- Shizu-chan -dijo Izaya muy conmocionado al oír esas palabras salir de la boca del rubio, jamás en su vida se hubiera imaginado desde el día en que lo conoció lo percibió, SU rubio era demasiado orgulloso se notaba a leguas, por eso el decir esas palabras le debía de haber costado esfuerzo y esa hazaña lo había conmovido hasta las lágrimas, si, el gran Izaya Orihara uno de los hombres más peligrosos de Ikebukuro se encontraba llorando como todo un hombrecito.
- ¿Izaya? ¿Estas llorando? - pregunto con un tono de burla en su voz.
- C-Claro que nooo - Dijo el azabache intentando ocultar su rostro de la vista de Shizuo.
- ¡Claro que sí! No tienes por qué ocultar tus emociones de mí, quiero compartirlo todo contigo y esperó lo mismo de ti, no hay necesidad de fingir ser otra persona en mi presencia, deja que tus emociones fluyan, muéstrame tu debilidad y yo también te mostrare la mía, puedes confiar en mí, de la misma forma en que ahora confío en ti.
- No temes que al voltear tu mirada e clave el puñal por la espalda.
- Si me haces sentir todas estas emociones nuevas, sería un gusto que usted rompa mi corazón.
- Jajaja ¡Que cursi! Si Shizu-chan, ya capte la idea, sabes podría vender esta información a algún diario popular – exclamo el pelinegro algo emocionado, lo que molestó mucho a Shizuo.
- I-ZA-YAAA- empezó a exasperarse el rubio.
- Jajaja ¡Cállate y bésame bestia!
Ni lento ni perezoso el rubio acato la “orden”, lo abrazo y lo besó, un beso lento y suave al principio, que se fue convirtiendo en uno cargado de pasión, sus lenguas danzaban dentro de la boca del otro de manera lujuriosa, el rubio empezó a subir sus manos por el pecho del otro recorriendo con sus dedos la separación simétrica en el pecho, y llegando por fin a los pezones quienes acarició y luego pellizco suavemente, provocando un suave jadeo por parte de Izaya, quien impaciente le quitaba el corbatín de su traje de Bart-tender, desabotonando su camisa y admirando sus pectorales , además de cavar sus fuertes uñas en la perfecta y bien formada espalda Shizuo.
- ¿Es necesaria tanta agresividad contra mi espalda?
- Cállate, estoy marcando mi territorio, tu espalda y todo tu ser ahora son de mi pertenencia.
- ¿ Hah ? ¿Entonces eso significa que tú también me perteneces? Dijo Shizuo que seguí en su tarea de juguetear con los botones rosados de Izaya.
- ¡Oh! ¡C-Calla Shizu-chan por mi lado no tendrías motivos de celos! En cambio tú.
- Yo ¿Qué?
- Tú dejas que todos se acerquen a ti y yo… ¡SOY EGOÍSTA! ¡No pienso compartirte con nadie!
¡A excepción especial de tu hermano! ¡Pero ni uno más!
- Que bueno que pienses de esa forma, me alegra saberlo, porque yo tampoco pienso compartirte con nadie.
Izaya muy sonrojado, solo atinó a decir- ¡Menos charlas más acción!
Y continuaron con su faena, Shizuo le arrebato los pantalones a Izaya, dejándolo solo con los bóxer puestos, mientras él, solo tenía el pantalón puesto, lo que causo la indignación del azabache.
- No es justo Shizu-chan ¡Quiero ver tus sexys piernas!
Seguido de este reclamo, este accedió a quitárselos, se acercó al moreno y lo recostó en la cama y paso su mano muy suavemente por encima de la ropa interior húmeda de Izaya, quien en seguida mostro reacción ante el suave contacto, moviendo un poco la zona en busca del contacto con esa mano, Shizuo le saco la ropa interior y se agacho frente a él y con una mirada le anticipo lo que estaba a punto de hacer.
- ¿Shizu-chan? ¿Qué vas a hacer? ¡No, eso es suci- Ah-!
- Tu boca dice eso pero a canga no piensa igual- dijo Shizuo introduciendo el miembro del azabache en su cavidad bucal, subiendo y bajando en forma de embestidas suaves haciendo que Izaya suelte gemidos suaves, sonidos que trataba de acallar con sus manos.
- No ocultes tu voz. ¡Déjame oírte!.
