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GEMINI por Maki Akira

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Notas del fanfic:

Three-shot c: espero les guste, como el nombre lo dice está inspirado en Gemini de Alice Nine, por eso es un three-shot, cada capítulo es una canción, espero lo disfruten.

Notas del capitulo:

Buenas~ vengo yo otra vez a joder con este three-shot, bueno ya traía ganas de este, la canción es hermosa, por ahí leí que es algo difícil interpretarla, muchos lo interpretan como "encontrarse a uno mismo" y otros como "encontrar a la persona indicada" obviamente yo no podía hacer la primera, así que escribí este three-shot inspirándome en mi interpretación con la segunda opción de encontrar a esa persona que llena nuestro vacío, que nos hace ver las cosas de una mejor forma... felicidad es la palabra clave. Bueno espero les guste y lo disfruten mucho que a mí personalmente me llegó *^*

 

PD: ya está escrito les actualizo las siguiente partes la próxima semana :3

 

 

Maki

El amor. ¿Qué es eso? Qué puede saber de eso una persona como yo. veme aquí sentado en un parque fumando, tirando bocanadas de humo al aire esperando que de repente la tierra se abra tragando solamente a esas estúpidas y molestas parejas que se pasean de un lado a otro sonriéndose, tomándose de la mano y dándose besos como si se encontraran solos, aagh! que me dan asco y molestan. No se sorprendan si un día ven en el periódico “hombre se vuelve loco y mata a parejas en el parque” muy probablemente eso pase pronto si se siguen paseando frente a mí. Como sea, me largo de aquí, soy muy joven para pasar el resto de mi vida en la cárcel por estas personas estúpidas que creen que todo es hermosos cuando te enamoras. No sé, nunca me he enamorado, siempre fracaso en mis relaciones, o soy muy frío o simplemente no soy humano, esas son las escusas que me dan mis parejas para terminarme, al fin de cuentas no me importa, porque en realidad no es que las quiera. A veces en medio de la relación me pregunto por qué estoy saliendo con alguien, no es que la quiera, no es que tenga que estar por compromiso con ella, ¿entonces porque estoy saliendo con alguien? Ahí es cuando ellas todo el tiempo tienen esa expresión triste y me hacen preguntas tontas como “¿me quieres?” “¿soy importante para ti?” después de un tiempo se cansan y se van diciendo “Eres muy frío, siento que no me quieres” respondo con lo primero que se me viene a lamente y me gritan “¡¿no tienes sentimientos?! ¡¿no eres humano?! ¡eres un idiota!” me golpean como si fuera mi culpa y se largan. Me gustaría que simplemente se largaran sin tener que golpearme.

 

 

 

La vida es un reto, tienes que mantenerte con vida, sobrevivir, como para que todavía estés perdiendo el tiempo “enamorándote” de alguien, preocupándote por esa persona, y si tienes suerte esa persona te corresponda con la misma fuerza que tú, y si no tienes suerte, se termine aburriendo de ti y botándote, sufres y ahí es donde pierdes tiempo, vea por donde lo vea enamorarse es innecesario y una clara estupidez, aun cuando los dos se correspondan de la misma manera no le veo beneficio, ahora tienes un punto débil para tus enemigos y tienes que dividir tu tiempo, tus logros con esa persona, ahora tienes que sobrevivir por dos, no nada más por ti, eso es malo. Otra cosa realmente mala es que cuando te enamoras se supone que no quieres perder a esa persona, te aferras a ella, pero oh triste realidad, por alguna razón las personas vienen y van, nadie se queda eternamente contigo, ¿de qué sirve aferrarte a una persona? si sabes que no importa que, al final la vas a perder. JA! Estúpidos enamorados, pero aun con todo eso, y aun cuando esas personas que se enamoran lo viven, no aprenden, siguen buscando enamorarse de alguien más, con la ridícula escusa de que quieren ser felices, por favor, ¿Quién puede ser feliz así? Déjame responder. ¡NADIE!. La clave para ser feliz, es no aferrarte a nadie, no depender de nadie, no vivir para nadie, solo te necesitas a ti mismo, mírame a mí, soy fel…. No, no soy feliz… ¡pero tampoco necesito a alguien para ser feliz!

