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Arachnophobia por KuroAshi_ZxS

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Notas del capitulo:

One Piece es propiedad de Eiichiro Oda, si no quien sabe...

Holas!! perdonenme de verdad _ _ll iba a traer la conti ayer en la noche como les habia prometido, pero tuve una fuerte discucion con mi madre y mi animo esta por los suelos, por no decir otra cosa _ _lll me siento horrible _ _ll Realmente este ultimo tiempo he tenido demasiados problemas, y ya estoy llegando a mi limite. Asi que de seguir asi debere dejar de escribir, lo lamento mucho u.u si les aviso con anticipacion es por si mas adelante no llego a actualizar, me han dicho que necesito ayuda y para hacerlo, me quieren sacar de internet

Por cierto, el lemmon de este cap lo hice algo diferente a las cursilerias que suelo escribir xD cualquier queja o reclamo dirigirse a Elliot, quien me pidio explicitamente que Zoro se cogiera a Sanji...bueno, ya saben como XD

Agradecimientos especiales a: Princezz InuyoukaiChilderika, Hehehe no te lo dire :3, Sakura Hale,kaguraaa, joss, Elliot yPortgas D Arely, muchas gracias por comentar >u<

Mil disculpas por las posibles faltas ortograficas y espero les guste n.n

-gra-gracias Zoro…-agradeció en un murmullo, desviando la mirada algo avergonzado al verse en tan penosa situación, sin darse cuenta que le había llamado por su nombre por primera vez en mucho tiempo- hey, marimo ¿podrías pasarme la manta que esta a tu lado? No quiero volver a ponerme mi ropa hasta que la haya lavado-susurro en un tono tímido, intentando cubrirse al darse cuenta que el espadachín le había acabado quitando casi todas sus prendas para poder dar con la pequeña araña-

-yo…-balbuceo Zoro al darse cuenta de la comprometedora situación en la que se encontraba, con el rubio prácticamente desnudo entre sus brazos y a su completa merced. Tragando saliva se acerco mas a él, rozando su cuerpo contra el suyo- yo…-repitió, sin saber que decir, dándose cuenta que un momento como aquel no volvería a repetirse en lo que le quedase de vida-yo…te amo Sanji…-

Xxxxx

Parecía que el tiempo se había detenido entre ambos, creando una atmosfera tensa e incómoda que poco a poco empezó a poner nervioso al espadachín. Sin poder soportarlo más agacho su cabeza frustrado, reviviendo en su mente la expresión desencajada que había teñido el rostro del rubio cuando, finalmente, aquellas palabras que por tanto tiempo había guardado en su corazón salieron de su garganta en un susurro.

Sorprendido, sintió como en vez de golpearle, Sanji le encerraba en un cálido abrazo sin importarle lo mas mínimo la situación en la que se encontraba, acariciando su corto cabello verde mientras dejaba que reposara su cabeza en su desnudo pecho. Con los ojos amenazando por escapar de sus respectivas cuencas subió la mirada hasta toparse con el rostro sonrojado del oji azul, quien le miraba cariñosamente como nunca lo había hecho antes.

-yo también te amo, Zoro…-susurro en su oído con un tono cariñoso, acariciando sus mejillas con suavidad- pero creo que fui un cobarde, temía mostrar mis sentimientos hacia ti…y es que eres tan cálido, idiota…desde aquella vez en Skypea, supe que me había enamorado de ti- su rostro también se tiño de un suave rojo, mientras el espadachín se incorporaba y esta vez le encerraba entre sus brazos- fu-fuiste el primero en aceptarme, por eso creo que yo…-

Todas sus palabras se ahogaron en su garganta, sintiendo como el moreno besaba furiosamente sus labios, ya sin poder contenerse un segundo más. De un segundo a otro se encontró de espaldas al suelo, sintiendo como el espadachín recorría su cuerpo con sus manos; provocándole placenteros escalofríos que le hicieron temblar impaciente, gimiendo entrecortadamente ante las sensaciones que el chico le brindaba.

