-Hyung.- susurró Taemin al leer las últimas publicaciones de Jonghyun en su cuenta de Twitter.
¿Matrimonio? ¿Key y Minho? Más una carita llorando.
Pasó saliva nervioso e incomodo, ¿qué quería decir Jonghyun con aquellos post? No lo sabía y ahora estaba ansioso por ello. Lo normal sería entrar a su habitación y preguntarle a qué se debieron, pero tal vez dejaría ver un poco de sus sentimientos por el más alto.
-¿Aun estás cansado?- preguntaron llamando su atención, bajando su móvil para esconderlo entre sus muslos y mirar la televisión.
-¿Quien?- preguntó mirando a Onew. –¿Yo?- se apuntó.
-Sí tú, no hay otra persona aquí.- contestó riendo leve mientras se sentaba en el mismo sofá que Taemin y tomaba el control remoto.
-No.- dijo.
-Hemos estado trabajando con los conciertos, pensé que estabas cansado.- se encogió de hombros para beber de la botella de agua que había sacado del refrigerador minutos antes.
-¿Kristal está bien?- después de haber presentado Red Light supo que se desmayó, quizá por eso Onew le había preguntado si estaba cansado.
-Sí, no fue nada grave.- asintió Taemin.
-Hyung.- susurró llamando la atención de Jinki. –¿Usted sabe por qué Jonghyun publicó eso en su Twitter?- ni siquiera había elevado la mirada.
-No lo sé.- dijo bajando el volumen del televisor. –¿Por qué no le preguntas? Está en tu habitación.- ¿pero cómo llegaría a preguntarle?
El escenario A en la mente de Taemin, era jugar al policía malo: patear la puerta para entrar e ir por Jonghyun que seguramente estaría mirando alguna película desde su laptop, levantarlo del cuello de la playera y preguntarle muy cerca de su rostro a qué se refería.
El escenario B, era Taemin entrando de manera común y corriente a su habitación, iniciando la conversación con el tema de Sungmin y su casamiento en unos meses más, una cosa llevaría la otra y terminaría diciéndole a qué se refería con esas publicaciones.
Pero ni A ni B, se quedó sentado mirando el televisor con Jinki hasta que llegó Key, que había ido a la tintorería a recoger uno de sus vestuarios, entró, saludó y luego se perdió en su pieza con la ropa en los brazos.
Hasta donde sabía los únicos miembros casados eran él y Key. Bueno él ya era un alma libre como lo había dicho en WGM con Arisa, pero ya hablar de ese compromiso “de verdad” con Minho y Key… como que no le gustaba.
Sí, el contrato terminaría el año siguiente. Pero también era cierto que iban a renovar todos para que SHINee siguiera brillando. Los cinco. Solteros. Los cinco siendo solteros. Haciendo ese tipo de cosas que a las fans les gustaba y al tiempo, cuidando de sus imágenes con las personas con quienes salían.
Con los otros hyungs de grupos diferentes a su empresa o de la misma.
-Ya llegué.- Taemin parpadeó un poco para girar su cabeza por encima de su hombro y ver a Minho entrar a su casa. –Me voy a dar una ducha y luego salgo a cenar. ¿Key ya hizo la comida?- preguntó entrando hacia la sala.
-No, llegó con ropa y se fue hacia su habitación. Jonghyun tampoco la ha hecho, ha estado en su habitación…- y de ahí en adelante dejó de escuchar al líder, Taemin se levantó del sofá para ir a un lado de Minho, tomar su mano y jalarlo hasta la habitación propia.
Entró abriendo la puerta, empujando a Minho dentro luego cerró la misma y recargó su espalda.
-Her?- preguntó Minho mirando la pantalla de Jonghyun, este sacó la paleta de caramelo macizo de su boca para mirar a sus compañeros.
-Sí, ¿la quieres ver conmigo?- Taemin hubiera golpeado su frente al olvidar que en su habitación estaba Jonghyun. Minho se acercó a la cama del vocalista, se agachó levemente para mirar mejor la pantalla.
-Ya va más de la mitad.- dijo.
-No podemos verla, hyung.- interrumpió Taemin tomando la muñeca de Minho para, ahora, sacarlo de su habitación y llevárselo a la ajena. En donde al entrar justo como ocurrió segundos antes, Taemin terminó con la espalda pegada a la puerta y Minho observándolo.
-¿Qué… ocurre?- pregunto nervioso por el comportamiento del menor.
-¿Te vas a casar?- preguntó elevando sus acuosos ojos, encontrando los granes de Minho.
Este suspiró mientras reía.
-Por qué me preguntas eso, ¿Taemin?- preguntó riendo aun, de manera leve mientras se acercaba al mencionado. Estiró su mano para ponerla sobre los hombros ajenos y conducirlo hacia su cama, en dónde lo sentó.
-Por lo que publicó Jonghyun.- contestó susurrando, sin elevar la mirada. Fue la mano de Minho en su barbilla lo que provocó el contacto visual.
-Qué sabe Jonghyun.- contestó Minho. –También ha envuelto a Key y tú y yo sabemos lo que hay entre esos dos.-
-Pero…-
-Es por el calor del momento. Sungmin va a contraer nupcias y eso ha vuelto locas a ELF, quiere provocar algo similar en SHINee World.- le sonrió.
-Entonces lo que publicó.- no dijo nada más pues Minho comenzó a asentir suavemente. Sin quitar la mano de su quijada lo acercó a sus labios para darle un suave beso.
-Es porque ni Key ni yo quisimos ver esa película con él.- susurró.
-Her?- preguntó separándose lentamente de Minho.
-Sí. Yo tenía que ir a la biblioteca de la Universidad por un libro para mi tarea y Key tenía un traje en la tintorería por eso le dijimos que no.-
-¿Entonces todo está bien?- preguntó Taemin sonriendo de nuevo, dejando atrás la incertidumbre de la publicación de su vocalista.
-Todo está bien.- contestó levantándose de la cama sin soltar la mano de Taemin. –Ahora vamos a cenar para dormir porque mañana tenemos un vuelo a Shanghái y lo correspondiente. Tendremos que tener muchas energías para nuestro momento.- ambos salieron de la habitación del mayor.
-Minho.- susurró el menor. –¿Puedes prometerme algo?- el nombrado soltó su mano y fue hacia el lavamanos para asearlas y empezar a cocinar la cena.
-Dime.-
-Que nosotros siempre estaremos juntos.- susurró sin pena, pues suponía que el resto de los miembros al oírlo, lo relacionarían con el grupo y no a ellos de manera más intima.
-Aquí y en Shanghái, Taemin, siempre juntos.- no fue eso lo que le hizo sonreír, sino la sonrisa que había esbozado Minho al decirlo.
Porque esa era diferente.
Era como cuando ganaba.
Era sincera.
-Gracias.- contestó sonriendo para sí mismo. –Yo también lo prometo.-