Login
Amor Yaoi
Fanfics yaoi en español

Malas Decisiones por Angelfiregot

[Reviews - 41]   LISTA DE CAPITULOS
- Tamaño del texto +

Capítulo 5

Retorno

 

Había acabado el tiempo y era momento de regresar. Harry después de más de un año de constante sufrimiento y dolor volvía a sonreír de manera genuina frente a su novio, quien lo llevaba de la mano mientras caminaban hacia el taxi que los llevaría hasta el aeropuerto. Había tomado la decisión de intentarlo de nuevo y no se retractaría ahora que parecía que por fin a su vida llegaba una nueva ilusión y oportunidad de reconstruir lo que quedaba de su existencia estancada aquél día.

Con una sonrisa se bajó y siguió al mayor hacía el interior del aeropuerto, pensando que su vida ahora volvía a comenzar otra etapa más y de la cual esperaba que todo saliera bien “al menos por una vez en mi vida” pensaba con ilusión.

-          Vamos a registrarnos – dice Bryan al notar que Harry se encontraba caminando completamente distraído sin rumbo fijo, logrando que el ojiverde se sonrojara y se devolviera para caminar hacia la extensa fila que los esperaba.

Durante sus divagaciones, no pudo evitar rememorar aquél día después de su entrega.

 

*-*-*-*-*-*-*-*-* Flash Back *-*-*-*-*-*-*-*-*-*

 

Podía sentir como la cama se mecía suavemente, como si quisiera arrullarlo y evitar su despertar. Cuando estiró su brazo, notó que a su lado no había nadie y no le dio importancia, hasta que recordó la tarde anterior, cuando se entregó en la sala del yate a Bryan. Inmediatamente abrió los ojos y se sorprendió al encontrarse entre las sábanas de la cama, cuando según lo que se acordaba, se habían quedado en la sala durmiendo entre los almohadones completamente desnudos y ahora llevaba un pantalón de pijama holgado, aunque no tenía nada debajo.

Lentamente se incorporó para observar el lugar y se dirigió al baño para lavarse la cara, encontrando por fortuna un cepillo de dientes en empaque, por lo que sin remordimiento lo tomó y se los lavó. Cuando salió del baño pensó en salir del cuarto cuando la puerta se abrió.

-          Buenos días – saluda el rubio con una sonrisa marcada en los labios y con una bandeja entre sus manos.

-          Buenos días – responde Harry un poco cohibido, pero sin perder la sonrisa que tenía desde el momento en que lo vio.

-          Pensaba despertarte con el desayuno en la cama, pero creo que te me adelantaste – dice el rubio con la intención de regresar para desayunar en la barra de la cocina, pero es detenido por el pelinegro.

-          No es necesario regresarlo, aun podemos desayunar en la cama – dice Harry suavemente para después comenzar a halarlo al lecho hasta toparse con las cobijas, por lo que las retiró y se metió nuevamente, para recibir la bandeja y darle el espacio al rubio, quien sin darse a esperar se metió a su lado. Sin que Harry lo sintiera, Bryan se acomodó junto a él y le tomó el rostro para darle un beso bastante candente para ser el primero del día – uhmmm es…pera… el desayuno… - dice Harry entre jadeos, sintiendo la clara necesidad de su pareja por entregarse nuevamente, pero la bandeja sobre sus piernas no le permitía moverse, además de que tenía hambre, sin embargo, los besos y caricias del rubio estaban logrando el efecto deseado, consiguiendo quitárselo un momento de encima – espera – es lo único que dice antes de dejar la bandeja en la mesa que se encontraba a su lado y regresar, cruzando sus brazos sobre los hombros del rubio quien lo recibió con una sonrisa, para continuar con lo que había empezado, repartiendo besos, caricias y quitando el pantalón que cubría la erección del menor.

Cuando finalizaron con su entrega mutua, se dedicaron a desayunar sin dejar de robarse besos o caricias. Todo parecía un sueño y Harry rápidamente se estaba acostumbrando a él.

