Kasamatsu: ¡Ki-kise! Eh oye... ¿estás bien? Eh Kise ¡responde!
Kasamatsu comprueba la respiración y las pulsaciones y ve que sólo es un desmayo.
Se lo lleva a su cuarto y cura mientras las heridas de la espalda.
Kasamatsu se siente mal primero porque Kise no era como antes y segundo por los esfuerzos que está dando.
Una vez que termina de curar las heridas, le pones una camiseta nueva y le tapa con las sábanas de su cama.
Al terminar se queda mirando la cara de Kise e intenta controlar sus impulsos.
Baja al salón para recoger las cosas de Kise que había dejado nada más entrar, al coger la maleta de repente sonó el móvil de Kise, ve la pantalla y el número era de Aomine. Ante esto Kasamatsu se enfada y cuelga la llamada.
Luego empezó a hacer la cena y al terminar le llevaría de comer a Kise para que se reponga.
Kise: ¿Dónde estoy y que hago aquí? –preguntó al aparecer de repente en las escaleras- ¡Kasamatsu! ¿Es esta tu casa? ¿Qué hago aquí?
Kasamatsu: Pero que haces idiota?! Vete a la cama ahora te cuento.
-Fueron juntos a la habitación-
Kasamatsu: resulta que en la puerta de mi casa te has desmayado y te has golpeado la espalda y has sangrado un poco, pero se te curará pronto, y sí, esta es mi casa y este es mi cuarto así que quédate aquí y no te muevas, te voy a traer la cena.
Kise: ¡Agh, no! No hace falta que mue cuides así… -dijo mientras tapaba su cara sonrojado-
Kasamatsu: No seas idiota, estás peor que yo así que cállate o te pego –dijo alzando un puño-
Kise: ¡Huele a quemado! ¡LA CENAAA! –aprovechó que Kasamatsu bajó las escaleras para coger el móvil y ver las llamadas perdidas de Aomine-
Kise: ¿Y esto…?
Kasamatsu: tsk… maldito Kise… siempre metiéndome en problemas menos mal que casi todo es comestible –dijo mirando el plato-
Kise: ¿Aomine? ¿Qué querías? No, ahora yo… No quiero hablar de eso… ¿Eh? No, no te disculpes ¿eh?...
Kasamatsu: Oye... toma come anda… -le da una bandeja con un plato que llevaba una tortilla y algunas verduras y un vaso de agua-
-se da cuenta de que está hablando por teléfono y cree que es Aomine-
Kise: ¿Ahora? No, no voy a ir, olvídalo, adiós –colgó el teléfono-
Kasamatsu: ¿Quién era? Te sonó mucho el móvil antes.
Kise: No era nadie… ¿Qué traes?
Kasamatsu: -ante esto se enfadó ya que sabía que era Aomine- toma la cena, avísame cuando termines –se va mosqueado-
Kise terminó de cena. Bajó la bandeja y vio que Kasamatsu aún estaba enfadado.
Kise: ¿Qué te pasa?
Kasamatsu: Nada, ¿Qué me va a pasar?
El móvil de Kise volvió a sonar.
Kise: Que pesado… -colgó-
Kasamatsu: ¿Te has quedado con hambre? –dijo ignorando lo del móvil-
Kise: No, ¿y tú?
Kasamatsu: No…mmm… voy a preparar las cosas para dormir aquí
Kise: No hace falta, me voy ya
Kasamatsu: ¿Qué dices idiota? ¿No ves que estás mal? Tranquilo te puedes quedar a dormir si es lo que te preocupa
Kise: Tengo que ir… a hacer algo importante…
Kasamatsu: Kise es mejor que descanses ¿o quieres lesionarte y no jugar?
Kise: Ya… pero… es algo importante
Kise recoge sus cosas, y a pesar de las quejas, se va.
Kasamatsu está enfadado por haberle ayudado y aun así no se lo agradece
-Al día siguiente-
Kasamatsu tiene las heridas de las piernas abiertas y sangran más y encima no durmió esa noche.
-En el gimnasio-
Entrenador: Tss… Kise no ha aparecido… ¿Kasamatsu sabes algo?
Kasamatsu: No… -se siente más enfadado aún-
Entrenador: Y hoy teníamos un amistoso contra Seirin
Kasamatsu: Bueno…daremos lo mejor… ¡vamos!
-Después del partido-
Kasamatsu: -hemos perdido 90-60… maldito Kise… y yo esforzándome al máximo-
Kasamatsu va al vestuario y de pasada escuchó decirle Kuroko a Kagami que Kise se había ido a dormir con Aomine.
En ese momento Kasamatsu se enfadó muchísimo y se sintió usado y sin importancia y encima él tenía sentimientos hacia Kise.
-Flashback-
<POV’s Kasamatsu>
En uno de los entrenamientos normales que teníamos antes de competición, estaba nervioso por como haríamos los partidos siguientes, pero había una extraña sensación esos días y creía que era sobre los partidos así que no le di importancia.
Al acabar el entrenamiento Kise y yo nos fuimos a casa juntos ya que vamos siempre por el mismo camino, y como siempre le paraban unas fans, ¿porqué leches tienen que ser tan escandalosas?
Una vez terminado el alboroto hubo un gran silencio y como siempre lo rompió Kise.
Kise: oye Kasamatsu… me preguntaba estos días que cada vez eres más famoso ¿no?
Kasamatsu: Qu-qué!? Que dices bakka… yo no soy popular como tú –le di un pequeño puñetazo en el costado-
Kise: Aaah~ sempai… pues yo creo que eres popular… aunque con tu humor se espantarán cada vez más… así no le gustarás a nadie jajajajajaja
No sé porque pero me entristecí ante esto, y me vino una pregunta en la mente… ¿No le gustaré nadie?...
Kasamatsu: Prefiero ser así que ser un idiota escandaloso como tú
Kise: Jajajajaja sempai no te enfades tú tienes tu encanto –me sonrío tontamente como hace-
Me sonrojé bastante pero se me pasó rápidamente.
Kise: Sempai… estoy nervioso por los partidos que vienen ahora…
Kasamatsu: No pasa nada si estamos concentrados nos saldrá bien
Kise: -sonrío- Me alegro de tener un sempai como tú, sin ti no seríamos el equipo de ahora –me puso la mano en el hombro-
A partir de aquí se me paró el tiempo esos segundos fueron el tiempo justo para darme cuenta de que sí, estaba enamorado del chico que más me sacaba de quicio, miré fijamente a Kise y esa mirada dorada… no podía desviar la vista de él.
Él, era esa persona que me ponía nervioso en unos segundos, sí, esos precisos segundos que cambian todo, y sin darme cuenta me enamoré de él y me aferré a él, pero negué esto aun así ya me he dado cuenta suficiente que es la verdad.
Encima esas palabras que me acaba de decir, me pusieron muy nervioso creyendo que tenía alguna esperanza, tsk estúpido como podría fijarse en una persona como yo teniendo a esas locas fans.
Dejé de mirarlo y quité su mano de mi hombro.
Kasamatsu: No digas esas cosas… el equipo es bueno gracias a ti también
A Kise le brillaron los ojos sin saber el porqué de esto.
Kise: oh ya hemos llegado… tengo que irme, hasta luego sempai luego hablamos si eso por móvil, adiós~
Kasamatsu: Adiós –susurré-
-Fin flashback-
Entró al vestuario y se cambió las vendas, las heridas estaban peor ya que hoy se esforzó más de lo debido, además la frustración acumulada le daba cada vez más dolor de cabeza.
Kasamatsu: soy un idiota… -dijo en un susurro y cabizbajo-