D: por cierto, ¿dónde estuviste?
B: con ustedes jajaja, son Ilan Bennett o al menos lo fui, recuerdas que dijiste que debía tomar esto (señalando la botella que Dylan le había dado), pues no la tome así que mi cuerpo empezó a envejecer, mi voz cambio, mis ojos se oscurecieron y mi cabello se aclaró.
K: pero por que no nos dijiste nada… ¿recuerdas todo eso?…
B: descuida Kevin, sé que no fue culpa tuya. Pues en esos momentos no lo recordé, cuando desperté después que Dylan borrara mis recuerdos por segunda vez sentí un intenso deseo de ir a Nueva York, hasta el lugar donde nos conocimos, de allí mi cuerpo cambio y empecé a vivir en tu antigua casa, sin saberlo, fue como si mi mente creara una nueva identidad.
D: supongo que al suprimir tus recuerdos te cree un trastorno de fuga disociativa… disculpa.
B: descuida, lo que me lleva a la siguiente duda, ¿qué fue esa conversación que escuche entre tú y Gwen después que desapareció?
G: ¿a qué conversación te refieres? Desde que quede atrapada en la nada no me he podido comunicar con nadie, salvo una vez que abrí un pequeño portal inestable.
D: si, trate de sacarte pero el portal se desvaneció, y esa conversación fue con tu yo del futuro.
B: no digas más, puede ser peligroso, Paradox me advirtió que no dijera nada sobre eso.
G: pues Paradox y yo estuvimos atrapados juntos, solo que él no logro salir cuando yo salí, me dijo que Dylan lo amenazo para que mintiera o lo eliminaría.
D: yo en ningún momento hice contacto con Paradox, de hecho se me hace extraño que no me reprendiera…
G: estaba atrapado junto conmigo, fuera de tiempo y espacio así que sus poderes quedaron neutralizados, y siendo honesta nunca dijo Dylan… dijo el príncipe del caos.
B: en ese caso explícate.
D:… bueno, si no hay de otra, mi verdadero nombre no es Dylan Relevart Emit, príncipe de Selene, soy Dylan Kelvin Levin Tennyson, príncipe de Osmos V.
K: que quieres decir, con eso…
B: es nuestro hijo Kevin, en serio no lo notaste… conocías ese apellido Kevin.
K: pues sí, ¿por qué?
B: Relevart Emit… es traveler time… time traveler… viajero del tiempo
K: O.o pues no lo había notado…
D: pues así es, vengo de un futuro alterno, donde el caos logra matar Kevin, así que nunca te conocí, quise cambiar la historia, Gwen siempre estuvo en desacuerdo con ello, me decía que podía empeorar las cosas pero quería tener a mi papá junto a mí…
K: (abrazando a Dylan) se lo que es vivir sin un padre, si hubiera podido habría hecho lo mismo que tú por mi padre.
G: entonces quien es nuestro enemigo.
Mientras Kevin y Dylan se abrazaban una extraña figura encapuchada apareció, antes de salvar a Dylan había logrado que Azmuth me regresara el omnitrix, ambos estábamos espiando la lucha, cuando vi a Gwen a punto de atacar a Dylan mi instinto logro desbloquear mis recuerdos, aún conservaba el antídoto, al beberlo mi cuerpo recupero su antigua apariencia así que rogué a Azmuth que me permitiera usar el omnitrix, al dármelo me transforme en Tortutornado para bloquear el ataque de Gwen. Ante esta aparición me convertí en Frio y logre quitarle la capucha, un pequeño ser humanoide estaba allí, de piel blanca y ojos amarillos, con pequeñas marcas en su piel, de color rojas, que no eran moretones sino parte de su piel, estas marcas hacían en su cabeza redonda y grande una especie de corona. Aquel era el verdadero enemigo, el pequeño hombrecito enfureció y ataco a Kevin, pero Gwen logro atraparlo, incapaz de moverse Kevin se acercó a él, estaba dispuesto a matarlo cuando logre contenerlo, le pedí a Dylan que usara su poder y calmara al hombrecito, Dylan se quitó el collar, al tiempo que yo sujetaba a Kevin, cuando se quitó el collar la furia de Kevin aumento, Dylan coloco su mano en la frente del hombrecito y yo coloque mis labios en los de Kevin, lentamente se fue calmando, hasta que sus manos se aflojaron y se apoderaron de mi cadera, su lengua juguetona empezó a bajar por mi mentón, mi cuello y encontró mi oreja, me encantaba cuando hacia eso, estábamos tan cegados por la pasión que no nos dimos cuenta que el hombrecito se había calmado, hasta que Gwen nos dijo que buscáramos un hotel si queríamos seguir con eso. Al calmar nuestros ímpetus vimos al hombrecito llorando, estaba arrepentido de lo que había hecho, dijo que nunca más volvería a pasar y libero a Paradox, acto seguido Gwen lo libera y el hombrecito corre hasta Kevin y lo toma de la mano, la agitaba con tal animo que me resulto gracioso, estaba agradecido con Kevin que aunque el reino del caos estaba aliado del universo estando allí vivían tranquilos y sin preocupaciones, de hecho todo había cambiado para mejor desde que fueron encerrados.