Después de regresar al hotel donde el ojiverde se hospedaba, subieron a la habitación para poder continuar juntos.

-          Deberé arreglar algunas cosas, pero creo que alcanzaré a irme contigo pasado mañana a Londres – dice el rubio, quien estaba sentado en uno de los sofás de la habitación con Harry sentado en sus piernas sin dejar de contemplarlo.

-          ¿En serio? ¿tan pronto? – cuestiona el ojiverde bastante impresionado y por qué no decirlo, bastante nervioso. Le encantaba que Bryan fuera tan decidido y que estuviera dispuesto a irse con él de inmediato, pero le asustaba que las cosas fueran tan exageradamente rápido; apenas la noche anterior habían comenzado con su relación y ahora a escasos dos días estarían viviendo juntos.

-          ¿No te agrada la idea? – cuestiona a su vez el rubio, mostrando cierta decepción en sus rasgos, logrando que Harry se sintiera mal de inmediato – creo que si estoy yendo demasiado rápido y te estoy asustando… será mejor que esperemos un poco entonces y… - pero no pudo terminar ya que fue acallado con un beso.

-          Lo siento, perdóname, sé que ya habíamos hablado al respecto, es solo que quiero estar seguro de que es lo correcto… es verdad que ya una vez estuve casado, pero nunca había hecho algo como esto, de hecho eres la segunda persona con la que tengo una relación y pues de la primera no salí muy bien, así que yo… - trata de decir pero el nudo en su garganta se hace cada vez más grande impidiéndole continuar, por lo que el mayor lo rodea con sus brazos y lo hace recostarse contra su pecho, logrando que Harry acomodara su rostro en el hueco del cuello del mayor y finalmente llorara.

-          No te preocupes, no debes alterarte, perdóname tu a mí, no debí ser tan impulsivo, perdóname, por favor no llores Harry – dice Bryan contra su oído de manera suave para poder calmarlo, cosa que pronto logra, haciendo que Harry levantara su rostro y lo mirara directamente a los ojos.

-          Yo… no quiero que me dejes… quiero intentarlo, pero tengo miedo de volver a sufrir una decepción, de que un día despierte y esté nuevamente solo y que todo se repita – dice Harry volviera a mirar hacia abajo, tratando de ocultar la vergüenza que su confesión le hace sentir.

-          Harry, ya te lo había dicho antes, he sentido algo por ti desde hace mucho, en varias ocasiones soñé con conocerte algún día y poder siquiera obtener un beso de tus labios, así que ¿en serio crees que te dejaría después de haber conseguido que salieras conmigo cuando ya tenía más que asimilado que nunca lo lograría? Harry Potter, no sé si sea lo correcto decírtelo ahora, pero te quiero, y mi mayor deseo es hacerte feliz y que podamos tener una maravillosa vida juntos, no me importa si es en el mundo mágico o el muggle, solo que podamos estar los dos juntos y vivir tranquilos como una pareja… pero lo que menos deseo es verte mal y más si es por mi culpa, por lo que no voy a presionarte, si quieres que vivamos juntos a partir de ahora, me iré contigo de inmediato, si quieres estar seguro y pensarlo, entonces puedo posponer mi partida… y si finalmente decides que eso no es lo que quieres, entonces simplemente no te obligaré y aunque me duela en el alma te dejaré ir y al menos viviré con el maravilloso recuerdo de haber podido estar contigo al menos una vez… todo depende de ti Harry, solo deseo lo mejor para ti – dice Bryan dejando en shock al ojiverde, quien tenía los ojos completamente abiertos ante semejante declaración, aun no podía asimilar sus palabras, pero sobretodo ese “te quiero” que parecía venir de lo más profundo de su corazón. ¿Realmente sería capaz de llegar a querer y quizás amar a Bryan? No lo sabía, pero después de semejante confesión lo mínimo que debía hacer era intentarlo, después de todo, estaba seguro que ya sentía algo por él, aunque aun no lo pudiera definir.

