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Project 1004 por ritsuka10

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Un pelirrosa caminaba molesto por la calle, el vestuario que utilizaba no era el más cómodo, simplemente odiaba esos "detalles" de su trabajo, esta era su quinta cita, simplemente nunca pensó que esa actividad se volvería algo rutinaria pero tenía demasiadas deudas, su matrícula en la universidad, la deuda acumulada con el prestamista del barrio, un joven de 19 años no tiene una vida sencilla menos cuando se está solo en el mundo, llego al club donde se encontraría con su cliente, llego diez minutos antes ya que primero le echaría un vistazo, hasta el momento le había tocado suerte, sus clientes fueron amables, dulces, pero recordaba las palabras de uno de sus amigos, Key, quien lo metió en ese negocio, "Hay unos tipos demasiado enfermos" parecía que ahora le tocaba conocer uno de ellos, iba vestido de chica, fue algo denigrante pero le habían prometido una paga extra, su cabello rosa, su cara blanca como papel y su piel suave le ayudaron a parecer una autentica chica, de hecho desde el momento que entro se comportó como una, odiaba hacer eso pero era la única forma de obtener dinero fácil, suspiro resignado, levanto la barbilla era un guerreo que no se dejaría deprimir por idioteces, solo era un trabajo más, tomo asiento en la barra donde pidió un refresco debía estar alerta para la llegada de su cliente se miró en el espejo de la cantina, era hermosa, bueno hermoso, fácilmente engañaría a cualquier individuo.


—Espero me dé una buena paga extra. —Dijo a si mismo sonriendo melancólicamente. —Lo bueno que nadie sabe que me dedico a esto.

—Hola preciosa ¿puedo acompañarte? —Un refrescante aliento se apodero del oído del menor quien se estremeció por el tono tan grave que usaba ese hombre. —Tu cabello parece un melocotón, tan rosa y ondulado.

¡Bingo! Se dijo mentalmente el menor, esa era la palabra clave, se giró para mirar a su dueño por la próxima hora, se topó con un hombre de cabello corto color negro, sus facciones eran varoniles, su sonrisa dejaba ver unas encías que le pareció extremadamente sexi, soltó una tímida sonrisa, era muy guapo, provocaba que sus piernas se derritieran como nieve en pleno verano, “Concentrarte JunHong solo es un cliente más” se reprimió mentalmente, quito su bolso del otro banco permitiendo que ese galante joven lo acompañara.

—¿Qué tomas hermosa? —Cuestiono el pelinegro colocando su mano en la pierna de la “chica”. —¿Esperas a alguien?

—Una soda por favor. —Contesto pestañeando coquetamente abriendo un poco las piernas dándole acceso al mayor. —A ti.

El mayor ordeno un par de copas de Champan puso una en las blancas manos de su presa, obligándola a beber después sin previo aviso “la” tomo por la mejilla para besarla, se apodero de sus labios como un lobo hambriento, introdujo su lengua comprendiendo que la “chica” no era tan inocente como aparentaba ya que contesto con la misma emoción, se puso de pie para pegarse a ese cuerpo que continuaba sentado en el banco, se puso en medio de sus piernas para hacer el beso más profundo.

—¿A dónde quieres ir? —Pregunto dulcemente “la” pelirrosa adentrando sus dedos debajo de la camisa del mayor. —Hay un hotel cerca de aquí.

—Wow me encanta que estés preparada pero iremos a mi auto. —Respondió el mayor tomando un botella de champan y las dos copas. —No me agrada ir a lugares desconocidos con personas extrañas.

El pelinegro jalo a “la” joven quien ya estaba un poco “mareada”, JunHong no estaba acostumbrado a tomar alcohol, miró que todo su alrededor daba vueltas pero también detecto como la gente le abría camino “Tal vez ya estoy muy ebrio” se dijo así mismo sonriendo de pronto el tacón de uno de sus zapatos se atoro provocando que se desbalanceara cerro los ojos esperando la eminente caída pero un brazo en su cintura lo ayudo a sostenerse, se giró hacia su salvador colgándose de su grueso cuello.

—Mi héroe. —Dijo en un susurro pegando sus labios. —Mi guapo salvador.

