ªMarca de nacimientoª
Era el día de su primera visita al doctor, por la información que se les habían dado a Hinata y Neji cuando habían comprado a sus yokai, Sasuke ya tendría casi cinco meses, mientras que Naruto apenas iría por a la mitad de su cuarto mes, además de que ya habían pasado dos meses desde que habían sido adoptados.
Sasuke iba dormido tranquilamente en su caja, mientras que Naruto se agarraba fuertemente de la reja de esta, le causaba demasiada curiosidad todo lo que pasaba afuera de esta, como las personas o lo árboles.
Entraron al hospital, Neji fue el que registró a ambos yokai y después fueron a la sala de espera mientras los llamaban. Hinata sacó a Naruto de su caja y lo puso en su regazo, el yokai se sentó sobre sus cuclillas y siguió mirando atento, no comprendía en qué lugar se encontraba, había muchos como él, solo que ahora no estaban detrás de cajas de vidrio, sino con sus respectivos dueños.
-Pueden pasar-le dijo una enfermera a Neji y Hinata.
El primer en ser revisado por el doctor fue Naruto, cuando Hinata lo puso sobre la mesa de exanimación, Naruto comenzó a maullar y a ponerse nervioso. El doctor se apresuró a acariciar la cabeza de este en un intento de calmarlo.
-Tranquilo-le dijo una voz y Naruto volteó a verlo, se trataba de un hombre de cabello largo y negro, piel bastante blanquecina, ojos de color ámbar, pero lo que le causaba más desconfianza a Naruto era su voz, parecía como si una víbora estuviera hablando, incluso a Hinata le causaba la misma sensación.
El doctor tomó, su estatura, el pulso de Naruto, escuchó los latidos de su corazón, examinó su boca y garganta y por último lo peso-está un poco pasado de peso, saben que no deben de darle aún de su comida-reprendió el doctor a Hinata-fuera de eso se ve saludable.
Hinata asintió sintiéndose regañada, era cierto que por las tardes le daba a veces papas o algún pedazo de pan, sintió como Neji la miraba con desaprobación.
-¿Han encontrado en él alguna marca de nacimiento?-preguntó el doctor.
-Sí-Hinata le alzó un poco la playera a Naruto, mostrando como alrededor del ombligo de este había un remolino, rodeado por unas extrañas marcas. El doctor le tomó una foto, así como después una al rostro de Naruto.
-Son para el expediente las fotos, no te preocupes-le dijo amablemente el doctor a Hinata, al ver que la chicha se había extrañado cuando sacó la cámara-Bien, que tal si ahora vemos al tuyo-le dijo a Neji.
Sacó a Sasuke de su caja, al parecer llevaba un tiempo despierto, la diferencia es que Sasuke era bastante tranquilo, lo colocó sobre la mesa y Sasuke miró hacia donde estaba el doctor, de no ser porque este también lo estaba mirando, Neji como Hinata se hubiera percatado de la expresión de este al ver a Sasuke, era como si estuviera sorprendido.
Procedió a examinarlo como Naruto, para cuando terminó, tuvo que esconder el ligero temblor de sus manos- Esté chico está bien-dijo acariciando la cabeza de Sasuke, quien lanzó un tenue maullido, pero no por miedo sino como si estuviera orgulloso de él mismo. Neji acarició a Sasuke y miró a su prima burlándose de ella y de Naruto.
-¿Alguna marca?-le preguntó el doctor.
-Sí-Neji le bajó un poco la playera para mostrar parte de su espalda y hombro. La marca de Sasuke era parecida a tres comillas formando un círculo. El doctor no puedo evitar mirarla con detenimiento y después procedió a tomarle foto, así como también a Sasuke.
Después de eso a cada uno de yokai se le pusieron las vacunas correspondientes, Sasuke como siempre fue muy tranquilo, solo que después de haber sido vacunado se aferró con fuerza a Neji quien lo cargaba mientras le acariciaba la cabeza. Naruto por su parte, necesitó de que Hinata los sostuviera para que se dejará vacunar, sin mencionar que maulló todo el tiempo.
-Todo está bien con sus yokai, solamente a ese-señaló a Naruto-deberían de ponerlo a jugar más a menudo, de esa manera no engordará y dejen de darle cosas que no deben de comer-
La mamá de Hinata fue por ellos en el auto, después de la revisión. Una vez que Sasuke se hubo tranquilizado, se recostó en el regazo de su dueño, pero Naruto por su parte solo maullaba y con su cabeza trataba de mover las muñecas de Hinata para poder esconderse debajo de sus brazos. Sasuke comenzó a hartarse de lo maullidos de Naruto así que con una de sus manos intentó arañarlo en la espalda. Naruto volteó y lo araño también, Sasuke acabó lanzándose sobre Naruto.