-          Bryan yo… ¿en serio me quieres? – pregunta aun sin creerlo del todo, eso era demasiado, más lo que recibió como respuesta fue un beso, no como cualquiera que le hubiera dado hasta el momento, sino uno completamente dulce y entregado, más de lo que se hubiera esperado - no sé aun que siento por ti, pero deseo intentarlo, quiero que me enseñes a quererte – dice finalmente cuando se separan, sin despegar su frente de la del rubio, quien lo miraba con una sonrisa.

-          Claro que lo haré, si tú me das la oportunidad, te prometo que terminarás queriéndome, aunque no sé si tanto como yo a ti, pero con solo saber qué me quieres algo, yo seré feliz – responde a sus dudas, besándolo nuevamente, para sellar finalmente su promesa.

Después de eso, ambos habían hecho todo lo que hacía falta para que el rubio pudiera irse con él en el mismo vuelo.

*-*-*-*-*-*-*-*-* Flash Back *-*-*-*-*-*-*-*-*-*

 

Había tenido algunas conversaciones más con Blaise, pero no le había dicho nada, por lo que cuando le preguntaba por cómo iba su relación con Bryan, simplemente contestaba un “bien, me estoy divirtiendo mucho con él” y no era porque no quisiera decírselo, sino porque deseaba poder darle una sorpresa en cuanto los viera juntos en el aeropuerto y agradecerle como era debido por ese viaje que le había cambiado la vida, además de que sería muy interesante ver la cara del moreno cuando lo viera con semejante hombre a su lado, de seguro lo molestaría un buen rato.

Y los dos días pasaron sin que los notaran realmente, hasta que se encontraron juntos sentados en las sillas de ese avión, que por cierto, ya no le había causado miedo gracias a él.

Solo en el momento en que se bajaron, fue que sintió un poco de temor ¿Y si a Blaise no le agradaba? ¿Y si las cosas entre ellos no funcionaban? ¿Y si no llegaba a quererlo como merecía? Pero todo eso se fue al caño cuando sintió la mano del mayor tomar la suya, apretándola para darle el valor que necesitaba para lo que se avecinaba y la sonrisa que le indicaba que todo estaría bien.

-          ¿Qué es lo que te preocupa? – pregunta suavemente el rubio sin dejar de mirarlo.

-          Que las cosas no salgan como las espero… aunque para serte sincero, en éstos momentos lo que más me preocupa es la reacción de Blaise, no sé si le agrades, a veces suele ser demasiado sobre protector conmigo – dice Harry mostrándole una sonrisa un tanto afectada por ese hecho, logrando hacer que el mayor riera suavemente.

-          No te preocupes por eso, ya verás que le agradaré y si no, haré lo posible por ganarme su confianza – dice el rubio, para posteriormente agacharse un poco y alcanzar los labios de su amante – te quiero y haré lo que sea por ti – susurra sin despegarse totalmente de sus labios logrando un sonrojo del ojiverde, para después sonreír cálidamente.

-          Gracias Bryan – contesta, para después retomar su camino hasta la puerta de ingreso, donde después de un momento logró divisar a un chico alto y moreno y a una rubia soñadora a su lado.

 

*-*-*-*-*-*-*-*-*-*-*-*-*-*-*-*-*-*

 

Había pasado los días pensando en las posibilidades de volver a verlo, realmente las palabras de Blaise no podía borrarlas de su mente tan fácilmente como hubiera querido; el solo pensar que Harry había encontrado a alguien más lo estaba mortificando, aunque sabía que tarde o temprano eso sucedería, solo que había esperado ingenua o estúpidamente que Harry viviría con su recuerdo y jamás tendría que pasar por la extraña sensación de pérdida, cuando había sido el mismo quien se había separado y lo había abandonado.

Durante las noches no había hecho más que beber como un maldito alcohólico, como si el licor se fuera a encargar de solucionar sus problemas y devolverle lo que había dejado por idiota, mientras que en los días trataba de ahogarse en el mar de trabajo que siempre tenía pendiente en la empresa o cuando estaba en casa, se dedicaba al cien por ciento a su hijo para tratar de no pensar en el hubiera sido.

