Con dolor y frio despertó al sentir la luz colarse por su ventana, estirándose y bostezando se dedicó a despertar, pestañeando repetida veces para aclarar su vista, grande fue su sorpresa al sentir el duro y frio suelo.
-“Qué raro, yo no soy de dormir mal y mucho menos de caerme de la cama”- Pensó Yuuri, pero su rostro se tornó rojo cuando vio que estaba desnudo, miro a su izquierda, viendo como dormía plácidamente Wolfram, con sus mejillas sonrojadas, meneando la cola y teniendo todo su menudo cuerpo expuesto a la vista, su rostro quedo mucho más rojo de lo que estaba, yéndose a un rincón de la habitación, recordando el por qué estaban él y Wolfram desnudos, su corazón latía de forma rápida y fuerte, provocando que su respiración se agite junto con un pequeño temblor en su cuerpo
- “Porque por primera vez se lo que quiero en verdad, y es que no te corras antes que yo”
-“Wolf... se siente...muy bien ahh”
-“¿Yo dije eso? ¿De verdad lo hice con un hombre? ¿Después de todo este tiempo tratando de ser un chico normal y sano, me acuesto con un hombre? Argg!! Ya basta Yuuri, admite que te gusto, sii, la verdad me encanto y cada vez deseo más a Wolfram, no me arrepiento de nada, pero aún tengo miedo al rechazo ¿Qué pasaría si no le gusto lo que hice anoche? ¿Ya no le gustare? De todos modos era mi primera vez y lo más probable es que lo haya hecho mal, de hecho ayer no dijo nada después de que termináramos”- Yuuri bajo la mirada, sus propios pensamientos lo hicieron deprimirse, ya no estaba enrojecido, tenía unas ganas tremendas de llorar y se dio cuenta que Wolfram le gustaba más de lo que él creía.
-Yuuri…- Murmuro el hermoso rubio despertando, estirándose felinamente (Bueno era un gato)- ¿Qué haces arrinconado y sin ropa?- Pregunto una vez incorporado mirando a Yuuri confundido.
-Ahh Wol…Wolfram ¿Cuándo despertaste?- Pregunto sobresaltado, tratando de no enrojecerse por ver a Wolfram directamente a los ojos- mmm, nada sólo…¡¡ tú me tiraste de la cama!!- Se levantó de repente, Wolfram sin poder evitarlo desvió la mirada a la entrepierna de Yuuri, provocando que ambos se sonrojaran- Pervertido- Susurro Yuuri, pero Wolfram logro escucharlo desviando la mirada a otro lugar.
-Bien, yo ocupare el baño primero- Wolfram se levantó para buscar su ropa, agarro una toalla, y estaba a punto de irse cuando vio a Yuuri bajar la mirada- ¿Qué sucede?- Puso una toalla en su cintura, acercándose a Yuuri y arrodillándose para verlo desde abajo.
-Wolf… Ayer no lo hice bien ¿Verdad? ¿Aun te gusto por eso?- Yuuri aún seguía con la mirada baja, el rubio lo miro serio, levantándose y yendo hacia la puerta, suspiro con enojo, por otra parte Yuuri tenía unas ganas tremenda de llorar, pensaba que su teoría de que ya no le interesaba a Wolfram era verdad.
–No creas que mis sentimientos son tan superficiales, tal vez aun no te amé, pero quiero llegar a eso y estoy dispuesto a dejar abierto mi corazón para que fácilmente entres por completo en él, me gustas mucho- Wolfram se había dado la vuelta para decir todo eso, mirando al pelinegro, se notaba serio y con seguridad en sus palabras, vio a Yuuri sorprendido y se dispuso a irse de nuevo- Además, también fue mi primera vez anoche… y puedo decir que me gusto de sobremanera- Eso ya no se lo había dicho mirándolo, pues su sonrojo era notorio, después de decir eso se marchó, dejando a un sorprendido pero sonriente Yuuri.
Yuuri entrando por la cocina, ya no sabía qué hacer, todos en la mesa estaban en silencio, mirándolo sólo a él, se puso nervioso y se dirigió a sentarse, al hacer ese acto todos seguían mirando, sólo que ahora a ambos, a Yuuri y a Wolfram.
-¿Q…qué sucede? ¿Tengo algo en la cara?- Pregunto nervioso Yuuri, mirando a todos en la mesa.