-¡Separen a esos dos!-gritó la mamá de Hinata y ambos primos separaron a su mascotas antes de que se hicieran algún daño- esos dos son como agua y aceite, más vale que los eduquen o si no, ya saben quién se va a deshacer de ellos-lo amenazó la mamá de Hinata, pues Hiashi el padre de la niña, les había dicho que si los yokai no eran educados como debían los regresaría a la tienda o los botaría en la calle.
-¿Papá los pondrá a pelear algún día?-preguntó Hinata preocupada.
-No lo sé, los entrenadores de la familia por ahorita están haciéndose cargo de unos yokai. Tu padre dijo que quería que estos fueran solo mascotas para ustedes, aunque ya sabes cómo cambia de opinión-
-No quiero que Naruto pelee-dijo con tristeza Hinata.
-Ni Sasuke-se apresuró a decir Neji, se había encariñado demasiado con su yokai en esos meses.
-Descuiden, Hiashi no romperá su promesa, a solo que sea necesario-
Neji como Hinata se miraron, ninguno de los dos quería perder a sus yokai. Sabían perfectamente que el padre de Hinata no era de las personas que cumplía promesas, generalmente era experto en romperlas todas.
*~**~*
Miraba detenidamente la foto de la marca de nacimiento del yokai, se supone que después de registrarlos, si los yokai presentaban alguna marca de nacimiento, se podía averiguar cuál era su linaje y así poder hacer un pronóstico de si sería un buen luchador. Sonó el teléfono de su consultorio mientras observaba la foto.
-Dr. Orochimaru Hebi-
-Doctor-dijo su asistente-lo buscan-
-Gracias, ahora salgo-colgó el teléfono y guardo la foto en uno de sus cajones, antes de que entrará la persona que estaba esperando afuera.
-Buen día, soy Hiashi Hyuga, me parece que hoy mi sobrino y mi hija llevaron a sus yokai a revisión, la recepcionista me dijo que usted fue quien la llevó a cabo-le dijo un hombre de tez blanca y cabello castaño.
Orochimaru miró el expediente de los yokai, llamados Sasuke y Naruto, en efecto sus propietarios se apellidaban de esa manera –Sí, así es, ¿en que puede ayudarlo?-
-Me gustaría saber-dijo el hombre tomando asiento-¿Qué tan saludables son esos yokai?-
-Salieron bien en sus exámenes-dijo con indiferencia Orochimaru.
-Ya veo-dijo Hiashi complacido-¿Poseían alguna marca de nacimiento?, ya sabe, para saber su linaje-
-Sí, lamentablemente, no tengo la información de quien puedan ser sus progenitores o parientes. Además de que no le puedo dar esa información, ya que realmente su sobrino y su hija no pagaron para que se llevara a cabo dicho estudio-
Los estudios sobre el linaje de los yokai eran realmente caros, razón por la cual muy pocos dueños podían saber que tan bueno sería su mascota, además de que el conocer la marca de un yokai, podía darle ventaja al oponente, es por eso que eso se trataba con sumo cuidado, sin mencionar que con confidencialidad.
-Veo que mi esposa no les dijo a los muchachos que lo pidieran. ¿Es posible que yo pueda pedirlo ahora?-
-Por supuesto, solo debe pagarlo con mi asistente y se realizaría el estudio, por lo que al cabo de sietes días hábiles usted podría saber que tan buen luchador es su yokai-
-Perfecto-
-Solo por curiosidad, su sobrino e hija dijeron en el cuestionario que sus yokai no pelearían-
-Oh si-Hiashi pareció incomodarse con la observación del doctor-verá, se los compré para que se hicieran más responsables, les dije que solo serían mascotas, pero ya sabe la situación puede cambiar y se pueden ver obligados en tener que dejar que su yokai pelee-
-¿Hyuga?-dijo Orochimaru leyendo el expediente-Ustedes son famosos por entrenar a los mejores yokai-puntualizó Orochimaru, viendo como Hiashi se sentía orgulloso al oír la mención de eso.
-Es cierto, tengo mi empresa de refacciones, pero lo cierto es que lo que más nos deja son las peleas de yokai. Actualmente tengo a siete de estos en entrenamiento, hemos ganado los últimos cinco campeonatos-dijo como si nada.
-¿Realmente quiere ese análisis para saber si los yokai de sus hija y sobrino son mejores que los que tiene en entrenamiento cierto?-
-Es cierto, de ser así, ahora que hay tiempo podría incluso intercambiar a uno de los yokai que son entrenados por el de uno de ellos-
-Por supuesto-le dijo Orochimaru con una sonrisa de complicidad- entonces solo pase con la asistente y pagué por el estudio, nosotros nos pondremos en contacto con usted, una vez que los resultados estén listos.