Blaise no le había dicho en que vuelo regresaba, pero por fortuna el dinero es algo que mueve a las masas y él tenía mucho para hacerlas bailar a su gusto, así que había conseguido averiguar el vuelo, la hora de llegada y hasta la silla en la que venía sentado, por lo que haciendo acopio de toda su fortaleza, decidió volver a aquel mundo que había dejado atrás junto con el amor de su vida, porque aunque le doliera aceptarlo, jamás podría dejar de amar a ese tonto héroe que le había robado el corazón años atrás.

Tomó su abrigo y ante la mirada expectante de su esposa, quien había notado la extraña actitud de Draco durante los últimos días, esperaba que al menos tuviera la decencia de decirle a donde se dirigía, pero como ya era costumbre, el rubio salió con la frente en alto apenas despidiéndose de manera cordial, pero sin demostrar un solo sentimiento, logrando que la mujer simplemente soltara un suspiro resignado ante lo evidente.

En los últimos días, cuando Draco caía dormido en su despacho y ella iba a buscarlo para llevarlo a la habitación, mientras lo dirigía con un hechizo de levitación podía escuchar los murmullos de Draco, donde llamaba a Harry Potter y a veces hasta le pedía perdón por haberlo abandonado. En un principio pensó en que solo era un lapsus del rubio, pero al notar que lo había convertido en un hábito, se dio cuenta de que sería algo de no acabar, su esposo jamás había olvidado a Potter y aunque sabía desde un comienzo que era un matrimonio  arreglado sin amor, tuvo la esperanza que en algún momento su sueño de niña se hiciera realidad y que ese amor platónico que había tenido con el heredero Malfoy alguna vez se pudiera concretar, pero lamentablemente no había sido así y sabía que debía conformarse con ser simplemente la esposa ante la sociedad, pero jamás en su hogar.

Draco por su parte, se dirigió a una de las chimeneas y se dirigió al Caldero Chorreante, donde salió y ante su total desagrado tomó un taxi para dirigirse al aeropuerto al cual llegó al cabo de 45 minutos, por lo que pagó y se bajó para entrar inmediatamente. Hubiera llegado más rápido con la aparición, pero al no interesarse nunca en conocer realmente el mundo muggle, no sabía dónde ni cómo era el lugar, por lo que le había tocado resignarse a ir en ese denigrante medio de transporte.

Una vez entró, se dirigió hacia el lugar donde se suponía quedaba la entrada por la que ingresarían los del vuelo donde venía Harry siguiendo las señales, ya que jamás se denigraría al punto de pedirle ayuda a un muggle. Cuando llegó, se quedó esperando un poco alejado, pero con una vista perfecta de la puerta donde entraría. Se sentía como un maldito intruso, pero había tomado una decisión y la llevaría a cabo y esa era hacer lo posible por poder acercarse nuevamente a Harry. Sí, estaba casado y sí, no podría volver a tener a Harry como su esposo, pero aun así buscaría la manera de estar con él nuevamente y que lo perdonara por el gran error que había cometido, solo esperaba que el amor de Harry hacia él aun estuviera latente o no sabría qué hacer.

Al poco tiempo vio a Blaise y Lovegood llegar juntos a la que era la sala de espera y sentarse en unas sillas cerca a la puerta de vidrio, dejándole notar que ambos parecían muy a gusto juntos. Nunca en su vida se hubiera imaginado que el que había sido su mejor amigo se pudiera llevar tan bien con esa extraña Ravenclaw, pero igual no podía juzgarlo cuando él mismo en algún tiempo se entendió con ella.

Esperó un poco más y escuchó un anuncio del vuelo que estaba por aterrizar, por lo que todo el temple que había mostrado hasta el momento se vino al piso, al saber que pronto lo volvería a ver después de tanto tiempo; más de un año era demasiado y hasta ese momento caía en cuenta de ello.