Bang le dedico una coqueto guiño contestando el beso, él no hacia ese tipo de cosas, no se iba con la primera chica que se encontraba pero sin duda “esa” joven de cabellos rosas capto su mirada desde el momento que entro al Bar, su altura, su piel, sus ojos enormes y brillantes lo habían hechizado, “¿Amor a primera vista?” se cuestionó pero negó con la cabeza, no creía en esa basura barata que las personas se inventaban para no estar solas, él era un lobo solitario que adoraba sus negocios, le fascinaba ser quien era, no necesitaba a una mujer a su lado para sentirse completo, solo le interesaba el sexo, era para lo único que necesitaba al sector femenino en su vida, no es que fuera homosexual, claramente el heredero de los Bang nunca se fijaría en un hombre, tenía claramente definido sus preferencias y simplemente un varón no le causaba ninguna atracción tampoco solía jugar con las humanas pero esa “pelirrosa” había despertado su instinto, levanto sus dedos tronándolos, de un momento a otro una fila de hombres se puso delante de él.

—Me iré en mi auto tienen prohibido seguirme. —Ordeno el líder abrazando por la espalda a “la” pelirrosa, el grupo de hombres solo asintieron. —Estaré ocupado esta noche.

La fogosa pareja camino entre los autos devorándose sin piedad al llegar a la meta “la” palirrosa fue lanzada en el asiento del copiloto mientras que el pelinegro subía del otro lado, Yong encendió el auto para dirigirse a su departamento, moría de ansia por poseer a “esa hermosa chica”, sus piernas lo volvían loco, su cuello era adictivo, salieron del estacionamiento miró el espejo retrovisor asegurándose que nadie lo seguía trato de calmarse de pronto sintió como unas manos se colaban en sus pantalones observo a su “compañera” quien ya estaba “entretenida” en sus ingle, no soporto más así que se estaciono en un callejón vacío apago el auto para tomar el rostro de “la” joven y devorar sus labios.

—Nunca había estado con alguien que me prendiera en solo unos minutos. —Hablo con voz ronca el mayor. —Te puedes convertir en mi favorita.

—Cariño me convertiré en tu vicio. —Contesto “la” pelirrosa pasándose al asiento trasero. —Sabrás que invertiste correctamente tu dinero.

Bang no entendió la última frase pero no se detuvo analizarla cuando unas manos lo arrastraron a la parte trasera, se colocó en medio de sus piernas, mordió su cuello con deseo, sus manos se deslizaron por debajo del vestido hasta acariciar sus suaves muslos lentamente fue subiendo hasta que llego a cierta área donde claramente detecto algo fuera de lo común, esa chica de cabellos rosas, tenía un “paquete” un aire frio se coló por su espalda congelándolo en un segundo.

—¿Qué te pasa? —Cuestiono el menor al notar que las caricias se habían detenido. —¿Hay algo que no te guste? ¿Quieres que sea el activo?

—¿QUE DIABLOS ERES TU? —Grito furioso el mayor sentándose y arrancando la parte superior de vestido, —Eres un maldito marica.

JunHong se puso más blanco que de costumbre observo como su pecho blanco y plano era revelado, se indignó por la última frase dicha por su cliente, se sentó tratando de arreglar su rota vestimenta.

—Ambos somos maricas, tú pediste a un chico vestido de chica así que yo cumplí con mi parte de trato. —Le contesto indignado. —Si eres un gay de closet no es mi problema yo solo hago mi trabajo.

—¿De qué diablos hablas pedazo de idiota? Yo no hice ningún trato contigo. —Pregunto colérico el pelinegro quien se trataba de abrochar el pantalón, su excitación había decaído. —¿Crees que soy un marica que contrata servicios de otro marica?

YongGuk tomo por el cuello al menor, nadie insultaba la hombría del gran Bang Yong Guk, miles de mujeres hacían fila por estar en sus brazos, nunca pagaría por tener una compañía y mucho menos por la de un hombre, su furia se desato, levanto el puño para estamparlo en ese chico pero al fijar su mirada en esos enormes ojos el remordimiento apareció, le enfadaba pero tampoco quería lastimarlo.

—Fuera de mi vista sino quieres que te mate. —Le grito soltándolo del agarre. —Anda fuera de mi auto.

—No me iré hasta que me pagues. —Se enfrentó valerosamente el pelirrosa. —Me debes los besos, las caricias, recuerda que debes pagar una parte por la cita están en las cláusulas del contrato.

