El me rescató de todo problema al que me metía, estuvo conmigo siempre, en todo momento incluso cuando yo no sabía que estaba ahí…en ocasiones podía sentir su presencia, palparlo en el aire mientras el aroma de sus largos y negros cabellos llegaba hasta mi nariz y en tono muy bajo mis labios pronunciaban su nombre como si fuera la más hermosa melodía que nunca se hubiera escrito…
Dreizehn…
Cada letra suena más hermosa que la anterior y todo esto solo para completarse con otra serie de letras que al juntarse y escucharlo me hace perder los estribos. Dreizehn Schwarzschild.
Yo solo quiero decirte que tu fiel Carbuncle está enamorada de ti, que rondas día y noche en sus pensamientos, recorriéndote con la mirada así como todo un acosador y atesorando cada palabra que sale de tus labios aunque sea de las más simples, quiero confesarte que el aroma que se queda impregnado en tus ropas, tus movimientos, las cosas que dices solo con la mirada son los tesoros más divinos que nunca había tenido el placer de conocer.
Quise resignarme a solo estar a tu lado cuando esa rosa blanca te robó el corazón sintiéndome lo más insignificante por no haber logrado en tanto tiempo lo que ella logró en menos de la mitad. Lo intenté, juro que intenté dejar de amarte, dejar de desear tu cuerpo y tus labios sin embargo era como si estuviese atado por algo que me impedía alejarme.
Tus encantos fatales eran algo que no podían ser comparados con los míos.
Odio las rosas blancas, una de ellas fue la que te alejó de mí. ¿Por qué no te gustan las rosas rojas? Su color representa tantas cosas tanto peligrosas como pasionales y sin embargo tú preferiste la pureza, la tranquilidad ¿Y de qué te sirvió? Aquellos significados tan pacíficos solo te hicieron caer en la locura a tal punto de morir solo porque esa pobre rosa blanca se acabó por marchitar…No pudiste soportar la idea de vivir toda la eternidad sin ella.
¿Y nosotros?
Carbuncle, Ráfaga, Wilderness y Kircheis ¿No significamos algo más importante que esa mujer?
Al parecer no pues terminaste por lanzarte a los cálidos brazos del sol para que él te envolviera totalmente haciéndote desaparecer mientras tú por supuesto sostenías un ramo de rosas blancas en los brazos en señal de que pronto te reunirías con tu amada.
Me siento triste pero incapaz de llorar, no quiero quebrarme a los ojos de los otros tres caballeros mientras las brasas del sol te asfixian acortando la distancia que hay entre tú y esa maldita rosa blanca que seguro te espera con los brazos abiertos. Ahora el que quiere morir soy yo…
Podría ahogarme ahora entre lágrimas, sollozos y gritos hasta quedarme sin voz y mis ojos hinchados se nieguen a producir una gota más…Esta vida infinita ya no tiene sentido alguno o eso es lo que pienso.
Pero ahí es cuando me doy cuenta de algo…Dreizehn, mi querido Dreizehn me has dejado un regalo que no dejaré que nadie más me arrebate…
Su nombre es Justice y es tu viva imagen, es como verte de nuevo caminando entre nosotros. Su mirada, sus gestos, su aroma…Todo el eres tú con la única diferencia de que su hermoso cabello largo no es negro en su totalidad si no que está adornado con mechas color blanco las cuales resaltan a través de sus ropas oscuras.
¿Es acaso una señal, mi querido Dreizehn? Nunca pudimos estar juntos sin embargo me has dejado este precioso regalo ¿No es así? Un presente tan hermoso y sagrado para mí que será imposible para alguna otra rosa blanca arrebatármelo. Soy egoísta y él es solo mío, es mi regalo y de nadie más, ni siquiera de los otros tres caballeros sin embargo te seguiré amando a ti por toda la eternidad.
Dreizehn…
Ya no sé si me estoy enamorando de Justice por su tremendo parecido contigo o por cómo se comporta conmigo…Estoy confundido ahora
Cometí una tontería y entonces me vi atrapada en el laboratorio del Doctor Fernando el cual deseaba hacer toda clase de experimentos conmigo. Creí que era mi fin y que no volvería a abrir los ojos al momento en el que me quedé inconsciente pero Justice llegó a mi rescate, tomándome entre sus brazos de una manera tan dulce que por un momento me olvidaba de ti mi Dreizehn y solo me concentraba en esos mechones color blanco que adornaban su melena larga…Cuando comencé a despertar enredé mis dedos en sus preciosos cabellos y mi nariz se vio invadida por el deliciosos aroma que el emanaba y por alguna extraña razón no pensé en ti.
Ya he dejado de pensar en Justice como el bendito regalo que me enviaste, ahora solo pienso en el cómo quien deseo que esté a mi lado por toda la eternidad que me queda de vida. Quiero que mis dedos se vean atrapados por sus cabellos bicolores, quiero que me bese y deje ese dulce sabor en mis labios todo el día, que me clave la mirada recorriendo mi cuerpo solo con las pupilas y que sus manosme rodeen la cintura en un erótico abrazo del cual no pueda escapar nunca más.
El corazón de Justice ha sido robado por una rosa pero esta no tiene un pobre color blanco, la rosa que es dueña de Justice es de color rojo, peligroso, ardiente y lleno de pasión. Esa rosa la ha enredado en sus mortales espinas de las cuales nunca podrá liberarse aunque lo intente.
Solo mío…
Espero esta carta te llegue pronto a pesar de que me he tardado en escribirla. Seguro que ahora el sol ya no te afecta en nada, no te quema la piel ni te vuelve cenizas en un instante, puedes pasearte bajo el sol con tu amada tomada de tu brazo sin ningún temor…Siento envidia por ello.
Cuando llegue la carta solo deseo que la leas sin compañía de la rosa blanca. Ella no lo podría entender.
Por siempre tuya
Carbuncle