CAPITULO 20
Draco se dirigió a toda velocidad al lado contrario al que se dirigía Harry, mil cosas pasaban por su mente, ¿cómo irían los marcadores?... ¿cómo justificar su ausencia?... cierto que le importaba un comino la opinión de los demás, pero si algún rumor relacionado con Potter llegaba a los oídos de su padre, podría darse por muerto; así que en realidad estaba preocupado por lo que pudiese pasar, ni siquiera sabía cuantas horas habían transcurrido, lo que si sabía era que tomando en cuenta que la altura que pueden alcanzar los jugadores no está sujeta a restricciones, podían alegar que se la pasaron persiguiendo a la snitch a una altura cada vez mas elevada, cierto que esa versión era totalmente inverosímil a menos que la snitch hubiese volado hasta la estratósfera, pero cualquier cosa era mejor a decir la verdad; así que volando hacia el otro extremo, tambien subía cada vez más.
En cuestión de minutos, el aire se sintió mas helado y el viento soplaba con mas fuerza; Harry pensaba muy similar respecto a subir los mas alto posible para sostener la versión de que se pasaron las horas peleando por la snitch, así que tambien enfiló hacia arriba; pronto los dos contendientes se encontraron ha gran distancia, donde apenas se veían debido a la gran nubosidad, se acercaron hasta quedar a unos veinte metros; Draco vio a Harry como nunca lo había visto en el campo de juego, se preguntó como es que nunca había notado que bien se veía con la túnica escarlata y equipo de Quidditch puesto, esos pantalones blancos ahora manchados de barro, hacían lucir sus piernas y su trasero de una manera que le quitaba el aliento, y su forma de jugar confirmaban la famosa teoría acerca de que si quieres saber que tan bueno es alguien en la cama, observa que tan bueno es en el Quidditch, y definitivamente Harry era muy bueno en el Quidditch.
Se quedaron quietos un momento, mirándose a lo lejos fijamente, la piel blanca de Draco relucía como perla a la poca luz de luna, mientras el viento jugaba salvaje con su cabello provocando que Harry sintiera nuevamente deseos de enredar sus manos en ella; se fueron acercando hasta quedar con sus escobas lado a lado; con los dedos descubiertos de su mano enguantada, Draco le toco el rostro suavemente, luego acercó su rostro y pasó su lengua por los labios de Harry delineándolos suavemente para después meterla en su boca; Harry correspondió el beso al tiempo que deslizaba una mano debajo de la túnica verde, pero Draco la apartó diciendo:
-Calma Potter... aun tenemos un partido que jugar.
-No calientes el agua sino te vas a meter a bañar.
-¿Me lo harías aquí mismo? -preguntó Draco riendo.
-Soy muy hábil en la escoba. -respondió Harry con petulancia.
-Estas loco.
-¿Quieres ver cuanto? -preguntó Harry chupándole el lóbulo de una oreja.
-No, gracias... -dijo Draco cerrando los ojos al tiempo que un cosquilleo le recorría la espalda- una snitch me espera.
-Eres un aguafiestas. -dijo Harry recargando su frente con la de Draco- pero desde ahora te digo que no esperes misericordia de mi parte, en cuestiones de Quidditch soy implacable, no por el hecho de que hacer el amor contigo sea delicioso, creas que te dejare ganar.
-¿Y quien necesita que lo dejes ganar, San Potter? -replicó Draco sonriendo- ya antes te he ganado... lo volveré a hacer.
-¿Cuantas?... ¿una de mil?
-Solo has tenido suerte, eso es todo. -respondió Draco de forma petulante.
-¿Eso crees? -dijo Harry alzando una ceja y separándose unos centímetros de Draco.
-Ajá... yo creo que... -pero Draco ya no alcanzo a terminar la frase, porque justo en ese momento, algo pasó entre sus rostros a gran velocidad.
-¡Demonios!... -exclamó Harry tocándose la nariz- ¿acaso eso fue...?
-¡La snitch! -dijo Draco sorprendido- ¡ahí esta!
Harry miró hacia donde señalaba Draco y vio que efectivamente la snitch estaba ahí, suspendida en el aire por un par de segundos antes de desaparecer nuevamente volando hacia abajo.
Los dos magos la miraron estupefactos, luego voltearon a verse, se sonrieron mutuamente y acto seguido se dejaron caer en picada al mismo tiempo en pos de la pequeña pelota dorada.
El viento parecía cortar la piel de la cara, o al menos eso sentían de lo helado que estaba, sin embargo, eso no era impedimento para que los dos buscadores se lanzaran en busca de la victoria, y aunque su atención estaba en la snitch, no pudieron hacer caso omiso a la oleada de gritos que se dejaron escuchar de repente.
