Después de un largo día esperando a que Ryuzaki se fuera a dormir a su propio cuarto, se encontraba por fin en su cama, acostado y bien cubierto con las sabanas pensando qué había sucedido, en qué estaba para que su cuerpo y mente reaccionaran de esa manera y tomara el impulso de besar a Ryuzaki, jamás en toda su vida desde que ha tenido relaciones con otras personas, había perdido tanto el control como paso con el pelinegro, pero tenerlo tan cerca y ver su pálida piel, ver que no tenía casi ninguna imperfección, que al rozar su piel con la de él se percató de que comer dulces lo beneficio bastante a su piel, pues estaba suave y bien tratada, ver directamente a esos ojos tan negros y profundos que sólo ese muchacho poseía, tener su respiración chocar contra su boca, eso y demás cosas lo hicieron comportarse de esa manera, no sabía en lo absoluto que le estaba pasando con Ryuzaki, pero tenía que averiguarlo de una u otra manera.
Despertó bastante cansado pues no había dormido bien dado a los continuos pensamientos que ahora su cabeza tenía, se levantó con pesadez, saco unas toallas, ropa y fue directo al baño para ducharse. Hoy tenía el día libre, no tenía clases y nadie lo había invitado para salir, decidió mientras se bañaba que sacaría de paseo a Ryuzaki, si, tal vez lo trataba como un animal, pero ¿Qué más es? No es humano, tampoco animal, o tal vez es o son las dos cosas, bueno eso era algo en lo que no valía pensar, por ahora Ryuzaki era humano, pero tampoco iba a dejar que lo vieran con las orejas y cola, se armaría un gran escándalo y quizás que no le harían para ver que especie es, por lo mismo tenía que ser cauteloso y salir con el pelinegro con gorra y la cola bien escondida.
Pov Light
Es fabuloso que hoy no este caluroso, de hecho está un poco frio así que es bueno para que Ryuzaki vaya con gorra y un abrigo largo y grueso, aunque ha estado con esa cara de enojo durante todo el camino, no se lo hare sacar ni por toda la calor que haya. Ahora nos dirigimos a un parque cerca de mi universidad, es bastante tranquilo y se puede hablar en paz.
-Ryuzaki, vamos a sentarnos por ahí… - Dije apuntando los lugares, el sólo asintió y me siguió, aún seguía enojado- No tienes por qué estar enojado por la ropa, es por tu bien ya que si te ven con tus orejas y cola armaran un alboroto, mira para recompensarte te iré a comprar un trozo de pie (pai xD) en ese local de al frente ¿Qué te parece?- Trate de sonar calmado, es un testarudo que cree que todo lo sabe, soy su dueño y yo puedo hacer lo que sea con el… rayos sentí mi corazón latir fuerte por un momento cuando dije que podía hacer lo que sea con él.
-No me trates como un niño, no se para que Salí contigo si te avergüenza el como soy- Dijo desviando la mirada con enojo, que irritable es de verdad que a veces si parecía un niño.
-No es vergüenza, ya te dije que es por tu bien además…- No alcancé a decir más pues alguien me tenía los ojos tapados con las manos.
-Adivina quién soy...- Escuche decir de la mujer detrás mío, no era misa pues la voz de ella es más aguda y escandalosa, en cambio la de esta mujer es más calmada y más grave.
-No lo sé, ya suéltame no estoy para juegos- Sentí como despegaba sus manos de mis ojos y con las mismas me dio la vuelta y beso frente a Ryuzaki, como maldecía que esto estuviera ocurriendo justo en este momento-Takada te he dicho varias veces que no me beses sin mi consentimiento- Dije separándome bruscamente de ella y limpiándome mi boca, algo realmente raro.
-Está bien, sólo era un juego, ¿Qué haces por aquí Light? ¿Dónde está la estúpida de misa?- Como odio que me interrumpa y hagan cosas innecesarias.
-No está conmigo, mira te presento a Ryuzaki- Dije señalándolo, él parecía más serio de lo normal, la miro y saludo con cortesía.
-Pensé que Misa era tu novia, Light-kun- Me dijo, casi me atragante con mi propia saliva, no espere que iba a decir algo como eso- Como la besaste cuando fue a la casa y dijiste que era tu novia…- Demonios, Ryuzaki está hablando demás, está arruinando mis planes, si, tal vez ellas ya me han visto siéndoles infiel, pero se supone que ya no haría eso, como me gustaría asesinarte ahora.
