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... Pero nunca lo sabras... por Rin Bunny

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Notas del capitulo:

PERDON POR LA DEMORA, en verdad PERDON

Pero estos meses, en si todo mayo e estado ocupada con lo que es mi tesis...

Volvi... FALTAN POCOSA CAPS PARA EL FINAL, por fin no? aaahhh

PERDON POR LA DEMORA Y POR EL DESASTROZO CAPITULO... ahora si a leer :3

J = Jung Min

B = Hyung Jun

S = Geun Suk

JUNG MIN

 

“No, no te vayas…”  – se desperté agitado y todo sudoroso de aquel sueño. No lo recordaba del todo, eran solo imágenes, algunas frases, oraciones incompletas, pétalos de cerezo a su alrededor, un abrazo, un beso, una sonrisa y un adiós que daba a entender que esa era una despedida–

Se levantó con pesadez de la cama y con los pies arrastrando se dirigió al baño. Prendió la luz de esta y recordó los rayos del sol de su sueño, se acercó al lavamanos, se vio el rostro y fue cuando noto las lágrimas en sus mejillas. Había llorado… había llorado por aquel sueño y no lo recordaba, bufo por lo irónico que podía llegar hacer y se lavó la cara, fue a la cocina, tomo una poco de jugo y volvió a su cama. Al acostarse en ella vio la ventana, aún estaba oscuro, no quería saber qué hora era… así que se acurruco entre las sabanas, hacia frio a esas horas de la madrugada, y se volvió a dormir. Ignorando por completo aquel sueño.

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Se removió y estiro la mano para tirar al despertador que osaba levantarlo a esas horas de la madrugada, porque si... para él aún era madrugada, cuando lo encontró no dudo en apagarlo y tirarlo lejos, solo supo que se rompió o algo parecido porque el ruido que escucho fue fuerte... muy fuerte. Cuando volvía a quedarse dormido, a los pocos minutos de matar al primer despertador, otro ruino interrumpió su sueño, mataría aquel que dejo 2 alarmas en su cuarto y para que suene a esa hora… con este despertador tuvo que ser más minucioso, ya que no lo encontraba, pero cuando lo encontró, aquel despertador corrió con la misma suerte que el otro, murió valientemente y con honores por hacerle la guerra al durmiente salvaje que tenía como dueño. Estaba a punto de girarse y volver a dormir, cuando su celular empezó a sonar… no grito de frustración porque en ese mismo momento recordó que tenía cosas que hacer, pero lo más importe era que tendría una cita, una muy importante.

 

Tomo el celular, se quitó el antifaz de panda que aun tenia y vio… bueno, que no eran tan de madrugadas como creyó, eran las 8:30 ya. Soltó un gran bostezo, si lo comparaban con algún animal, los osos pandas estarían orgullosos de él. Se estiro un poco en la cama como un gato y con pereza se levantó de esta. Hoy sería un largo, pero largo día, esperaba comenzar con el pie derecho para que todo le saliera bien. 

Camino con los ojos cerrados al baño, cuando sintió un fuerte dolor en el pie derecho, se alejó de inmediato levantando el pie, abrió los ojos y pudo ver lo que piso, el despertador que había lanzado minutos antes se hallaba roto en el piso frente a él. Cercioro que su amado pie no tuviera ningún corte y se puso las pantuflas, eso le pasaba por ir descalzo por ahí.

 

Eran las 9:30 de la mañana cuando entro a su cocina, ya bien bañado, limpio y con mucha hambre. La noche anterior no había comido, bebido más que un vaso de leche y jugo en la madrugada, tenía mucha hambre. Cuando estuvo frente al televisor, tenía en una mano un pan tostado y en la otra su taza de café con leche, en la mesa de centro una fuente con más pan tostado, un vaso de jugo y un poco de fruta picada. Prendió la televisión y no sabía que programa ver a esa hora, pero sabía que tenía que estar informado y así prefirió escuchar las noticias. No había nada interesante. Dejo la televisión prendida y volvió a la cocina con la fuente ya vacía.

Se encontraría con aquella persona a las 5 de la tarde… y recién eran las 10 de la mañana, ¿qué iba hacer todo el día?

 

Vio que su despensa comenzaba a disminuir, así que sin nada que hacer en casa y con Jumrye y los gemelos en casa de sus padres no tenía con quien jugar en esos momentos. Tomo un abrigo, su bufando, una mascarilla color café, se puso todo aquello antes de salir de casa y alzando la capucha del abrigo salió al súper.

