Cap. 4
Lucius Malfoy no era tonto, claro que no.
Siempre fue un hombre perceptivo, no por nada había sido uno de los mejores Slytherins de su promoción.
Por eso, ese verano, cuando sus dos hijos volvieron, supo que algo andaba mal.
Y lo comprobó cuando ambos se sentaron en lugares opuestos en la mesa en vez de uno al lado del otro.
Esa misma noche invito a Severus a su despacho, para saber que sucedía.
Y como esperaba, este lo sabía.
Se sorprendió bastante con lo que le conto. Sabía que Harry había participado (es más, ni siquiera le habían permitido a él y a Narcissa ir a verlo y llevarlo San Mungo) en el Torneo de Los Tres Magos.
Frunció el ceño ante la actitud de Draco en todo el año con Harry. Eso no lo sabía.
Pero lo que si le sorprendió fue que Harry llorase en el regazo de Snape, y que para colmo estuviese enamorado de Draco.
-Harry puede estar en Slytherin pero tiene corazón de Gryffindor-comento Snape, antes de irse-pero está claro que, a excepción tuya y de Potter, los leones tienen una fuerte debilidad con respecto a las serpientes
Y Lucius no pudo más que darle la razón.
Por su parte, a Narcissa le parecía extraño lo que pasaba. Ella había notado de inmediato un cambio en sus niños, y le preocupaba que hubieran discutido.
Lucius la tranquilizo, diciendo que eso pasaría. Aunque temía que eso no fuera cierto.
Pero su preocupación aumento aun más el día en que, dos semanas después de llegar a casa, Harry se encerrare en su habitación y no quisiera comer.
Draco, dos días antes, había pedido pasar al menos la mitad de las vacaciones con Blaise y Theo. Sus padres no se negaron (Lucius pensó que así se calmarían los ánimos).
Narcissa entro a la habitación de su hijo, siempre pulcra aunque algo desordenada, y lo encontró envuelto en al menos unas 10 mantas, hecho un ovillo en la cama.
-Harry cariño, ¿estás bien?-pregunto, sentándose rápidamente a su lado
-s... si, ma... mamá-respondió, castañeando-so... solo te... tengo frio
-¿Harry qué...?-Narcissa retiro las mantas y toco su frente-¡Merlín! ¡Estás ardiendo Harry!
Se paró de un salto y salió corriendo de la habitación. Bajo las escaleras y entro al despacho de Lucius.
-¡Lucius! ¡Llama a Regulus, ahora!
El rubio alzo la vista, sorprendido de la actitud de su esposa, pero al verla tan preocupada no le quedo de otra que hacerle caso.
Llamo por vía Flu a Regulus, quien entro en el despacho sin dudarlo.
-¿qué sucede?-pregunto, mirando con suma preocupación a su prima
-es Harry, está ardiendo en fiebre-se estrujo las manos, preocupada
-llévame con el
Ella asintió y lo guio fuera del despacho, y justo en ese instante apareció Draco por la chimenea.
Miro con el ceño fruncido a su padre, que pareció no notarlo.
-¿qué sucede?-cuestiono
-no sé, parece que Harry enfermo-le miro intensamente, frunciendo el ceño-tenía varios días sin muchas ganas de comer, pero ahora ni come ni quiere salir de su habitación
-complejo de mártir-Draco rodo los ojos
-no, está ardiendo en fiebre, tu madre hizo a Regulus venir, Draco tu...
Un grito interrumpió sus palabras.
Ambos rubios salieron apresurados y subieron las escaleras sin pensarlo, ignorando el leve cosquilleo en su piel producido por una honda de magia.
Al entrar en la habitación del moreno se quedaron pasmados. Regulus lo sostenía envuelto en sus brazos, dictándole una sarta de cosas a Narcissa.
-llama a Severus y dile que las traiga-explico-él las tiene en su casa, y llamen a Remus y a Sirius tambien
Ella asintió y salió
-¿qué sucede?
-sufrió un colapso, y su núcleo mágico esta inestable-explico, saco su varita como pudo y lo levito hasta la cama-no sé que pudo provocarlo
Pero Lucius se hacia una idea de que sucedía.