Todo el colegio los vio bajar de entre las nubes a una gran velocidad, ya todos los estudiantes estaban abrigados a causa del frío y el campo estaba iluminado por grandes bolas de fuego que se sostenían en el aire, ambos equipos se quedaron quietos por unos momentos al ver a sus buscadores y capitanes aparecer de repente; pero Draco y Harry solo tenían ojos para la snitch dorada que continuaba su camino hacia abajo.
Los dos buscadores iban a la par en su vertiginosa caída, tal parecía que la snitch no se detendría hasta tocar el suelo, y a pesar de la sorpresa que ambos chicos ocasionaron con tan repentina desaparición y aparición, todos contuvieron la respiración al verlos acercarse al suelo cada vez más; ambos estaban realizando un aparente "Amago de Wronski", pero no para engañar al otro jugador y hacerlo estrellarse, ya que los dos iban tras un objetivo perfectamente localizado; solo que a pocos metros de llegar al suelo, Malfoy tiró de su escoba y levantó el vuelo para evitar estrellarse; Harry ya se imaginaba con la snitch en la mano cuando de pronto esta hizo un giro repentino y salió disparada hacia un lado.
Llenos de contrariedad por sus respectivas jugadas frustradas, los dos levantaron el vuelo en busca de la snitch, solo entonces repararon en lo que les rodeaba; lo que les rodeaba era un grupo de ceñudos y malencarados jugadores que los miraban con cara de pocos amigos; torciendo la boca, Draco se elevó mas sin prestar mas atención al mal humor de sus compañeros; Harry en cambio se sintió un tanto avergonzado al verlos a todos con rostros agotados y amoratados por la larga jornada de juego.
-No creo que mueran por unos cuantos golpes. -pensó Draco alzando los hombros y no dándole mas importancia al asunto- Lo que si me gustaría saber... es el marcador.
Harry entre tanto, decidió centrar toda su atención en localizar a la snitch, atraparla lo más pronto posible y así terminar el juego para que todos pudiesen irse a descansar incluyéndolo a él.
Pasó una hora más en la que los menguados ánimos del público se habían encendido de nuevo y no dejaban de vitorear a su equipo favorito.
Draco estaba agotado y lo único que quería era irse a dormir, así que tambien se afanaba en encontrar la pelota dorada, no porque en otras ocasiones le pusiera menos entusiasmo, era solo que ya no aguantaba estar montado en la escoba un momento más.
-Maldita pelota desgraciada... -pensó molesto buscándola con la vista por todas partes- Cuando te atrape te voy a desaparecer. -Entonces vio a Harry enfilar rápidamente hacia un extremo del campo y supo que se debía a que había localizado la snitch, así que fue tras él, sin embargo Harry tenía esa habilidad tan detestada por Draco de ser un cazador mas hábil, así que a pesar de que la snitch había vuelto a escapar, Harry la localizaba de inmediato. -¡Maldición! -exclamó Draco contrariado- ¿acaso tiene un maldito localizador? -En eso, el marcador en voz de un narrador, estudiante de Ravenclaw se dejó escuchar- ¡Eso es!... -pensó de repente; así que dejando por unos instantes su búsqueda de la snitch, se dirigió lo mas rápido que pudo a su equipo gritándoles: ¡rápido!... ¡"Cabeza de Halcón"!...
Tanto los cazadores como los golpeadores lo miraron como si hubiese perdido un tornillo, sin embargo, al ser él el capitán, lo obedecieron rápidamente para tomar la posición "Cabeza de Halcón", que es una formación de ataque en la que los cazadores se colocan imitando una punta de flecha y vuelan juntos en dirección a los postes y sirve para intimidar al equipo adversario y apartar a los otros jugadores; cuando hicieron eso, Draco reinició su búsqueda de la snitch, pero al comprender la intención de aquella jugada, el equipo de Slytherin, con renovados bríos, se lanzó a marcar el tanto que necesitaban.
Harry no ponía atención a nada que no fuera la snitch, hasta que por fin la encontró en el centro del campo, muy por encima de todos, así que rápidamente se dirigió hacia ella; pero Draco tambien la había visto, así que enfiló su escoba hacia allá, todos miraban expectantes, aunque ya no sabían hacia donde voltear; a los buscadores o a los cazadores de Slytherin; lo que si era un hecho, era que todos los jugadores estaban dando su máximo esfuerzo.
La snitch zigzagueó perseguida por los buscadores, hasta que la innata habilidad de Harry se sobrepuso al buscador de Slytherin y finalmente cerró sus dedos sobre la pequeña pelota alada.
Un rugido ensordecedor se dejo escuchar en el campo; el juego finalmente había terminado; sintiéndose feliz por su triunfo, volteó a ver a Malfoy quien lo miraba... ¿sonriendo?... y como no queriendo la cosa, voló cerca de él y le preguntó en voz baja:
-¿Sonríes por que yo gane?... ¿acaso estoy descubriendo una nueva faceta tuya?
-No tarado... -respondió Draco descendiendo lentamente- me río de ti, porque aunque tú atrapaste la snitch, Slytherin ganó el partido.
