Login
Amor Yaoi
Fanfics yaoi en español

Me enamoré de ti. por MimiChibiDiethel

[Reviews - 11]   LISTA DE CAPITULOS
- Tamaño del texto +

— ¡Oh, llegaron! —sonrió Thor, con una bolsa de papas en el aire y un vaso de soda en la otra. Loki no lo miró, subió corriendo las escaleras rumbo a su habitación. — ¿Loki?

—Necesita estar solo. —comentó Odín, sentándose a su lado.

— ¿Lo regañaste de nuevo? —reprochó Thor. — ¿De verdad? ¿Ni siquiera pueden tener un día de padre e hijo?

—Thor, no necesito escuchar tus reproches. —cortó el hombre, mirando fijamente el televisor. —Cuando venga Frigga, hablaremos los cuatro de nuevo.

— ¿Hablar?

Los pasos de Loki bajando rápidamente las escaleras se escucharon, atrayendo la mirada de ambos. En cuanto Thor vio que su hermano corría rumbo a la puerta de entrada con una mochila en su espalda no lo dudo ni un segundo, saltó del sillón, derribando en el proceso la soda, y corrió hacía él, antes de que pudiera salir de la puerta, tomándolo bruscamente del brazo para voltearlo.

— ¿Loki? Es muy tarde, ¿A dónde crees que vas?

—Eso a ti ya no te concierne en lo más mínimo. —espetó enojado, sin darle la cara. — ¡Iré a donde me plazca!

— ¡Loki! —la voz de Odín resonó por el pasillo. —Dejen de armar un drama los dos y métanse. Atraerán la atención de todos.

— ¿Qué fue lo que paso? —preguntó Thor, sin soltar a su hermano y cerrando la puerta. —Loki, mírame y dime que fue lo que paso. ¿Le hiciste algo? —preguntó hacía Odín. —Sí, debí imaginarlo, nunca puedes estar tranquilo con él. ¡Cielos! ¿Por qué no puedes llevarte bien con él por una vez en la vida?

—Suéltame Thor, no te pelees con tu padre por esto.

—Loki, escucha. —le tomó del mentón, sonriéndole, al ver las lágrimas fluyendo en el rostro de su hermano pasó saliva. De verdad, a veces su padre no tenía remedio. —No sé lo que te haya dicho padre, pero sabes que a veces puede ser…—Thor miró a su padre, él alzó una ceja provocando que su hijo tragara saliva. —complicado.

—Esto no te incumbe. —jadeó Loki, buscando que el mayor aire entrara a sus pulmones.

Odín tomó la mano de Thor, separándola del moreno. Thor miró a su padre, confundido, soltándose de un manotazo intentó tomar de nuevo el brazo de su hermano pero este se separó, girándose de nuevo a la puerta.

— ¿Dejarás que se marche? ¿De verdad? —preguntó Thor, enojado a Odín. — ¡Incluso tú sabes lo peligroso que es que salga tan tarde!

—Hay alguien esperándolo. —contestó su padre, abriendo la puerta y mirando el auto color vino que esperaba a fuera de su casa.

— ¿Quién es él?

—Puedes venir por todo lo demás cuando lo creas conveniente. —comentó Odín. —Por ahora no lo hagas esperar más, anda.

—Vete  la mierda. —dijo Loki, dándose media vuelta.

— ¿Laufey? —comentó Thor sin llegar a comprender. — ¿Por qué está yendo con él, padre?

—Ah, no te lo ha dicho.

—Loki. —Odín hizo su voz más grave, intentando marcar una autoridad que ya no tenía. El nombrado ahogó una risa entre los sollozos acumulados en su garganta.

—Resulta, Thor, que no soy el hijo de Odín, tampoco el de Frigga.

— ¿Qué?

—No somos hermanos. —comentó Loki, seco. —Y Laufey es mi padre, así que si me disculpas, iré a reponer el tiempo perdido con el hombre de negocios. —se dio meda vuelta, aguantando las lágrimas. Pese a que esperó a que Thor lo detuviera en algún momento del portón al auto, nada paso, simplemente escuchó la puerta cerrarse antes de que subiera al auto.

—Andando, niño. Tengo trabajo mañana. —ordenó Laufey, abriendo la puerta del auto. —No necesitas volver aquí, compraré todo lo que necesites o tenías aquí.

—Sí. —antes de subir Loki miró atrás, mirando por última vez la puerta de su casa. Cuando Laufey tronó sus dedos, comprendió que no había marcha atrás, jamás podría volver ahí.

Al llegar a su nuevo hogar notó que era una casa enorme, demasiado para que un solo hombre viviera ahí, según lo dicho por Odín. Bajaron en completo silencio, Laufey básicamente fingía ignorarlo, como si nunca le hubiese revelado que era su padre y que lo dio a Odín porque “tenía problemas económicos en ese tiempo”. Claro, porque nadie sabía que la compañía de Laufey era millonaria.

—Los sirvientes se encargaran de ti. —comentó Laufey, yendo hacía su estudio. —Si necesitas dinero o algo, he abierto una cuenta a tu nombre por lo que pasa al banco para recibir la tarjeta mañana. Sobre juntas y cosas de la escuela, te otorgaré un tutor legal para que puedas revisarlo con él.

— ¿Un tutor?

—Sí. Me parece que se llama Quill o algo así, mañana se presentará ante ti. —dicho esto, se metió al estudio.