Severus no tardo mucho en llegar, pero cuando lo hizo Harry se estaba poniendo frio y balbuceaba incoherencias.
Poco después llegaron Remus y Sirius, preocupados por el pequeño (ya no tan pequeño) Harry.
-¿Petegrew le habrá hecho algo?-pregunto Remus, observando a su esposo desde el marco de la puerta de Harry
-no, Poppy dijo que estaba bien-negó Severus, sin despegar la vista de su cuñado y abrazando a Sirius para que no irrumpiera
-es extraño-murmuro el auror, revolviéndose nervioso en los brazos de su esposo-¿por qué...?
-Lily sufrió algo así, ¿recuerdas?-menciono el lobo, mirando a su viejo amigo-poco antes de definitivamente aceptar a James
-cierto-asintió, frunciendo el ceño-recuerdo que unos Inefables fueron a la enfermería y hablaron por lago rato con ella
-¿creen que en el Departamento de Misterios encontremos lo que le sucede a Harry?-cuestiono Lucius, apareciendo en ese instante
-puede ser-asintieron a la vez los Gryffindors
-logre estabilizarlo-anuncio Regulus, saliendo-pero debemos hablar
Los 4 hombres asintieron y lo siguieron escaleras abajo.
Entraron a un salón, donde ya estaban Narcissa y Draco.
Ambos se levantaron al verlos entrar.
-Reg...
-está estable, por ahora-respondió a la muda pregunta-no entiendo cómo o porqué, pero su núcleo se desequilibro, y más extraño aun, un nuevo núcleo nació, sub dividido al primero
-supongo que la fiebre se debía a que ambos núcleos “peleaban” por ser el único-comento Severus
-si-asintió el moreno-la magia de Harry reconoció esta nueva magia como un agente enemigo al cuerpo, y hasta que no se estabilicen lo que puede suceder es impredecible
Un sollozo escapo de los labios de Narcissa. ¡Era totalmente injusto!
Lucius la abrazo, tratando de consolarla.
-¿no podemos hacer nada?-los dorados ojos de Remus se llenaron de lagrimas
-si descubrimos que sucedió con Lily, tal vez podamos ayudar a Harry-apunto Sirius-tal vez el Ministro me permita acceder a los archivos
Hubo un asentimiento general.
Draco, sin que los adultos se dieran cuenta, se deslizo fuera del despacho y subió a ver a su hermano.
Podían estar peleados, pero él estaba muy preocupado.
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Thomas Riddle, Ministro de Magia de Londres, recibió con sorpresa el pedido del Jefe de Aurores Sirius Snape (a muchos les sorprendió que el decidiera tomar el apellido de su esposo y no al revés), de ir al Departamento de Misterios a buscar información sobre Lilianne (Lily) Potter.
Le dijo que el mismo lo buscaría y llevaría a la Mansión Malfoy, que él estaba mejor allá, atendiendo a su ahijado.
Y por esa razón se encontraba en ese momento en una de las secciones del Departamento de Misterio. Sorprendentemente, uno de los Inefables, que lo encontró en el Área de Enfermedades Mágicas Extrañas, al preguntarle que buscaba, le envío al área de Criaturas Mágicas No Registradas.
Anduvo buscando por largo rato, pero la única Lilianne que tenían registrada se apellidaba Miracle y no Evans.
Harto de dar vueltas, decidió tomar el delgado pergamino y lo abrió.
De más está decir que casi se cayó de espaldas al leerlo.
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Cuando arribó a Malfoy's Manor, 7 pares de ojos se posaron en el.
Sus ojos café-rojizos analizaron todos y cada uno de los semblantes, y supo que lo que les diría no les caería bien.
-señor Riddle-saludo Regulus, poniéndose en pie
-Black-asintió-creo que lo que les tengo que decir no les gustara
El aire se tenso casi de inmediato, y casi pudo jurar escuchar como varias gargantas pasaban saliva.