Cuando lo vio traspasar las puertas de cristal sintió cómo su corazón daba un brinco de emoción y excitación como hacía mucho no lo hacía, dándose cuenta de cuánto lo había extrañado y añorado, aunque se negara constantemente a sus sentimientos, sin embargo, cuando estuvo a punto de dar el primer paso para acercarse a él completamente decidido a recuperarlo a como diera lugar, fue que lo vio. Un hombre alto, rubio y bien parecido aunque no le gustara aceptarlo, iba tomado de su mano y se había detenido para decirle algo al parecer en secreto, para posteriormente tomar su rostro y besarlo.

Eso no podía estar pasando, no era más que una maldita pesadilla, no podía ser cierto que Harry le sonriera y se sonrojara después de eso, que lo abrazara y se empinara para robarle un nuevo beso antes de dirigirse hacia el moreno y la rubia que los esperaban. No sabía que sentir, solo podía ser consciente de cómo su mundo se desmoronaba lentamente ante el hecho de notar lo evidente, Blaise no mentía, Harry había encontrado a alguien más y muy probablemente lo había olvidado. Se maldijo una y mil veces por no haber sido tan impulsivo e idiota, ahora muy probablemente no volvería a estar con él. Trató de alejarse del lugar pero su cuerpo no reaccionaba, era como estar en un maldito mundo alterno donde no tienes la capacidad de moverte a voluntad. Intentó desviar la mirada de aquella escena donde el que consideraba su mejor amigo recibía efusivamente a Harry y para colmo le daba la mano a ese intruso que se había atrevido a meterse en la vida del hombre que hasta ese momento nunca pudo de dejar de considerar suyo.

Cuando los vio salir del lugar pudo finalmente reaccionar y salir de ahí, no necesitaba ver más, ya con eso había sido suficiente para aceptar que lo había perdido. Pensó en regresar a su casa, pero de inmediato desechó la idea. Iría al mundo mágico y buscaría un lugar donde pudiera beber hasta olvidarse de su propio nombre.

 

*-*-*-*-*-*-*-*-*-*-*-*-*-*-*-*-*-*

 

Harry por fin podía sentirse tranquilo, sus dos amigos habían aceptado sin remilgos a Bryan aunque Blaise lo había advertido de mil cosas como si fuera su padre, logrando que pasara más de una vergüenza, pero al notar que a su pareja no le había molestado en lo absoluto y por el contrario le había seguido el juego pudo sentirse más tranquilo, aunque todo pareciera como si fueran una familia un tanto extraña y disfuncional.

Después de salir del lugar se habían dirigido a un callejón oculto, para poder aparecerse en la casa de Harry, la cual se encontraba con un enorme cartel que decía “Bienvenido Harry” y había una decoración sutil pero bonita y una mesa con algunos aperitivos, que sin lugar a dudas era obra de ese par que definitivamente con cada cosa lograban hacerlo sentir querido y especial.

-          Gracias chicos – dice Harry mirando cada detalle, además de que parecía haber pasado la mano que limpia, porque todo relucía como hacía mucho no hacía – no debieron molestarse – continúa acercándose a ellos y abrazándolos.

-          Solo esperamos que realmente sea de tu agrado Harry, igual sacamos a todos los Conxsixs que invadían los lugares oscuros para que no te vayan a molestar, igual tu una vez me dijiste que soy tu amiga, así que es lo mínimo que podía hacer – dice la rubia con su aire soñador, logrando que Bryan enarcara una ceja al no entender exactamente a qué se refería la mujer. Definitivamente Harry tenía razón al decir que ella era un tanto extraña.

-          Claro que eres mi amiga Luna ¿Cuántas veces te lo debo repetir? – dice Harry aun sin comprender porque ella siempre salía con eso, aunque teniendo en cuenta su forma de ser, tampoco era de extrañar tanto.