-ngh ma-marimo mmm-jadeo mientras mordía sus labios, intentando acallar su voz- ¿Qué...?-susurro al ver como este empezaba a quitarse su ropa con cierta prisa pero sin brusquedad, quedando embobado prácticamente al instante-

-ya luego podremos hablar de ese tema con más calma, ahora tenemos cosas más importantes que hacer ¿no crees, mi cocinerito?-comento suavemente mientras acariciaba con el dorso de su mano una de sus mejillas, sonriendo ladino al ver como estas enrojecían fuertemente ante el contacto- no te preocupes Sanji, yo me encargare de quitar la sensación de esa molesta araña en tu cuerpo ¿te parece?-murmuro con un tono ronco, paseando nuevamente sus manos por el torso desnudo de su acompañante al ver como este asentía con rapidez-

Poco a poco y con una destreza desconocida, el peli verde empezó a recorrer el cuerpo del cocinero a base de lametones, mordidas y besos esporádicos. Marco con algo de fuerza su cuello un par de veces, deleitándose al oír el coro de gemidos que Sanji le regalaba; recorriendo curioso sus hombros y brazos para luego entretenerse durante unos momentos en sus pectorales que, para su éxtasis, estos estaban mucho más trabajados y perfectos que antes.

-Zo…Zoro ahhh-le llamo mientras veía como el peli verde se entretenía en su cuerpo, pasando de su torso a sus piernas y arrancándole de paso algún que otro gemido mal contenido-Zoro mmm- repitió al sentir como, finalmente, empezaba a retirar su ropa interior-

-me pregunto si la araña paso por aquí también-comento inocentemente, bajando su cabeza hacia su entrepierna mientras la miraba con algo de curiosidad, viendo como ya se encontraba algo húmeda por el liquido pre seminal-

Sin dudas ni contemplaciones, el espadachín hundió en su cavidad bucal el miembro del cocinero, moviéndose con rapidez hasta sentir como el rubio empezaba a derretirse entre sus brazos. Pero aun así, no era suficiente.

Zoro quería mas, quería escucharle gritar de placer, de hacerlo perderse una y otra vez en sus besos, en sus caricias, en cada mínimo roce que pudiese brindarle a aquel cuerpo que ahora se encontraba bajo su completa merced. El tiempo no pasaba en vano, y la abstinencia que había tenido desde el momento en que se había dado cuenta de sus sentimientos finalmente había llegado a su límite.

Dudaba que pudiese seguir controlándose con el cocinero así, bajo sus brazos…

Cerró los ojos al sentir como un líquido espeso y caliente empezaba a bajar por su garganta, tragándolo con lentitud. Sonrió suavemente al sentir a Sanji jadear por el reciente clímax, abriendo los ojos y relamiendo sus labios ante la escena que se presentaba ante su lujuriosa mirada: el oji azul completamente desnudo, gimiendo su nombre entrecortadamente con su piel perlada por el sudor.

Ya sin poder soportarlo un segundo mas y dejando a un lado los juegos preliminares tomo al chico entre sus brazos, poniéndose de pie mientras le recargaba contra la pared y besaba sus labios con furia; sintiendo como Sanji correspondía torpemente el contacto y rodeaba su cintura con sus piernas a la vez que su cuello con sus brazos.

Aprovechando la posición en la que ambos se encontraban, el moreno bajo una mano hasta el trasero del cocinero, empezando a juguetear con su entraba mientras introducía un dedo en su interior; disfrutando de las reacciones que provocaba en el oji azul.

-marimo ahmmm-susurro en su oído mientras jugueteaba con sus pendientes, sintiéndose nuevamente a punto y deseoso de pasar a la siguiente fase- no es necesario que ahh te contengas, no me mmm romperé tan fácil…-

Pero sin saberlo, con aquellas simples palabras el cocinero había desatado una bestia.