-¿y?, ¿lo encontró?-pregunto Sirius ansioso, apretando la mano de su esposo
-sí, pero no estaba registrado en Enfermedades Mágicas Extrañas
-¿qué?
-sí, y no solo eso, estaba en Criaturas Mágicas No Registradas, bajo el apellido de Miracle
El silencio que se instalo en el salón podía ser cortado con un cuchillo.
-¿cómo es eso posible?-se atrevió a preguntar Narcissa
El Ministro se encogió de hombros.
-esto fue lo que encontré
Se acerco a una mesa que había cerca y extendió el pergamino. Saco su varita y lo apunto, murmurando suavemente unas palabras en Parsél.
“Lilianne Clarisse Miracle-Evans” se leía con unas enormes y claras letras doradas, que salían del papel y se elevaban sobre este.
“Hija de: Nikolai y Johanne Miracle.
Adoptada por los Muggles Evans a la edad de 3 años.
Estatus de sangre: Pura, hija de una Bruja Sangre Pura y un mestizo de una Criatura Mágica de raza Desconocida.
Descendiente directa de Antioch Peverell y Salazar Slytherin por parte de madre, y de Ahren Miracle y Tiare Elfen por parte de padre”
Todos leyeron sorprendidos, ¿Slytherin y uno de los Peverell?
“Casada con: James Charlus Potter, descendiente de Ignotus Peverell y Godric Gryffindor.
Madre de: Harry James Potter Miracle-Malfoy
Caso #3251-5: Descontrol en el núcleo Mágico.
Al recibir su herencia mágica, Lilianne sufrió un colapso mágico, pues la herencia proveniente de sus antepasados de Criaturas Mágicas, y los de Magos Sangre Pura no se reconocía como una sola y trataron de balancearse mutuamente”
Tom extendió otro pergamino y procedió de igual forma.
“Características de esta raza (desconocida aún):
Se desconoce nombre, pero esta ínfimamente relacionada con los Veelas, además, comparte ciertas características con otras razas.
Más bien parece una mezcla de estas.
Al igual que los Veelas, tiene una única pareja destinada, aunque puede emparejarse con otras personas. Comparten con los Elfos Antiguos su amor por la naturaleza y, dependiendo de la persona, tienden a tener el control sobre uno o dos elementos, normalmente estos se complementan.
Poseen vista, oído y olfato muy sensitivo, igual que los Vampiros, y con los lobos comparten las épocas de celo, y distintas “transformaciones” en la Luna Llena, aunque estas parecen ser menos dolorosas.
Guardan una relación física con los Dragones y los felinos.
Poseen el encanto natural de las sirenas, y una que otra característica no definida del ave Fénix.
Existen (o eso se considera) dos vertientes de esta raza, pero se desconocen las características de cada una.
La ultima “vista” fue Tiare Elfen, casada con un mago mestizo de su propia raza”
Todos quedaron pasmados ante lo leído. ¿Harry una criatura mágica?
Y al parecer no cualquiera, una sumamente poderosa.
-entonces-Sirius carraspeo-¿lo de Harry se resolverá solo?
-tal parece, pero, ¿por que recibió su herencia a tan temprana edad?-Regulus se acerco a los pergaminos y los leyó rápidamente
-no lo sabemos-Tom miro a Remus y a Sirius-¿saben si Evans dejo algo que le pueda de servir de ayuda a Harry en esta dura transición?
Ambos negaron, suspirando.
-bien-tomo los pergaminos-me avisan de cualquier cambio, espero se mejore
Y dicho esto, desapareció por la chimenea.
El salón se sumió en un tenso silencio durante unos minutos.
-¿solo queda esperar?-pregunto Narcissa, mirando a su primo
-solo queda esperar-corroboro
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Por suerte, no tuvieron que esperar mucho.
Cuatro días después Harry despertó, la fiebre había bajado y su magia se fue anivelando poco a poco, aunque ahora parecía 3 veces mayor (y eso era un eufemismo, pues parecía vibrar por la piel del joven).
El moreno no recordaba nada de lo sucedido y le sorprendió saber que estuvo casi una semana sumido en un “coma” mágico.
