Domingo 23 de Julio, 1972.
------Byakuya---------
Me levanto y arreglo rápidamente para bajar a desayunar con mi abuelo, padre y tío ya que hoy después de tanto tiempo pensándolo por fin llegué a una resolución. Bajo encontrándolos ya en el comedor.
-Buenos días Byakuya.
Buenos días abuelo. Mi tío me sonríe mientras muerde un pan al igual que mi padre que bebe un poco de jugo, me siento al lado izquierdo de mi abuelo que se encuentra en la cabecera frente a mi padre que se encuentra junto a su hermano. Nos dedicamos a comer en silencio, uno bastante incómodo, termino mis alimentos para después suspirar. Tengo algo que decirles… Los tres levantan la vista mirándome curiosos.
-¿Qué pasa Byakuya?
Quiero decirles que he tomado la decisión de no estudiar economía, en cambio estudiaré botánica en una pequeña Universidad que ofrece la carrera, también se encuentra en la ciudad.
-¡Qué clase de tontería estás diciendo Byakuya!
Abuelo lo siento, prometí ayudar en los negocios de la familia pero realmente no deseo hacerlo, no me gusta y no lo haré.
-Esto es una tontería, es inaceptable.
-Byakuya…
Mi padre me mira bastante serio y un tanto sorprendido.
-Byakuya ¿Estás seguro de qué es lo que quieres?
Por supuesto, las flores y plantas son lo que me hacen feliz.
-¡Byakuya he dicho que no!
Lo siento abuelo no te estoy preguntando si quieres, simplemente te estoy avisando lo que haré.
-¡Eres un ingrato! ¡Después de todo lo que he hecho por ti! ¿Así es como me pagas? ¡¿Te estas burlando de la familia?! ¿Un Kuchiki, un simple jardinero? ¡De ninguna manera!
Perdóname abuelo, puedo ser todo pero mi padre me ha enseñado a nunca ser un malagradecido, agradezco con el corazón todo lo que has hecho por mí pero no arruinaré mi vida haciendo algo que no quiero solo porque tú deseas proteger el estatus de la familia.
-Yo apoyo a Byakuya.
-¡Cierra la boca Koga! ¡Eres una vergüenza! ¡Un inútil! ¡Ni siquiera sé por qué estás aquí! Ya te habías ido, no sé para qué demonios volviste.
-Koga volvió porque yo se lo pedí padre y ten la decencia de no gritarle ni a él ni a mi hijo.
-Soujun maldito atrevido ¿Estás desafiando a tu padre?
-Por supuesto que no, simplemente te pido que les des el respeto que se merecen. Y en cuanto a ti Byakuya si estás completamente seguro de que eso es lo que quieras temo decirte que después no podrás arrepentirte. Pero si eso es lo que te hace feliz no puedo hacer más que apoyarte hijo, si tú eres feliz no puedo pedir nada más…
Padre… Me sonríe amablemente al igual que mi tío hasta que escuchamos como mi abuelo azota su mano sobre la mesa.
-¡Inaceptable! ¡He dicho que no! Soujun ¿Cómo te atreves a darle tu consentimiento a Byakuya para semejante estupidez?
-Lo siento padre pero ya fue suficiente, Koga y yo vivimos bajo tus reglas toda nuestra vida, fuimos a la Universidad, estudiamos lo que tú quisiste, hemos hecho todo tal y como tú lo deseas. Nunca te importaron nuestros verdaderos sentimientos, sueños ni deseos. Pudiste haberme manipulado pero no dejaré que le arruines la vida a mi hijo obligándolo a hacer algo que él no quiere. Él que está a cargo de él aquí soy yo, Byakuya es mi hijo y si el desea ser un botánico lo será y yo lo apoyaré porque lo amo y quiero su felicidad.
-Tú también maldito mal agradecido, después de que trabaje toda mi vida duro por ti y Koga los dos resultaron ser unos buenos para nada y tú un mal padre, lo único que estás haciendo al darle tú consentimiento es arruinarle la vida.
-Arruinarle la vida sería dejar que siga viendo la clase de hombre cruel y sin sentimientos en el que se ha convertido su abuelo. Byakuya toma tus cosas, nos vamos de esta casa. Lo siento padre nadie me vendrá a decir cómo o no criar a mi hijo.
Mi padre se levanta y rápidamente hago lo mismo.
-Óyeme bien Soujun, si te vas por esa puerta será solo y aparte te quitaré todo, recuerda que el dueño de todos los negocios que posee la familia están a mi nombre.
-Puedes quedártelos padre, espero todo tu dinero te haga compañía cuando tu familia salga por la puerta. Espero que tus negocios te abracen y cuiden cuando estés en tus últimos momentos. Byakuya dije que nos vamos.
