aprovechando que el tigre estaba en estado de Shock rodeo con sus brazos su cuello, se acercaba lenta y peligrosamente al rostro del tigre, solo faltaban unos centímetros para besarlo_
_KAGAMI_se escucho un rugido por todo el lugar haciendo que el nombrado diera un salto del susto_
_sucede algo Aomine-san_ pregunto sin que Kise se apartara de su lado_
_como que pasa, ese idiota estuvo a punto de besarte y no pasa nada, porque no se aparta de él_ pensaba mientras una venita se veía en su frente_ vine a saber en dónde están los informes que debía de revisar_ dijo lo primero que se le vino a la mente
_están en mi escritorio Aomine-san, enseguida se los entrego, tengo que irme Ryouta_ menciono con una tierna sonrisa provocando que Aomine se molestara aún más de lo que ya estaba_
_lo se Taiga no quiero dejarte ir pero sé que es tu trabajo, nos vemos en nuestro lugar de siempre_ diciendo aquellas palabras intencionadamente pues se había dado cuenta de las expresiones del moreno_ sí que se pone celoso pero no es suficiente, ha hecho sufrir mucho a Taiga no se lo daré tan fácil_ pensaba mientras observaba como su amigo salía del lugar junto a un furioso moreno_
El día pasaba con calma para todos. Kagami mientras revisaba y ordenaba algunos papeles, no dejaba de pensar el por qué su jefe se veía tan molesto, es como si tan solo le dijera una palabra este saltaría a la defensiva
_realmente no lo entiendo_ pensaba mientras soltaba un suspiro guardando unos papeles en un archivador
_Kagami-kun_ provocando que el mencionado casi soltara todos los papeles que tenía en la mano al igual que cierto moreno_
_Kuroko no me des esos sustos
_Kagami-kun, Akashi-kun me mando a buscarte
_no sabes lo que quiere
_no solo me dijo que te dirigieras enseguida a su oficina
_entiendo, con su permiso Aomine-san_ menciono mientras se colocaba de pie_ como supuse a lo mejor prefiere a Kuroko como su secretario, bueno no lo niego él tiene todo lo que Aomine quiere de un secretario, una belleza, por ello no le quita la mirada de encima_ pensaba mientras soltaba un suspiro de resignación, viera por donde viera aquella persona nunca se fijaría en él_
Ambos chicos salieron del lugar pero lo que no sabía el tigre es que el moreno para nada estaba pensando en aquello sino se preguntaba por qué Akashi lo había llamado. Al llegar a la oficina, el pelirrojo toco la puerta escuchando el típico pase
_me mando a llamar Akashi_ dijo mientras se sentaba_
_claro Taiga_ mientras lo observaba fijamente_ bueno ya debes de tener una idea del porque Kise Ryouta se encontraba en este lugar
_seguramente para cerrar un contrato cierto, ya que Ryouta solo se encuentra en otras empresas para cerrar un contrato o por una sesión de fotos
_estas en lo correcto_ menciono con una sonrisa_ ya sabes quien serán los modelos
_no me diga que…. Bueno al final ya me suponía que usted sabia la verdad_ dijo con un suspiro mientras se sacaba los lentes dejando a la vista aquel rostro tan atractivo_
_desde la primera vez que te vi vestido de esa forma lo supe Taiga
_creo que es el único que se daría cuanta de ese modo_ menciono con una sonrisa_ y bien supongo que estaré trabajando para usted como Kai, pero quien será mi compañero
_Momoi Satsuki
_Momoi, hace tiempo que no trabajo con ella más que seguro debe de estar contenta
_Taiga creo que no debo de preguntar pero su relación
_ con Ryouta somos amigos de la infancia y con Momoi y Riko somos amigos desde la preparatoria_ recordando aquellos momentos tan divertidos que habían pasado con ellos_ Akashi no tengo ningún problema sobre el trabajo que me será asignado pero y mi puesto como secretario, usted sabe que esta identidad nadie lo sabe, solo usted y algunos miembros de la corporación de Ryouta
_sobre eso no te preocupes le inventare alguna escusa a Daiki y pondré un sustituto
_supongo que será el_ pregunto viendo la foto de un castaño_ si es él es justo el tipo de doncel que tanto le gusta_ pensó_
_si, no tiene tus mismas capacidades pero podrá hacer su trabajo, tienes alguna objeción_ pregunto al ver el rostro del tigre_
_no ninguna, más que seguro Aomine-san estará bastante feliz el tener por unos días a aquella tierna persona_ dijo con una sonrisa intentando ocultar su tristeza_
_espero que con esto Daiki se dé cuenta de una vez de lo que siente_ pensaba el emperador observando como el pelirrojo se colocaba los lentes al escuchar que alguien golpeaba la puerta
_Aka-chin aquí están los papeles que me pediste traer_ menciono una persona con tono aburrido_ Gami-chin como estas
_buenas tardes Murasakibara-san he estado bien gracias por preguntar_ dijo con una sonrisa_ bueno Akashi no tengo ningún problema en realizar aquel trabajo, vera que obtendrá buenos resultados
_ no creo que me defraudas Taiga_ menciono con una pequeña sonrisa que fue correspondida por una del tigre_
_Gami-chin toma_ entregándole varios caramelos_ Mine-chin debe ser difícil de trabajar así que te doy estos dulces
_gracias Murasakibara-san_ dijo con una sonrisa para luego salir del lugar_
El resto de la tarde para el tigre fue como siempre, contestar las llamadas de las amantes de su jefe, organizar papeles y finalmente cuando terminaba su trabajo una mujer distinta a la anterior entraba a la oficina para llevarse a su jefe entre besos
_Ryouta que haces aquí_ pregunto pues el rubio se encontraba en la entrada del edificio_
_pues como nos dirigimos al mismo logar creí que era mejor venir a buscar a Taiga_ menciono con una sonrisa mientras observaba a un punto fijo_ te are sentir lo mismo que siente Taiga_ murmuro
_Ryouta diji…._ la frase murió en los labios que en ese instante estaban tocando los suyos, pues de un momento a otro, aquel rubio rodeo con sus brazos su cuello haciendo que bajara un poco aprovechando aquello para besarlo sin saber que detrás suyo se encontraba su jefe acompañado de la mujer que minutos atrás había visto, ambos con una expresión de sorpresa pero había algo mezclado en aquellos zafiros que miraban fijamente la escena_