Let’s Not……..Find us
En definitiva el mundo es una ruleta, un dia estas arriba y al siguiente estas debajo; unos días se gana y otros se pierde…
Todos los días nos encontramos con cosa y personas, situaciones y acciones que marcaran para siempre nuestro futuro, de alguna u otra manera decidimos si queremos dejar que esto nos afecte o salimos a delante con todo lo que se nos venga encima…
Recibimos lecciones que son importantes y otras con la que somos solo capaces de decir ‘que hare con esto en el futuro si no lo necesitare’…lo que muchos no saben es que de todo se aprende alguna cosa, nada en este mundo es un desperdicio…
Si es bien sabido que la basura de unos es el tesoro de otros…
Pero esta solo en nosotros hacer algo con eso, no nos caerán del cielo las respuestas a nuestras preguntas y dudas, pero todos dicen que debemos encontrarlas y que están ahí….
Hay algunos que nacen con la vida arreglada y ellos solo se tiene que preocupar por nacer, unos creen ser felices en ese tipo de vidas pero son más los que se hastían y tratan de buscar una salida más factible que los ayude a ser más felices…no importa lo que tengan que hacer o pasar para conseguirlo…
Otros menos afortunados, nacen para ganarse las cosas a pulso dia con dia…pero esto no los hace ni más ni menos felices que aquellos que nacen con la vida arreglada, cada uno tiene sus desventajas…
Cada quien debe vivir con la suerte que les toco; pero cuando los destinos se entrelazan y este decide poner a esas personas en la cuerda floja jugando con sus sentimientos…que hacer?
En definitiva hay personas que no deberíamos haber conocido nunca en la vida…jamás, pero quien sabe si fue la mano de Dios o de algún otro que hiso todo aquello y los puso el mismo dia, a la misma hora y en el mismo lugar…
Su destino estaba marcado por las lágrimas y el dolor y nunca debieron encontrarse…
Quizás si su padre no se hubiera sentido mal e ido al médico, él no hubiera tenido que cuidar de la tienda…
Quizás si no se hubiera distraído, su amigo no le hubiera roto la cuerda de su guitarra…
Quizás si esas chicas tan molestas se hubieran ido más temprano, él podría haber cerrado la tienda más temprano…
Quizás si no hubiera sido tan tarde, él no hubiera entrado en la única tienda de música abierta a esas horas…
Quizás si no fuera tan distraído y despistado, no hubiera tropezado con su nuevo cliente…
Quizás si no hubiera ido tan apresurado, no habría chocado con aquel chico de ojos negros tan profundos como la noche que reinaba afuera quedando atrapado en ellos…
Quizás si hubiera sido otra persona con la que choco, él no le habría dado importancia…pero era aquel chico de voz encantadora que siempre escuchaba cuando iba a arreglar el piano de aquella universidad tan inalcanzable para el…
Quizás si no hubiera sido el Hyung del piano, se habría levantado y gritado todas las sartas de insultos que sabía…
Quizás ese dia nunca debió pasar y dejarlo en el calendario de ese año como un dia más en el mundo, debieron seguir sus caminos como si nada…pero la oportunidad estaba ahí y ellos no la iban a desaprovechar por mas descabellada que esta fuera.
Pero aun con todos esos quizás si o quizás no…paso y no había vuelta atrás; los dos estaban prendados el uno del otro, el amor le exudaba del cuerpo con cada respiro, con cada palabra, con cada mirada que se dedicaban el uno al otro.
Había que ser ciegos para no darse cuenta del amor que los rodeaba a cuando se encontraban, había que ser tonto para no darse cuenta de la melancolía en sus ojos cuando no veían al otro por sus ocupaciones, había que estar muy ajeno a la realidad para no notar que ellos se amaban con locura y que eran el uno para el otro, que encajaban como dos piezas echas específicamente para que no existiera otra igual que pudiese reemplazar alguna de las dos.
Porque para Yesung no había otro que el…Kyuhyun…
Porque para Kyuhyun no podía ser otro si no lo era el…Yesung…
El ver a Yesung sonreír alegremente cada dia, para su padre eso era lo más importante y si su felicidad y aquella sonrisa era causada por aquel joven rico entonces él no tendría el valor para separarlos, no después de que la madre de Yesung hubiese muerto dejándolos a ambos sumidos en la tristeza; después de eso no impediría que aquella sonrisa volviera.
Parecía más el alcahuete de ambos cuando el menor en aquella relación inventaba una mentira en su casa solo para venir a ver a Yesung, eso no le importaba en lo más mínimo; su hijo estaba feliz y veía en los ojos de Kyuhyun el amor también. Las cenas con Kyuhyun en su casa se convirtieron en normales, a veces se quedaba a dormir pero el como buen padre lo mandaba al cuarto de invitados aunque ellos atestiguaban ser grandes y portarse bien, pero no se confiaba de las hormonas de ambos jóvenes; incluso en una ocasión decidió hablarles de sexualidad obteniendo asi un sonrojo pronunciado por parte de ambos…él estaba más que divertido.