 Loki subió las escaleras, siguiendo al mayordomo. Una vez que ingresó a su habitación, prendió las luces, no había nada más que la cama, un closet con ropa nueva y libros nuevos, que no remplazarían sus notas que ya había tomado y dejado en su antiguo hogar. Se tiró sobre la cama, hundiéndose en ella, poniendo una almohada encima de su rostro ahogando un grito en ella; se sentía tan impotente, quería gritar, maldecir, llorar hasta quedar satisfecho, poder decir que odiaba con todas sus fuerzas a Odín por haberle mentido, por alejarlo de Thor y Frigga.

Ahora no tenía a nadie a su lado.

“ ¡Loki! ¿Se puede saber qué haces aquí? ¡Casi anochece! ¡Vamos, no llores! ¡Loki, madre pensará que yo te he hecho llorar!”

El recuerdo inundó su mente, llenándole los ojos en lágrimas. Thor siempre había estado ahí para él, cuidándolo, queriéndolo y protegiéndolo. También Frigga de la cual no tuvo ni tiempo de despedirse, quería sus abrazos, que estuviera ahí para él.

Quería estar con su familia.

Laufey no lo necesitaba, ¿por qué lo retenía ahí? ¿por qué no lo mandaba lejos para alejarse de todos aquellos que le traían malos recuerdos? Ni siquiera pensó en cambiarlo de escuela, a su mala suerte tendría que verle la cara a Thor todos los días de aquí hasta que este se graduara.

¿De verdad era una carga para ellos? ¿De verdad no podían estar a su lado?

Todo este tiempo, ¿Odín no llegó a quererlo ni un poco?

¡…KI!

Un alboroto comenzó a hacerse alrededor de la casa, escuchó los gritos de unas mucamas incluidos con las advertencias del personal de seguridad y otros empleados. Loki dejó de llorar, limpiándose las mejillas, alzando la mirada sin dejar de abrazar la almohada.

¡LOKI! —El grito de su hermano tronó por todo el pasillo, sorprendiéndolo. — ¡LOKI, HE VENIDO POR TI!

¿Cómo demonios le había encontrado? Dudaba mucho que Odín le hubiera dado la dirección. Loki se levantó de la cama, escuchando los demás gritos de Thor a los empleados, diciéndole que sabía que estaba ahí. En ningún momento, el moreno escuchó que Laufey saliera a hablar con él.

¡LOKI!

—Thor. —llamó él, saliendo de su habitación. Mirando que su hermano amenazaba con su zapato a los empleados. — ¿Qué estás haciendo aquí?

— ¿No es obvio? ¡Vine por ti! —aclaró de inmediato, sonriéndole. —Y no me iré sin ti.

—Parece que no me escuchaste, Laufey es mi padre y viviré con él desde ahora.

—Él no es tu padre. —reprochó Thor, poniéndose de nuevo el zapato. —Vámonos a casa, Loki. —le extendió la mano, esperando con una gran sonrisa. —No perteneces aquí.

— ¿Cómo me encontraste?

—Le pregunte a Stark, él sabe muchas cosas.

—Vete. —ordenó Loki, poniéndose firme. —Odín no debe de tardar en llegar, vete. Yo… ya no pertenezco más a tu familia.

—Escucha, Loki, no sé lo que padre te haya dicho, pero…

—Siempre estuve celoso de ti. —comentó Loki, serio. Thor avanzó un paso a él, mismo que Loki retrocedió. —Tu siempre fuiste el favorito de Odín, y ahora entiendo porque. Dices que vaya a casa, pero ese sitió nunca ha sido mi hogar. Yo, estoy feliz de no ser más tu hermano.

—Loki…

—Ahora puedo brillar por mí mismo.

—Sé que lo que estás diciendo no es verdad, Loki. —Thor dio zancadas a él, tomándole las manos. —Tú eres mi hermano pese a que no llevamos la misma sangre.  

—Tú qué sabes sobre mí. —espetó molesto. Miró detrás del hombro de Thor, los guardias de seguridad ya venían, acompañados por Laufey que miraba a Loki molesto, como si el tuviera la culpa de ello. —Jamás me había sentido tan feliz en toda mi vida.

—Tus ojos dicen todo lo contrario.

—Llevnselo. —ordenó Loki, dando media vuelta y metiéndose de nuevo a la habitación.

¡LOKI!

Escuchó los gritos de su hermano unas cuantas veces más, hasta que se fueron difuminando por el grosor de las paredes y los pisos. Loki se asomó por la ventana, mirando el auto de Odín que acababa de llegar, llevándose a Thor consigo y pidiéndole disculpas a Laufey.

Una vez que se marcharon, Loki cerró de golpe su cortina, caminando lentamente hasta la mochila que había llevado consigo. Abrió el cierre despacio, metiendo la mano y sacando uno de los artefactos que llevó, era una de las cosas más valiosas que tenía, junto a aquel amuleto que Frigga le dio y ahora estaba sobre su escritorio, dándole fuerzas para afrontar todo lo que vendría.

Miró el objeto en su mano, era una pequeña piedra azul, envuelta en una cadena para formar un collar. Thor se lo había regalado en su décimo cumpleaños, y desde entonces siempre lo llevaba con él. Loki suspiró, agarrando la cadena, la puso delante de él y la soltó, haciéndola estrellarse contra el suelo.

¡Hermano!

Los recuerdos de su niñez con Thor lo embriagaron, haciéndolo sentir miserable, pensando en que todo aquello había sido una farsa.

¡No temas, Loki, yo te protegeré!

Loki abrió los ojos, al momento en que su pie aplastó la pequeña piedra, partiéndola en mil pedazos. Quitó su pie, observándola con indiferencia.

Era hora de crecer. 


Si quieres dejar un comentario al autor debes login (registrase).