Siwon tenía su vista perdida en algún punto lejano en su habitación. Se preguntaba cuántas veces había llorado por él, de tanto dolor se sentía asqueado y sin vida. Porque jamás lo dejó abandonado y siguió cuidando de él a pesar del daño que se hacía, simple respuesta: lo amaba. Pero lastimosamente parecía que el menor no.
La lengua de aquel ser era demasiado afilada al hablar, los reclamos e insultos eran su predilección, nunca pudo pronunciar una palabra de amor desde que estaban juntos.
Cuando llegó a conocer a aquel hermoso joven, peleó de manera irremediable por obtener su atención y más su cariño. Kyuhyun siempre se acercó a él de una manera diferente para llamarle amistad y cuando más enamorado se encontraba uno, decidieron unirse y ser pareja. Pero lo que alguna vez los unió era como si jamás hubiese existido, al parecer del mayor el sentimiento sólo venía por parte de él porque Kyuhyun nunca se acercaba ni siquiera para ofrecerle un corto y caluroso abrazo y no se diga permitirle a Siwon tocarlo de una manera más provocativa.
Siwon se levantó fuerte y fue directamente a aclarar toda la situación que rondaba en su cabeza. Buscó a Kyu con su mirada y supo que no se encontraba más que en la sala jugando videojuegos. Ingresó a la sala y lo vio sentado con su ordenador, gritando quien sabe cuántas maldiciones por no poder ganar.
Se acercó lentamente tomándolo por los hombros, asustando al menor.
-¡Pero qué mierda!, Siwon hiciste que me desconcentrara.
-Kyuhyun, ¿puedo hablarte un momento?
-Ya lo estás haciendo. ¿Qué quieres?
-Tú… ¿Tú me amas?
Kyuhyun dejó un momento su juego y se levantó, quedando demasiado cerca del mayor y en un momento de desesperación se acercó a él y lo besó lentamente para luego dejar su corazón abierto y expresarse.
-Siwon yo... yo te quiero.
-Kyu, te pregunté si me amas
-No, realmente no lo hago
-Entonces ¿por qué estás aquí?
-Porque simplemente quiero aprender a amarte, lo intento y sé que mi corazón cederá y se rendirá ante ti.
-Vete. -Siwon no deseaba escuchar una triste mentira con respecto a los sentimientos del menor, se dio vuelta y esperó a calmarse un poco para retirarse y darse por vencido para hacer que Kyu se rindiera y más aún, si fuera posible volverse a enamorar.
-Espera, Siwon-. Cuando el mayor dio vuelta encontró a Kyuhyun mostrando su desnudez completa, con sus mejillas sonrojadas y su mirada gacha.
-Pero… ¿qué estás haciendo?
-Si no puedo convencerte con mis palabras lo haré con mis acciones; Siwon quiero que seas el único que llegue a tocar mi cuerpo, hazme el amor.
Siwon no salía del shock de escuchar la entrega completa del menor, lentamente fue acortando la distancia y besando al menor, quien se dejaba guiar con su tacto y sin negarse a nada se entregó al mayor sellando la promesa de que cuando su corazón se enamorara de Siwon sería suyo hasta el final.
Besos iban y venían, Siwon disfrutaba del sabor de la piel de Kyuhyun, mientras el más bajo controlaba sus miedos abrazándose a la ancha espalda de su ahora amante, el dolor que sintió cuando Siwon empezó a ingresar en él fue de lo peor pues prefería mil veces haberse ido a estar llorando como en ese momento.
-Respira Kyu, ya pasará.
Y luego de un momento, todo el mundo se había perdido para ambos, Siwon realizaba un vaivén suave dentro de Kyuhyun, haciéndose sentir hasta el fondo del mismo mientras su amado pequeño arqueaba la espalda y gemía sin control por las miles de sensaciones que recorrían su espina dorsal. Cuando todo hubo llegado al clímax, el mayor abrazó a Kyuhyun y lo pegó a su cuerpo, dándole a entender que ahora le pertenecía.
-Te Amo, Kyuhyun.
Kyu respiró y regresó su vista a su amante -. Mi corazón pronto empezará a amarte Siwon y desde ese día serás mío para siempre, que eso te quede de amenaza.
-Siempre tuyo, Kyuhyun.
Y así dos cuerpos perlados se abrazaron y descansaron, pronto Kyuhyun estaría listo para entregarle todo a Siwon, principalmente su corazón.