-Pensé… que ya no estabas con ella Light… ¿aún me eres infiel?- Takada a pesar de no demostrarlo mucho estaba enojada, siempre se consideró alguien superior a Misa y si ahora sabía que la estaba engañando con ella, de seguro su orgullo decayó.
-No, Ryuzaki sólo se confundió, como en ese momento comía sus dulces no escucho bien, Misa fue a invitarme a que vaya a uno de sus eventos, pero por supuesto yo me negué, ya sabes que yo te amo a ti, eres la única, eres inteligente y atractiva…- Engañar a una mujer es muy fácil, sólo con palabras bonitas se sienten de maravilla y te pueden dar hasta el cielo.
-Mmm está bien Light, yo me voy sólo venía a saludarte, bueno nos vemos otro día, adiós Light…- Al parecer creyó lo que le dije, ella miro a Ryuzaki con seriedad y sin despedirse de él se fue, me di vuelta de inmediato para reclamarle a Ryuzaki por lo que dijo, pero este sólo tenía una sonrisa, la cual de por si me molesto.
-¿De qué te ríes?- Le pregunte molesto, después de lo que acaba de hacer se da el lujo de sonreír de esa manera.
-Wow Light, sí que eres popular, tienes a muchas mujeres a tus pies además de eso sabes cómo engañarlas fácilmente, me pregunto cuál es tu objetivo de hacer todo esto de tener a más de una novia… o sólo es por placer… tal vez…- Ryuzaki y su manera de ser irónico, como lo odio de verdad, esa manera tan arrogante que tiene.
-Eso no es de tu incumbencia, así que la próxima vez no abras tu boca y deja que las cosas pasen- El paro de sonreír y me miro serio.
-Pero… hasta ahora no me he divertido, aparte de tener que estar vistiendo esto y soportar a cada novia tuya que aparece, esto no me está pareciendo para nada de mi agrado, así que lo mejor es que regrese…-
Fin pov Light
Ryuzaki nuevamente como la vez anterior se había quedado paralizado ante la acción que hacía el castaño, otra vez lo besaba sin su consentimiento, otra vez volvía a sentir eso en su estómago que no podía soportar, ¿Por qué era la única cosa que no podía deducir? Por alguna razón quería seguir saboreando los labios de Light, pero él tampoco era tonto de hecho era todo lo contrario y lo más probable en ese momento es que Light sólo jugaba con él, como lo estaba haciendo con sus demás novias, cada día conocía más al castaño y se daba cuenta que su apariencia de chico bueno y correcto, sólo es imagen para las personas, pero en su interior era cruel y manipulador, alguien que haría lo que fuera con tal de que le obedezcan o que estén a sus pies. Lo separo bruscamente y vio los ojos de Light, este lo miraba algo sorprendido bueno ¿Qué se esperaba de alguien que no estaba acostumbrado a ser rechazado?
-¿Qué crees que están haciendo?- Pregunto un poco enrojecido y con enfado, aunque tenía el rostro sin expresión alguna.
-Yo… sólo quería que te callaras- Light no estaba menos sorprendido pues nuevamente no se había controlado al ver a Ryuzaki- bueno mejor vamos a comer algo- dijo Light sin mirar a Ryuzaki, comenzó su marcha y el pelinegro lo siguió segundos después.
El atardecer ya se hacía presente, ambos seguían con su salida, ahora se encontraban caminando a casa, en ese trayecto apareció un buen amigo de Light junto con una muchacha.
-¿Light? Wow no espere verte, ah! Mira te presento a mi prima Haruka, Haruka él es Light- Presento un chico de cabello rubio que le llegaba hasta por los hombros, con ojos azules y su tan único estilo que el siempre acostumbraba a llevar, pantalones negros de cuero ajustados y camisas de igual color sin mangas.
-Hola Haruka, mucho gusto en conocerte- Saludo Light con su mirada coqueta, Ryuzaki de inmediato noto esto y desvió un poco la mirada- Mello que bueno verte, ¿Cuándo regresaste de Inglaterra? Y él es mi amigo su nombre es Ryuzaki- el pelinegro sólo saludo con la cabeza, Mello lo quedo mirando unos momentos.
-Pues me vine hace poco, sólo vine de paseo por lo que estaré un tiempo aquí, aunque tengo varias cosas que hacer, como ver al tarado de Matt y también al enano de Near- Dijo el rubio con algo de desagrado, Light le causo un poco de gracia pues cuando se juntaban todos ellos lo primero que hacían eran discutir entre ellos.