 

 

¡GENIAL! Lo que faltaba, empezó a llover, ¿Cómo es posible? Estaba soleado, no traje paraguas, ¿alguien puede ser mas desdichado que yo? no, no lo creo. Tendré que correr hasta un lugar donde cubrirme y tomar un maldito taxi a mi departamento. ¡Odio tomar taxis! Esos hombres son estúpidos y molestos, haciendo comentarios irrelevantes, preguntándote sobre tu vida o contándote la suya. ¡QUE MIERDA ME IMPORTA! Un día me subí a uno y el chofer empezó a hablar de la religión lo estaba ignorando hasta que me preguntó si creía en Dios. Naturalmente respondí que no y el muy desgraciado me empezó decir que no habría salvación para mí si no creía ¡y me pidió que orara con él! Quería romperle el cuello, pero se me hacía tarde y tenía que llegar pronto, con un chofer con el cuello roto no iba a poder llegar. Mierda, arreció ahora si tendré que correr.

 

 

— Ahh! ¡Ten cuidado!

 

 

— lo siento, lo siento — ¿y este niño quién es? Doblando la esquina sin cuidado, los jóvenes de hoy en día son muy groseros. Ah! mierda, está llorando, ¿lo habré lastimado?

 

 

— no importa [desvió la mirada] ¿te lastime? [lo miró, el chico bajó el rostro, pasó su brazo por su cara secando las lagrimas que se combinaban con la lluvia y negó con la cabeza] bien, ten más cuidado, te lastimaras. [siguió caminando cuando se detuvo abruptamente por el jalón que sintió en la manga de su chaqueta] — ¿pero qué mierda? ¿Qué se cree este mocoso? [lo miró con el entrecejo fruncido y el chico aún no alzaba la mirada] — ¿necesitas algo? [preguntó con un tono de voz molesto esperando impaciente que soltará su manga].

 

 

— señor… ¿puedo abrazarlo? — ¡¿QUÉ?! ¿está drogado? [se agachó un poco para tratar de ver los ojos del chico que aun mantenía la cabeza gacha y poder ver si tenía los ojos rojos o algo que indicará que no estaba completamente en su juicio]

 

 

— ¿pe-perdón?

 

— abrazarlo… ¿puedo?

 

 

— ¿Por qué crees que dejaría que un extraño me abrazara?

 

 

— por… favor [levantó el rostro que tenía completamente mojado, su cabello se pegaba a su frente y a los lados, sus ojos estaban brillosos con una tonalidad un poco roja como si hubiese estado llorando mucho, al ver el rostro del chico sintió que algo golpeó a su pecho y tragó saliva] — ¿Qué es… esto? ¿mi sentido de humanidad? [gruñó negando con la cabeza un par de veces]

 

 

— hazlo rápido. [dejó caer sus brazos a los lados y el chico prácticamente se aventó sobre él aferrándose a su cintura y hundiendo su rostro en su pecho, que era hasta donde le llegaba el joven] bien, ya… es suficiente [intentó separarlo de él pero este solo aplicó más fuerza al agarre] — ¿eh? ¿no piensa soltarme? — oye, dije que es suficiente [el chico negó con la cabeza sin separar su rostro del pecho del mayor] escucha! tienes que soltarme, llevamos rato mojándonos aquí, así que suéltame! [no había respuesta por parte del chico, tan solo se aferraba más a él] — ¿Qué sucede con él? ¿quiere partirme en dos o qué? Aagh! por sentido común nadie dejaría que un extraño lo abrazara, no sé qué me pasa, probablemente todo esto es una farsa y quiere robarme el dinero. — está bien, te daré mi dinero, suéltame [rápidamente alzó la mirada mirándolo confundido] ¿qué? es eso lo que quieres ¿no? Asaltarme.

 

 

— ¡¿eh?! No, claro que no [se soltó del mayor y negó rápidamente con la cabeza y ambas manos]

 

 

— ah bueno [se dio la vuelta y siguió caminando. Se detuvo cuando escuchó los pasos en los charcos detrás de él, miró y vio al chico siguiéndolo] ¿necesitas algo?