Fueron buenos tiempos en los que Kyuhyun se comportó mejor que nunca ya que su atención estaba toda en el mayor, incluso lo ayudaba con la tienda cuando estaba muy ocupado y no podían salir en una cita; no había nada de que quejarse excepto de que estaba haciendo todo aquello a escondidas de su familia y aunque Yesung le decía que no le importaba él sabía que le dolía ser ocultado de los ojos de sus familiares como alguien sin importancia, él no quería ver su rostro triste.
Después de dos años en el que estuvieron de novios, estaba cansado de ocultarle a sus padres el motivo de su felicidad, por eso se los dijo. Les dijo que estaba enamorado de una persona maravillosa que aunque fuera mayor que él no lo aparentaba en ningún sentido, que era responsable y amable, que tenía talento para la música, que era el amor de su vida y que nuca había conocido a alguien asi, que simplemente estaba enamorado.
No quiso decir más nada y solo les dijo que se los presentaría aquella noche en la cena. Asi fue que Yesung conoció a los padres de Kyuhyun, se los gano rápidamente por lo educado y bello joven que era, lo que no les agrado pero para nada es que fuera pobre, que ni siquiera tuviera la mitad del dinero que ellos tenían. Lo insultaron como nunca nadie lo había hecho; ver el desprecio en los rostros de los padres de Kyuhyun era algo que ninguno se esperaba pero ahí estaban en sus expresiones y en cada palabra que salía de sus bocas.
Hasta que Kyuhyun exploto como nunca en su vida, el trato de contenerlo pues sabia hasta donde podía llegar la lengua afilada del menor-si la había visto varias veces en acción cuando se los presento a sus amigos y algunos lo rechazaron-era peligroso cuando se enojaba para cualquiera que quisiera sanidad mental. Después de decir lo que quisiera fue que tomo el brazo del mayor y salió de casa para llevarlo a la suya, él quería quedarse pero Yesung le dijo que mejor fuera a pedir disculpas a sus padres por hablarles de esa manera…y se despidieron por esa noche con lágrimas en los ojos y besos tiernos llenos de amor pero amargos y salados por las lágrimas de ambos.
Lloraron como nunca en su vida, cada uno consumiéndose en su dolor el uno lejos del otro porque asi debía de ser, ellos estaba en estratos de la sociedad muy diferentes y asi debería haber quedado; debió decirle que no cuando lo vio en la mañana en la puerta de la tienda, o tal vez no debió verlo porque asi no se habría dado cuenta de que su cara todavía quedaban vestigios de haber llorado al igual que él. En definitiva no debió derretirse entre sus brazos cuando lo abrazo con necesidad y miedo a perderlo, debió cerrar sus oídos y boca para no escuchar ni responder a sus palabras de amor y disculpas.
Debió haber hecho muchas cosas que no hiso y dejar de hacer otras; tenía que haber cerrado su corazón y escuchar a su cabeza por primera vez en la vida….pero no lo hizo…
Se despidieron al caer la noche como cada dia en la puerta de la casa del mayor, entre besos, abrazos y más palabras de amor prometiendo verse mañana…
Pero quien iba a decir que Kyuhyun no iba a llegar al dia siguiente ni al siguiente de ese, ni en la semana completa, quien iba a decir que él no contestaría sus llamadas o mensajes, que no estaría en la universidad cuando fue a arreglar el piano y sus amigos tampoco sabrían nada de él.
Y si se arrepintió, si le hiso caso a sus padres y ya no quería verlo más, y si ya se olvidó de el…
Esos pensamientos eran los que lo atormentaban totalmente al ver que el menor no aprecia frente a él; lo que no sabía es que el menor trataba por todos los medios de escapar de su casa donde lo tenían encerrado y sin comunicación hasta el dia en que tuviera que irse del país. Por lo menos quería despedirse de Yesung porque ya sabía que no podrían estar juntos sin hacerle daño al mayor, su padre ya se lo había advertido que si se empeñaba en frecuentar a Yesung entonces lo destruiría a él y a su padre, sabía que era cierto porque su padre tenía el poder para hacerlo.
Pero aun asi tenía que despedirse, tenía que verlo por última vez, tenía que mirar dentro de aquellos ojos una vez más, tenía que perderse en aquellos labios tan dulces que tanto le gustaban, quería hacerlo sonrojar, quería verlo reír, quería oírlo decirle te amo y asi poder responderle con un ‘yo te amo más’.
Tiro el porta retrato que estaba en su cómoda directo al piso donde se hiso mil pedazos, miraba con odio aquella foto donde estaban él y sus padres hasta que fue consciente de que Heechul con Eunhyuk y Donghae estaban en su habitación mirándolo asustados.