JunHong ya había perdido la noche en ese cliente así que merecía una compensación, no se iría de ese lugar hasta obtener algo, su casero ya lo tenía fichado ya que debía casi tres meses de renta además necesitaba material para una clase, no podía regresar con las manos vacías, le aterraba ese chico pero no se iría sin algo de dinero.

—Mira tarado no voy a pagar por unos simples besos. —Bufo molesto el mayor saliendo del auto. —No es mi problema que te equivocaras de cliente.

—Pues podemos terminar lo que comenzamos. —Rogo el pelirrosa aferrándose de los asientos al notar que el mayor lo comenzaba a jalar. —Te estaba gustando.
Bang jaló de una pierna al rebelde mocoso obligándolo a salirse de su auto, se avergonzaba al solo pensar que había besado a un hombre, a un humano, era la primera vez que caía tan bajo, nadie de su clan se tenía que enterar de eso, jaló con más fuerza pero el chico seguía aferrado a los asientos claramente era más fuerte así que de un tirón lo sacó provocando que callera al piso.

—Puedes cerrar los ojos e imaginar que soy una chica. —Grito con los ojos vidriosos, necesitaba el dinero. —No seas tacaño.

—¿Qué parte de “NO SOY GAY” no entiendes? —Contesto caminando hacia el lado del copiloto. —Nunca pagaría por tener sexo y menos con un hombre.

Zelo se puso de pie al notar que el auto arrancaba se quitó uno de los zapatos lanzándolo tratando vagamente de golpear el vehículo, al notar que había avanzado una notable distancia hizo un berrinche, pataleo molesto, maldijo al hombre de cabello negro que lo había abandonado en ese solitario callejón, trato de cubrirse pero fue en vano, el vestido de la parte superior estaba destrozado.

—Genial ¿Ahora como regreso a casa? —Se reprendió con los ojos aguados. —Odio esto, tendré que hablarle a JongUp.

Bang manejaba molesto por la calle, no podía creer que se había excitado por besar a un hombre, negó con la cabeza ferozmente, simplemente era reverenda estupidez comenzó a escuchar un tono musical horroroso se giró al asiento trasero descubriendo que su “chica” había olvidado el bolso, se detuvo para tomarlo, verificando que ahí estaba la cartera, celular y pertenecías del pelirrosa, “Es un idiota mejor dicho yo soy el imbécil”, miro como en su mano derecha una aura roja se desprendía, esa señal le daba mala espina.

Zelo bufaba molesto, ahora había perdido el poco dinero que tenía, lo bueno es que ya no andaba medio desnudo debido a que había encontrado una bolsa negra entre la basura la cual se puso como camisa a lo lejos observo un auto corrió hacia él para ver si el idiota había vuelto pero al llegar se llevó una desagradable sorpresa.

—Miren lo que me trajo la noche. —Hablo un hombre con peinado de mohicano saliendo del auto. —Zelo, mi prostituto favorito.

—Inati ¿Qué haces aquí? —Dijo en un murmuro el menor retrocediendo con miedo. —Estos no son tus terrenos.

—Nos debes mucho dinero así que hemos venido a cobrarnos. —Interrumpió Simon sujetando de los brazos al pelirrosa. —¿Cuándo piensas pagarnos?

JunHong se removió nervioso no tenía ni un solo centavo en la bolsa, esos tipos se cobrarían como fuera su deuda, ya le habían propuesto muchas veces trabajar en su burdel pero no quería rebajarse a eso, sabía que en “Dalmatian” era un prostíbulo de pésima cálida drogaban a sus empleados para que trabajaran todo el día, no quería perderse en ese mundo.

—Yo te prometo que la próxima semana tengo tu dinero pero por favor déjame ir. —Rogo el menor cuando un sujeto se puso delante de él. —Por favor no me hagas daño.

Fue entonces que el líder de ese grupo lo tomo por la barbilla mientras otro buscaba algo detrás de su oreja, una sonrisa se dibujó en los labios de los hombres,.

—¿Sabes hay alguien que nos dio mucho dinero por llevarte con él? —Dijo el líder con un maquiavélico gesto. —Veamos si tú eres el indicado.