 

 

— ¿puedo ir con usted?

 

 

— No. [siguió caminando. El chico corrió hasta llegar al lado del mayor y empezó a seguirlo a su paso]

 

 

— sé que es extraño todo esto…

 

 

— si lo sabes entonces deja de seguirme [interrumpió al menor]

 

 

— ¡por eso! Déjeme explicarle [rogó el chico. El mayor dio un gran suspiro y se detuvo] — no es que me importe pero no todo los días te encuentras con un extraño que te pide descaradamente que dejes que te abrace y luego te sigue. Solo tengo un poco de… ¿curiosidad? O simplemente hoy salí de casa sin mi sentido común y me traje mi sentido de humanidad. [al ver que el mayor se detenía y se giraba hacía a él para escucharlo el chico se emocionó no pudo evitar sonreír mentalmente]

 

 

— ¡usted huele como a mi papá! [dijo con un leve sonrisa] — ¡¿QUÉ?! [abrió los ojos que había mantenido cerrados y vio la leve sonrisa del menor, sintió algo raro en el pecho pero decidió no tomarle importancia]

 

 

— ¿qu-qué quieres decir con eso?!

 

 

— cuando choqué con usted… su aroma, sentí su aroma y es como el de él… como el de mi padre [bajó la mirada y lo ultimo lo dijo casi con hilo de voz que se le dificultó un poco escuchar]

 

 

— sigo sin entender.

 

 

— mi padre acaba de… morir. — ah, era eso… [sintió un presión en su pecho y unas ganas extrañas de acariciar la cabeza del chico que ahora estaba gacha] algo anda muy mal conmigo hoy.

 

 

— ya te has mojado mucho [sintió un peso sobre su cabeza, alzó la vista y algo negro la cubrió, subió sus manos quitando eso de en medio y vio a aquel alto hombre pelinegro mojándose en la lluvia sin su chaqueta, alzó la mirada y las manos y sintió la chaqueta sobre su cabeza, sonrió levemente y se volvió a ir encima de él aferrándose una vez más a ese cuerpo cálido y con un aroma familiarmente reconfortante]

 

 

 

 

 

 

 

Sin una dirección, nace, entre las millones de vidas
Finalmente te conocí.

 

 

 

 

 

¿Cómo terminó así? [dio un gran suspiro y caminó hacia la sala con dos tazas de chocolate]

 

 

— aquí tienes.

 

 

— gracias! [sonrió y tomó la taza llevándosela a la boca para soplar y dar pequeños traguitos] — esas sonrisas ya me están molestando… ¿Por qué sonríe tanto? — tiene un departamento muy grande y bonito. ¿tiene familia?

 

 

— no te importa. [respondía serio y sin verlo, se recargó en el respaldar del sofá y cruzó las piernas bebiendo de su tasa]

 

 

— ¿vive solo?

 

 

— no te importa. Solo sécate y vete.

 

 

— claro que si me importa, no pregunto cosas que no me importan. ¿Cuál es su nombre? El mío es kohara, pero puede decirme shou.

 

 

— solo sécate y vete.

 

 

— ¿Cuántos años tiene? Yo tengo 22

 

 

— solo…

 

 

— sécate y vete. Si, ya sé, pero quiero saber sobre usted.

 

 

— te dejé venir aquí porque no me pareció bien dejarte solo en la calle y mojado, así que cuando estés seco y pare un poco la lluvia vete. [se levantó del sofá, pasó enfrente del chico y siguió caminando. Se detuvo cuando sintió los delgados brazos rodeándole por la espalda. Dio un gran suspiro e intentó separar los brazos del chico que no cedían]

 

 

— ¡no quiero! Quiero conocerlo, saber de usted, llamarlo por su nombre. Usted me cae bien.

 

 

— tú a mi no.

 

 

— ¿Cómo sabe eso? No me conoce.

 

 

— Ja! Tú tampoco me conoces.

 

 

— ya lo sé, pero me cae bien.

 

 

— no puedes saber eso si no me conoces.

