Como era posible que el destino fuera tan cruel con los que menos se lo merecían, era un día tranquilo en la mañana estaba tratando de pensar acerca de que planeaba él pues eran muchos los peligros y aún no estaba listo para enfrentarse a un miembro del shichibukai del calibre de crocodile pero mis planes tenían que ser con la ayuda y opinión de mi comandante así que fuimos al restaurante más famoso de por ahí cuando menos nos dimos cuenta él estaba junto a nosotros con el chico narizota y mucha agua del susto los dos nos escupieron la mayoría del agua que tenían en la boca y salieron corriendo, sin pensármelo dos veces salí pitando detrás de ellos no podía creerlo siempre me lo encontraba en los lugares menos esperados, si era verdad que lo estaba siguiendo pero muy rara vez podía encontrarlo en el mismo lugar pues siempre llegaba antes o yo llegaba después, esta vez no pensaba perderlo de vista corrimos por muchas calles y ellos llevaban una muy buena delantera pero en un giro de calle cada quién se encontró con los suyos yo de frente con mis marinos y ellos con los demás de su tripulación aquellos que tenían el preciado tiempo y toda la atención de su hermoso capitán Monkey D. Luffy.
Desde aquel primer encuentro en Grand Line me llamo la atención un pirata que de la nada había salido en búsqueda con una recompensa bastante gorda y con el mito de haber derrotado a cinco o seis piratas grandes pero eso no era lo único tenía un encanto sin igual una sonrisa inocente, la fuerza de voluntad de un dios, una fuerza física impresionante y por lo visto un gran sentido de el humor (eso o era muy idiota y creo que un poco de ambas).
Tuvo mucho valor cuando me reto en mi propio territorio tomando el lugar donde fue ejecutado el "rey de los piratas" le he dado caza desde entonces y no me arrepiento pero ahora mismo en arabasta me doy cuenta que sus intenciones puedes ser muy oscuras pues no es normal que un pirata piense en la posibilidad de enfrentarse sólo a crocodile no por que le tuviera miedo pero el si era alguien que si no lo respetabas te mataba o te hacia respetarlo por la mala claro esta que no quisiera que terminara así en algún momento pues aquel que quería atraparlo para tenerlo y si era posible conquistarlo, que me respetara y que me quisiera, era yo.
Seguimos corriendo detrás de ellos esta vez todos los marinos que se podían contra toda su tripulación y la princesa de arabasta, en cierto momento llegamos a la calle principal donde se separaron, no me importaron los demás yo solo iba por el chico, brinco a un techo y para no perderlo subí en forma de humo intente rodearlo y ya lo tenía ¡por fin lo tenía! Pero sin más se inflo, se expandió, engordo o como le quieran llamar el punto es que disipo toda mi existencia de su alrededor y caímos.
Eso no me detuvo lo perseguí hasta que mis sospechas quedaron confirmadas y se reunió con los demás de su tripulación y todos juntos tratando de huir de mi corrieron al interior del casino dirigido por crocodile, esto se estaba poniendo peligroso pues si ellos ya eran parte de sus aliados ya no tenía muchas esperanzas de que su capitán pudiera tener espacio para pensar en mi, corrimos y corrimos hasta que en el casino nos enviaron a la zona VIP era muy sospechoso cada vez que veía como era tratado con atenciones más celoso y preocupado me ponía, pasamos un último giro y llegamos a un callejón sin salida ¡mierda, era una trampa! Se abrió el piso ante nosotros y lo último que pensé fue en su seguridad me hice humo y lo alcance mientras caíamos lo abrace y retuve el impacto de la caída luego me pare (con dolores pero no quería que viera quien había sido) y analice que había pasado pues estábamos en una jaula de la marina donde ni el ni yo podíamos hacer nada entonces me concentre y vi que erróneamente había pensado que era toda su tripulación pues hacían falta dos de ellos y la princesa.
Esperando que los demás volvieran en sí me senté en una parte de la jaula y mire y escuche todo.
-¿dónde estamos?-era la clásica pregunta que se escuchaba de alguien inconsciente que acababa de despertar así que más o menos lo escuche otras dos o tres veces.
No me importo habría dado todo lo que tenía por sacar a esos que sobraban en la jaula eso incluía al tipo verde (que no me gustaba que siempre le tenía mucho aprecio a Luffy) al narizota y a la chica esa, me hubiera gustado que sólo cayéramos los dos para así estar juntos y posiblemente hacerlo mío por fin tratándolo como a una joya y haciendo que disfrutara hasta el último momento, pero como bien dije al principio el destino es cruel con los que menos se lo merecen (eso lo digo por que todos mis años los he pasado al servicio de la marina y ayudando al pueblo y justo cuando deseó ser feliz me enamoro de un pirata que no tiene ni la más remota idea de que lo que siento hacia él no son ganas de atraparlo y llevarlo ante la justicia, más bien me gustaría atraparlo y llevarlo a mi cama)
-me siento maaaaaaal- se quejaba.
-ha de ser por que tienes hambre- otro de sus pasatiempos: comer.
-nooooo, me siento débil- ah ya entendía pues ellos no sabían lo que pasaba en la jaula, mejor les muestro.
Golpee a su capitán con el "bastón" hecho del mismo material que el de la jaula, inmediatamente todos se pusieron a la defensiva excepto el capitán que por obvias razones no se podía ni parar y para que se calmaran les explique:
-Las jaulas de la marina están hechas con un material que inhibe los poderes de las frutas del diablo, el mismo que trae mi "bastón" y por ello se siente débil y no se puede escapar de este tipo de jaulas sino ya hubiera salido de aquí hace rato.- una vez les dije eso volví al rincón en el que estaba y los otros se calmaron.