Una vez Regulus le reviso y le indico lo que debía hacer para mejorarse (y le advirtió que a la mínima molestia le llamara), fue al baño y se dio una larga ducha.
Se sentía totalmente entumecido.
Al salir y pasar frente al espejo se quedo pasmado.
¿Era su imaginación o había cambiado?
Su piel estaba mucho más pálida, y las ligerísimas pecas que tenía le pareció que eran más nítidas. Y no solo eso, sus ojos se veían de un verde tres veces más profundo y la pupila parecía ligeramente rasgada. Sin contar el hecho de que veíaperfectamente sin sus gafas.
Su pelo parecía estar más largo y ligeramente más liso, aunque seguía siendo una revoltosa mata negruzca.
Se vistió rápidamente y salió, casi aterrado.
Le parecía que podía escuchar el más mínimo ruido, producido por la suave brisa que se introducía por la ventana, o que el olor de los narcisos de su madre era demasiado dulzón... Teniendo en cuenta que estos estaban del otro lado del jardín, en el ala Norte y el dormía en el ala Sur.
Se dejo caer en su cama, desconcertado. ¿Qué demonios le pasaba?
Miro su habitación, como si buscase una respuesta, como si esta se la fuera a dar. Y, como si algo quisiera responder a su muda pregunta, sobre su escritorio se materializo un libro de gruesas tapas negras.
Alzo una ceja y, movido por la curiosidad se levanto y lo tomo.
Sobre las tapas, se leía, con unas hermosas letras doradas, “Elfen y Miracle”. Lo abrió y dentro habían muchos más nombres, y al final de la lista el nombre que se ubicaba le sorprendió.
“Harry James Potter Miracle-Malfoy”
Parecía haber sido escrito recientemente, con una pulcra e inmaculada letra y tinta roja. Y sobre este estaba escrita, con tinta verde esmeralda “Lilianne Clarisse Miracle-Evans Potter”
Esto aumento su curiosidad. ¿Por qué el nombre de su madre y el suyo estaba allí? ¿Y qué significaba que estuviesen ligado al apellido Miracle?
Paso las paginas y se sumió en la lectura.
Leyendo, con los ojos anegados en lagrimas y la nariz roja (signo de que había llorado) y la habitación vuelta un desastre, le encontraron Sirius, Remus y Narcissa.
Al escuchar el ruido de la puerta alzo la vista, y sin poder evitarlo se lanzo a los brazos de su madre, sollozando en su hombro.
-Harry, cariño, ¿qué sucede?-pregunto preocupada, acariciando la suave melena de su hijo
-¿por qué...?-hipo-¿por qué me pasa esto a mi? ¿No es suficiente ya con haber sobrevivido a un Avada o ser un Potter-Malfoy?-sus sollozos aumentaron de volumen y su cuerpo se agito, y con el varios objetos que permanecían relativamenteintactos en su habitación
-Harry, ¿qué pasa?-Remus lo despego suavemente de Narcissa, y acto seguido el chico envolvió sus brazos alrededor de su cintura
Parecía un niño pequeño, perdido en un lugar que no conocía, que lloraba amargamente por no encontrar a sus padres.
-ya sé lo que era Lily-susurro, calmándose un poco-lo que soy
Los adultos se miraron entre sí, ¿cómo lo supo?
-encontré-se despego y limpio sus lagrimas, caminando a la cama-esto, es el diario de mis antepasados, y tiene el registro de todos y cada uno de sus descendientes-los miro, desesperanzado-incluso de Lily... Y ahora el mío, aunque no dice el nombre de la Criatura Mágica
-oh mi amor-Narcissa se acerco apresurada y volvió a abrazarlo-no te preocupes, estarás bien, buscaremos la forma de... de...
-¿controlar mi magia?-pregunto, sonriendo débilmente-no quiero clase particulares pero-miro su habitación-las necesitare
-lamento que ya no queden de los tuyos para que te guíen-susurro, apretándolo aun mas
Se sentía mal al saber que su niño sufriría, no solo porque era algo nuevo, sino tambien porque era algo... Prematuro.