-¿Cómo?... -exclamó Harry sorprendido- ¿cómo que Slytherin ganó?
-Ajá... -respondió Draco sin dejar de sonreír- el marcador estaba con quinientos cuarenta puntos a nuestro favor mientras ustedes contaban con tan solo trescientos noventa...
-Trescientos noventa mas ciento cincuenta... -dijo Harry haciendo cuentas- Dan quinientos cuarenta puntos...
-Así es... y con la última jugada, Slytherin encesto dos veces dándonos veinte puntos más.
-Acumulando quinientas sesenta puntos.
-Si, -dijo Draco sonriendo de manera petulante- Y ahora, Harry Potter, el niño- que- vivió- para ser- un perdedor... debo irme, mi cansado y dolorido culo, merece un buen descanso.
A pesar de haber perdido, Harry sonrió, se sentía bien a pesar de lo que sabía le esperaba en la sala común de Griffindor, así que dijo:
-Adelante, ve a celebrar con tu equipo, que estas victorias contra nosotros son escasas.
-¿Celebrar con mi equipo?... ¿acaso no recuerdas lo que te dije?... me detestan, pero no importa, eso viene valiéndome un soberano cacahuate, y ahora separémonos, empiezan a fijarse en nosotros.
Los dos buscadores descendieron al pasto para finalmente dirigirse a los vestidores; los estudiantes de Slytherin armaban revuelo mientras que los jugadores sonreían satisfechos a pesar de sentirse agotados. Draco pasó entre ellos sin siquiera mirarlos, y en vez de dirigirse a los vestidores, se fue directamente al castillo al baño de los prefectos; necesitaba tranquilidad para relajarse, y en las duchas y en su sala común no lo lograría, así que fue a encerrarse a esos baños aunque ya no fuera prefecto para tomar un merecido baño de burbujas.
Mientras tanto, Harry se dirigió a las duchas siendo muy consciente de que era observado con mala cara por muchos de sus compañeros; pero se sentía muy cansado como para preocuparse por eso en esos momentos, así que sin decir nada a nadie, se despojo de su equipo de Quidditch y se baño rápidamente para irse a refugiar a su habitación.
Mientras tanto, en el baño de prefectos, sumergido en caliente y espumosa agua, Draco descansaba recostado en la gran tina con los ojos cerrados; a pesar de haber ganado el partido, no se sentía satisfecho por no haber sido él el que atrapara la snitch, sin embargo, otros recuerdos invadieron su mente haciendo que una sonrisa se dibujara en sus labios; después de un buen rato, decidió salir del agua para finalmente poder irse a dormir; cuando entro a la sala común, toda la algarabía que había, ceso de repente ante su llegada, pero como si nada pasara, se fue directamente a su habitación para encontrarse con alguien recostado en su cama.
-Blaise, quítate de mi cama, quiero dormir.
-Ya Draco... -exclamó sonriente el chico de color mientras continuaba recostado en la cama recargado en un codo- ¿Qué pasó haya arriba?
-¿Qué pasó de que? -respondió Draco sacando un pijama de su baúl.
-Allá arriba... ¿Por qué tardaron tanto?
-El estúpido de Potter me lanzó un hechizo... todo se detuvo, fue muy extraño en realidad.
-¿Un hechizo?... ¿el "salvador del mundo" te hizo eso? -exclamó Blaise alzando una ceja.
-Si... bueno, -añadió Draco sonriendo- después de que recibió un muy merecido hechizo mío.
-¡Ah bueno! -exclamó riendo Blaise- ya lo decía yo... ¿y que hechizo usó? O más bien ¿Cómo fue que no cayeron?
-¡Yo que sé, Blaise!... -exclamó Draco exasperado- No me detuve a preguntarle, lo que si sé con seguridad es que lo detesto mas que nunca y no volverá a tomarme desprevenido, ahora si me disculpas, estoy muy, pero muy cansado.
-Que genio. -Respondió Blaise levantándose de la cama- Pero te mereces ese descanso si hiciste que Potter la pasara mal allá arriba.
-¿Mal? -pensó Draco reprimiendo una sonrisa- Para nada...
Mientras tanto, Harry llegaba a la sala común de Griffindor, en donde había una gran concurrencia a pesar de haber perdido el partido; al verlo entrar, muchos guardaron silencio, pero Harry, muerto de cansancio como estaba, poco le importó, lo que hizo fue dirigirse directamente a su habitación, en donde al entrar, se dio cuenta de que descansar sería lo último que haría esa noche.
-Harry... -exclamó Hermione sentada en la cama de Ron junto a éste- ¿Qué rayos pasó allá arriba?
-Si, ¿Qué pasó? -intervino Ron- sino fuera porque "aquel" ya esta muerto, Dumbledore hubiese desplegado todo un batallón de búsqueda.
-¿Tuviste problemas con Malfoy, Harry?
Harry suspiró con desaliento, ya sabía que no todo iba a ser tan fácil.