 

No le molestaba que lo reconocieran, solo que con el frio que hacía, no quería enfermar. Eran pasadas las 1 de la tarde cuando volvió a casa, había caminado al súper Marquet que no estaba tan lejos y para comprar algunas cosas, pero no sabía que se traería la tienda completa al ver y no recordar si tenía lejía, o detergente o limpia vidrio, leche o juego de banana, ¿las zanahorias se le habían acabado? Y muchas cosas como estas, hicieron que el carrito de compras le quedara muy chiquito y más por tener que esperar la cola inmensa que había a esa hora. Con más de 4 bolsas en cada mano salió de la tienda, por lo que tenía que tomar un taxi, porque si iba caminando podrían ocurrirle tres cosas:

 

La 1° sus brazos se le caerían, aunque algo exagerado, pero podía ocurrir… con ese frio, nadie sabe cuan fácil es que se congelen los huesos y la carne.

 

Lo 2° que le roben todas sus “cosas necesarias” y “para evitar volver al súper” en su camino.

 

El 3° y no menos drástico, se le rompieran las bolsas, eso sí sería un problemón, si eso pasaba el mismo regalaría sus compras en la esquina de la calle.

 

Cuando llego al edificio de su apartamento, el chofer le ayudo a bajar todas las bolsas y el guardia del edificio a llevarlas al ascensor, estaba agradecido con aquellos hombres que les dio una pequeña propina por la ayuda. Al abrir la puerta se puso a ordenar todas sus compras, dándose la sorpresa que la mitad de sus compras ya las tenía y que la otra mitad no. Había sido un día de compras productivo, ya que la próxima no compraría algunas cosas y tendría menos bolsas que cargar. Cuando termino se debatía en comer fuera o cocinar algo, no sabía cuál elegir, por un lado no quería volver a salir, pero por otro no quería cocinar, haría un pedido de entrega, estaba buscando el número de algún restaurant cuando su celular sonó. Era Geun Suk, hace tiempo que no hablaba con él.

 

M: “Hola Suk que milagro”

S: escucho un bufido del otro lado “Milagro que tú me respondas caballo ingrato” – sentencio el actor –

Jung Min gruño antes el apodo y dijo: “Este caballo tiene mejores cosas que ir gastando palabras con una anguila como tú”

S: “Ya, ya no aguantas ni una broma no? ¿Cómo estás? Algún plan para el almuerzo, estoy saliendo de la sala de grabaciones, almorzamos juntos, Jun me llamo, también se apunta a la comido”

M: “No esas bromas no me gustan, estoy bien gracias, enserio… y sobre el almuerzo mmm ¿dónde nos vemos?”

S: “Oh en ‘Gran Mom’, esa cafetería que está cerca de la JYP, estoy cerca al igual que Jun ¿podrás llegar?”

M: “mmm Gran Mon, solo porque no los veo tiempo, llegare en 30 minutos, espero que no haya mucho tráfico.”

S: “Oh genial, nos vemos entonces”

M: “Nos vemos Suk”

S: “Bye bye”

M: “Chau”

 

Así la llama se cortó, fue a su cuarto y se dio una ducha rápida, se puso ropas abrigadoras, sabía que no volvería a casa hasta muy tarde, al terminar de almorzar con los chicos se iría a dar unas vueltas y a pensar, luego a reunirse con quien tenía que hablar. Cogió una mochila, puso aquel regalo que le había comprado a su hyung, sus llaves, billetera, celular, audífonos, iPod y en una bolsa puso los presentes para esos dos amigos que vería ahora. Salió de su casa, tomo un taxi, al bajar de este frente al local, pudo ver como Jun entraba corriendo y frotándose un poco los brazos en la entrada de la puerta. Min ingreso al local y con la mirada busco a sus dongsaeng’s y los pudo ubicar en una de las mesas del fondo, el local era tranquilo y no habían muchas personas a esas horas.   

 

S: “Hey tú, llegaste”

J: “Hey ustedes, llegue” – los 3 jóvenes se vieron y rompieron en una armoniosa carcajada – “¿Cómo han estado chicos?”

S: “Bien gracias, ya sabes grabando, estudiando y aprendiéndome el nuevo guion… todo igual con la diferencia que Kyu no está a mi lado” – cada que Suk nombraba a Kyu Jong esa tristeza en él se reflejaba como un sol mañanero, era duro tener lejos a la persona que amaba, lo entiendo muy bien, pero su caso es diferente…

J: “Tranquilo Suk… ya falta poco para que Kyu vuelva”

B: “Si hyung, Kyu hyung está bien, lo fuiste a visitar el otro día no es así?”

S: dándonos una leve sonrisa nos dijo “Es verdad chicos, discúlpenme por poner así jejeje y si Jun, fui con su madre a verlo”

J: “¿Cómo está?” – pregunte, ya que la última vez que pude hablar con Kyu Jong… bueno no… no fue un momento grato para ninguno.