-Que quieren?-dijo enojado sentándose sobre su cama…
-Vinimos a sacarte de aquí…-dijo el mayor
-No pueden, hay guardias por todos lados…-tiro de sus cabellos hacia atrás…
-Ya nos encargamos de los de adentro, solo faltan los de la entrada y la ajuma se está haciendo cargo…-respondió Donghae mirando por la ventana
-Vístete ya, que los otros se están encargando de llevar a Yesung Hyung al parque…-Hyuk le lanzo un par de prendas y el comenzó a cambiarse…
-No sé qué haría sin ustedes…-dijo sonriendo
-Después nos agradeces mocoso, además no lo hago por ti…-dijo el mayor- Sabes que esa tortuga no la puedo ver en ese estado…
-Tendrás que cuidarlo por mi mientras vuelva Heechul Hyung…-lo abrazo ganándose un zape en la cabeza…
-Espero que eso sea pronto, antes de que alguno de los dos muera de amor…-dijo burlón
-Yo ya estoy muriendo…-pronuncio triste…
Cuando llegaron al portón principal este ya estaba abierto y esperando a que el saliera, Heechul no espero una invitación para salir a toda velocidad en su auto perdiéndose inmediatamente en la lejanía.
Al llegar al parque pudo ver al mayor esperándolo junto LeeTeuk, Ryeowook y Siwon, se notaba que había estado llorando, se veía la angustia en sus ojos y en los nerviosos ademanes que realizaba inconscientemente, lo había extrañado como el…
Corrió a su encuentro fundiéndose ambos en un abrazo necesitado y adolorido…
-Te…ex….trañe tanto Kyu…-dijo de manera entrecortada por los sollozos y las lágrimas…
-yo también te extrañe Hyung…mucho…-hundió su nariz en sus cabellos y aspiro su aroma…
Los otros solo los miraban con pena en sus ojos pero también con envidia por el amor que existía entre ambos. Heechul se acercó a ellos mientras sacaba un juego de llaves de su bolsillo y se lo tendía a Kyuhyun que lo miraba con una clara duda en sus facciones.
-Vallan por ahí a hacer cositas…-dijo burlonamente viendo como crecía el sonrojo en ambos-Ya sabes donde esta…
-Gracias Hyung…
Apenas dijo aquello y los demás abandonaron el sitio dejándolo solos a él y a Yesung rodeados por la tranquilidad del parque. El rostro del mayor se notaba claramente preocupado y dolido, dos cosas que en definitiva a Kyuhyun no le gustaba que estuvieran en su bello rostro por obvias razones; y es que cuando el mayor se ponía en ese estado el sentía como si su corazón fuera apuñalado miles de veces, lo peor de todo es que estaba a punto de dejarlo a merced del dolor.
-Kyu…-apenas pronuncio cuando el menor ya lo estaba besando intensamente sin miramientos ni restricciones, un beso apasionado y necesitado que le dejaba en claro cuanto lo había extrañado.
-No…Sabes…Cuanto…te..amo Hyung…-le dijo repartiendo besos por toda su cara mientras acariciaba su negro cabello….
-Tú no sabes cuánto te amo Kyuhyun…-respondió mirándolo fijamente…
-Cuanto…?-lo sostuvo de la cintura apresándolo más cerca…
-Más de lo que puedas imaginar…-sin esperar a ver la reacción en la cara del otro, lo tomo de la nuca estampando sus labios de manera ferviente para poder robarle hasta el último aliento de existencia en el cuerpo del menor.
-Vamos a otro lugar…-dijo Kyu cuando se hubo recuperado…
Tomo aquella mano pequeña entre las suyas y comenzó a caminar hasta tomar un taxi. Media hora después estaban en el centro de la ciudad en el departamento de escapada que usaba cuando quería huir de casa-en realidad todos sus amigos lo usaban ya que era propiedad de Heechul y este los dejaba usarlo cuando lo necesitasen-.
Entraron en el departamento del cual Yesung no se fijó mucho en la decoración ya que fue apresado por el menor entre sus brazos y sus labios robándole la atención una vez se habían cerrado la puerta a su espalda.
Entre tantos besos y caricias atravesaron el living dejando a tras sus suéteres y camisas; Kyuhyun lo miraba con ojos hambrientos llenos de deseo, pero también había en ellos amor puro y grande. Pasando sus manos desde su trasero hasta la cara interna de sus muslos, Kyuhyun hiso que el mayor envolviera sus piernas en su cintura provocando que este se aferrara a sus hombros mientras seguían en aquel beso apasionado pero tierno.
Yesung le miraba con aquellos oscuros ojos en los que centelleaban unos destellos que lo dejaban más embobado, aquella sonrisa tímida pero maliciosa le surcaba el rostro asi como el sonrojo pronunciado en sus abultadas mejillas. Sonriéndole también se encamino con el encima hasta la habitación más cercana y cerrando se encamino a la cama donde se dejó caer con el mayor encima quedando el de espaldas al colchón.
