"Pero Necesitamos un cambio cariño Mio puede que tardemos en hacerlo pero se cumplira yo lo se."
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Mis manos comenzaron a temblar no se en que momento comencé a sudar. Mi corazón palpitaba cada vez más rápido con cada segundo que pasaba. Algo presionaba mi pecho y sentía que el oxígeno no llegaba a mis pulmones. Necesitaba salir y gritar. Como un niño que sabe ha perdido algo valioso y no volverá. Que irónico.
Siento un líquido recorrer mis mejillas y paso mi mano quitando ese rastro que decía que débil podía ser con solo mencionar a una persona.
Es estúpido.
Es como sentir que huyo de prisión y el aire de mis pulmones se acaba. Es como si gritaras a todo el mundo que te ayude pero nadie te hace caso y siguen sus caminos.
A veces solo necesito un tiempo para analizar las cosas. Para verlas desde otro punto de vista buscando soluciones. Pero es gracioso cuando te das cuenta que no las hay pero tú sigues buscando y al final te das cuenta de que estás solo. Vaya mierda.
Suspiro.
Necesitaba un trago con urgencia. Hace mucho que no bebía desde antes de tener a los niños. Pero de vez en vez no está mal volver a viejas rutinas.
Rio sin gracia al recordar que esas viejas rutinas eran una en un montón. Unas donde Yuuri no me hacía caso y me encerraba en mi habitación para desquitarme con el centro de noche y las mucamas. Noches donde me las pasaba implorando a una persona y bebía hasta olvidar mi nombre.
Sacudo la cabeza y vuelvo a reír. Aun no bebo y ya estoy comportándome como un idiota mientras que los soldados que pasan a un lado de mi me miran raro. Como si la persona que caminaba a un lado suyo sea un bicho raro que necesitaban analizar al ser la primera que han visto en toda su vida.
Tal vez no era tan malo volver a las viejas rutinas. Pero estas serán diferente a las otras, porque ya no serán por despecho, sino por frustración y odiando a una persona que me ha dejado completamente solo con dos niños que en estos momentos no están conmigo y que tanta falta me hacen.
Llorare y gritare porque no sé qué demonios está sucediendo en mi reino. Porque la persona que debería de darme un montón de explicaciones está a tres metros bajo tierra mientras que su carne ha sido comida por los gusanos y la otra… la otra simplemente esta aun hilo de perder la cordura cada vez que mencionan a su marido.
Definitivamente tal vez… solo tal vez… necesite un trago como los viejos tiempos…
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3 horas antes
Después de eso no recordamos nada, despertamos en la clínica del reino y...
-¿Papi?-Una pequeña vocecilla se escuchó trayendo consigo la atención de los mayores que miraban a un pequeño niñito detrás de las puertas dejando ver ese cabello azabache y esos grandes ojos esmeraldas…
-Hotaru vuelve a tu Habitación aun no eh pedido que vayan por ti
-Él es el príncipe del joven Jaeger-pregunto confundido Armin mientras salía de entre las personas para quedar en frente del más pequeño.
-Tu.. ¿Usted conoció a mi mama?
-Eso no es de su interés. Hotaru vuelve a tu habitación.
-¿Es cierto que mi papa tampoco me quería y por eso mami me dejo con mi tío Wolf?
-Suficiente. Gunter llévatelo y que no salga. Señores se ha terminado esta reunión siéntanse con la libertad de pasar la noche aquí.
-Si soy tu padre y esa no fue la razón por la que te deje aquí. Tu madre nunca me dijo de tu existencia, hasta hace poco me entere y eh venido por ti.
-¿Enserio?
-Suficiente señor Ackerman. ¡Gunter!
-Enseguida Majestad- haciendo una breve inclinación para después correr y tomar al menor mientras salían de la sala.
-¡Tío Wolf! ¡Por favor tío Gunter Soltadme! ¡Por favor!
-No puede hacer esto majestad.
-Claro que puedo señor Ackerman. Si no recuerda soy tutor legal de Hotaru hasta que este cumpla la mayoría de edad el decidirá con quien irse.
-Sabe que está volviendo a violentar la ley. En una de las clausulas del tratado de paz que se ha firmado con Shin Makoku queda establecido que un menor de edad queda en completa tutoría de un mazoku solo con el consentimiento de ambos padres.
-Por supuesto que lo se mi Marido decreto esa ley.
-Por lo tanto usted la esta violentado ya que usted solo tiene el consentimiento de la madre.
-Se equivoca. En el documento que me fue entregado está firmado con el consentimiento de ambas partes.
-¿Levi firmaste ese documento?
-Cállate Hanji. No yo no recuerdo firmar ni un papel.
-Por lo tanto al estar violentando la ley al no cumplir con las clausulas ya establecidas donde el padre no podrá acercarse a más de cinco metros de distancia del susodicho tengo en mí poder a ley para poder exiliarlo o meterlo a prisión con diez años de condena. Dígame señor ackerman ¿Cuál escoge?
