-Tú… mmm… Tú… -No sabía cómo preguntar, estaba nervioso.
-¿Siiii? –lo miraba ilusionado.
-Tú… ¿Estás saliendo con Syusuke? – preguntó un poco colorado mirando hacia el helado.
-¿QUEEEEE? –abrió los ojos enormes, cuando en ese momento golpearon la puerta y entró justamente el joven nombrado.
-Disculpen la molestia. Tezuka dijo que vayas a la habitación nuestra que tiene que hablar contigo Oishi –dejarlos una vez más solos para que se toquen y besen, no le convencía mucho a Oishi, pero en fin, tendría que ir.
-Después hablamos Eiji –para luego salir de la habitación y dirigirse a la del Capitán.
-Oye, ¿de qué hablaban? –preguntó Fuji al ver la cara que tenía Eiji.
-…- mantuvo el silencio, estaba algo desconcertado- Me preguntó si estaba saliendo contigo…
-Oh ¿en serio? Me imagine que él pensaría eso.
-¿Por qué? –muy inocente el pequeño gatito.
-No te diste cuenta, es que últimamente lo has dejado de lado a él y estás todo el tiempo conmigo; y además, hoy cuando entró a la habitación cuando me estabas contando por qué se habían peleado, seguramente pensó otra cosa –le explicaba a su amigo que no entendía mucho.
-¿Crees qué es por eso? –mientras ponía cara de "no entiendo, soy la persona más inocente del mundo"
-Si, además su cara lo dice todo. Estoy seguro de que está enamorado de ti, pero no se anima a decírtelo.
-Nyaaa… no creo… -dijo tirándose de espaldas a la cama, a lo que solo Fuji sonrío, talvez un poco más de lo normal.
-Tezuka, permiso –se asomó por la puerta de la habitación- ¿de qué querías hablar?
-Ah, Oishi. No tengo ganas de dar vueltas, pero quiero que me digas tú qué es lo que pasa. Así que, dime, ¿qué es lo que te tiene distraído últimamente? No eres el de siempre –se encontraba sentado en la cama mirando un partido de tenis en la tele.
-Tengo un par de cosas que pensar. Lo lamento por perjudicar al equipo –decía muy seriamente.
-¿Esas cosas en que pensar tiene ojos azules y pelo rojizo? –lo miró por arriba de los lentes
-Este… -sus mejillas se pusieron rojas- bueno… eehhh… sí… -suspiró al fin rascándose la mejilla- es por Eiji…
-¿Cuál es el problema? –apagó la tele en ese momento.
-Verás Tezuka…. Es que no es fácil decirlo, ni siquiera sé si es realmente lo que me pasa –miraba hacia un costado y más rojo aún.
-¿Te gusta Eiji? Es eso, ¿verdad?
-mph… -tragó saliva- pero, ¿cómo puede ser? ¡El es un chico! Y yo también… no sería correcto –seguía siendo terco, olvidando todos los sentimientos que le provocaba estar cerca de Eiji.
-No es así. No elegimos de quien nos enamoramos, solo lo hacemos. Y no tenemos que sentirnos mal por nuestra elección si en un final nos va a hacer feliz.
-Tezuka… ¿por qué me estás hablando de ésto? Además estoy seguro de que a Eiji le gusta Syusuke, es más creo que "están juntos" –le decía algo dolido.
-Si eso pasara, tendría que sacar a Eiji del equipo –miró con una ceja levantada y con la vista afilada.
-¿Por qué? ¿Acaso no están permitidas las relaciones entre compañeros? –y al mismo tiempo pensaba "¿relación entre compañeros? ¿Qué estoy diciendo?"
-Es muy simple el por qué, Fuji es mío –imaginen la cara de sorpresa de Oishi.
-¿Qué? Tezuka, tu y Fuji…
-Si… bueno, pero ese no es el punto –acomodándose los lentes y con las mejillas un poco coloradas prosiguió- Lo que quiero decir es que si los dos van a estar así, no le sirve al equipo y mucho menos a ustedes. Así que, hagan algo, pero estén bien. Es solo eso lo que quería decirte, ya puedes irte. Comeremos dentro de una hora.
-Está bien… -se dio vuelta y medito unos segundos lo que le había dicho su capitán- Gracias Tezuka –y luego salió de la habitación para dirigirse a la de él. Mientras caminaba por el pasillo iba pensando en qué hacer, si estará seguro de lo que siente por Eiji… y obviamente, la mayor noticia que lo sorprendió. ¡Tezuka y Fuji son pareja!
-¡Oishi, volviste! ¿Qué quería Tezuka? –le preguntó Eiji apenas su compañero entró a la habitación.
-Eeehh… solo hablar de lo que haremos estos días, eso es todo -finalizó con una sonrisa. A la vez pensaba en las palabras que le había dicho su capitán, tenía razón, lo que él siente por Eiji no lo siente por nadie más. Tal vez si esté enamorado de su amigo, pero cómo decírselo, tal vez el otro no lo quiera de igual forma. Mientras Oishi pensaba, Eiji y Fuji lo miraban cómo pensando "está loco que se queda parado en medio de la puerta mirando al vacío" y mirándose entre ellos desconcertados.
-Entonces los dejo. Me voy a preparar para ir a comer. Nos vemos luego –fuji salió de la habitación.
-Oishi, tu helado se lo comió Syusuke, es que se estaba derritiendo.
-Está bien, no te preocupes por eso. En un rato iremos a comer.
-De acuerdo. –en ese momento, los dos se tiraron en sus camas y miraban al techo.
-Eiji, quería preguntarte algo…
-Espera, si me vas a preguntar de nuevo si salgo con Syusuke, la respuesta es no –se sentó en la cama y lo miró- Es solo mi mejor amigo.
-¿En serio es tu mejor amigo?
-Sí, es solo eso –concluyó cruzándose de brazos.
-Entonces, si Fuji es tu mejor amigo… ¿yo qué soy? –le preguntó mientras se sentaba en la cama y lo miraba, al igual que su compañero.
-…- se puso nervioso y colorado que no se distinguía la cara de su pelo- Tú eres…