-Te amo Kyuhyun…-unas imperceptibles lagrimas abandonaron sus ojos cuando pronuncio aquellas palabras…
-Sabes que también te amo Yesung…-le dijo alejando aquellas lágrimas de sus ojos con sus manos…
En un ágil movimiento lo dejo debajo suyo para atacar sus labios trazando un camino desde ellos, recorriendo su mandíbula y cuello para dedicarse a torturarlo ahí unos minutos. Sonoros gemidos abandonaron los rojizos labios de Yesung cuando sintió al menor tomar uno de sus pezones entre sus dientes para luego succionarlo sin compasión pero con mucha delicadeza, acto que no se quedó en uno solo.
Preso del éxtasis que recorría su cuerpo movió sus caderas sintiendo como la rodilla de Kyuhyun presionaba suavemente su miembro en una caricia enloquecedora que lo llevo mas lejos de la cordura que en ese momento no tenía. Con un poco de desesperación llevo sus manos hasta el botón de los pantalones del menor desabrochándolos y tratando de quitárselos con sus pies, cosa que le costó mucho esfuerzo pero que al final logro llevándose con ellos el bóxer.
-Estamos desesperados…-dijo el menor con una risita al ver como un puchero adornaba los labios de su adorable novio que cargaba un color escarlata en sus mejillas…
-Kyu…por favor…-aquella voz rasposa cargada de necesidad y aquella mirada encendida hizo que Kyuhyun se apresurada en dejar al mayor sin nada de ropa encima logrando una vista increíble de un Yesung desnudo y avergonzado.
-Sabes que te amo, no es asi?-el mayo asintió-Si no quieres yo…
-Si quiero, llevo esperando más de dos años y tú ya te has tardado mucho…-el otro sonrió y volvió a besarlo esta ves dejando que sus pieles se encontraran, y más que eso, creando una dulce y excitante fricción entre sus sexos que hiso a ambos jadear. Con aquella danza entre sus caderas el mayor lo apreso más cerca enredando sus piernas en la cintura del otro quedando a si más cerca.
-Ahh….lámelos Hyung…-el menor puso tres dedos frente a sus labios y no se negó a dejarlos humanos con su saliva mirando fija y sugerentemente a Kyuhyun mientras lo hacía…
No pudiendo aguantar la vista de un muy cachondo Hyung; saco los dedos de su boca para volver a besarlo mientras dirigía uno de sus ensalivados dígitos hasta la entrada del mayor, penetrando en la cavidad lentamente y sintiendo la tensión en el cuerpo del mayor.
-Kyu…humm….-lloriqueo un poco por el dolor mientras clavaba sus unas en su espalda para aliviar un poco el dolor…
-Pasara…lo prometo…-susurro en su oído para luego repartir besos por sus parpados fuertemente cerrados…
No quería hacerle daño a Yesung por eso lo preparo muy lentamente y a conciencia de que era la primera vez del mayor; aun no sabía cómo es que siendo tan atractivo no había conseguido una pareja, pero le agradecía en el alma a los idiotas que nunca se fijaron en Yesung porque ahora era todo suyo. Tomo una de sus piernas y con su mano libre entrelazo sus dedos con los del mayo por encima de su cabeza, con un último beso se hiso espacio entre las estrechas paredes del mayor sacándole un gemido a ambos solo que mesclado con un poco de dolor para Yesung.
Con el corazón latiéndoles desbocado en el pecho y una prominente capa de sudor cubriéndoles todo el cuerpo, sus cuerpos seguían uniéndose en un dulce y placentero acto de amor. Kyuhyun cada vez daba estocadas más profundas y fuertes en el interior de Yesung que no paraba de gemir encantado acompañado por el menor. Palabras inconexas y sin significado para algunos, abandonaban sus bocas que trataban de unirse en un beso que era impedido por los jadeos y gemidos que abandonaban sus bocas sin temor a que los escucharan; sin dudas algún vecino iría a quejarse con ellos, pero eso no les importaba.
El calor era abrazador en la habitación haciendo que sus cabellos húmedos se ciñeran sobres sus frentes perladas de las cuales escapaban pequeñas gotas de sudor que ahora estaban por todo su cuerpo. Kyuhyun no quería acabar con aquello, no todavía; no quería enfrentarse a lo que vendría después de aquella entrega en la que ambos estaban dejando el alma y mucho más, pero era imposible que detuviera el inminente orgasmo que se le avecinaba y menos cuando sintió a Yesung derramarse entre ambos viendo su cara tenida por la excitación y la satisfacción, sin poderlo evitar el también llego a su límite corriéndose en su interior con fuerza.