-No serias capaz de hacerlo yo no firme ningún documento. Estoy seguro que Jaeger te dio un documento falso y en caso contrario el que está metiéndose en problemas eres tú.
-¿Eso crees? Solo no te acerques a Hotaru si sabes lo que te conviene y no quieres que marque tu sentencia. Estas advertido ackerman. Buenas Noches.
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Mi cabeza duele. Es en esos momentos en que sientes que el cerebro va a estallar dentro de tu cráneo. Rio. Es absurdo. La tercera Botella de licor es dejada en la mesa y siento que apenas eh bebido una copa. No es suficiente necesito algo más. La oficina está demasiado obscura y las ventanas aún se encuentran abiertas. Si los niños me vieran en esta situación estaría obligado a pedir perdón por el resto de mis días. Pero no es así. Lo curioso es que tenía la necesidad de llorar y véanme aquí con un vaso de licor en mano y aun no eh derramado ni una sola lagrima. Al final no me llego el sentimiento. Eso es cruel.
Hay una parte de la oficina que se encuentra más obscuras que las demás. Rio
-Yuuri~ cariño si estás ahí por favor sal yo sé que me estas mirando-vuelvo a reír y me llevo el vaso de licor a mis labios para beberla de un solo tajo. El licor comienza quemarme la garganta por mi anterior acción y no puedo evitar aventar el vaso a aquel rincón. Esta vez el sentimiento me invade y las lágrimas no tardan en aparecer lo odio sin lugar a dudas lo odio.
-Eres un idiota Yuuri~
Recargo mi cabeza al asiento y suspiro. Él no va a regresar tengo que hacerme a la idea que él no va a volver. Es difícil.
-Me has dejado solo. Tú te has largado y me has dejado solo ¡No eres más que un maldito mentiroso y no sabes cuánto te odio!-grito
Comienzo a llorar, no puedo evitarlo, ya no aguanto más. Grito y tiro los papeles al suelo. La pluma y tintero caen al suelo y me les quedo mirando por un instante como la tienta se riega por todo el suelo como si fuera la cosa más interesante.
Suspiro y comienzo a negar lentamente mientras me lleve las manos a mi rostro mientras me recargo de la mesa.
Vuelvo a reír por mis acciones parezco un niño pero enseguida comienzo a llorar. La acción se repite un par de veces más. Afuera puedo escuchar como tratan de entrar a la oficina pero es inútil cuando me encerré le puse seguro a la cerradura.
-¿Hablas enserio Wolf? ¿Realmente me odias?
-Genial me eh vuelto loco-murmuro aun con el rostro en la mesa mientras rio bajito. Al parecer ya no soy tolerante al alcohol.
-No me gusta que bebas-lo vuelvo a escuchar y decido levantar la cabeza mientras que mi brazo la sostiene. No puedo evitar sonreír. Estoy seguro que mis mejillas están sonrojadas por el alcohol
-No es tu problema- reprocho siguiéndole el juego a mi mente al ver a Yuuri con su típico traje negro sentado frente mientras me miraba seriamente.
-Claro que lo es-responde
-Claro que no.-lo molesto y el suspira mientras niega lentamente y sonríe
- ¿Me odias?-dice
-Te odio- respondo al instante
El hace una mueca y se levanta del asiento para quedar a mis espaldas mirando el patio
-Ha pasado mucho tiempo desde la última vez que comí el curry de mama-dice y me dan ganas de golpearlo.
-Eres un idiota ¿lo sabes no?
-Por supuesto-sonríe y me levanto para quedar a un lado de el- sabes Wolf hay algo de lo que me arrepiento profundamente-me mira y yo no puedo despegar los ojos de él.- Me arrepiento de haberte alejado de mis hijos, y por dejarte con un montón de cargas en tu espalda.-El sentimiento me gana y no puedo evitar llevar mis manos al rostro para evitar que las lágrimas caigan. Pero él no hace nada para que evite llorar. Enserio lo odio.
Afuera se escucha que gritan mi nombre mientras golpean la puerta escucho a Gunter decir mi nombre un par de ves y después nada.
-Has cambiado mucho y me alegra que te estés desahogando ahora. No mereces sufrir tanto y yo me odio porque fui la principal causa de ello.
-Si ya lo sabes por qué me lo vuelves a recordar-el niega y yo hipeo una vez más.
-Dentro de poco habrá luz aquí-señala mi vientre y yo lo miro confundido el solo sonríe.- es hora de que me vaya hay alguien afuera que está preocupado por ti
-Porque volviste-pregunto y el niega
-Necesitabas desahogarte por lo menos merezco ayudarte en eso-dice y comienza a alejarse de mi- ¿Podrías perdonarme?- dice y me acerco a él para tomar su mano. Es inútil y el desaparece.
-Si-susurro una vez solo y la puerta es abierta.-Emmet-digo y después todo se vuelve obscuro a mi alrededor.
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"Porque pedir perdon de corazon no es humillarse, es reconocer que fallamos y queremos cambiar... Aveces los cambios son mejores que quedarse estancado."