–Si querían hacerlo, pudieron ser menos ruidosos, para la próxima váyanse a otro lado para hacer sus cosas- Claude hablo directo, provocando que ambos chicos tosieran por tal comentario, estaban totalmente rojos de la vergüenza.
–jajajajaja, hermanito eres muy escandaloso, lo más probable es que toda la cuadra los hayan escuchado, aunque debo admitir que gimes bastante sexy, incluso quise hacerlo con Claude- Alois fue el hablo esta vez, como siempre sin pudor alguno, Wolfram no pudo más de la vergüenza, se levantó de la mesa con un “permiso” y se fue directo a su habitación, Alois sólo comenzó a reír.
-Valla Yuuri, jamás pensé que serias tan bueno en tu primera vez- Light sonrió con burla, Yuuri también se marchó de la mesa ante esos comentarios tan vergonzosos.
Light había entrado a su habitación riendo ya que aún molestaba a Yuuri con el tema anterior, algo que disfrutaba era de molestar de su primo menor.
-jjajjaja ayyy! Nunca me cansare de burlarme de él… emm ¿Ryuzaki? ¿Qué haces con mis libros y cuadernos?- Vio como Ryuzaki estaba muy concentrado en sus apuntes de universidad.
– ¿Quieres ser detective? Porque a mí me encantas estos tipos de cosas, de hecho entre y vi tus cuadernos, los revise un poco y la información que hay todo lo entiendo ¿Crees que yo también pueda ser uno?- Light desde que había conocido a Ryuzaki no había visto en sus ojos el brillo que ahora portaba, él no era alguien cariñoso, con sus hermanos de vez en cuando decía cosas como “te quiero” o los abrazaba y a pesar de que él decía que era feliz sus ojos eran tan oscuros y vacíos que a veces le daba miedo mirarlo a los ojos por tanto tiempo, tenía una mirada realmente penetrante como si quisiera ver el alma de uno.
–Bueno… no sé exactamente si un gato puede ser detective jejeje- Rio con un poco de culpa al ver el rostro decepcionado de Ryuzaki, por alguna razón sintió culpa por eso y quería remediarlo- Pero con mis notas y como soy un joven prodigio lo más probable es que pueda escoger y ser un detective privado, si es así entonces tu podrás ayudarme en todo lo que puedas- No sabía porque pero era la primera vez que de verdad quería hacer sentir feliz a alguien, como caballero que era con las chicas, siempre animaba a las mujeres sólo por hacerse el amable, él quería tener una reputación intachable, pero ahora no era sólo para figurar ser alguien de buena apariencia, sino algo más, de hecho desde que conoció a Ryuzaki algo extraño recorría su pecho.
-Pues sería aburrido ser sólo ayudante, yo quiero ser algo más, mi sueño ahora es conseguir ser el mejor detective del mundo, pero que nadie me reconozca, mi alias sería “L” me gusta esa letra, nadie conocería el rostro “del gran detective L” sería todo un misterio…- Ryuzaki no alcanzo a decir más, pues ambos sintieron el timbre de la casa, ambos bajaron para ver la visita y grande fue la sorpresa de Light al ver a su supuesta novia ya dentro de la casa.
-Mira Light, Misa-misa vino a visitarte, hace mucho que no lo hacía- Yuuri estaba junto a ella en la puerta, la chica de largos cabellos rubios, de buen físico, con un color de ojos marrones claros, a la vista de Ryuzaki la chica era bastante atractiva.
-Misa… ¿Qué haces acá? ¿No quedamos en juntarnos en la cafetería?- Pregunto Light al ponerle una mano en la espalda para que se acomodara mejor.
-Sii, pero misa-misa no puede esperar ver a Light, es porque te amo demasiado que prefiero verte ahora- Misa abrazo a Light por el cuello, el castaño poso sus manos en su cintura tratando de alejarla disimuladamente mientras le sonreía.
-Si misa, ya sé que me amas y yo también, pero ahora estamos frente a personas para ser tan cariñosos, mejor siéntate y yo te sirvo algo, ahh! Se me olvidaba, él es Ryuzaki mi masc... digo un amigo, Ryuzaki ella es mi novia Misa Amane- A Ryuzaki la palabra “novia” le había provocado algo en su pecho, la chica lo saludo con beso en la mejilla, al parecer era todo lo contrario a él, una chica optimista, alegre y cariñosa, no sabía cómo actuar pues sentía algo de rabia por ella.