-Volverás por mi…?-murmuro suavemente rompiendo el silencio en el que se habían sumido luego de su escena de amor; sintió como el menor detenía las caricias sobre su cabello un momento para luego reanudarlas y dejar un beso en su mejilla.
-No lo sé…-su voz tenía un tono de melancolía que estaba destruyendo a ambos, sabía que no podía quedarse pero sabía que si se iba destruiría más que la vida de ambos, destruiría sus corazones en mil pedazos. Lo tomo entre sus brazos y bajo de la cama en la que estaban llevando al mayor consigo al baño; sin pronunciar palabra alguna lleno la tina y se metió con el dejando que el agua tibia mojara sus cuerpos. Después de un rato de estar sin hacer nada ahí, lavo sus cuerpos y salió del baño en busca de la ropa de ambos.
Una vez vestidos, salió del apartamento con Yesung de la mano y se encaminaron recorriendo las calles de la ciudad que ahora se encontraba a oscuras. El mayor se sorprendió cuando vio el letrero del karaoke donde a ambos les gustaba ir cuando estaban aburridos, intento preguntarle a Kyuhyun pero este no lo veía; se adentraron en el local saludando a la administradora que ya los conocía, pagaron por unas horas y luego se dirigieron a uno de los cuartos donde escucharon sus canciones favoritas mientras tomaban soda y comían algunas chucherías.
-Quiero cantarte algo…-Kyuhyun se levantó del sofá y fue hasta el aparato para elegir la canción, tomo uno de los micrófonos y se dio la vuelta para mirar al mayor mientras escuchaba la melodía inicial…
La conocía, a la perfección; conocía tanto la canción que solo deseaba no conocerla o tener un episodio de amnesia en ese momento, pero sin advertirlo comenzó a escuchar aquella voz que tanto amaba….
Diciendo que este momento es el último…
Para ti a quien ame tanto.
Aunque intentes volver a empezar y te aferres a mi lado…
Yo fui el único que dijo no y propuso nuestra despedida.
Sabía lo que quería decirle y por más que no quisiera escuchar era la realidad a la que ambos estaban sujetos…
Siempre me hago el fuerte, pero…
Soy un hombre cobarde…
Que no tiene la confianza de protegerte por siempre y huye…
Aun escuchando ese verso solo podía pensar en que no era cierto, por eso sus lágrimas que estaban fuertemente amarradas a sus ojos no soportaron más y se desbordaron recorriendo sus mejillas y aunque no quería comenzó a cantar aquella canción junto a él.
No ames a alguien como yo de nuevo…
No tengas a alguien para extrañar otra vez…
Conoce a alguien que solo…
Te mire y necesite a ti….
Que te amé tanto que no pueda pasar un dia sin ti……por favor.
Sufriendo tratas de detenerme…
Pero soy un cobarde que no tiene la seguridad…
Para dar felicidad a nadie a su lado…
No ames a alguien como yo de nuevo…
No tengas alguien para extrañar otra vez…
Conoce a alguien que solo…
Te mire y necesite a ti
Que te amé tanto que no pueda pasar un dia sin ti
Incluso si alguna vez nos arrepentimos por nuestra separación…
No puedo hacer otra cosa más que darte una gran despedida.
No llores contando el tiempo que paso…
No extrañes un tonto amor que ya paso…
Conoce a alguien que solo…
Te mire y necesite a ti…
Que te amé tanto que no pueda pasar un dia sin ti…
Por favor, espero que seas feliz…
Como podía solo decirle aquellas palabras cuando se lo estaba llevando todo con él, como podía pedirle que conociera a otro cuando ni siquiera quería mirar a nadie más, como podía decirle que sea feliz cuando se estaba llevando con el todo su corazón; él era su felicidad y nadie más.
Podía ver también el dolor en sus ojos y lo demostraban sus lágrimas que también se perdían en su cara dejando el rastro de su paso por sus mejillas…era consciente de que ambos se estaban muriendo…
Nunca volvamos a……encontrarnos…
Sintiendo indudablemente el sabor amargo de la despedida ligado al profundo dolor de su corazón herido, aun asi sintió el beso de Kyuhyun sobre sus cabellos y la tierna caricia que le proporcionaba a su mejilla bañada en lágrimas; pudo escuchar como minutos después abandonaba la sala con un sordo ‘te amo’ escapando de sus labios y confundiéndose con el débil sonido de la puerta al cerrarse.
No quería perderlo, no quería que en la mañana se lamentara por haberlo dejado ir de esa manera, él lo amaba y no lo dejaría marchar aunque tuviera que enfrentarse a sus padres. Con esa decisión tomada salió del lugar casi corriendo hasta la salida del local, pero era tarde, puedo ver como la limosina del padre de Kyuhyun estaba aparcada a fuera y este se subía para que luego el auto comenzada a andar.