-          Lamentamos no haberte tenido en cuenta en el cartel, pero como a Harry se le ocurrió que era mejor ocultarnos tu llegada, espero no te moleste – dice Blaise a Bryan, quien tan solo sonrió.

-          No se preocupen por eso, entiendo perfectamente y me alegra que hayan preparado todo esto para Harry, que es quien realmente lo merece – dice el rubio dirigiendo su mirada hacia el ojiverde quien le brindó una pequeña sonrisa.

-          Bueno tenemos mucho que hablar, empezando por ¿Cómo es que son novios oficialmente y a mí ni una consulta me llegó? – dice Blaise mirando acusadoramente al pelinegro, quien tan solo lo miró apenado y agachó la cabeza.

-          Perdóname Blaise, pero es que quería sorprenderlos, además de que quería agradecerte personalmente por haberme dado la oportunidad de ir y así poder conocerlo – contesta Harry tomando de la mano a Bryan y sintiendo su apoyo de inmediato.

-          Ahhh está bien, por ésta vez te lo dejaré pasar, aunque no te niego que me alegró la sorpresa, pero espero que no vuelvas a dejarme así, todos éstos días no hice más que pensar si habías concretado algo y si te habían quitado la virginidad por segunda vez – dice el moreno en tono melodramático, logrando que Harry se pusiera exageradamente rojo.

-          ¡Blaise! – gritó completamente azorado imaginándose lo que su pareja podía estar pensando en ese momento – deja de decir esas cosas… ¿Por qué siempre tienes que salirme con esos comentarios? – cuestiona sin que aun se le pasara la vergüenza.

-          Porque siempre caes y actúas como si fueras un adolecente descubriendo su sexualidad cariño – contesta el moreno, logrando la risa de todos los presentes, menos el afectado.

-          Será mejor que pasemos a comer, dejamos todo con un hechizo para que mantuviera la temperatura, pero creo que es mejor hacerlo ahora – dice Luna encaminándose a la cocina siendo seguida por Harry quien decidió ayudarla – no te preocupes Harry, eres el festejado, deberías esperar con los demás en el comedor – dice ella al notarlo a su lado.

-          Claro que no Luna, una cosa es que sea el festejado y otra muy diferente que no le colabore a una dama – dice él logrando sacarle una risita a la rubia.

-          Eres todo un caballero Harry y me alegra que hayas encontrado a alguien especial – dice ella con una sonrisa - solo espero que las cosas salgan bien – dice despreocupadamente al final, pero algo en su tono y forma de decirlo deja un poco desconcertado a Harry, aunque prefiere omitir el hecho, igual ella siempre solía salir con ese tipo de apuntes.

-          Uhmmm huele delicioso, de seguro te quedó exquisito Luna – comenta el ojiverde sirviendo la cena, mientras Luna se encargaba de sacar las cosas necesarias para alistar la mesa.

-          Te lo agradezco Harry, espero realmente les agrade y si no, pues para eso están los dorslinks – dice ella sin perder su aire, como si el hecho de que probablemente la cena no les agradara no le afectara en lo absoluto.

-          Claro que nos gustará – finaliza él para salir de la cocina y servirle a todos.

Durante la cena no hicieron más que hablar sobre el viaje, la extraña manera de empezar su relación entre Harry y Bryan, lo que habían pensado hacer y las ganas que se les veía a ambos de sacar adelante su relación, cosa que agradó a Blaise y Luna, sin embargo, el moreno no dejaba de pensar que quizás era demasiado rápido aunque él lo hubiera alentado, después de todo, una cosa era una relación pasajera y otra muy distinta formalizar algo cuando apenas se conocían, pero aun así, prefería hablar eso en privado con Harry ya que a pesar de todo, solo conocía de nombre a Bryan.

Pasaron las horas, hasta que se dieron cuenta que faltaban unos minutos para la media noche, por lo que Luna se puso de pie y después de darle un beso a cada hombre en la mejilla, se dirigió a la chimenea para irse a su hogar. Blaise tuvo la intención de irse también, pero quería hablar primero con Harry, por lo que se quedó un momento más hasta que Bryan se levantó de la silla.

