OnMinHo.
Algo día siguiente el joven Choi se removía en su cama, molesto por el insistente sonido de la alarma del despertador. Refunfuñando se reincorporó y tomó su móvil, presionando un par de botones para así acallar el aparato. Un suspiro hondo y prolongado salió de sus labios al darse cuenta de que la cama de su amigo estaba desocupada y sin hacer, seguramente porque no logró dormir el resto de la noche.
—¿JongHyun?.
Cuestionó un adormilado MinHo que se encaminaba por el único pasillo de aquella casa que daba hacia la sala de estar, buscando con la mirada a su amigo. No llevaba más que sólo el pantalón de pijama de tela suave y blanca, realmente a los jóvenes no les incomodaba al desnudez que podía mostrar su compañero.
—Estoy en la cocina, Choi. Más te vale estar listo, las clases comienzan a las 8h, el desayuno ya está listo.
Respondió un muy animado JongHyun, todo a causa del ejercicio matutino.
MinHo al escuchar al mayor se miró de pies a cabeza, antes de dar media vuelta y correr hacia el baño.
Treinta minutos más tarde, ambos jóvenes se encontraban de camino hacia el instituto que no quedaba a más de dos cuadras de su casa, cosa que MinHo agradecía enormemente, era perezoso para levantarse temprano.
Se detuvieron en la entrada del recinto a esperar a sus amigos, los cuales llegaban en bus escolar y otros en sus autos. Fue entonces cuando los vieron..
OffMinHo - OnKey.
—TaeMinnie, ¿ya estás listo?.
Una voz masculina, aunque suave, se escuchaba a través del teléfono. Un perfectamente arreglado Kim Kibum hablaba a su mejor amigo de la infancia, Lee TaeMin.
—Si, hyung, lo estoy.
Respondió un agitado Tae que corría de lado a lado. Sabía que su hyung no tardaría en pasar por el, y no quería molestar al mayor por no encontrarse listo para partir hacia el nuevo instituto.
—No quiero llegar tarde el primer día que clase, bebé. Bummie te quiere, hablamos al rato.
Cortó la línea y se dirigió hacia el comedor, encontrándose ahí con sus padres. Realizó una venia ante ambos adultos, para luego acercarse a su madre y besar una de sus mejillas.
—¿Nervioso, cariño?.
Preguntó una cariñosa madre a su único hijo. Lo observaba con una sonrisa llena de ternura y orgullo, mientras pasaba una de sus manos por los amarillos cabellos de Key, quien ocupaba la silla junto a ella.
Una hermosa sonrisa por parte del menor fue la respuesta suficiente.
Minutos más tarde se encontraba fuera de la casa de TaeMin tocando una y otra vez la bocina de su automóvil, hasta que por fin un agitado chico de cabellos castaños y tes blanca, salió de aquella mansión.
—Mira la hora, te dije que debías estar listo. Como lleguemos tarde me conocerás, Minnie.
—Lo siento, umma. Me retrasé solo un poquito.
Respondió con noto suave y tierno el menor, tratando de persuadir a su amigo para que no lo siguiera regañando. Besó la mejilla del mayor y su trabajo se vio recompensado con una sonrisa por parte del mayor. Puso el auto en marcha y se dirigieron al establecimiento.
Un emocionado Key descendía de su lujoso automóvil, esbozando una amplia sonrisa de suficiencia. Observaba a todos los demás como si no fuesen dignos de mirarlo, claro, él era una diva. Sin importar a donde fuese, adoraba llamar la atención de los demás.
—Vamos TaeMin, hay que conocer muchachos.
Una pequeña risa por parte del menor, además de un sonrojo en sus mejillas, fue todo lo que Key consiguió con su comentario, aunque Tae sabía que hablaba en serio. Hace unos años, ambos jóvenes se habían confesado entre sí su preferencia sexual, y desde entonces, las noches de fiestas en discotecas para homosexuales y los comentarios de su mejor amigo, no cesaron.
—Vamos umma.
Ambos chicos caminaban hacia la entrada del lugar, observando sin mucho interés a su alrededor, más se fijaban en los chicos que pasaban por al lado de ellos. La mirada de Key se fijó en un chico de ojos oscuros, al igual que su cabello. Iba vestido de ropa negra, aunque no parecía tan alto, pero podía notar su cuerpo formado a través de la ajustada camiseta que portaba, y al parecer el no pasaba desapercibido para aquel muchacho, ya que él también se había detenido a observarlo.