Cuando salió de su ensimismamiento ya era demasiado tarde y la limosina se alejaba de él dejándolo más que destrozado; sintió como sus piernas cedían ante su peso y el peso del dolor que reinaba en su corazón mientras sollozaba incontrolablemente. Unos brazos cálidos lo envolvieron y pudo sentir el perfume de Heechul mientras su voz se perdía en el viento helado de esa noche pronunciando palabras de consuelo que su alma y corazón no querían admitir.
Su destino no era otro que estar marcado por las lágrimas de ambos, no había otro…pero ni el propio futuro estaba grabado en piedra…
Tal vez si Heechul y sus amigos no se hubieran empeñado en juntarlos a ambos…
Tal vez si no le hubiera dado las llaves de ‘la cueva’ como ellos le llamaban a su pequeño lugar…
Tal vez si los otros no hubieran encontrado a Yesung cuando fueron por el…
Tal vez si no hubieran ido a aquel lugar juntos y no se hubieran entregado como lo hicieron….
Pero él tal vez no existe, solo está el presente y sus consecuencias…..
Tres meces después…..
El dolor seguía siendo el mismo, era tan asfixiante que le aplastaba los pulmones dejándolo sin aliento o fuerzas para poder vivir, su padre estaba preocupado, sus amigos lo estaban y también los amigos del menor que no le decían nada sobre él de como le estaba yendo; no le decían si lo había olvidado y eso era lo que más daño causaba a su corazón.
Pero ahora tenía algo porque vivir, algo que había creado el amor entre él y Kyuhyun; no se lo diría al menor y eso lo tenía más que claro, no planeaba que los padres del menor quisieran hacer algo en su contra o de lo que ahora crecía en su interior; si el menor algún dia regresaba entonces se lo diría.
-Estas seguro…?-los ojos de LeeTeuk estaban muy abiertos por lo que le decía el menor con aquella sonrisa en su rostro mientras los otros lo miraban incrédulos y con duda…
-No nos pidas que mintamos Hyung…-dijo Donghae con un puchero a modo de súplica…
-No les digo que mientan, solo que no le digan nada de esto…
-Es casi lo mismo…-dijo Hyuk cruzándose de brazos-No estoy de acuerdo
-Qué piensas que harán sus padres cuando se enteren?-pregunto Siwon de manera inquisitiva al menor que había comenzado a boquear buscando alguna respuesta saludable que en ese momento no le llegaba ni le llegaría…-Exactamente,…
-Debemos guardar el secreto…-dijo Heechul incomodo con la idea…
-No les pido que mientan, pero no quiero pensar en lo que podría hacer Kyuhyun si se entera en este momento…-poso sus manos sobre su vientre-Él no puede hacer nada mientras se encuentre en esta posición, lo saben…
-Sí, no tiene ningún poder contra sus padres…-los demás suspiraron al escuchar a LeeTeuk; el había sido quien le dio la grandiosa noticia a Yesung de su embarazo pero cuando estuvo a punto de llamar a Kyuhyun para contárselo el menor lo impidió y pidió una reunión con todos.
-Está bien, haremos lo que dices…-dijo Wook mientras una sonrisa se formaba en sus labios-Vamos a ser tíos…
-Vamos a comprarle cosas lindas al bebe Hyung…-dijo Hae mas que ilusionado; comenzaba a hacerse una idea de cómo sería la vida de su hijo con esos cuidándolo, seguro se convertiría en todo un niño mimado.
Trece años después….
Su mente aún se negaba a dejar escapar el recuerdo de Yesung tendido en el piso mientras la limosina se alejaba, su cuerpo aun recordaba cada caricia que le había proporcionado el mayor, sus oídos aun escuchaban su rasposa y melodiosa voz que llenaba el silencio, aun podía sentir su aroma embriagarlo por completo dejándolo aturdido, sus labios aun sentían aquel sabor a café tan característico de su boca; aun podía escuchar su risa o a veces creía ver su mirada por ahí, pero era una ilusión a la que aún se aferraba fuertemente.
Aun y habiéndose a costado con más de una docena de mujeres-entre ellas hombres-, nadie había podido borrarlo de sus recuerdos y de su piel; aunque el había pronunciado aquellas palabras en una canción esperaba que el mayor las hubiera ignorado y siguiera amándolo como el primer dia en que lo vio, deseaba que hubiera hecho de la vista gorda y que se quedara con su recuerdo. Pero sabía que era el deseo más egoísta cuando él ha estado en la cama con diferentes personas después de él, cuando el había tratado de olvidarlo, pero pareciese que el cielo no admitía esa necesidad de borrarlo porque aun y queriendo olvidar su mente solo se empeñaba e recordarlo y a cada detalle.
Salió de la cama con una maldición y una erección que no fue provocada por su nueva conquista de una noche, se dirigió al baño donde tardo más de media hora en bañarse mientras lidiaba con su indomable amigo. Una vez aseado y vestido, salió de la habitación del hotel sin despedirse-nunca lo hacía- para encontrarse con su chofer que lo llevaría al aeropuerto que a su vez lo llevaría a Corea, quizás por eso estaba tan ansioso esa mañana.