 

— siento que usted es el tipo de persona que todo el tiempo es frío, grosero y dice no querer a nadie, pero realmente no es que no quiera a nadie, es que aun no ha encontrado a la persona correcta que querer, cuando la conozca las cosas van a cambiar, empezará a ser una persona diferente, más amigable, amable…

 

 

 

— no me estás escuchando [interrumpió al chico pero este lo ignoró y siguió hablando]

 

 

— usted es ese tipo de persona, se siente solo ¿no es así?...

 

 

— No.

 

 

— también quiere ser querido por alguien…

 

 

— no, claro que no.

 

 

— quiere sonreír con alguien, [el chico ya hablaba sin escucharlo, como si estuviera pensando en voz alta] yo lo entiendo, todos merecen ser felices. Usted está solo, apuesto que no tiene novia, ni esposa, ni hijos, no hay ninguna foto de algún familiar, amigo o de usted mismo. No cuenta ni con usted mismo.

 

 

— ¿puedes saberlo tan solo por la falta de fotos? [bufó]

 

 

— sin familia, y con más de treinta.

 

 

— 29 [rezongó en voz baja]

 

 

— ¡¿29?! [abrió grande los ojos y el mayor resopló rodando los ojos] se ve más grande [susurró el chico] ¡debe ser por eso! [señaló al mayor sentenciando y con el entrecejo fruncido] es porque no es feliz, no sonríe, no ama la vida.

 

 

— ¿amar la vida? Ja! Por favor — [rió burlonamente]

 

 

— usted es del tipo de persona que no derrama lagrimas pero su alma ya está ahogada de tanto llorar [su expresión de repente cambio a una triste que sorprendió al mayor] — ¿Cómo puede cambiar su expresión así de repente? Este niño está loco — usted siente más que otras personas, sus sentimientos están perfectamente grabados dentro de usted, y duelen más por qué no puede expresarlos.

 

 

— tienes razón…

 

 

— es suficiente! Tiene que… ¿eh? ¿Qué dijo?

 

 

— que tienes razón.

 

 

— ¿enserio? [la sonrisa en su rostro era enorme y sus ojos parecieron empezar a brillar de una manera muy intensa, sintió algo dentro de él, algo muy cálido esparciéndose por todo su pecho cuando vio esa hermosa y grande sonrisa, tragó saliva lentamente y tratando de sonar serio y tranquilo]

 

 

— no, claro que no. Vamos, vete de aquí, ya paró la lluvia.

 

 

— ¿eh? No, no quiero. Aun no me ha dicho su nombre y si puedo venir a visitarlo.

 

 

— no sirve de nada que sepas mi nombre. Y no, no puedes venir a visitarme.

 

 

— ¡pues entonces no me voy! [se dejó caer en el suelo doblando sus pierna y cruzando sus brazos en señal de protesta] — ¿eh? ¿esto es en serio?.

 

 

— vamos levántate y sal de aquí, ya es tarde, tu familia debe estar preocupada por ti.

 

 

— ya le dije, mi padre murió y mi madre no quiere saber nada de mí.

 

 

— tienes apenas 22, ¿Cómo crees que tu madre no va a querer saber nada de ti? [el chico se encogió de hombros suspirando y se levantó del suelo para ahora dejarse caer en el sofá]

 

 

— no me quiere, nunca lo hizo… yo solo estaba en esa casa por mi padre, porque él no quería que me fuera, pero una vez murió, ella no tardó en correrme.

 

 

— ¿hace cuanto murió?

 

 

— un mes.

 

 

— ¿y dónde te estás quedando?

 

 

— con un amigo, pero se va a mudar de la ciudad por la universidad. Tengo que buscar otro lugar.

 

 

— y con todo eso vienes a hablarme de la felicidad. Vaya que eres interesante [soltó un risa irónica]

 

 

— la felicidad no tiene nada que ver con eso. Puedes ser feliz aunque vivas en la calle.

 

 

— no seas tonto… bueno, eres joven, es inevitable que seas tonto.

 

 

— me voy [sonrió] vendré a verte seguido ¿ok?

 

 

— No.