-Mmm ¿Por qué andas con gorra en la casa?- Pregunto la chica incrédula al ver a Ryuzaki portando una gorra.
-Porque tengo frio- Respondió serio, agarro el plato con pastel que tenía encima la mesa y se dispuso a comer, ignorando completamente a la chica en el otro asiento.
-Si comes eso, engordaras- el pelinegro alzo la cabeza para mirarla sin expresión alguna, odiaba cuando le decían cosas tan estúpidas.
-Si piensas, quemas calorías- de la misma forma en como le hablo, volvió a bajar la cabeza para concentrarse en comer el delicioso pastel, la rubia hizo un gesto de molestia, que al momento en que iba a reclamar llego Light con algo para que beba- Lightt!! Qué bueno que llegaste, ven siéntate conmigo- Misa agarro a Light del brazo y lo condujo hasta el asiento donde ella estaba sentada anteriormente, sentándose en las piernas del castaño y abrazándolo por el cuello.
-Misa cuantas veces tengo que decirte que estamos con gente al frente- Light quiso bajarla pero Misa se resistió.
-Eso…- Dijo apuntando a Ryuzaki- ni parece humano, mira la manera en que se sienta, usa gorra en casa, come dulces, es muy delgado, es pálido, tiene enormes ojeras, y su rostro no tiene expresión, hump!! “eso” no tendría por qué estar aquí- Light frunció el ceño y bajo a Misa de sus piernas, levantándose para irse al lado de Ryuzaki, quien seguía con sus misma expresión seria.
-Lo siento Ryuzaki no le hagas caso- Dijo Light colocando una mano en su hombro, para luego mirar a Misa.
-No es como si me importara, así que no tienes por qué disculparte conmigo, ya capte de qué tamaño es la mente de tu novia, bueno yo me retiro, diviértanse en lo que sea que hagan- Ryuzaki se levantó y de inmediato se fue, dejando a una furiosa Misa y a un sorprendido Light.
-Misa, no tenías por qué hacer eso, mejor salgamos de aquí- Light sólo se fue y Misa lo siguió, le gustaba a Misa, pero odiaba cuando se ponía así, comenzaba a nombrar cada defecto de la gente que estaba cerca de Light, bueno aunque el castaño no se quedaba atrás sobre ser buena persona, le gustaba aprovecharse de las chicas estúpidas como Misa como el seguidamente las llamaba, incluso ha estado con tres al mismo tiempo, sólo las usaba para su beneficio, y aunque hubo veces en que lo pillaron de ser infiel jamás dejo de ser un caballero, las mujeres con tal de estar con él podían compartir a Light hasta con 5. Cada vez que se encontraban las chicas que estaban enamoradas de él, se quedaban mirando fijamente, mientras Light sólo observaba y esperaba en que momento empezaría una guerra entre ellas, no sentía nada por nadie, de hecho en toda su vida nunca supo que era estar enamorado. Pero ahora aunque lo niegue a sí mismo no sabía que era lo que le estaba pasando, con una persona en especial que no era misa, ni Takada, sino era Ryuzaki, no sabía el por qué pero no le gustaba nada lo que pasaba en su interior, a pesar de discutir continuamente con Ryuzaki se sentía bien y tranquilo estando con él.
Light no tuvo una sexualidad definida pues también había estado con hombres, no a la vista de todos pero si a escondidas, de igual forma tampoco había sentido nada por ningún hombre, pero Ryuzaki era el primero con él que sentía algo así, su poder deductivo, su inteligencia el cual nunca nadie estaba a su nivel, su personalidad tan arrogante pero dulce a la vez lo hacían ver alguien misterioso, para Light no sólo era un misterio su personalidad sino también el misterio de saber por qué lo encontraba atractivo si era todo lo contrario a él de acuerdo a vestimenta, con sus pantalones holgados, su playera blanca, mayormente casi no usa calcetines ni zapatos, su cabello despeinado, las notables ojeras, su piel exageradamente pálida, delgado, es decir, todo de él para otros no era atractivo para pensamiento de Light, pero no sabía el por qué lo hallaba tan lindo cuando veía sus orejas en movimiento o su cola meneándose, incluso varias veces se había excitado al verlo cambiarse y eso era lo que más lo asustaba, no porque era un hombre el que lo ponía erecto sino el hecho de que era Ryuzaki el que lo ponía así, tal vez lo más cruel de toda esta situación era que de seguro Ryuzaki odiaba a Light, o por lo menos eso era lo que pensaba el castaño.
