Reita amaba a Ruki con todo su corazón, desde que lo vio por primera vez había quedado embelesado con el joven y con el paso de los años esa atracción se volvió en amor, amaba su inocencia y su manera infantil de comportarse y su positivismo para con todo.
Tanto era el amor que le tenía que sentía que explotaría en cualquier momento y que Ruki fuera su mejor amigo no ayudaba mucho ya que de alguna manera u otra este siempre lograba estar un momento a solas con él para pasar un momento juntos ya fuera comiendo, viendo una película o enseñándole una nueva letra para alguna canción que sospechosamente era al único que se las mostraba por lo que se había decidido que el día de hoy a como diera lugar le diría sus sentimientos al vocalista de la banda.
Se la habían pasado ensayando casi toda la tarde y ahora estaban el descansando del ensayo, habían tocado Wakaremichi, Last heaven, Ganges ni akai bara, Guren, Cassis y otras canciones por lo que estaban exhaustos, él estaba hablando con Uruha y Ruki estaba jugando con Aoi, y se veía demasiado feliz a su lado lo cual había hecho rabiar a Reita que solo esperaba que el descanso acabara para poder descargar su energía en su bajo ya que había notado que cada que dejaba salir sus emociones tocando en su amado instrumento la melodía proveniente del mismo era demasiado hermosa y dejaba a todos impresionados.
Por estar viendo a Ruki con Aoi no le prestó atención a Uruha el cual le había estado diciendo casi todo el rato que todos se reunirían en casa de Ruki para pasar un momento todos juntos.
-¡Reita! Le llamaron haciendo que su concentración en Ruki se distrajera logrando que volviera a la persona que le estaba hablando.
-Lo siento… ¿Qué decías?
-Decía que hoy iremos a la casa de Ruki después del ensayo, ya todos confirmaron solo faltas tú.
-Oh… entonces iré. Dijo con entusiasmo ya que podría estar con Ruki, y con suerte lograría un momento a solas con el menor donde podría decirle lo que sentía.
-Chicos es momento de volver al ensayo. Grito el líder haciendo que todos regresaran a sus puestos y tocaran de nuevo.
Cuando acabo el ensayo cada quien fue a su auto para poder ir a la casa del vocalista el cual por mera coincidencia no traía su automóvil.
-Ne Reita, ¿me llevas a mi casa? Le pregunto Ruki con su mejor mirada de cordero a punto de ser degollado y un puchero en sus labios sacando una risita por parte del alto.
-Pues ya que… Dijo tratando de sonar desinteresado pero la sonrisa en sus labios terminaba delatándolo.
Ambos subieron al auto del bajista y cuando se hubieron puesto los cinturones de seguridad, el mayor arranco el auto y se encamino para ir a la casa de Ruki.
-¿Y bien? Pregunto tratando de descubrir el ¿porque Ruki no llevaba su cauto?
-¿Y bien qué? Pregunto Ruki mirándolo con infantilismo.
-¿Por qué no has traído tu auto? Pregunto divertido el mayor.
-Porque…porque…um…porque… ¡se descompuso! Dijo tratando de ser convincente sin serlo ni un poco.
-Oh… ¿y que le paso? Pregunto Reita siguiéndole la corriente.
-Um…se…le…descompuso…la…la…el…um… -Ruki puso su mano en su barbilla tratando de pensar en una buena excusa- el radiador. Dijo a modo de duda.
-Ho… Dijo Reita tratando de no morir de risa por la mala actuación del hombre a su lado.
-Sí, y lo peor es que tuve que venir en autobús, las locas fans casi se me avientan encima al ver que subí al autobús puedes creerlo. Dijo inflando sus mejillas y cruzando sus brazos.
-Hooo… Dijo volteando a verle momentáneamente haciendo que su corazón se acelerara por la imagen tan linda que le daba Ruki.
-Y… ¿ahora porque tan hablador? Le pregunto Ruki dejando su berrinche de lado mirando al bajista.
-No por nada… ¿y dime tienes nuevas películas en tu casa?
-Sí, y tengo de terror, conseguí la del conjuro y la de Anabel para cuando quieras desvelarte. Dijo sonriendo tiernamente.
-Ok. Dijo sin decir más.
Reita encendió el estéreo y ambos se dedicaron a escuchar música mientras llegaban a la morada del vocalista, en cuanto llegaron ambos entraron y como era de suponerse, ambos arreglaron el lugar en espera de que los demás llegaran, habían sacado cervezas y las metieron al congelador para que se enfriaran, ceniceros para los cigarrillos que seguramente fumarían, entre otras cosas como botanas y refrescos. Al poco rato llegaron Aoi, Uruha, Kai y algunas personas de otras bandas.