Zelo le dio una patada a su agresor logrando zafarse así que comenzó a correr por la calle, no quería irse con ellos, estaba seguro que lo matarían, no logro huir debido a que otros tres sujetos lo alcanzaron, dos lo tomaron de los brazos y el otro le soltó un golpe en el estómago, uno en el rostro, su alrededor se volvió negro desmayándose automáticamente, lo último que escucho fue una grave voz. Bang regreso al callejón donde había dejado al pelirrosa, el remordimiento extrañamente se había apoderado de su interior, él no solía tener consideraciones con los humanos ya que siempre los considero una especie inferior, miró como el aura de su mano se ponía más roja, alguien de su misma condición estaba cerca, continuo manejando por la calle cuando a lo lejos observo como unos jóvenes rodeaban a un pelirrosa, lo que más llamo su atención fue que de uno de esos hombres un rayo amarillo salía de su mano, “Un pecador” dijo deteniendo el auto del cual descendió mientras una aura de fuego lo rodeaba, una torcida sonrisa se mostró en sus labios.

 

Un par de horas después
Bang miraba por el espejo retrovisor a su pasajero quien iba inconsciente llego a su domicilio donde lo alzo hasta llevarlo a su departamento donde lo recostó en la cama, lentamente le fue quitando la ropa descubriendo que el vestido estaba completamente desgarrado, un extraño calor recorrió su cuerpo al tocar aquella blanca piel, parecía nieve, fría como el invierno, de la punta de sus dedos la aura roja se presentaba pero al hace contacto con ese cuerpo se apagaba y vapor desprendía ese efecto no pasó desapercibido por el mayor quien movía la cabeza curioso.

—Ni siquiera el cabello es real. —Escupió molesto el pelinegro al darse cuenta que el joven llevaba una peluca. —Rubio, te queda mejor.

El mayor camino hacia el baño donde tomo el botiquín y curo las heridas del menor, no podía creer que solo tuviera 19 años, era muy pequeño para tener esa profesión tan peligrosa, le puso una ropa más cómoda para después cobijarlo, lo miró dormir tranquilamente, parecía a un ángel, delineo su rostro inocente, una extraña atracción apareció en su pecho, era la misma que había sentido cuando “la” vio entrar en el Club, se acercó a sus labios dispuesto a tocarlos pero el sonido de su celular lo detuvo, se puso de pie caminando hacia la salida.

—¿Qué pasa? —Contesto cerrando la puerta de su recamara dirigiéndose a la sala. —Quiero que averigüen que misión tenían,

—Casi los matas, por algo eres el jefe. —Hablo una voz cantarina. —Déjamelo a mí, llevaré a estos “pecadores “ante el consejo para que sellen sus poderes.
Bang asintió mientras continuaba dándole órdenes a su subordinado quien no paraba de gritar emocionado.

—DaeHyun este es un trabajo personal no quiero que nadie se entere. —Dijo fríamente el mayor. —¿Entendido?

—Sabes que puedes contar conmigo YongGuk-hyung. —Contesto el rubio. —Por algo soy tu mano derecha.


La llamada se cortó, Bang checo su teléfono de casa notando que tenía muchos mensajes en la contestadora le dio play para escucharlos mientras se dirigía a la cocina para tomar una soda “Soy Natt mamá te busca dice que encontró a la chica perfecta, llámame”, “YongGuk soy tu abuelo sabes la Familia Ho tiene una hermosa heredera perfecta para ti”, “Hermano escóndete nuestra abuela ha decidido hacer una fiesta para encontrar a tu prometida”,”Guk debes elegir una buena mujer para darme un heredero, quiero ser abuelo” “Cariño soy mamá tengo el perfil de varias chicas hermosas ¿Cuándo pasas por la casa y elegimos la mejor? ” el pelinegro se dejó caer en el sillón, estaba cansado que sus padres le buscarán una prometida, deseaba vivir a su ritmo, sin presiones de herederos, simplemente quería ser libre, estaba consiente que por haber asumido el control del clan debía seguir las normas, pero él era el “Jefe” porque le encantaba serlo, suspiro molesto, sus parpados se sintieron pesados trato de acomodarse en el sillón pero no pudo así que camino de regreso a su habitación, la cama era lo sufrientemente grande para caber dos personas.

—Eres un niño muy confiado. —Susurro el mayor tomando por la barbilla al rubio. —Lástima que seas un chico porque realmente eres hermoso ¿Para qué te querían esos pecadores?