S: “Él está bien, lo está haciendo bien en el ejército, lo vi con ojeras, está tomando cuerpo” – todos reímos con este comentario – “Manda saludos, me pregunto por todos y si lo estaban haciendo bien” – y fue cuando su mirada se posó en mi –

J: “Lo estoy haciendo bien” – dije con la mejor sonrisa que tengo – “Siempre lo hago bien”

 

Y la tarde transcurrió de esta manera, en una amena y tranquila conversación con estos dos buenos amigos… Kyu Jong siempre estucó cuando más necesitaba de alguien, siempre me apoyo, me consoló, guardo secretos, fue mi paño de lágrimas, quien me consolaba todas la noches… Muchas veces me reproche el no haberme enamorado de él, pero las cosas pasan por algo… el encontró a un gran tipo, uno que lo respeta, ama y adora… Suk y Kyu son la pareja perfecto, me alegro por ellos.

Hyung Jun es un buen chico, reímos mucho por sus comentarios, que de una u otra forma… aún siguen siendo infantiles, no sé cómo Nam Soo lo soporta, a no, me olvidaba que son como espejos ¬¬ jajajajajaja par de niños.

 

S: “De verdad me gustaría quedarme más tiempo con ustedes chicos” – nos dijo viendo su reloj – “Pero me tengo que ir, hoy grabaremos hasta tarde fuera de la ciudad”

B: “Oh Suk no te preocupes, yo también tengo que irme” – dijo levantándose –

J: “Esperen por favor” – dije sacando los presentes que les había comprado en Japón – “Esto es para ti Jun y este… es para ti Suk” – les dije dándoles sus respectivos regalos –

S: “Oh hyung no debiste” – dijo viendo la pequeña bolsa de cartón que le di – “¿Qué es?” – y rápidamente la abrió, es un niño.

B: “Haber, a ver que me trajiste” – dijo un entusiasmado Jun, él no cambia.

J: “jajajaja, espero que les guste” – a Suk le compre un collar hecho de plata con un pequeño dije en el medio, cuando lo vi, no sé porque pero me dije “eso debe ser de Sukkie”, a no, ya me acorde… es porque el dije es un anguila jajajaja. Mientras que a Jun le traje un caja de sus dulces que son sus preferidos, esos que solo ¨Japón sabe hacer¨ según él… muere por esos dulces jajajaja ahora mismo está que los come ¬¬

S: “No es que sea mal agradecido ni nada hyung, pero… me parece o ¿me estás dando una indirecta?” – dijo viendo serio, no pude mas y estalle en una sonora carcajada, hace mucho no reía así jejeje

B: “Grachiash Mhinnn” – dijo Jun con unos cuantos dulces en la boca, cuantos por no decir que tenía como 5 en ella, hay este chico.

J: “No Suk, como crees… lo que pasa es que cuando vi aquel collar me dije “Suk, debe tener esto” y lo compre, es la verdad y tú Jun deja de hablar con la boca llena” – le dije dándole un zape en la cabeza –

J: “Yah hyung deja de golpearme y si me atorro?”

S: “ja ja ja que gracioso, pero igual gracias… me gusta” – dijo dándome una de esas sonrisas que conquista a sus fans –

J: “Bueno, vayan a realizar sus deberes, vayan no quiero que me culpen luego por sus demoras…” – al terminar de decir esto el celular de Suk sonó y despidiéndose con la mano se fue del lugar, de seguro era su manager.

Fue como me quede solo con Jun, este me miraba intrigado, no se… me sentí algo incómodo, a decir en verdad, todo el rato me ha mirado de esa forma.

Iba a preguntarle qué pasaba cuando me estiro la mano y me dio uno de esos dulces diciendome “Hyung gracias por ser mi amigo” dejando en mi mano estirada uno de los dulces, parándose y abrazándome inesperadamente, sabía que Jun era de los chicos impulsivos y los que hacían lo que querían cuando lo querían, pero por algún motivo extraño, sentí su abrazo algo… algo melancólico, queriéndome decir algo, pero sin saberlo ni él mismo que era ese “algo” por decirme…

 

“Gracias a ti Jun por estar siempre conmigo, por cuidarme sin que me diera cuenta, por guardar mis secretos, por ser mi pequeña tortuga de molestia, la que me sacaba de mis casillas para solo hacerme olvidar mis tristezas. Gracias a ti Hyung Joon, gracias ^_^”

 

El abrazo se terminó y sin saber que más decirnos, Jun se alejó y antes de salir por la puerta, se despidió agitando la mano, como los niños cuando se despiden de sus padres en la puerta de los colegios y salió del local, dejándome solo en aquel lugar.

 

Eran las 15:40 cuando por fin me digne a dejar el local. Me dirigí al centro para caminar y despejar la mente por un momento, el lugar al cual cite a Saeng no está muy lejos de donde estoy actualmente, la cual es una pequeña tienda de ropas… me hace falta un nuevo chall.


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