 

 

— gracias por todo [lo abrazó de repente dejándolo paralizado] nos vemos. [agitó su mano en ademán de despedida y salió del departamento]

 

 

Es solo un joven al final de todo [sonrió ampliamente, para después borrar su sonrisa abruptamente al darse cuenta que sonrió por ese “niño”]

 

 

 

 

1 AÑO 6 MESES DESPUÉS…

 

 

 

— oye tora [se acercó al pelinegro sentándose a su lado en el sofá]

 

 

— ya te dije que no me digas así.

 

 

— pero me gusta decirte así, así es como yo te veo. Como un tigre grande y fuerte. [el pelinegro dio un suspiro cerrando el libro que leía, se quitó las gafas y dejó caer su cabeza sobre el respaldar del sofá con los ojos cerrados]

 

 

— ya está bien, ¿Qué ibas a decir? — no tiene remedio, pelear con él es como pelear con la pared, no cambia sus ideas por nada, es difícil convencerlo de algo cuando ya tiene algo metido en esa cabeza de… aagh! me desquicia. [en medio de sus pensamientos y en respuesta a su pregunta shou (como le dijo que le dijera) sonrió amplia y delicadamente] Pero esas sonrisas me encantan… ¿qué…? ¿Qué mierda me pasa? [se abofeteó mentalmente al sorprenderse pensando eso].

 

 

— quiero ir a las afuera de la ciudad [no borraba esa sonrisa y tora empezaba a sentirse nervioso. Cada día le costaba más verse tranquilo frente al chico de hermosa sonrisa y mirada]

 

 

— pues ve… [volvió a abrir el libro y ponerse las gafas para seguir leyendo cuando un mano se atravesó en su campo de visión y quitó lentamente el libro de sus manos, alzó la mirada y se encontró la mirada fija y el entrecejo fruncido del joven]

 

 

— ¡VA-MOS! [exclamó lentamente asiendo énfasis en la palabra]

 

 

— no, yo paso, gracias [sonrió y volvió a tomar su libro]

 

 

— ¡NO!... [tora se sorprendió por el grito, el joven pelinegro no era de gritar ni nada de eso, lo volteó a ver y se encontró con un pequeño puchero y ojos brillos] — ¿Qué?! ¿va a llorar?... ¿es en serio? —… se supone que… ¡tenemos que ir juntos! [el mayor dio un suspiro quitándose las gafas nuevamente] — es la primera vez que me hace un berrinche así.

 

 

— ¿Por qué? ¿no puedes ir solo?

 

 

— n-no… tenemos que ir juntos.

 

 

— ¿Por qué quieres ir a las afuera de la ciudad?

 

 

— porque ahí hay un parque… creo. Bueno es un lugar muy bonito rodeado de arboles hermosos, cerca de un pequeño lago, vi las fotos, es realmente hermoso, por favor. ¡vamos!

 

 

— ya es tarde, puede ser peligroso [volvió a tomar su libro]

 

 

— por favor… [bajó el libro]

 

 

— ya está bien, vamos… solo si prometes no molestarme en un buen rato ¿ok?

 

 

— sí, sí. No te pediré nada. ¡Lo prometo! — ahí está, otra vez, esa sonrisa que causaba esa sensación cálida en su pecho, que solo con el tiempo en vez de disminuir aumentaba más y más.

 

 

 

*~*~*

 

 

— al menos no hay gente.

 

 

— sí, está muy tranquilo... es hermosos ¿no? Los arboles siendo agitados por el viento, la luna reflejada en el agua, el silencio, la paz, es hermoso ¿no? [tora quedó por un momento perdido en la imagen de shou de espaldas a él mirando el lago, reaccionando solo con una fuerte ráfaga de viento]

 

 

— cúbrete bien hay mucho viento.

 

 

— jeje, sí [volteó a ver al mayor sonriendo y abrochando los botones de su chaqueta] podrás ser siempre “frío” [hizo comillas con sus dedos haciendo énfasis en la palabra] pero en realidad eres muy amable, siempre preocupándote por mí.

 

 

— no me preocupo por ti.

 

 

— claro que sí, sino no te importaría que trajera unos botones desabrochados.

 

 

— suficiente… ¿nos vamos?