Prendieron el estéreo que tenía Ruki y pusieron música, fueron a la cocina y sacaron la cerveza que tenían en el congelador, Ruki en cuanto vio que Aoi estaba desocupado fue con él y como en el ensayo Uruha se acercó a Reita, Reita y Uruha empezaron a charlar de cosas triviales pero unas risas los sacaron de la conversación volteando a ver al lugar de donde provenían las carcajadas encontrándose a Aoi y Ruki jugando a las cosquillas mientras Kai trataba de no ser incluido en el juego. Ambos hicieron una mueca de molestia y el que se dignó a ir por uno de los dos risueños fue Uruha el cual al llegar con ellos miro a Aoi de manera asesina y luego tomo a Kai de la mano y lo rapto para irse de nuevo con Reita dejando una gran cara de disgusto en la cara de Aoi.
-Bien Reita ¿de que hablábamos? Dijo Uruha tratando de tranquilizarse mostrándole una sonrisa macabra.
-Hablábamos de las nuevas películas que tiene Ruki.
-Hoo… ¿y cuáles tiene? Dijo algo interesado Kai.
-Tiene la del conjuro y Anabel, ¿quieren verlas?
-¿Sabes dónde las guarda? Preguntaron ambos con sorpresa.
-Por supuesto. Dijo con su habitual tono desinteresado.
-Pues vamos. Dijeron ambos y Uruha tomo la mano de Reita jalándolo para ir por las dichosas películas, y el bajista solo se dejó hacer ya que realmente no le importaba mucho.
-Lo siento pero Uru no ira a ningún lado. Dijo Aoi mirando a Reita algo molesto y más al volver a ver sus manos juntas.
-¿Disculpa? Dijo Uruha.
-Lo que oíste. Dijo Aoi jalándolo para llevárselo a alguna parte de la casa.
-Oh genial… una pelea pre-marital. Dijo Kai golpeando su frente.
Reita no le presto mucha atención y fue al baño, en cuanto salió logro ver a Ruki casi a punto de ser besado por alguien a quien no distinguió y guiado esta vez por sus celos lo saco del lugar y se lo llevo hasta uno de los cuartos de la casa.
En cuanto cerró la puerta lo beso con fiereza acorralándolo en la puerta, en cuanto lo dejo de besar, lo guio a la cama donde sus manos empezaron a recorrer aquel cuerpo perfecto, sintiendo la suave piel empezar a arder bajo su tacto, Ruki estaba siendo totalmente sumiso, parecía que no le importara que le tocara o que sus dedos exploraran cada rincón de su ser.
Él se estaba molestando, ¿porque aun después de haberlo besado a la fuerza y arrastrarlo a aquel cuarto oscuro no protestaba? ¿Por qué no lloraba ni se removía? No parecía que le disgustase lo que le estaba haciendo pero tampoco parecía que lo disfrutara.
Siguió acariciando por debajo de aquella molesta camisa la piel del menor, llego a sus botones y empezó a acariciarlos, los pellizcaba y rodeaba con su yema la aureola pero al no recibir respuesta estaba por dejar de hacerlo cuando escucho.
-Haa. Un suspiro salió de los labios del cantante lo cual empezó a motivarlo por lo que siguió haciéndolo mientras ahora besaba el cuello de Ruki y este solo soltaba suspiros hasta que en un momento escucho un suave gemido que hizo que todo su autocontrol desapareciera.
Lo beso desenfrenadamente metiendo su lengua en la cavidad del otro acariciando el paladar y casi llegando a la garganta, Ruki solo ahogaba gemidos por el beso.
Dejo de besarlo y acariciarlo recibiendo una protesta por parte del más bajo logrando que sonriera burlonamente.
-¿De qué te ríes? ¿No crees que es injusto el traerme hasta aquí solo para esto? Y yo que esperaba más. Dijo Ruki con un tono de niño pequeño haciendo berrinche y cruzando sus brazos dándole la espalda.
Eso le hizo reír suavemente ya que aun sabiendo lo que estaban por hacer el cantante mantenía esa actitud de niño inocente que no le quedaba del todo a sus 32 años.
-Tranquilo, solo iba por esto. Dijo Reita mostrándole el pequeño frasquito el cual dejo a un lado de la cama en la mesita de noche.
-Ahora… ¿en que nos quedamos? Pregunto el alto con una voz gruesa haciendo que a Ruki le diera un escalofrió que recorrió todo su cuerpo.
-No lo sé, tú dime. Dijo con una voz suave llena de inocencia, que se perdía en la distancia entre sus labios y respiraciones.