-          Lo siento estoy muy cansado, quisiera ir a dormir – dice el rubio un tanto incomodo de estar en casa ajena y actuar de esa manera.

-          No te preocupes, Blaise ¿me esperas un momento? – dice Harry levantándose junto a su amante y mirando de manera significativa al moreno, haciéndole entender que necesitaba hablar con él, cosa que Blaise agradeció, ya que si Harry decidía subir con su pareja le tocaría esperar para hablar con él.

-          Claro, ve tranquilo, nos vemos después Bryan y nuevamente bienvenido a nuestra extraña familia – dice el moreno levantándose y tendiéndole la mano.

-          Muchas gracias y lamento retirarme tan pronto, pero será mientras me acostumbro al cambio de horario – dice el rubio estrechando su mano – buenas noches – finaliza y se retira junto a Harry, quien lo guía hasta su habitación.

En cuanto llegaron al lugar, Harry encendió las luces y el rubio miró con detenimiento el lugar, cosa que logra poner un poco tenso a Harry.

-          Sé que no es la gran cosa, pero espero te guste – dice Harry un tanto cohibido, por lo que el rubio lo voltea a mirar de inmediato.

-          Lo siento, creo que mal interpretaste mi actitud, estaba pensando que hacía mucho quería conocer el lugar donde tu vives y me siento honrado de poder estar en ésta habitación y saber que la podré compartir contigo – dice el mayor tomando el rostro del más bajo entre sus manos, para posteriormente agacharse un poco y atrapar sus labios en un beso suave y lento, logrando dejar perdidos todos los sentidos del ojiverde. Cuando se separaron, no pudieron evitar mirarse a los ojos y sonreír.

-          Me alegra saberlo. En un momento vuelvo, voy a hablar un rato con Blaise y luego subo, así que no me esperes, quiero que descanses – dice el menor, logrando que Bryan le robara un beso y al separarse se alejara.

-          Está bien, pero te extrañaré – dice guiñándole un ojo, logrando que se sintiera aun mejor.

-          Exagerado – dice Harry saliendo nuevamente de la habitación y cerrando la puerta sin dejar de sonreír.

Se sentía bastante extraño sabiendo que había alguien en su habitación esperándolo, cuando ya se había hecho a la idea de que no volvería a estar con nadie, sin embargo, su corazón no podía sentirse más contento ante el hecho.

En cuanto llegó a la sala, encontró a su amigo con una copa de whiskey de fuego en su mano, mirando hacia el vacio por la ventana, cosa que lo extrañó un poco.

-          ¿Blaise? – pregunta un tanto inseguro de sacarlo de sus cavilaciones.

-          Harry, pensé que tardarías más, un poco más y me salen raíces esperándote – dice el moreno recobrando su actitud des complicada de siempre logrando que Harry se tranquilizara.

-          Lo siento, es que bueno, ya sabes… debíamos despedirnos – dice el menor con cierta vergüenza.

-          Ni que se fuera a ir… me imagino cómo habría sido si te hubieras venido solo – dice el moreno con cierta burla, logrando que el menor se avergonzara aún más de ser posible.

-          No te burles Blaise – dice sentándose en uno de los sofás de la sala, por lo que el moreno se sentó a su lado y pasó uno de sus brazos sobre sus hombros para abrazarlo.

-          ¿Realmente estás feliz y conforme con esto Harry? – dice el mayor cambiando totalmente su tono de voz a uno completamente serio, aunque bajando su tono para no ser escuchado por nadie más que el chico que se encontraba entre sus brazos.

-          La verdad es que no lo sé Blaise, él realmente me gusta, ha sido muy especial conmigo y me siento muy bien a su lado, pero tengo mucho miedo de que al final me deje nuevamente y me destroce el corazón… lo soporte una vez Blaise, pero no lo haré dos y a eso es a lo que le temo – dice el pelinegro sintiéndose completamente extraño, era curioso el carrusel de sensaciones que lo perseguían últimamente, en un momento se podía sentir bien y de un momento a otro, sentía que no estaba bien lo que hacía, era escalofriante hasta cierto punto.