 

 

— ¿eh? Pero si acabamos de llegar. [el mayor desvió la mirada con el entrecejo fruncido y metiendo las manos en sus bolsillos, muy probablemente se quería solo por que empezaba a sentirse nervioso con el menor, hoy actuaba… diferente a otros días, insistiendo con lo de ir a ese lugar, luego la tranquilidad con la que hablaba, tora se sentía algo raro] no importa [rió shou capturando la atención de tora que se había quedado en estado autista] en realidad te mentí [sonrió volviéndose a girar hacia a el lago]

 

 

— ¿Qué quieres decir con que me mentiste? [Prefirió quedarse en su lugar mirando con una expresión confundida al menor]

 

 

— no vi este lugar en fotos… mi padre solía traerme aquí en mis cumpleaños a pasar un tiempo solo él y yo. [no podía ver su rostro pero tora sabía que shou estaba sonriendo. Cada vez que hablaba de su padre el chico sonreía de una manera hermosa y sincera, una sonrisa diferente a las cotidianas, una sonrisa única].

 

 

— ¿en tus cumpleaños? [susurró el pelinegro] acaso… ¿hoy es tu cumpleaños? [reaccionó, se dio cuenta que no sabía la fecha de cumpleaños del menor y se sintió mal, por una razón a la que no le estaba tomando importancia se molestó con él mismo por su descuido, shou rió levemente girándose hacia el mayor]

 

 

— sí… [asintió enérgicamente mientras mantenía su hermosa sonrisa que a la vista de tora hacía un perfecto juego con el paisaje y ambiente]

 

 

— fe-felicidad… [habló tímidamente bajando la mirada avergonzado, shou amplió más sus sonrisa y negó con su mano restándole importancia]

 

 

— aah~ [suspiró el menor] pero de verdad me hubiese encantado recibir un regalo tuyo hoy — ¡¿eh?! ¿un regalo mío? [enseguida alzó la mirada mirando al chico con una expresión sorprendida, mientras el otro sonreía de una manera divertida por la reacción del pelinegro]

 

 

— ¿u-un regalo? ¿quieres un regalo? [el pelinegro menor sonrió asintiendo] está bien… mañana te compraré uno.

 

 

— pero mi cumpleaños es hoy.

 

 

— ¿y qué? ¿quieres que corra ahorita a conseguirte uno?

 

 

— puedes improvisar [habló obviando el asunto y encogiéndose de hombros] bueno… [habló de repente atrayendo la atención y mirada del mayor] en realidad no es que quiera que me compres un regalo…

 

 

— ¿entonces? [interrumpió tora]

 

 

— el regalo que quiero que me des no se compra. [continuó el menor]

 

 

— ¿saldrás con alguna cursilería como un abrazo o algo así? [bufó el mayor]

 

 

— un beso y tu compañía eterna [habló abruptamente el menor con una expresión seria que no dejaba cabida a la interpretación de una posible broma y dejó al mayor totalmente congelado] — ¡Esa seriedad es demasiada!. ¡Esa petición es demasiado!.

 

 

— ¿e-eeh? — no, tal vez no escuché bien, ja, si debe ser eso. [sonrió mentalmente]

 

 

— quiero un beso… y que me prometas que no me abandonaras.

 

 

— ok… solo para asegurarme, ¿esto es una broma?

 

 

— ¡claro que no es una broma!, ¿lo harás o no? [el menor caminó hacía el pelinegro y este no sabía si huir, correr lo más rápido que pudiese o ceder a sus pensamientos que gritaban que aceptara, era algo que ya sabía sin embargo hasta ese momento se negaba creer, no quería aceptar que él ya tenía fuertes sentimientos por el joven]

 

 

No supo en qué momento, solo se encontraba queriendo protegerlo y mantenerlo a su lado, ¿Dónde había quedado ese hombre que no creía en el “amor”? ¿Dónde había quedado ese hombre que creía firmemente en que querer mantener a alguien a tu lado era ridículo, el aferrarse a alguien solo significaba tu autodestrucción? Shou se detuvo exactamente frente a él, clavando sus ojos negros directamente en los de él, no había más esa sonrisa, por un momento pensó que si se negaba de verdad ya no habría nunca más esa sonrisa, no la volvería a ver y se quedaría como un hermoso recuerdo. Tan solo eso. Tembló internamente por la situación, si seguía su necedad y orgullo sabía perfectamente que le perdería, a ese joven que le dio vida a su “vida” o lo que sea que tenía antes de que llegara ese joven pelinegro con sus ideas locas de los sentimientos y la felicidad. Tragó saliva y apretó los puños, era el momento, de cometer probablemente uno de los errores que lo marcarían o tomar una decisión que le cambiaría la vida… tal vez (no, estaba seguro) para bien.