Reita en vez de contestar lo beso, empezó siendo un beso dulce y tranquilo que no iba en el ambiente que ya tenían pero aun así fue subiendo de tono a tal grado en que las lenguas de ambos danzaban en un baile sin fin adentrándose más en la cavidad del otro. Mientras se besaban se iban acariciando por debajo de sus ropas, Reita seguía explorando cada rincón de aquella tersa piel y Ruki solo se dedicaba a acariciar los pectorales del mayor. Reita al sentirse satisfecho con lo que ya había recorrido rompió el beso y empezó a dejar besos por las mejillas, frente, mentón y clavícula del menor para luego ir al cuello donde besaba, chupaba y mordía con intención de marcar al cantante como suyo, mientras que este solo dejaba salir pequeños quejidos de placer; Reita al estar besando el cuello de Ruki se dio cuenta del bulto en los pantalones del mismo por lo que dispuesto a torturarlo un poco lo beso de nuevo mientras deslizaba su dedo índice desde su pecho hasta la entrepierna del menor donde paso aquel digito por encima de la ropa dejando oír un sonido gutural que salió de la boca del menor, siguió paseando su dedo por aquel lugar hasta que Ruki rompió el beso y soltar un gemido.
-Ahhhh…Re…Reita…e…esperaaahh. Gimió el menor en cuanto sintió toda la mano del bajista acariciarlo por encima de la ropa.
Reita con cuidado fue recostando al menor en la cama mientras le desabotonaba la camisa y le quitaba el pantalón lentamente, dejándolo solo en ropa interior, lo miro admirando su belleza logrando que Ruki se avergonzara y tratara de taparse con algo. El mayor previendo esto se posiciono encima suyo tomando ambas manos del menor y colocándolas arriba de su cabeza empezando a besarlo y luego de unos segundos fue bajando hasta su pecho donde se detuvo a mirarlo, se veía hermoso, su cara sonrojada y sus ojos entrecerrados lograron que Reita se quedara embelesado unos segundos para luego seguir besándolo hasta que bajo al vientre donde dejo otro chupetón haciendo gemir a Ruki
-Ah.
Llego al borde del bóxer y bajo con sus dientes la ropa interior dejando al descubierto el miembro de su acompañante, no espero ni 5 segundos para metérselo en la boca, subía y bajaba mientras enrollaba con su lengua toda la extensión del menor, de vez en cuando lamiendo la punta volviendo loco al cantante que no hacía nada más que aferrarse a las sabanas de la cama y gemir su nombre.
-Reii…ahh…Reita, si…sigue…ahhh.
El bajista solo siguió con su trabajo unos minutos más ya que no quería que el menor se corriera tan rápido, con un movimiento ágil logro alcanzar la botellita de lubricante y en lo que cubría sus dedos con un poco subió a besar los labios de su amante el cual se hallaba demasiado excitado, mientras ambos se besaban el mayor metió un dedo en la entrada del cantante donde logro descubrir como sospechaba que era virgen, Ruki solo sintió un poco de dolor pero tratando de ignorarlo beso con más fiereza a la persona que amaba.
Reita metía y sacaba su dedo y lo movía en círculos tratando de prepararlo y cuando creyó que era tiempo metió un segundo dedo, los empezó a mover en forma de tijeras logrando sacar alguno que otro suspiro del menor y cuando metió el tercer digito por fin escucho una queja por parte del joven y tratando de distraerlo comenzó a masturbarlo nuevamente, Ruki solo sentía un dolor punzante proveniente de su trasero que de poco a poco se convertía en placer infinito y empezó a seguir las embestidas de los dedos con sus caderas, al ver esto Ruki saco sus dedos y antes de seguir le pregunto a Ruki.
-¿Estás seguro que quieres continuar?, no quiero obligarte a nada.
-Estoy seguro. Dijo el menor mirando al bajista con ternura y amor.
-Pero, te traje aquí sin tu consentimiento y…
-Vine porque quise, Reita, te amo así que hay que hacerlo. Dijo el menor besando a Reita el cual al oír esas palabras todas sus dudas se esfumaron y decidido correspondió el beso, adentrando la punta de su hombría en el interior de Ruki.
Takanori trataba de no estar nervioso y no ponerse rígido ya que sabía de muy buenas fuentes (se lo pregunto a Uruha y este le había respondido de esa manera) que dolía si eso hacía más nunca sus fuentes le dijeron que aun dolía sin ponerse rígido, Reita espero unos momentos quieto disfrutando de la estreches de Ruki mientras el mismo se acostumbraba y a este le duro poco el sufrimiento ya que pronto se volvió placer infinito así que empezó a mover sus caderas a un ritmo suave y lento dando un roce demasiado placentero para ambos, pero Reita decidió que era el momento de subir la velocidad por lo que empezó a subir el ritmo haciendo que de un momento a otro Takanori estuviera en cuatro siendo embestido salvajemente y que ambos lanzaran varios gemidos.