Se había convertido en alguien frio y sarcástico, no era ni la sombra de lo que en algún momento había sido, ya no…ya no estaba con el Yesung para dejar su carácter prepotente a un lado; las personas que lo conocían lo admiraban por su ingenio en los negocios, pero aborrecían la forma altanera en que los trataba y sin el menor remordimiento, incluso sus padres habían sufrido en carne propia el cambio del menor teniendo que llegar a admitir solo para ellos que se habían equivocado, pero ya era muy tarde…
-Llegas tarde…-un hombre no muy mayor pero al que se le notaban en las facciones el paso de los años los miraba inquisitivamente y con pena por lo que había hecho-Otra vez con mujerzuelas Kyuhyun…
-Eso dejo de importarme hace mucho-lo miro ceñudo aunque luego cambio su expresión a una más juguetona con una sonrisa torcida que denotaba que venía listo para atacar-No debería importarte eso ya, lograste lo que querías…
-Kyuhyun, yo…lo sí…
-Ahórrate tus disculpas y vamos que ya es muy tarde…
Frio, calculador, al punto y directo. Sin esperar por más subieron al Jet que los llevaría a casa después de trece años de no estar ahí tenía miedo de lo que encontraría, sabía que si perdía otra vez a Yesung nunca se lo perdonaría a su padre; aunque sus amigos no le contaran nada de el por su propia decisión, se moría por saber que fue de él.
El viaje fue largo y agotador pero valió la pena, solo por ver los rostros de sus amigos esperando por el en el aeropuerto, y por primera vez en trece años, sonrió verdaderamente pero aun asi su mirada quería encontrar la de Yesung entre ellos cosa que no sería posible.
Su madre le dio una bienvenida acogedora, pero sus amigos notaron como estaba de distante y frio con sus progenitores; luego de la cena prácticamente fue secuestrado y llevado a ‘la cueva’ que seguía estando igual que años atrás cuando estuvo con Yesung en ese lugar, e inevitablemente su mente se llenó de recuerdos. Fue víctima del interrogatorio de sus amigos y por primera vez en tanto tiempo lloro, lloro como aquel dia en que se separaron y se lamentó de todo lo que había echo mientras no estuvieron juntos, los otros solo podían consolarlo y llorar con él.
El dia era más radiante que nunca, hacía un calor abrazador que era aplacado por la fresca briza que se colaba por todas partes, comenzaron a levantarse y a asearse; no había preguntado por el mayor pero ganas no le faltaban.
-Kyu…esta noche iremos al teatro-dijo el pez sonriendo…
-Hoy tocara un niño al que queremos mucho, es importante para nosotros…-lo acompaño Eun…
-Todos iremos…-dijo Teuk-Le hemos hablado de ti, tenía muchas ganas de conocerte…
-Y quién es?-pregunto llevándose otra cucharada de cereal a la boca…
-Es un niño adorable, se llama Henry…-contesto Siwon…
-A ti todos te parecen adorables Hyung…-el otro hizo un puchero que no iba con él al oír a Kyuhyun decir aquello…
-Iras o no niño del mal…-Le pregunto Heechul…
-Estoy cansado…
-Vamos Kyu….solo un ratito…-Wook junto las manos a modo de súplica mientras le hacía ojitos…
-Bueno, ya está bien…iré…
Todos celebraron internamente por la aceptación del menor y asi se pasaron todo el dia, contándose cosas que no se habían dicho, comiendo piza, viendo la televisión, sonriendo, hablando o simplemente estando en silencio todos juntos.
La noche cayo en nueva vez sobre la ciudad, el frio de la temporada comenzaba a sentirse mientras ellos esperaban en el vestíbulo del teatro a que dieran paso a los asistentes al concierto. Estaba ansioso por ver a ese niño que sus Hyung’s tanto alababan por sus habilidades con el violín, sin duda debía ser muy bueno para que estos hablaran del el a cada momento, incluso le obligaron a pagar por el ramo de flores que le darían al terminar la interpretación.
Comenzaron a ocupar sus asientos de manera parsimoniosa y unos minutos más tarde las luces cambiaron de intensidad para dejar todo a oscuras acepto el escenario donde se presentarían los exponentes. En una hora y media de música clásica vio de todo: violín, chelo, arpa, piano, guitarra, flautas, Saxofones, hasta intérpretes con sus voces; estaba a gusto escuchando todo pero ya estaba más que cansado pero sus amigos parecían cada vez más ansiosos.
-Ya es el turno de Henry…-la voz de Donghae a du lado lo sobresalto un poco ya que este se notaba muy sobre excitado y feliz…
Las luces volvieron a bajar un poco más la intensidad solo para enfocar al piano y a un pequeño montículo un poco alejado de este donde estaba parado un pequeño niño de piel clara, ojos negros y cabellos castaños, que miraba a todos muy sonriente.