-Pues deberíamos salir alguno de estos días, podrías llevar a tu prima…- Atino a decir Light, la chica sólo se sonrojo.
-Cuidado Light… tu nunca cambias no sé cómo lo aguantas… esto…- Mello quedo en pose pensativo tratando de recordar el nombre del pelinegro.
-Ryuzaki- Dijo cortante, sin ningún tipo de emoción en su rostro, Light se dio cuenta que el pelinegro se estaba sintiendo incómodo.
-Bueno Mello, tenemos que irnos, bueno quedamos en eso, adiós- Se despidió Light, Ryuzaki al igual que él se despidió y siguió al castaño, lo observo por atrás unos segundos, pensando seriamente en que Light sólo jugaba con él- ¿Qué tienes? Desde hace un rato has estado callado y más serio de lo normal- Pregunto curioso.
-Nada- Volvió a sonar cortante, de hecho ni el sabia el porqué de su enojo- wow, cada vez me convenzo más que no hay mujer que no caiga ante tus encantos- Dijo con ironía.
-Si bueno, no son sólo mujeres, aunque en toda mi vida que llevo en relaciones, nunca me he confesado- Dijo mirando hacía al frente, Ryuzaki sabía que se sentía triste, la razón, no la sabía.
-Es decir, ¿anteriormente has estado con hombres?- Pregunto el pelinegro curioso, hasta ese momento no se había puesto a pensar que a lo mejor él era especial para Light, pues al que había besado el castaño era a un hombre y no a una mujer.
-Por supuesto, me gusta llevar mis propios ideales cuando se trata de relaciones, por lo mismo no me importa el sexo de las personas cuando me gusta alguien- Ryuzaki no supo reaccionar, ósea que él no era el primer hombre al que Light había besado, hasta podía asegurar que él no era virgen en todo los sentidos, se sintió un idiota él pensar que podía ser aunque sea un poco especial para el castaño, lo cual lo ponía aun peor, pues nunca le importo ser especial para alguien a excepción de sus hermanos.
-Eso es bueno, Light-kun me quiero ir no soporto estar con esta ropa- Ni sabía por qué daba una excusa como esa, lo único que quería era poder estar en su habitación pensando, el único lugar en el que podía estar tranquilo y sin que lo juzguen era su mente.
-Ryuzaki…- Light de un momento a otro acorralo a Ryuzaki en un muro de donde estaban pasando, le agarro las muñecas y las pego a la pared, sus cuerpos estaban a pocos centímetros, ambos se miraban a los ojos, uno que se notaba sorpresa y el otro tratando de estudiar toda aquella negra mirada, tratando de entrar en esa profundidad- Ryuzaki…- Volvió a pronunciar su nombre, sólo que esta vez en un susurro cerca de sus labios, el pelinegro sin poder evitarlo al sentir el cálido aliento de Light cerro sus ojos- has estado raro…- dijo en voz baja, Ryuzaki aún seguía con los ojos cerrado, no los quería abrir pues tenía vergüenza.
-No es nada- Al momento de decir eso sintió los labios de Light rozar con los suyos, estaba esperando el contacto, aquel que no llego, cuando abrió los ojos para ver lo que sucedió, Light se había separo un poco- Lig…
-Ryuzaki no tenías nada, sólo era una basura que ya salió de tu ojo- Ryuzaki abrió los ojos con sorpresa y confusión, vio a la dirección que veía el castaño y entendió el porqué de tan repentino cambio, pues Misa estaba parada al frente de ellos.
-Ah… si gracias Light-kun- Dijo aun con la mirada en Misa, no podía creer lo sínico que podía ser Light.
-Light!! No esperaba verte hoy…oh estas con este- Misa lo miro con desagrado para luego irse hacía Light y abrazarlo por el cuello, dándole un profundo beso, Light correspondió ante aquel beso, Ryuzaki se sintió aún más estúpido, los quedo mirando un momento y comenzó a marcharse, el castaño se dio cuenta de esto y se separó de Misa.
-Ryuzaki!! Espera no te vayas sin mí tú no sabes el camino, lo siento Misa adiós nos vemos otro día- Misa quedo con la boca abierta al ver tal reacción por parte de Light, cosa que la enojo y con un gran gruñido se fue con ambos brazos rígidos y con los puños apretados.