OffKey - OnJongHyun.
—¿Quién es ese?.
Cuestionó un interesado Jonghyun a su amigo, aunque éste parecía más interesado en observar a las chicas que pasaban por ahí. JongHyun no podía dejar de mirar al hermoso chico de cabellos rubios y ojos felinos, le parecía realmente atractivo, aunque él no se consideraba homosexual; nunca había salido con un chico o fijado en uno, pero aquel muchacho había despertado su curiosidad.
La campana sacó al mayor de su trance, haciendo que desvíe la mirada hacia el edificio que era el instituto, notando que todos iban ingresando más de prisa. Para cuando volvió a mirar al joven de ojos felinos, éste ya no estaba ahí, seguramente se había introducido en la multitud de estudiantes que ingresaba.
—Al parecer éste año no será tan aburrido, eh JongHyun.
Comentó MinHo a su amigo, aunque éste no estaba tan interesado en escucharlo y menos en saber lo bueno que tenían el trasero las nuevas estudiantes, su atención y curiosidad estaba centrada en aquel chico con aires de superior.
—Vamos MinHo, tenemos que ir a clases o nos reprenderán por retraso.
MinHo notó que su amigo estaba distraído, pero no hizo preguntas sobre el tema.
Ambos se encontraban en la entrada del salón de clases; MinHo siguió derecho hasta un asiento desocupado en el fondo, mientras JongHyun se volvía a quedar hipnotizado por la presencia de aquel joven en el salón. "¿Seremos compañeros?"; se cuestionó a sí mismo mientras observaba al joven.
Un carraspeo de garganta lo hizo alarmarse; el profesor se encontraba tras de JongHyun tratando de ingresar al salón.
—¿Me permite joven Kim?, quiero dar mi clase.
—¿Eh?, claro, claro. Lo siento.
Hizo una venia hacia el profesor y luego se adentró en el aula, aunque volvió a detenerse al notar que no habían asientos disponibles; "carajo", pensó. El único asiento disponible era junto al chico de cabellos rubios. Tragó con algo de esfuerzo y se dirigió hasta ahí; "Tranquilízate, pareces idiota", se reprendió a sí mismo mientras tomaba asiento. Miró a su compañero de banco, quedándose en sus ojos más de lo normal; "¿Por qué no puedo dejar de mirarlo?", se cuestionó a sí mismo; "Eres.. hermoso", pensó, logrando ponerse un poco nervioso, por lo que tomó una gran bocada de aire.
OffJongHyun - OnKey.
Todos parecían agradables, aunque a Key no le interesaba en lo más mínimo ser amigo de todos, sólo de los precisos; aquellos que llamaban populares.
Se encontraba sentado en uno de los bancos del centro del aula, esperando a que llegase el profesor, cuando una mirada puesta en su persona le hizo alzar la cabeza y fijarse en la puerta; "de nuevo tú", se dijo a sí mismo al notar al chico de cabellos oscuros en la puerta. Aquel chico comenzaba a ponerlo nervioso, la forma en que lo miraba, y bueno, él tampoco podía negar que lo miraba de igual forma.
Un parpadeo y el chico se encontraba caminando hacia él; "Que no se siente conmigo, por favor, que no se siente conmigo". Un par de segundos y el joven JongHyun se encontraba sentado a su lado, y nuevamente no podía dejar de mirarlo; era realmente atractivo. Su mirada descendió hacia los labios del joven y notó como éste inhaló con fuerza, haciendo que sus labios se separen. Tuvo que apartar la mirada y volver a mirar al frente para así ocultar su sonrojo, nadie merecía ver a Kim Kibum sonrojado; "Concéntrate Key", pensó.
OffKey.
El día avanzó sin muchos sucesos. JongHyun y Key trataban de mirarse lo menos posible, sabían que podían perderse en los ojos del otro, y para ambos eso era debilidad, cosa que no estaban dispuesto a mostrar. El final de las clases se anunció por el sonido del timbre, logrando sacar un hondo suspiro de todos los alumnos.
JongHyun fue el primero en abandonar el aula, debía prepararse para ir a "trabajar", o eso le decía a su amigo MinHo, pero no era eso lo que realmente hacía.