-Light!! ¿Qué te sucede? Has estado callado y pensativo, misa-misa está preocupada- Pregunto misa al frente de él, haciendo un puchero y acercándose más a su cara para poder besarlo.
-Nada misa, estoy bien, mejor vamos ya a la cafetería- Light disimuladamente la aparto de él, no quería besar a misa, era pegajosa con él y eso lo molestaba, pero si aún estaba con ella era porque era la hija del jefe de su padre, cualquier altercado que tenga con ella sería un gran problema para su padre, en conclusión estaba atrapado con la rubia que tenía a su lado.
-siii!! Amo comer con Lightt!!- Misa lo agarró del brazo y se fueron juntos a la cafetería.
Había llegado agotado a su casa, después de estar tanto tiempo con misa lo había dejado cansado, pero no le importo mucho lo cansado que estaba, algo más lo preocupaba y era el cómo estaría Ryuzaki después de como misa lo había tratado. Por lo mismo subió las escaleras sigilosamente hasta llegar a su cuarto, donde encontró a Ryusaki durmiendo en su cama en posición fetal, con el dedo pulgar en su boca, con su cola enroscada y con una tranquilidad única, le pareció demasiado tierno para ser Ryuzaki, sonrió sin querer mirándolo con ternura, sacudió su cabeza en forma de negación, se veía muy placido durmiendo para que lo despierten, se sentó en la cama observándolo mientras dormía, sin consentimiento comenzó a acariciar su negra cabellera, las yemas de sus dedos se paseaban por la mejilla, y su dedo pulgar acaricio el labio inferior, se inclinó un poco y se acercó más al bello rostro durmiente.
-¿Qué planeas hacer?- Abrió los ojos de inmediato al escuchar la voz del pelinegro, sintió su rostro enrojecido y se dio cuenta de lo que estaba a punto de hacer, su corazón comenzó a latir rápidamente, sólo se dedicó a mirar al serio rostro de Ryuzaki.
-N…ada, digo… es sólo que quería ver que tan grande eran tus ojeras- Se golpeó mentalmente por lo que había dicho, jamás se había comportado así, estaba nervioso y tragaba con dificultad, sonrió nerviosamente y se levantó- Quería decirte que no le hagas caso a Misa, ella es un poco celosa y además es una modelo y… bueno ya no importa, sólo no lo tomes en serio.
-No soy un estúpido para hacer caso de todo lo que me dicen, además que no me interesa como me vean las “súper modelos”, tú sólo puedes irte con ella y dejarme tranquilo- Dijo Ryuzaki con un tono algo enfadado, sentado en cuclillas, desvió la mirada hacía la ventana.
-¿Acaso estas celoso?- Se burló Light acercándose a Ryuzaki quien se giró para ver enojado al castaño, que sonreía con algo de alegría y burla.
-¿Estás loco? No me interesas en lo más mínimo, así que no digas estupideces- El pelinegro se dedicó a mirar por la ventana de nuevo, algo enrojecido.
-¿Seguro que no te intereso?- Light se acercó peligrosamente, dio vuelta a Ryuzaki y lo beso sin que el pelinegro alcanzara a reaccionar. Ryuzaki al darse cuenta trataba de empujar a Light, pero este no hacía caso alguno, a los segundos dejo de luchar por soltarse y se dejó llevar, cerrando él también los ojos y disfrutar de aquel delicioso beso que le entregaba Light, a separarse ambos se quedaron mirando por un corto tiempo- Perdón… yo no… lo siento- Light salió de la habitación, dejando a su amigo sorprendido y sonrojado, jamás se había sentido así, trataba de entender aquellos sentimientos humanos que ahora comenzaban a florecer en él, quería investigar qué era lo que pasaba en su interior y en su cuerpo, no estaba entendiendo nada lo que había pasado, Ryuzaki se encontraba confundido, pero lo único que podía hacer en ese momento era sonreír con un poco de alegría e ironía, pues por una parte estaba feliz y por otra sabiendo de quien se estaba enamorando, al chico popular y correcto, alguien imposible para él, pensaba en eso mientras con su dedo pulgar acaricio sus labios, recordando el sabor del castaño.