-          Está bien Harry, creo que te he presionado mucho para que conocieras a alguien y te dieras una nueva oportunidad, pero me preocupa que hayas decidido traerlo a tu casa como tu pareja, cuando ambos sabemos que aun no has superado del todo tu pasado y no trates de negármelo – dice el moreno al notar que Harry pensaba refutar ante su afirmación.

-          No… no puedo negártelo, pero tampoco te puedo negar que estoy feliz de estar con Bryan, es… especial… y quiero intentar dejar mi pasado atrás y tener un futuro con él, solo que quiero saber qué piensas tú al respecto – dice el menor levantando su rostro del pecho del moreno para mirarlo a los ojos.

-          Bien te lo diré, hasta hace unos años me valía poco y nada lo que tu hicieras con tu vida, pero desde que te conocí realmente, me di cuenta de que eras un tesoro invaluable que para mi desgracia había caído en las manos de mi mejor amigo, pero con el tiempo, pude verte como uno, como un verdadero amigo que tiene pinta de desvalido y que deseo poder proteger, por lo que de manera inconsciente me convertí en tu guardián y decidí hacer lo posible porque tu estuvieras bien… en un principio por Draco, pero después fue enteramente por ti, y más cuando él tomó la peor decisión de su vida, por lo que te confieso que aunque me haya agradado Bryan, no podré estar completamente tranquilo hasta ver con el transcurso del tiempo que él es el hombre correcto para ti… te quiero Harry, como mi amigo, mi confidente, como mi protegido y como el chico que se ha convertido en mi centro, por lo que solo puedo decirte que no voy a dejarte solo, te aseguro que estaré aquí constantemente cuidándote y brindándote todo el apoyo que necesites, pero te juro que si ese hombre se atreve a hacerte daño, no vivirá para contarlo y me iré con gusto a Azkaban sabiendo que te lo quité de encima, así que solo debemos esperar a ver que hace y depende de él que lo acepte completamente o no – dice Blaise, logrando que Harry lo mirara completamente asombrado y enternecido por sus palabras, por lo que finalmente sonrió y le dio un suave beso en los labios para después abrazarlo.

-          Gracias Blaise, por cuidarme tanto y apoyarme siempre, yo también te quiero mi chocolate – dice Harry logrando sacarle una risa al mayor, quien hacía mucho no escuchaba ese apelativo de parte del ojiverde.

-          Por nada precioso y ahora si me voy que me esperan en casa – dice el moreno, por lo que Harry se levanta y lo mira completamente asombrado.

-          ¿Quién te espera? – pregunta el menor sin salir de su asombro.

-          Mi más fiel compañera… la almohada – dice dirigiéndose hacia la chimenea antes de que Harry reaccionara y lo golpeara por haberlo hecho pensar lo que no era.

-          Blaise – lo llama pero el moreno ya se encuentra con los polvos flu en sus manos.

-          Hasta mañana cariño – dice guiñándole un ojo para posteriormente decir la dirección de su mansión y salir del lugar.

Lo que ninguno notó fue a aquel hombre que los miraba con cierto recelo desde la escalera. No le gustaba en lo absoluto esa amistad tan estrecha.

 

Continuará…

Notas finales:

Holassss a tod@s!!!

Bueno espero les haya gustado el cap, empiecen a sacar conclusiones y me las comenten ;)

Muchísimas gracias a quienes me han dejado sus reviews y me han alentado a seguir con ésta historia :D

Sé que había dicho que Harry sufrirá, así que no desesperen que pronto será jejeje

Lamento demorar tanto, pero por cuestiones laborales se me ha complicado escribir, pero no se preocupen que eso no significa que haya olvidado mis fics.

Nos leemos!!

Les mando muchos besos y abrazos!!!!


Si quieres dejar un comentario al autor debes login (registrase).