- ¡S-Shizu-chaan!. Si sigues yo voy a…
- ¡No aún no Izaya! Aun no tengo suficiente- dijo Shizuo que dejo la felación a un lado , subió su lengua desde el miembro de Izaya, pasando por su pecho y luego a su cuello, dejando pequeños pero notables chupetones y mordiscos, que seguramente mañana empezaran a notarse, y qué le avisará a todo aquel que se acerque a Izaya que este le pertenece .
- AH..! ¡Basta!¡Si sigues así, enloqueceré!- dijo entre jadeos el azabache.
- No creo que puedas tener menos cordura de la ya tienes.
- ¡Q-Que cruel eres Shizu-chan!.
El rubio lo volteo y lo colocó en cuatro, sorprendiendo al pelinegro. Quien cerró los ojos y espero la intromisión en su entrada. Que sorpresivamente no llegó, y en su lugar sintió algo húmedo en su interior, volteando un poco el rostro para visualizar al rubio, pera cayó en cuenta de lo que pretendía hacer.
- NOO…¡A-AHÍ NO!- dijo muy nervioso el azabache al percatarse de lo que quería hacer SU rubio- ¡Hii…!¡Shizu-chan B-Bak-kaaa …¡PA-PARAA…!
El blondo cogió con una de sus manos el miembro excitado de Izaya, mientras al mismo tiempo metía su lengua en la entrada de este, llevando un ritmo semejante en ambos lados de esa forma estaba haciendo crispar a Izaya de placer, quien se encontraba sosteniéndose de las sabanas, arañando el colchón con todas sus fuerzas para poder contener todo el placer que estaba sintiendo.
- Hah..! AAAH…! AH…! NO…. S-SHIZU-CHAAAN S-SUELTAME…! AH…! AAAH…! AAH…!
Shizuo pasó sus manos por el pecho de Izaya abrazándolo y acercándose a su oído le murmuro:
- ¡No sabes cuánto quiero entrar en ti! ¿Puedo?.
- N-No Preguntes cosas obvias.
- No oí una repuesta afirmativa.
- ¡Joder! ¡Que si puedes! ¡Solamente a ti te dejo hacer esto! ¡No hay nadie más, ni lo habrá! ¡Quiero esto! ¡Deseo esto así que cúmpleme como amante Shizu-chan!
- Tu lo pediste.- Dijo el más alto entrando completamente en el menor, causándole una gran impresión y dolor.
- AAAAHH! Hah..!NN…! AH! UGH… Eres una bestia!.
- No debería de haberte dolido tanto después de todo te prepare.
- Nunca terminare de acostumbrarme a la bestia que tienes ahí
- HAA..! ¡Tan estrecho como siempre! Ngh!
- ¡No quiero hacerlo de esta forma Shizu-chan!
- Huh ¿Entonces?
- Y-Yo quiero v-ver tu rostro
- Okey , espera.
- ¡E-Espera que haces!
El rubio lo volteo y lo colocó en la cama bocarriba y se coloco sobre etrando de nuvo en su entrada.
- ¡HYAA!
- Entonces…¿De esta forma está bien?
- HAA…SHIZU-CHAAN! NNH..! NNNH! ¡ME VOY A- !- Dijo el pelinegro al mismo tiempo en que lo embestían en la cama, la cual producía sonidos al golpear contra la pared por la fuerza sobrehumana de Shizuo que lo estaba volviendo loco entrando más y más dentro de él.
- UGH..! YO TAMBIEN.
Sin poder esperar más Izaya se corrió entre los vientres de ambos, al mismo tiempo que contraía su entrada por el reciente orgasmo apretando el miembro del rubio y causando que este también se venga dentro de él.
- AH! AHH! AHHH! AHHHH! Shizu-chan ¡Se siente tan bien!
Shizuo se giró y se hecho abrazado a Izaya sin retirar su miembro aún.
- Te amo Izaya
- Yo también Shizu-chan, no quiero separarme de ti jamás
Shizuo sacó su miembro, causando un pequeño gemido de parte de Izaya y cubriéndose a él y a su amante con una sábana, acurrucándolo bajo su brazo y acariciando los cabellos del el pelinegro ya dormido y sintiendo que el sueño lo vence y cayendo en brazos de Morfeo, con un solo pensamiento en su cabeza… “Solamente pasaba unas horas con el amor de su vida, y miles de horas pensando en él.”
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