-¿Sigues sin poder dormir bien?- preguntó Jinki mirando al maknae cabecear hacia adelante, queriendo y no, dormirse.
-Déjalo, haber si se duerme.- susurró Key tomando la cabellera de Taemin para recargarla en su hombro.
Lo cierto es que Taemin había tenido problemas de sueño porque en alguno de los últimos vuelos que habían tomado se le perdió su almohada y desde entonces las noches se volvieron complicadas, las pasaba girándose en la cama, cambiando de posición la almohada haciendo de todo para intentar dormir pero no tenía éxito alguno.
Ni las almohadas súper suaves de los hoteles en donde se hospedaban eran tan cómodas como la que él perdió.
-Ya llegamos.- susurró Jonghyun apuntando a través de la ventana al hotel.
-No lo despierten.- dijo Key pues el resto de los miembros había comenzado a bajar del auto a prisa, y cualquier ruido lo podría despertar. –Minho.- le llamó, el nombrado sólo lo miró afuera del auto. –Ayúdame.-
Asintió y se acercó estirando sus brazos para sacar al maknae, lo tomó y al instante Taemin abrió los ojos.
-¿Ya llegamos?- preguntó somnoliento.
-Minho te va a llevar.- susurró Key saliendo del auto, cerrando la puerta corrediza tras de él. –Sigue durmiendo.-
-No.- contestó Taemin bajando de sus brazos. –Caminaré.- Minho se encogió de hombros y caminó detrás él. También estaba preocupado por el descanso del menor, antes de cada concierto tomaba mucha cafeína y multivitamínicos pero al finalizarlos, era como si toda la energía de Taemin cayera hasta el subsuelo.
Sabía que esa almohada estaba más que perdida en el aeropuerto y que difícilmente la encontrarían. Habían ido los cinco a varias tiendas de muebles para buscar una nueva, pero ninguna le convencía a Taemin.
Porque eran muy suaves, porque eran muy duras, porque estaban muy pequeñas, porque eran enormes, parecía que él tampoco quería cooperar con su asunto del sueño, justo como lo había hecho segundos antes, cuando decidió que caminaría hacia el elevador y de ahí a su habitación.
-¿Quieren cenar?- preguntó Jinki dentro del elevador, esperando al resto. –Podemos encargar algo.- una vez todos dentro, junto con el manager, indicaron el piso en el que querían y el elevador subió.
-Mañana antes que nada, tenemos que buscar una almohada para Taemin.- dijo el manager, todos asintieron.
-Estoy bien.- susurró Taemin en medio de todos. –Una vez que estemos en casa estoy seguro que dormiré. Creo que también es porque extraño mi cama.- minimizó el asunto, pero todos negaron lento e imperceptiblemente.
-Vayan a bañarse, les pediré la cena.- dijo el manager una vez abiertas las puertas, todos salieron en dirección a su habitación.
Jinki abrió pasando una credencial, se hizo a un lado para que todos pasaran y al final entró cerrando la puerta.
-Hay dos baños, así que dense prisa.- indicó caminando hacia la sala de estar, dejándose caer en uno de los sofás.
-Nos podemos bañar de dos.- dijo Kibum caminando hacia su habitación.
-¿Y me tocará bañarme con el manager?- preguntó riendo levemente. –Sólo apúrense chicos.-
-Danos quince minutos.-dijo Jonghyun riendo, caminando tras los pasos de Kibum, entrando al baño.
-Quince minutos tendrán.- contestó Jinki acomodándose mejor en el sofá.
-Estaba pensando en el problema de Taemin.- dijo Minho entrando a la sala de estar para sentarse al lado de Jinki.
-Mañana vamos a ir a otra tienda, sólo espero que esta vez sí le gusten las que haya.-
-Creo que el problema está en que lo presionamos para que elija una.- dijo Minho tomando un cojín de los sofás, lo amasó y recostó su cabeza en él para sentir la comodidad.
-Yo también pienso que hace berrinche cuando las mira.- dijo Jinki estirándose para alcanzar el control remoto, pero al no hacerlo Minho se levantó para tendérselo. –Gracias.-
-Iré a ver si se metió a bañar, sino para hacerlo yo.- se llevó el cojín en sus manos para entrar a la habitación que les fue asignada. –¿Taemin?- no lo vio por ninguna parte. –¿Te estás duchando?-
-¡En un momento salgo!- el eco más el agua cayendo se lo afirmaron.
-No, disfruta tu baño.- contestó para caminar hacia la cama, se dejó caer y puso el cojín bajo su cabeza para intentar dormir. Para Minho sí estaba cómodo, pero la noche anterior Taemin no pensó lo mismo.
-Listo.- salió del cubículo con la bata del hotel. –Puedes ducharte.- caminó hacia la cama mientras secaba su cabello.
-¿Has comido bien?- preguntó Minho sin despegar su rostro del cojín.
-Sí.- contestó.
-Este cojín también está suave.- sintió el peso de Taemin en la cama y luego su calor. –No sé por qué no pudiste dormir ayer.- sintió su húmeda cabellera en la parte declive de la espalda.
-Extraño mi almohada.- susurró mirando hacia el techo.
-Cualquiera te puede funcionar, todas están suaves.- susurró Minho contra la almohada, sintiendo y escuchando como reía Taemin.
-Escoger una almohada no es tan fácil.- dijo cerrando los ojos. –Es como el matrimonio, con ella vas a pasar gran parte de tu vida.- Minho asintió dándole razón.
-Pero deberías de considerar buscar una para que las noches sean más cómodas.- dijo Minho sintiendo húmeda su ropa.
-¿Novia?- preguntó Taemin riendo.
-Almohada.- corrigió.
-No quiero hacer un gasto innecesario.- contestó suspirando. Estaba a punto de dormirse así que se giró para mirar la cabellera de Minho.
-Yo te la compro.- propuso. –No quiero que sigas sin dormir y drogándote para poder estar de pie, bailando y cantando en los conciertos.-
-No me estoy drogando.- susurró, sus ojos ya no querían abrirse y el cansancio se escuchaba en su voz.
-La cafeína también es droga.-
-No quiero preocupar a SHINee World.-
-Entonces sólo compra una almohada.-
-Mmm…- lo meditó. –No.- contestó sonriendo.
-Deja de ser un gasto innecesario cuando tiene un beneficio para ti.- dijo. –Además yo te la compraré. Escoge laque sea pero mañana.-
-Ya te dije que no.- susurró Taemin luchando por abrir los ojos. Y es que no compraría otra, no mientras Minho se siguiera prestando para ser su almohada.