-Ese es Henry…-dijo Heechul a su lado, y luego vio como una figura muy conocida se sentaba en el banquillo frente al piano que le asintió imperceptiblemente al pequeño niño y este inmediatamente tomo su posición.
-Ye…Yesung Hyung…-logro articular apenas…
-Ahhh…y ese es, ya lo conoces…pero lo que no sabes es que es la madre del pequeño…-dijo el mayor a su lado otra vez sonriéndole burlonamente…
Coincidencia o destino?; ahora Yesung estaba ahí, sentado en ese banquillo mientras él y su hijo interpretaban la melodía que el en algún momento cantara en su despedida. No podía alejar el pensamiento de haberlo perdido de su mente mientras la canción avanzaba y con aquel sentimiento que estrujaba su pecho sintió la humedad en sus mejillas.
-Me has olvidado?...-pregunto al viento en un susurro casi imperceptible…
-Claro que no…-volvió a decir Hee- La tortuga sigue tan muerta por ti como el primer dia…
Con esas últimas palabras le permitió a su corazón un momento de paz mientras seguía escuchando aquella melodía tan envolvente; no importa si Yesung había tenido un hijo de otra persona, si el mayor lo aceptaba entonces él se haría cargo de ambos, eso si el mayor no tenía a nadie…por lo que rogaba fervientemente.
Una vez la interpretación acabo, Yesung desapareció de su vista de la mano del pequeño Henry tras bastidores, su corazón estaba palpitando descontrolado por la interpretación que acababan de hacer, eso y porque sabía que Kyuhyun estaba allá fuer viéndolos a ambos.
-Omma…estas bien…-pregunto Henry al verlo tan pálido…
-Sí, es solo que no debe tardar…
-No quieres encontrarte con appa?
-Claro que quiero…-beso sus cabellos-Porque no le traes a Omma un poco de agua…
-Está bien, pero siéntate…-el menor lo dejo una vez que estuvo sentado solo para asustarse más al sentir como era sostenido por los hombros desde a otras.
-Sigues igual o más deslumbrante que hace trece años Hyung…
-Tú sigues dándome los mismos sustos…
-Algunas cosas nunca cambian…-murmuro en su oreja haciendo que un escalofrío le recorriera el cuerpo…
-Ha cambiado tu amor por mí?-pregunto con temor y el otro solo lo güiro para verlo mejor…
-Dime, ha cambiado tu amor por mí?-solo con una mirada, una sola para saber que lo que una vez sintieron no importando el tiempo ha sobrevivido.
Sin dudarlo un segundo sus labios se encontraron con una desesperante necesidad que hiso a ambos jadear al encontrarse, porque nunca se olvidarían, porque es imposible, porque están hechos el uno para el otro como una pieza única e irremplazable.
-Dejen sus besuqueos delante de su hijo….que cosas le están enseñando a esta edad….-grito Donghae indignado y al separarse vio como le tapaba los ojos a Henry que trataba de quitarse las manos del otro de sus ojos…
-Hyung, déjame ver a mi appa…-protesto el pequeño haciendo a Yesung sonreír…
El mayor lo soltó y Henry lo miro con un puchero adorable y las mejillas infladas para luego correr hasta donde estaba Yesung sin mirarlo, solo con la mirada fija en Kyuhyun que también se la devolvía solo que más confundida.
-Tu cabello es más oscuro ahora…-dijo mientras paseaba sus manos por el cabello de Kyuhyun-Omma dice que antes era como el chocolate.
-Qué?
-Omma dice que me parezco más a ti y me mostro una foto porque no le creía…-ahora le acariciaba la cara lentamente mientras sonreía. Kyuhyun solo podía mirar al niño perdido en sus mimos sin entender nada.
-Hyung…Que?-dijo en voz baja mirándolo mientras tomaba la mano de Henry entre las suyas…
-Es caprichoso como tú, le gustan los video juegos, y las tortugas; la música es su única pasión…-dijo limpiándose las lágrimas-Le gustan los dramas históricos también, que le den mucha atención y lo mimen. Es muy inteligente y el número uno en su salón; no le gusta que lo manden o que lo mangoneen, es muy divertido y le gusta el baile…
-Y los perros Omma…
-Y los perros…-dijo sonriendo…
Como podría interpretar la alegría que se instaló en su corazón….
Como expresarla?...el caso es que estaba ahí….una felicidad latente que lo embriagaba por completo como ninguna otra…podía pedir más?....
Tal vez el destino de ambos estaba marcado por las lágrimas…
Tal vez hubiera hecho caso a la canción y no volver a encontrarse…
Tal vez nunca debieron conocerse….
Pero él hubiera como el tal vez no existe…pero ni futuro ni el destino estaban escritos en piedras…