-Dios Ruki…eres…ahh…tan…estrecho.
-Mhhmm…Ahhhh…Rei…Reitaaaahhh…maaahhhaas…rápido.
Suzuki siguiendo aquella petición aumento el ritmo de las embestidas cínicamente a tal grado de que casi partía a la mitad al pobre cantante de la banda el cual solo gemía sin control alguno y sintiéndose poco satisfecho, el mismo vocalista cambio de posición sentándose en las piernas del bajista logrando que la hombría de Reita llegara más profundo en su interior dando en aquel punto exacto donde Ruki llegaría al éxtasis.
-Ahhhh…ahhhhh…Reita…Ahii.
Reita al escuchar eso solo siguió guiando las caderas del menor mientras este saltaba por toda su extensión logrando dar en aquel lugar que lo llevaba al cielo mismo, Reita queriendo darle más gozo a su amante empezó a masturbar su miembro dándole doble placer al menor el cual disfrutaba demasiado hasta que llegó un momento donde todo su ser comenzaba a temblar por el placer y con un pequeño grito le aviso a su ser amado que no aguantaría mucho tiempo más.
-Reitaaahha…me…me…vengo ahhhhh.
-Yo…AH….También.
Dijeron ambos aumentando más el ritmo y luego de unas pocas estocadas más ambos se vinieron, el menor entre sus vientres y el mayor dentro del cantante en el mismo momento que se dijeron:
-Te amoooo.
Ambos acabaron exhaustos pero satisfechos, Ruki se acostó en la cama guiado por Reita el cual lentamente salió de su interior para luego darle un beso suave y lleno de cariño en los labios que fue bien correspondido.
-Te amo, te amo, te amo demasiado, me tienes loco Ruki. Dijo Reita abrazando al menor con posesividad el cual como niño mimado se dejó hacer con una gran sonrisa en los labios.
-Te amo. Solo respondió con cansancio pero con voz dulce.
Ambos se abrazaron y Reita antes de caer rendido a los brazos de Morfeo, los cubrió a ambos con el cubre cama y las sabanas que tenía la cama.
A la mañana siguiente, Reita se despertó temprano viendo el rostro de Ruki en total calma y serenidad al estar dormido, así que con cuidado se separó de él sin despertarlo y se dirigió a la cocina del menor para preparar el desayuno. Ruki fue despertado por los rayos del sol que daban en su cara y poco a poco los recuerdos de la noche anterior vinieron a su mente haciéndolo sonrojar hasta las orejas pero al mismo tiempo se sentía feliz, cerro sus ojos nuevamente pero al instante los abrió al notar que nadie más estaba en su cama que él, haciendo que se alarmara ya estaba a punto de salir de la cama cuando su puerta fue abierta.
-Buenos días Ruki. Le dijo Reita con una gran sonrisa.
-Hola. Dijo Ruki algo avergonzado y bajando un poco la mirada sonrojado.
Reita se acercó a él y le beso la frente para luego llevarle el desayuno, era algo muy americano un vaso de café y pan tostado pero no importaba ya que era hecho con mucho amor, además de que era lo único que Reita no podría echar a perder por su déficit de-no-saber-cocinar.
Al terminar de desayunar ambos se dieron una ducha y en cuanto bajaron se encontraron con Aoi y Uruha comiendo arroz y tamagoyaki con una gran sonrisa en sus labios cada que sus miradas chocaban.
-¡Ah!... hola chicos. Les dijo Aoi.
-Buen día. Respondieron al unísono.
-¿Y los demás que vinieron anoche? Pregunto Reita sentándose junto a ellos.
-Se fueron a la madrugada, nuestro líder se dedicó buena parte de la noche y madrugada en limpiar tu casa Ruki. Dijo Uruha.
-¿Y porque no me llamo? ¿Podríamos haberla limpiado juntos? ¡Qué vergüenza que el haya tenido que limpiar todo. Dijo Ruki algo preocupado.
-No te preocupes, dijo que disfrutaras mejor tu noche y que lo más seguro que hoy estarías exhausto asi que quiso hacerte un favor. Dijo Aoi demasiado divertido al ver el gran sonrojo de Ruki.
-Bueno, y ¿quién más aparte de él sabe? Pregunto Reita.
-Nosotros, pero ya saben, no diremos nada, después de todo ustedes no han dicho nada de lo nuestro.
-Sera nuestro pequeño secreto, ¿ok?
-Ok. Respondieron todos.
Todos esperaban que su pequeño secreto no fuera descubierto pero mientras no fuera así, todo estaría bien.
FIN.