El pelinegro se sentó en el borde mirando detalladamente a ese rubio, le parecía fascinante la raza humana, los despreciaba por ser tan egoístas, tan soberbios pero también le llamaban la atención, por su voluntad, su arrogancia, en el tiempo que llevaba viviendo fue capaz de conocer miles de personalidades humanas cada una le sorprendía más ya que existían aquellas que eran capaz de dar su propia existencia por sus semejantes mientras que otras no se tocaban el corazón para matarlos, un cabello rebelde tapo la frente del menor así que lo acomodo detrás de su oreja denotando unas cicatriz, el mayor se acercó para verificar que había, “1004” estaba tatuado en su piel.

—Te salve de una eminente muerte niño raro. —Dijo lentamente recostándose a su lado, mirándolo a la cara.

—Los pecadores están matando a los humanos que llevan esta marca, es como si buscaran algo o alguien, tengo un presentimiento sobre ti.

La oscuridad se apodero de la habitación un gesto de molestia se dibujó en el ceño del pelinegro quien extendió la palma de su mano y una llama roja apareció, la suplo despacio provocando que saliera volando esa flama a una vela que se encontraba en un buro a lado de la cama, sonrió complacido al ver que se encendía, se giró para acomodarse en su almohada ahora podía ver tranquilamente como su compañero dormía, lentamente sus parpados se fueron cerrando y el sueño también lo invadió. La brisa de la mañana se coló por las ventanas abriéndolas, el pelinegro pestañeo perezosamente, cuando logro vencer su cansancio descubrió que su compañero continuaba dormido, una tonta sonrisa apareció en sus labios, no lograba reconocerse, nunca había llevado a otra persona a su departamento, ni a una amante, ni mucho menos a un humano estiro su mano para tocar ese blanco rostro pero un ruido proveniente de la sala lo alerto, se puso de pie rápidamente caminando hacia la puerta la cual abrió y cerró detrás de él.

—¿Qué haces tan temprano molestándome? —Cuestiono el mayor a un joven con dientes de conejo. —Habla.

—Déjame ver que tienes en tu cuarto. —Contesto con una mirada ladina enfocando su vista en los ojos de su líder. —¿A quién escondes?

Bang YongGuk contesto esa mirada con la misma potencia, se enfrascaron en una batalla, el menor retrocedió recargándose en la pared mientras tocaba su cabeza y un gesto de dolor se dibujaba en su rostro.

—No tienes permitido meterte en mi cabeza, no lo vuelvas a intentar. —Una voz resonaba en la mente de HimChan quien solo sonrió. —Tu poder es maravilloso no lo deberías usar en este tipo de cosas.

El pelinegro mayor camino hacia la sala mientras su compañero lo seguía, tomaron asiento mirándose a la cara fue entonces que una ráfaga de agua golpeo una de las mejillas del Bang quien de un momento a otro se secó con una aura roja que desprendió de su cuerpo.

—Idiota ahora todo el día me dolerá la cabeza. —Hablo molesto el menor masajeando sus cienes. —No entiendo cómo puedes anular mi poder.

—Deja de leer la mente de la gente, sabes que eres un hibrido y que no tienes control sobre el. —Contesto el mayor mientras le lanzaba pequeñas llamas de fuego a su compañero quien las apagaba con enormes gotas de agua.

—Eres mejor controlando el agua ¿Qué te dijo el chismoso de DaeHyun?

—No pude hacer nada. —Dijo una voz desde la concina. —Sabes que es muy fácil que me envuelva con sus palabras y dejo abierta mi mente.

Los mayores voltearon en dirección de la cantarina voz el dueño de tal queja era un castaño que llevaba un sándwich en la boca y un vaso de leche en la mano derecha, Yong negó con la cabeza, sus dos mejores amigos era todo un caso aún recordaba como el consejo se opuso cuando los eligió como su mano derecha y su consejero personal, la razón por la cual nadie aceptaba que DaeHun Jung y HimChan Kim fueran sus allegados era que ambos eran híbridos, pero a él nunca le importo ese factor, con ellos creció, eran sus hermanos, sus mejores amigos en las personas que más confiaba, los tres dejados atrás por sus familias, una perverso gesto apareció en sus labios movió su dedo derecho provocando que la leche que estaba tomando el castaño hirviera en un solo segundo logrando que se quemara la lengua.

