Entramos a mi casa besándonos apasionadamente, hasta llegar a mi habitación y me sorprendí, esta noche han sido de sorpresas y aun no terminaban mi cama tenia pétalos de rosas formando un corazón.
-AAHHH!! Eres tan tierno, gracias amor- lo empecé a besar él fue llevándome hasta la cama donde caí empezó a llevarme hasta el centro de esta, mediantes besos que fueron aumentando de intensidad. Juntábamos nuestras lenguas y jugábamos con ellas tratando de enredarlas, de probarnos con más ahínco a la hora de besarnos, sentía que se acababa el aire y paramos. Nuestras respiraciones estaban agitadas y empezamos otra serie de besos más apasionados y empezó a bajar hasta mi cuello dejando un hilo de saliva hasta el lugar.
Empezó a desabrochar la camisa, mientras volvió a besar mis labios, cada vez sentía estallar de pasión lo amo demasiado. Me saco la camisa y se rio.
-Me la pones difícil-me saco la muscula que llevaba abajo, no sin antes besarme mientras retiraba la musculosa por sobre los hombros. Sonrió
-Me encanta tu piel es suave- me tocaba hasta llegar a mi pecho rodeo con sus dedos mis pezones y luego los pellizco lo que hizo que gimiera
-Eso es gime para mí- cada vez pellizcaba más fuertemente mis botones lo que hacía que mis gemidos que ya no paraban de llenar el lugar, esto me encantaba.
Posteriormente bajo y libero mi excitación, quitándome primero el pantalón y tocando mi virilidad por sobre la tela, lo que provoco que curvara mi espalda y gimiera
-Espera un momento- hice un puchero inconscientemente, me he vuelto muy caliente. De una caja saco unas amarras- esta noche será tuya- y me las puso en cada muñeca y estas las amarro a la cabecera de la cama, lo que me mantenía con los brazos hacia arriba. Mordí mi labio esto me llena de lujuria y el solo me miro y sonrió como imaginando el placer que viviría.
Pellizco mis pezones nuevamente y coloco sobre ellos una especie de pequeñas trabas que mantenían apretados lo que me excitaba muchísimo
-ah ah ah- Gemí de placer, eso me encanto
Se dirigió de lleno a mi excitación me quito mi ropa interior, ya estaba completamente desnudo y el aún continuaba con ropa
-Bueno seguirás con ropa mientras yo aquí estoy a tu merced- lo dije con ese tono calentón y pícaro
-Que impaciente pero si me quieres ver no hay problema- de pie y de espaldas a mí, se quitó un hombro me lo mostro y se lo volvió a tapar yo me reí. Después se quitó ambos hombros y se giró mostrando todo su torso bien trabajado que hizo que me mordiera el labio inferior, es exquisito un deleite para mis ojos. Se bajó el cierre del pantalón lentamente esto me está enloqueciendo, se giró y se sacó el pantalón y la ropa interior y yo recreando mi visión con las nalgas más perfectas que han pisado la tierra.
-Veo que te gusto lo que estás viendo-
-Sabes que me excita tu cuerpo-
-Que sincero-
-Gracias- nos reímos
Se acercó a mi miembro que se metió de una en la boca y lo succiono hasta llegar a la punto lo que me provoco unos espasmo
-¿Te gusta?- yo apenas podía abrir los ojos
Contorneaba mi glande con su lengua y tomaba con ella cada gota de líquido preseminal que ya escurría y succionaba nuevamente la punta de mi miembro lo que me provocaba nuevamente una ola de espasmos y gemidos
-A..amor es.. est me..me encan-
-Mi princesa golosa no puedes ni pronunciar bien las frases- empezó a lamer mi miembro de base a punta y se introducía mi miembro y empezó a dar unas enérgicas mamadas provocando que curvara mi espalda. Metía mi miembro en su boca me miraba de vez en cuando y seguía haciéndome la mejor felación que me hayan practicado
-A..Amor pa..me..ven..g- no termine la frase cuando ya había acabado en su boca y el trago sonoramente todo mi semen
-Riquísimo amor cada día estas más dulce- dejo que regularizara un poco mi respiración, que con el orgasmo que viví, me dejo cansado.
Cuando vi su miembro frente mi cara, yo miraba mi golosina preferida, es como él decía soy una princesa golosa, pero no podía tocar este manjar, que impotencia
-Amor mira tengo tu dulce predilecto, a ver abra la boquita- creo que estamos más que conectado y yo haciendo caso de inmediato abrí mi boca y recibí su miembro, empezó envestir lentamente mi boca, haciendo que disfrutara de su gotas perladas. Saco su miembro y lo afirmo frente a mí para que disfrutara mejor de su esencia, así que yo con mi lengua tomaba cada gota que salía y la pasaba por su glande, esto me enloquece. Volvió a embestir mi boca lentamente al comienzo hasta llegar a ser cada vez más fuertes sus gemidos se escuchaban por toda la pieza lo que me encantaba verlo disfrutar. Sentí aumentar la velocidad lo que me indica que está a puertas de terminar, lleno mi boca que su esencia la que no me demore en tragar y degustar, tenía un sabor agridulce.