Cuando ambos llegaron a la casa, en todo el camino no habían dicho palabra alguna, Light se sentía culpable en pensar que podía haber herido a Ryuzaki. Por otra parte el pelinegro no tenía ganas de hablar con Light, no quería estar con él, lo enfurecía estar con él, a paso lento se fue a su habitación sin saludar al resto que de inmediato sintieron la tensión entre ellos.
-¿Qué fue lo que sucedió Light?- Pregunto Yuuri curioso, Light dio un gran suspiro y se dirigió al sillón, ahí se sentó y se puso sus manos en la cara.
-No lo sé, no hablo en todo el camino- Hablo con tranquilidad, y a decir verdad eso era lo que más molestaba a Light, no saber el porqué de que estuviera así- Voy a hablar con él- Sin más subió las escaleras dispuesto a resolver cualquier duda que tenga su cabeza. Mientras los demás quedaron en silencio tratando de asimilar lo que ahí estaba pasando.
Después de varios intento por tratar de que Ryuzaki le abriera la puerta, logro hacerlo, en ese minuto se encontraban mirando la televisión, ambos sin decir nada, Ryuzaki no sabía lo que ahí estaba pasando, Light no entendía que le pasaba en ese momento, debería tener experiencia con eso si ya ha estado con muchas personas. En el momento en que ambos trataban de entender sus propias dudas, apareció una noticia.
-En la televisión- Informamos que en las afuera de la 8va comisaria, en estos momentos está saliendo el asesino de Fumiko Zen, según el fiscal a cargo lo dejo con arresto domiciliario nocturno y con firma mensual, la familia en estos momento está indignada…- Seguía hablando la periodista.
-¿Qué opinas de eso Light-kun?- Se atrevió a romper el silencio Ryuzaki, el castaño lo miro confundido ¿A qué venía esa pregunta tan obvia?
-Pues lo lógico sería que lo ejecutaran, acabar con todo delincuente y asesino en el mundo para que la gente viva en paz, esa sería una buena solución con toda la delincuencia del mundo- Dijo Light seguro de lo que decía.
-¡Vaya! No pensé que un futuro detective fuera a pensar de esa manera, los humanos no tenemos derecho a quitarle la vida a otros humanos, dime ¿No sería mejor cadena perpetua? De ese modo pagaría sus culpas toda su vida.
-Ryuzaki, la única forma de acabar con todo eso es matándolos, porque los tipos cuando salen vuelven a cometer los mismas acciones, jamás cambian- Light se colocó más cómodo en la cama.
-Pero todas las personas podemos cambiar, un animal puede cambiar ¿Por qué el humano no? si algo bueno tenemos es la fuerza de voluntad y personas que quieran ayudar a rehabilitar a la gente ¿Qué pasa con los que se arrepienten? También tienen derecho a ser perdonados.
-Imposible, la gente no cambia, si lo hacen es para que no los culpen y al final vuelven a caer en lo mismo, por ejemplo ¿Qué pasa con la familia de esa niña? ¿Se sentirá tranquila con el asesino de su hija suelto? Por supuesto que no, a esa familia le quitaron su más preciado tesoro y no fue por causas naturales, a lo mejor tenía muchas metas que hubiera podido cumplir si no la hubieran matado, hay que sacar de este mundo a la gente malvada.
-¿Y crees que quitándole la vida al asesino, le devolverá a su hija? La vida misma se encarga de castigar la maldad y en lo que dices de sacar toda maldad del mundo, pues déjame decirte que quedarías solo en este mundo, ademá…- Nuevamente sentía los labios de Light, otra vez trataba de jugar con él, otra vez salía ese lado sádico de querer hacer sufrir a la gente, ¿por qué se empeñaba en besarlo sin tener una razón?- ¿Qué es lo que haces?- Se empeñó a decir tratando de sacar a Light que ya estaba encima de él.
-Hablas demasiado…- lo volvió a besar pero con más brusquedad, algo pasaba con Light, a pesar de que se sentía estúpido por haberse dejado llevar anteriormente, sabía que en ese momento no era Light quien lo besaba.
-¿Qué es lo que te sucede? Ya suéltame- No escucho, su mano fue directo a la entrepierna de Ryuzaki, este lo vio a los ojos y como si hubiera sido su imaginación, juraba que Light tenía en ese momento los ojos de un color rojizo.
-No sé qué me pasa contigo Ryuzaki… sólo sé que te deseo desde que te conocí, serás mío mi querida mascota y amigo…