-¿no se suponía que debería saber de esto antes de que me pase?-pregunto suavemente, sentándose en la cama y acariciando el diario-aquí dice que todos lo heredaron entre los 20 y 22 años, tal vez los 19, pero Lily lo recibió a los 17 y yo... Yo aun no tengo 15
-no lo sabemos-respondió Sirius, sentándose a su lado-Riddle lo asocio a tu parentesco con Gryffindor, pero no sabemos
Harry asintió, y sonrio, con verdaderas ganas.
-entonces, ¿qué haremos?
-primero habría que ver hasta qué nivel es controlable tu magia, y luego entrenarte en varios aspectos-respondió Remus-pero creo que deberíamos saber si eres un Criatura Mágica oscura
-¿con todas las mezclas de las buenas?-Harry rio suavemente ante el comentario de su tío-Rems, creo que deberías juntarte menos con Sev, ¿sabes?
El castaño rio tambien y el ambiente tenso en el que estaba sumida la habitación se relajo.
-anda, ve a desayunar con Cissa y nosotros arreglamos esto-Remus beso su frente y le insto a salir
Narcissa lo siguió, estrechándolo nuevamente entre sus brazos, feliz de que su niño estuviera bien.
No quería ni imaginarse que le sucedería a Draco cuando supiera de su herencia.
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Los días y las semanas pasaron con rapidez.
Harry se la pasaba encerrado en una habitación del ala este, que nadie usaba, para sus entrenamientos.
Siempre rodeado de montones y montones de libros, desde criaturas mágicas hasta magia oscura (esto último no le agrado mucho a su padrino y su tío, pero ¿qué podía hacer?), tanto de la biblioteca en Malfoy's Manor, como la de Grimmauld Place, y uno que otro proporcionado por el Ministro Riddle.
Con cada libro que leía más estaba fascinado con lo que era. Aunque no estaba definido, leer sobre las características que compartía con otras razas le emocionaba.
Por otro lado, Thomas Riddle tomaba cada tiempo libre que tenia para entrenarle, pues hasta la fecha era el único Mago con un nivel de magia tan alto como el de Harry (tal vez el del menor era mayor, pero preferían no pensar en eso), Sirius y Remus tambien ayudaban.
Severus se había propuesto (por pedido de su esposo –o más bien coacción-) a ayudar, compartiendo sus conocimientos en Pociones (como si el moreno no fuese ya lo suficientemente bueno en esa materia).
Narcissa, por su parte, había decidido a ayudarle con esa pequeña parte Veela de Harry (luego de una charla con Draco y este), guiándole con pequeñas cositas.
Por otro lado, su relación con Draco no había mejorado, es mas, parecía haber empeorado desde que se supo lo de su herencia. Y a él le dolía, porque lejos de disminuir, el sentimiento que nació en él, parecía crecer y crecer, lastimándolo.
Por eso, luego del cumpleaños del rubio y una nueva discusión con el (lejos de los indiscretos ojos y oídos) había decidido mudarse al ala Este.
Allí nadie le molestaba, podía leer en paz y los sonidos de toda la casa parecían mas amortiguados (lo único que no le gustaba de todo eso era el oído y el olfato desarrollado).
Para su cumpleaños, no solo recibió regalo de sus padres, sino tambien de sus amigos (que no eran muchos) y sorprendentemente, de Cedric (se recordó que en cuanto iniciaran el año debía pedirle disculpas por lo sucedido)
Y así paso los meses, sumergido entre libros y entrenamientos para controlar que su magia no se desatara y destrozara todo a su alrededor.
Y más entrenamiento, y más libros, y su hermano odiándolo cada vez más.
Jamás comprendería porque Draco le detestaba tanto, si él no había hecho nada para que le odiara.
Suspiro y, rogando a cualquier divinidad que se compadeciera de él, deseo que Draco volviera a tratarlo como a un hermano, o tal vez un amigo, cualquier cosa con tal de que no lo odiase.
Si al menos supiera que Draco en realidad no lo odiaba…
Continuara...