-¿Rico?- jadeaba mientras hablaba
-No te imaginas cuanto -
Llego a mi entrada y lamio por todo el contorno a vez que simulaba embestidas con su lengua, esto provoco que mi miembro se volviera a tensar
-Definitivamente eres una princesa golosa- se rio.
Dejo mi ano y tomo mi miembro con una de sus manos empezó a bombear, mientras con la otra mano la llevo a mi entrada e introdujo uno de sus dedos y empezó a moverlo adentro de forma circular, después ingreso un segundo dedo, esto me dolió un poco espero unos segundos y empezó abrir como tijeras, sentía que se me distendía adentro, mientras seguía con los movimientos lentos de arriba abajo sobre mi falo. Retiro sus dedos y saco de la cajita unas bolas unidas le hecho un líquido y las acerco a mi ano.
-Amor esto te molestara al inicio pero prometo que te gustara- ¿Que va hacer? Me estoy poniendo nervioso.
Introdujo la pelota más pequeña dentro de mi ano, después la segunda, la tercera esta bola me dolió por lo que me queje el beso mis muslo
-Aguanta mi amor- introdujo la cuarta y quinta bola sentía me iba partir, porque no solo eran varias sino iban aumentando de tamaño
-Vamos amor estamos por las ultimas- introdujo las 3 últimas y estas hicieron que me salieran unas lágrimas y apreté las amarras de mis manos
-Tranquilo bebe- Seco mis lágrimas, espero un momento me dolía un mundo
- ¿Estas bien?-
Respondí con un hilo de voz -Si- ya me estaba acostumbrando
- Si quieres lo dejamos hasta aquí-
-Que estás loco no me dejaras así de excitado con mi falo cada vez más duro y con esto en el culo olvídalo- Ya esto me molesto
Ja ja ja ja –Ya entendí, se acercó a mi oído –Prepárate- ¿para qué?
Bajo y prendió el interruptor y las bolas empezaron a vibrar dentro de mí, yo me curve y mi piernas las doble nunca había sentido tanto placer junto, era una sensación indescribible.
Mientras el atendía mi miembro, mis gemidos eran tan fuertes que se escuchaban por toda la casa
-Vo..Voy a Aca…bar- Estaba a entradas de mi segundo orgasmo esto es lo máximo
-No aun no- ¿Qué dijo?
Tapo con su dedo la punta del glande y con la otra mano saco unos anillos que puso alrededor de mi miembro.
Lo matare!! me va dejar con las ganas, eres un maldito Siwon me las pagaras.
-Viste que te gusto, pero ya es tiempo que este dentro de ti- Saco las bolas de adentro
-No- respondí instintivamente a la falta de contacto
-veo que a mi bebe le gusto el juguetito nuevo- lo dijo con esa voz insinuadora –Oh que hermosa vista veo como tu hermosa entrada de contraer para mí-
-Hazlo de una vez- Juro que me vengare, osea me tenía amarrado, con unas trabas en mis pezones, con mi hombría en su máximo esplendor y con unos anillos en la base y dilado a mas no poder y él se demoraba.
Posesiono su glande en mi entrada –Halla va a amor- de una sola embestida entro, empecé a moverme casi instantáneamente, aunque me molestaba un poco no podía esperar más.
El entendió el movimiento y empezó a envestirme. Mis piernas las puso sobre sus hombro y acerco su boca a la mía me beso como si su vida dependiera de ellos cuando ambos nos quedamos sin aire paro, salió de mi interior me giro en la cama y me puso en cuatro hizo que apoyara los codos en la cama con mi culo levantándome ofreciéndose hacia él.
Volvió a unirse en mi pero cada vez las embestidas eran más bruscas, literalmente me cogía como bestia, con una mano tiraba de la cadena de los pezones y con la otra estimulaba mi miembro amarrado.
-oh Dios oh Dios voy a acabar-siguió embistiéndome y mientras sacaba en los amarres de mi hombría y continuo con la masturbación
Hasta que sentí un líquido entrar y el con toda su mano llena de semen, habíamos acabado a la vez. Él se apoyó en mi espada y yo caí como saco de papa en la cama agotadísimo.
Cuando ya tranquilice mi respiración y el también, salió de mi interior, desamarro mis amarra y dejo un beso en cada muñeca, saco mis rabas de los pezones. Era como que me quedara un vacío.
-Amor te amo demasiado, buscare una toalla y te limpiare un poco-
-Yo también te amo- apenas sostenía mis ojos abiertos
Se me fueron cerrando lentamente mis ojos. Al otro día me encontré acurrucado en el regazo de mi novio, me trate de soltar de su abrazo de oso me senté en la cama y el dolor en la parte baja de la espalda no era muy motivador, alcancé mi celular telefoneé a mi trabajo para pedirle el día, ya que las obvias condiciones no me iban a dejaran ejercer. Me quede regaloneando en su cama con mi futuro esposo.