—Guk deja de jugar con mi comida. —Grito el menor poniéndose de pie soplando para enfriar su lastimada boca. —Sabes que no es mi culpa, Channie siempre se mete a mi mente sin mi permiso un día pateare su trasero para que me deje en paz.

—¿Tu y cuantos más? Tragón no te vayas a comer el desayuno que le traje a Gukkie. —Grito el pelinegro poniéndose de pie y caminando detrás del menor cuando toco la mesa una descarga eléctrica recorrió su cuerpo. —No hagas eso, maldito te voy a matar cuando te alcance.

Los dos menores comenzaron a jugar pero el castaño era bastante rápido, el líder solo miraba entretenido la escena, le agradaba ver que aunque pasaran los años los tres seguían siendo los mismos, ese trio siempre fue el equipo perdedor, YongGuk era el menor de la familia Bang por lo tanto no tenía derecho a ser la cabeza del clan Koguryŏ, los otros dos eran los bastardos de integrantes del consejo, no tenían derecho aspirar a ser alguien pero gracias a su esfuerzo ahora tenían el control de su Clan el cual gobernaba una gran parte de Asia, a los oídos del pelinegro llego un pequeño quejido fue entonces que extendió la palma de su mano y dos auras rojas rodearon a sus escandalosos amigos quienes se quedaron quietos para que las llamas no los tocaran.

—No quiero que despierten a mi invitado. —Dijo poniéndose de pie caminando hacia la habitación donde abrió la puerta observando que el rubio continuaba dormido, fue entonces que el mayor murmuro algo, las ventanas se cerraron una llama se encendió en el centro al ver que el joven sonría regreso a la sala. —¿Qué averiguaste de los pecadores?

—Quítanos esto, las quemadoras tardan meses en sanar. —Hablo molesto el castaño mientras una ahora amarilla lo rodeaba al ver el gesto serio de su amigo suspiro pesadamente. —Solo el líder era pecador el resto eran humanos, logramos que olvidaran lo sucedido, Inati solo tenía la misión de cazar jóvenes con la marca 1004 pero no sabe que hacen con ellos o para que los quieren ¿Por qué tan interesado en ese tema?

—Los asesinatos de humanos han aumentado alarmadamente y la policía imperial nos culpa de eso, no tardaran en querer iniciar una guerra con los Yonkai. —Contesto el otro joven quien bajita la mano trataba de apagar las llamas con su aura azul pero era imposible. —Solo necesitan un pretexto para romper la tregua, somos los líderes de esta zona nuestro objetivo es preservar nuestra especie, la policía imperial son cazadores sin escrúpulos.

Las llamas que rodeaban a los jóvenes desaparecieron, al verse libres corrieron hacia su líder para atacarlo, el castaño lo tomo del cuello mientas el otro pelinegro se montaba encima de él, el mayor pudo con ambos chicos y los lanzo en el sillón donde nuevamente las risas aparecieron, por eso los sabios del consejo los odiaban, eran demasiado inmaduros y jóvenes para hacerse cargo de un clan tan importante, un sonido los saco de sus peleas infantiles el mayor camino hacia un bolso de chica que estaba sobre una mesa, saco el móvil contestando la llamada.

—JunHong ¿Dónde estás? —Una desesperado voz cuestionaba pero el silencio reino entre ambos oyentes, el menor tuvo un mal presentimiento ya que su amigo siempre le contestaba el celular. —Por favor regrésame a mi hermano, no lo lastimes más.

—¿JongUp-hyung? —Una adormilado voz provenía del pasillo, donde un joven de cabello rubio hacia acto de presencia. —¿Dónde estoy?


Los dos chicos que estaban en la sala giraron su rostro para toparse con el extraño.

Notas finales:

Hola, un nuevo fic para celebrar el nuevo album de BAP, estoy contenta con este nuevo proyecto, muchos tal vez esten molestas porque comienzo fic y me atraso en otros pero prometo trabajar en todos, también estoy consiente de mis pendientes y prometo ponerme al corriente, de igual manera quiero presumirles que BYG contesto un tweet en el evento de ayer (mex), ustedes saben lo mucho que lo amo y lo inmensamente feliz que fui al ser una de las 14 afortunadass babys :D a las cuales les contesto :D Por favor reproduzcan el MV de igual manera diganme que les parece el nuevo fic 

http://www.youtube.com/watch?v=sGolQ9LzbkY


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