*~**~*
Naruto observaba como Sasuke jugaba con su madeja, se percató de que un hilo de esta arrastraba así que intentó atraparlo, claro que al hacerlo impedía que Sasuke pudiera mover con libertad su juguete, así que Sasuke jaló con fuerza su madeja, logrando que Naruto soltará el hilo, pensó que con eso y el lanzarle una mirada furiosa a Naruto le bastaría, pero no. Cuando le dio la espalda a Naruto este se abalanzó sobre él, logrando que Sasuke brincara del susto.
Tomó la madeja y se sentó en sus cuclillas mientras movía su cola mirando felizmente a Sasuke, solo que este estaba molesto, lo miraba con los ojos entrecerrados y entonces se lanzó sobre Naruto.
-¿De nuevo están peleando?-le preguntó su mamá a Hinata.
-No, están jugando, mira la cola de Naruto, la está moviendo-dijo Hinata contemplando a ambos yokai.
Nauro usaba la madeja para protegerse de los arañazos de Sasuke, aunque estos realmente no le hicieran mucho daño, ya que Sasuke tampoco quería lastimarlo, incluso se estaba divirtiendo. Pero Sasuke dejó de moverse cuando de pronto sintió una lengüetada de Naruto en su mejilla, ahora Sasuke estaba debajo de Naruto, mientras este movía con su cola y miraba con felicidad. De nuevo intentó arañarlo para quitárselo de encima, pero Naruto se movió más rápido y le mordió su oreja con delicadeza y Sasuke tuvo que aventarlo con fuerza para que dejara de hacerlo.
Hinata se reía mientras los seguía viendo, al parecer Naruto no odiaba a Sasuke como ellos habían pensando, aunque al parecer Sasuke no le tenía tanta paciencia a Naruto, tal vez por ello es que se peleaban tanto.
Hiashi llegó a la casa en ese momento y tanto Hinata como su madre sirvieron la cena, mientras lo hacían Hiashi contempló a los yokai, al parecer al rubio era al que le gustaba pelear, con solo ver como hacía que Sasuke le siguiera el juego.
-¿Por qué regresaste tan tarde?-le preguntó su esposa, cuando ya todos estuvieron sentados.
-Fui con el doctor, para que me dijera como están los yokai-
Tanto Neji como Hinata se miraron, la única razón por la que su padre se preocuparía por sus mascotas, era porque estaba pensando usarlas para aquellas peleas.
-Hiashi, dijiste que estos yokai serían mascotas, lo prometiste-le reclamó su esposa, mientras se servía agua.
-Lo sé, solo quise que investigaran su linaje, si salen mejor que los que tengo en entrenamiento, puede que tenga que cambiarlos-
-¡Prometiste que no los usarías!-gritó Neji enojado por las palabras de tío, al parecer nunca podría cumplir una promesa.
-Lo sé-le contestó Hiashi con seriedad- pero al final de cuentas las peleas de Yokai, son nuestra principal fuente de ingresos, así que prefiero sacrificar a una mascota que vivir en la miseria solo por tenerla aquí en la casa como un adorno inútil-
Neji aventó los cubiertos y se retiró de la mesa, antes de irse a su cuarto, tomó a Sasuke, quien lanzó un maullido cuando lo separaron de Naruto. Hinata siguió los pasos de su primo y se encerró en su cuarto con su yokai, el cual se quedó frente a la puerta maullando, hasta que cayó dormido.
-Podrías cumplir una de tus promesas por una vez-le dijo su esposa frustrada-te dije que no quería que les comprarás yokai, hubiera sido mejor un perro o un gato, al menos esos mueren debido a la vejez no porque le gobierno los maté-dejó a su esposo solo en la mesa y se retiró a su cuarto.
Hiashi siguió comiendo como si nada hubiera pasado, sabía que tanto su hija como su sobrino lo odiaban en aquellos momentos, pero solo era cuestión de tiempo para que sus hijos lo entendieran.
*~**~*
Encontró a primo recostado en la mesa de la cocina, seguramente le habían dejado mucho trabajo, le echó una ojeada en lo que estaba trabajando, en cuanto vio la foto lo despertó de un golpe, ese Orochimaru nunca entendía.
-¡Orochimaru, te dije que dejarás de sacarle fotos a Itachi, no es una rata de laboratorio!-
-¡No le he hecho!-le reclamó Orochimaru mientras se sobaba la cabeza.
-¡¿Entonces porque de nuevo tienes esas fotos de su marca?!-dijo señalando la foto de que estaba sobre la mesa.
-Fugaku, está no es una foto de la marca de Itachi-
-¡No me mientas, sabes que solo Itachi y Mikoto tienen esa marca!-
-¡Esta marca es de un yokai que me llevaron a revisar hoy!-
Fugaku se quedó petrificado, estaba sorprendido por las palabras que le estaba diciendo su primo- Eso no es posible-
-Mira la foto-Orochimaru le mostró la foto de Sasuke a Fugaku, quien no pudo evitar abrir los ojos con sorpresa, no había duda, debía de ser la misma criatura que Mikoto había dado a luz hace unos cuantos meses.