 

 

Tomó al chico por los hombros apretando el agarre, shou sintió su corazón acelerar el ritmo, trató de mantener la calma, tora acercó lentamente su rostro y de un forma delicada dejó un tierno y suave beso en los labios del contrario, duró apenas unos segundo, pero para ambos fueron los segundos más eternos, placenteros y perfectos. Finalmente tora se alejó y observó el rostro del menor, con una de esas sonrisas que anhelaba, una sonrisa sincera y diferente a las cotidianas, sus ojos brillosos que poco a poco se inundaban de lágrimas hasta el punto que se desbordaron un par deslizándose por sus blancas mejillas.

 

 

— Feliz cumpleaños… pasemos muchos más juntos. [sonrió dando seguridad al menor de sus palabras]

 

 

— siempre… [abrazó al mayor hundiendo su rostro en su pecho, aspirando su aroma fuertemente] — cambió…

 

 

— ¿eh?

 

 

— tu aroma… cambió… ahora es diferente… único [sonrió y volvió a bajar su rostro aplicando más fuerza al abrazo que enseguida fue correspondido por el mayor]

 

 

 

 

Elementos completamente opuestos
Se parecen entre sí, como gemelos
Luz y sombra
Tu y yo

 

 

 

 

 

Abrió los ojos por la luz cálida que entraba por su ventana, sintió un peso extra sobre su brazo y un calor nuevo cerca de su pecho, bajo la mirada y vio el rostro durmiente del menor con unos cabellos sobre su rostro, despacio los quitó y sonrió acariciando suavemente las pestañas del menor, miró por la ventana, ¿desde cuándo los amaneceres eran tan agradables? ¿Desde cuándo el cielo tenía ese color? ¿Desde cuándo podía sonreír sin razón aparente? No… había una razón y estaba justo alado de él, durmiendo.

 

 

— buenos días [volteó a ver al menor que empezaba a despertar y sonreía mientras frotaba sus ojos]

 

 

— buenos días [sonrió instintivamente] ¿tienes hambre? [negó suavemente con la cabeza] bien [quitó las sabanas de encima para levantarse pero la mano se shou se aferró a su playera]

 

 

— un rato más… por favor.

 

 

— solo un poco [sonrió volviéndose a acomodar en la cama]

 

 

— o todo el día [rió y se abrazó a él recargando su cabeza en su pecho, no dijo más y con un brazo rodeó al menor y con su otra mano acariciaba gentilmente su cabello].

 

 

 

 

 

 

 

La eternidad se hunde a tu lado
Las aves del ocaso, mirando hacia el mañana
Solo los recuerdos que amaba, ligeramente conectan mi corazón.
El mundo que podría ser teñido en color oro, llega a su fin.

Notas finales:

Eso es todo, yo sentí que quedó largo pero a la vez las cosas pasaron muy rápido, fue un brinco de tiempo de 1 año 6 meses, tengan en cuenta que en ese tiempo shou se metió a la de ley en la vida de tora le gustara o no xD no me podía extender mucho en ese parte porque es solo un three-shot espero entiendan :c

 

Aquí shou sale con cabello negro, no sé si me han leído antes pero tengo un one-shot llamado NEMESIS (aquí: http://www.amor-yaoi.com/fanfic/viewstory.php?sid=103192&warning=5 ) donde shou también sale con el cabello negro, y es que personalmente me encanta como se ve, aquí les dejó una imagen para que se imaginen más o menos como sale en esta historia: http://ic.pics.livejournal.com/nico_nicoru/38135888/15730/15730_640.jpg 

 

Bueno es todo, cuídense y gracias por leer.

Saluditos ^-^/

 

 

Maki


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