De un segundo a otro el peli verde ya se encontraba penetrándole con fuerza, haciéndolo gemir hasta sentir su garganta seca y cansada. Sus embestidas, cada vez más bruscas y certeras, lograban dar en su punto una y otra vez, haciéndole retorcerse entre sus brazos hasta que acabaron ambos en el suelo; con Zoro arriba del cocinero penetrándole con el mismo ritmo sin mostrar siquiera signos de cansancio.

Sanji, por su parte, estaba por llegar a su límite. El placer que sentía en aquellos instantes era enorme, sintiendo como con cada estocada era capaz de llegar al cielo por unos instantes. Y es que para él, desde el instante en que Zoro se había declarado, había alcanzado el verdadero paraíso.

El simple hecho de sentir al espadachín jadeando su nombre en cada embestida, abrazándole con fuerza contra su pecho como si temiese que al terminar todo acabaría entre ambos.

Ahogo un grito en sus labios al sentir como el moreno le daba vuelta, quedando recargado sobre sus rodillas mientras este le penetraba con aun más fuerza, sujetando sus caderas hasta dejar marcas en su pálida piel. Ya sin poder resistirlo más, ambos gritaron por última vez antes de caer rendidos al suelo, aun manteniéndose unidos y abrazados mientras Sanji sentía como el peli verde besaba suavemente su cuello, lamiendo las marcas que el mismo había hecho antes.

-¿ya te sientes mejor?-pregunto con sorna el espadachín, haciendo alusión al incidente con la pequeña araña mientras salía con cuidado de su interior, abrazándole contra su pecho-

-tú solo te aprovechaste de la situación, marimo malo-contesto el rubio mientras inflaba las mejillas, intentando parecer indignado- no importa, después de todo si te tengo conmigo cada vez que haya una plaga en el barco, no tengo nada que temer- sintió sus mejillas arder con fuerza al escuchar como Zoro reía quedamente, besando su frente con cariño mientras acariciaba su cabello con ternura-

-no tienes nada de qué quejarte, después de todo tu también exageraste un poco cuando te encontré asustado en la cocina ¿o me equivoco?-la sonrisa de triunfo que apareció en los labios del cocinero le dio la respuesta, sonriendo también al notar los esfuerzos que hacia su cocinero para acercarse a él a pesar de su orgullo y de la vergüenza que debía sentir cada vez que le veía en una situación como aquella- por cierto, cook…-

-¿Qué quieres, marimo?-murmuro adormilado Sanji, acurrucándose en el torso de su amado mientras cerraba los ojos, dejándose vencer ante el mundo de los sueños-

-tienes una araña en la cabeza…-susurro con una gota tras la nuca, viendo como una pequeña araña se movía por los lacios cabellos del cocinero y este, aterrado, se ponía de pie mientras intentaba quitársela sin resultado alguno-

Así fue como encontraron a los chicos la mañana siguiente cuando volvieron al barco el resto de la tripulación: un enfadado Sanji cocinando mientras fumaba sin parar, con evidentes marcas de chupetones y mordiscos en cada parte visible de su cuerpo y a un Zoro estampado contra cubierta, con un enorme golpe en su cabeza y tan solo cubierto a medias con su abrigo.

Ninguno de los dos había dicho algo respecto a aquella extraña situación, pero tampoco nadie había preguntado. Solo aquella noche, luego que viesen por casualidad como el rubio saltaba a los brazos del espadachín luego de la cena al ver como un par de arañas se encontraban en la puerta, habían sido capaces de entender lo que realmente sucedía allí.

Y aunque los años habían pasado y el miedo del cocinero no había desaparecido, siempre había contado con el peli verde para sentirse a salvo donde quieran que fuesen. Porque después de todo Zoro había aprendido que la fobia a las arañas no era tan malo como parecía, mas si cierto rubio era quien sufría del miedo a ella…

¿The End?

Notas finales:

Espero les haya gustado y sus rew XD cuidense y gracias por apoyarme en este pequeño fic >u< nos vemos en la proxima minna san! .w./

Nos Leemos!!! x33

Kuro-Chan!!!


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