Empezaron tanto a entrar en terror como a hacer conjeturas muy inútiles después de eso crocodile apareció y explico ante todos lo que planeaba hacerle a arabasta luego de eso me volteo a ver y me dijo:
-Tú nunca me viste como un aliado a pesar de tener el permiso y la ayuda del gobierno así que me alegró que estés aquí.
-Pues de todas maneras no eres mi tipo eres demasiado asqueroso e inútil.- en estos momentos solo quería molestarlo.
-Mmmmm... Que mal pues tu sí eras mi tipo.- todos y repito TODOS en la jaula nos sorprendimos la verdad jamás pensé que un hombre se me declararía (pues sí me había enamorado de Luffy pero jamás me había puesto a pensar en otros hombres) -tenía una corta esperanza de que te dieras cuenta pero viendo que siempre me viste como un enemigo no se le podrá hacer más claro que siempre puedes cambiar de opinión y quedarte conmigo.
-¡DÉJATE DE TONTERÍAS Y SÁCANOS DE AQUÍ!- que pulmón tenía Luffy he de admitirlo eso me puso un poco feliz
-Bueno pero veo que nuestra invitada especial ya llego.
Tenía razón la princesa había llegado junto con una de las criminales más buscadas en todo el mundo Nico Robin esto se estaba poniendo feo dos de los grandes piratas unidos para destrozar una nación con problemas suena a muuuuchos problemas.
Crocodile seguía con sus explicaciones no le preste atención hasta que llegamos a un punto donde sacó una llave de su bolsillo y reto a la princesa a elegir entre nosotros y todo su pueblo pero claro como estaba atada no pudo ir a tiempo y la llave callo, ahí fue comida por un bananawabi que sonaba como ronco con un gruñido muy grueso y raspado.
-Huy que mal se me callo la lave tal parece que no se va a poder abrir la jaula amorcito- crocodile era un carbón por tratar a la princesa de "amorcito"
-Cállate, y no me digas amorcito, asqueroso- vaya la princesa mínimo tiene pantalones.
-no te lo decía a ti ni te hagas ilusiones, se lo decía a él- me señalo con su dedo y continuo con sus tonterías -si hubieras dicho algo un poco antes te hubiera dejado salir y aquí mismo te tomaría sin ningún tipo de pudor pero ya ves lo que son las cosas.
-Tranquilo puedes estar seguro de que te seguiré muy de cerca una vez que haya salido de aquí- no pensaba dejar que se burlara de mi sin pensarlo me pare y me acerque a los barrotes (sin tocarlos claro esta).
-espero volverte a ver por que justamente esta sala quedara debajo del agua en una hora- paso su brazo por una de las rejas de la jaula y con su garfio en mi cuello me jalo hacia su boca y junto nuestros labios claro que eso no le pareció poco aparte de eso se atrevió a meter su lengua en mi cavidad, se separó de mi y con una sonrisa me dijo: -eso era para que probaras un poco de mi y de lo que te perdiste antes de morir.
Sacó su brazo de la reja y se fue con la criminal por mi parte me limpie los labios y escupieron fuera de la jaula donde no se hicieron de esperar más gritos, más peleas sin sentido, me impresionaba que Luffy no se la pensaba cuando sabiendo las consecuencias intentaba agarrar la jaula para escapar. Después de mucho ajetreo ya con uno o dos bananawabi dentro de la sala y con uno de los integrantes perdidos de la tripulación le Luffy lo escuche claramente era el mismo rugido ronco grave y rasposo de hace unos momentos así que le dije al güerito cejas de Caracol:
-dale al tercero es el que tiene la llave.
-¿cómo sabes eso?- eso que importaba narizota
-¡¿Están sordos o que?! Es el mismo rugido del que se comió la llave allá abajo.
Después de escucharlo Luffy me pregunto:
-¿pero cómo sabes que es ese?- sep en definitiva este chico era muy distraído.
Al final siguieron mi consejo y del bananawabi salió una cosa tipo huevo con un esqueleto viviente (que al final resulta que era Mr. 3) que después de que aventara la llave al agua en medio de otros bananawabi, que se enojar y después de una buena paliza salimos por fin ahora solo faltaba salir del lugar lleno de los monstruos que en menos de tres segundos Luffy y el chico verde habían acabado con ellos pero la tubería no aguanto tanto y término por derrumbarse sobre nosotros ahí fue cuando perdí en conocimiento era seguro que iba a morir no podía nadar y estaba entre el enemigo, ya no tenía esperanza hasta que sentí un brazo a mi alrededor que me elevaba y por fin el aire en mis pulmones, escupí toda esa agua que había tragado por la falta de aire y al no saber como reaccionar hice lo primero que se me vino a la mente fue atacar y preguntar ¿PORQUÉ?
-¿POR QUÉ ME SALVASTE?- al parecer había sido el chico verde
-ESTABA SIGUIENDO ÓRDENES DE MI CAPITÁN. -¿de su capitán? Baje el "bastón" y mire incrédulo a Luffy todos se fueron corriendo pues tenían que llegar a detener a crocodile pero él se quedo mirándome a los ojos eso hizo que me sonrojara y le dijera: -Los dejare ir sólo esta vez.- y entonces paso Luffy se acercó y con un casto beso en los labios me susurro.
-Gracias- lo vi marcharse con los demás y no cabía en mi regocijo no sabía el por que lo había hecho pero el saber que era él y que sentía algo por mi me hizo muy FELIZ.