Sí padre. Miro a mi abuelo con pena pero no puedo echarme para atrás, subo y apenas si tomo algunas cosas para luego bajar a donde me espera ya mi padre. Por su parte mi tío se termina de beber su jugo sonriente.
-Bueno padre creo que este es el adiós, no te preocupes de todas formas yo pensaba mudarme mañana. Gracias por tu cuidado hasta ahora y por cierto ya que no volveremos a vernos tengo que confesarte que cuando era niño fui yo quien se robaba tus chocolates con licor pero no te preocupes luego te mando una caja. Por lo menos este inútil sin vergüenza puede comprar eso. Será bueno que busques un remplazo para mi puesto y sobre todo el de Soujun. Cielos ojalá mamá estuviera aquí para reírse de la cara que estás poniendo.
Mi tío se ríe un poco para después salir por la puerta, mi padre y yo le dedicamos una última mirada a mi abuelo que permanece en silencio. Mi padre me toma por la muñeca y salimos.
-Koga lo siento, terminamos envolviéndote en esto.
-¿Bromeas? Hasta que alguien le dice a ese viejo tacaño un poco de lo que se merece, ya entenderá, definitivamente esta era la única manera para que entrará en razón.
-¿Estarás bien? ¿Tienes donde quedarte?
-Claro, rente un departamento en el centro del pueblo. En cuanto al trabajo ya veré que me consigo, por lo menos tengo que quedarme otro año mientras Toshiro se gradúa para que después pueda llevármelo muy lejos de aquí.
-Bien ¿Seguro que estás bien? ¿Aún conservas el dinero de mamá?
-No lo he tocado.
-Qué alivio, ya sabes dónde encontrarme ¿Sí?
-Claro, salúdame a Starrk.
Mi tío toma su auto yéndose, por mi parte mi padre y yo también nos metemos en su carro y de inmediato abrazo mi maleta. Padre lo siento.
-Byakuya si eso te hace feliz no necesito nada más. No es tu culpa.
Está bien ¿A dónde vamos?
-Ya lo verás.
A los pocos minutos llegamos a la librería del señor del otro día viendo que se encuentra cerrada por la parte del frente, caminamos por el callejón continuo tocando la puerta. No me digas que… La puerta se abre y de inmediato sale ese hombre que en cuanto ve a mi padre lo toma por el rostro besándolo con pasión hasta que me mira y de inmediato se aparta.
-Byakuya…
Ya decía yo que no recordaba haberle dicho mi nombre. Pero ahora que lo pienso no sé el suyo señor.
-Coyote Starrk.
-Byakuya como puedes ver yo y Starrk estamos en ese tipo de relación ¿Te molesta?
Para nada padre, estoy muy feliz. De repente sale la pequeña hija de Coyote Starrk que abraza a mi padre muy emocionada.
-¡Mami! ¡Mami!
-Hola Lily, mira quiero presentarte a tu hermano mayor.
-¡Hola!
Hola… los cuatro sonreímos.
-¿Mami tú y mi hermano se quedarán para la comida?
-Claro ahora adelántate.
La pequeña entra corriendo mientras los tres permanecemos en la entrada.
-Starrk, Byakuya y yo nos fuimos de casa de mi padre ¿Podemos quedarnos por un tiempo?
-Vaya eso es una sorpresa pero no por un tiempo, por favor quédense para siempre.
Mi padre sonríe abrazando a su novio. Padre yo volveré más tarde, tengo que ir a ver a alguien.
-¿A Renji?
Lo miro sorprendido pero de inmediato asiento.
-Ve anda y algo más dile a ese muchacho que si le preocupan sus padres que no tema, yo les ayudaré.
Sonrío emocionado y asiento para después de pasarle mi maleta salir corriendo, llegó tan rápido como puedo a casa de Renji, me acomodo la ropa y rápidamente toco la puerta. A los pocos minutos me abre él mirándome sorprendido.
-Byakuya ¿Qué haces aquí?
Renji tenemos que hablar.
-¿Qué? No… no hay nada que hablar.
Con permiso. Me mira sorprendido mientras lo empujo para entrar y cerrar la puerta a su espalda. Toda su familia que se encuentra en la sala me sonríe alegre. Buenas tardes.
-Hola Byakuya.
-¿Cómo estás hijo?
Bien gracias les robaré a Renji unos minutos ya venimos. Asienten mientras lo tomo de la mano jalándolo hasta su habitación, después de cerrar la puerta lo arrojo a la cama abalanzándome sobre él.
-Byakuya espera ¿Qué haces? Te dije que terminamos.
Cierra la boca, me amas y yo a ti. Sin esperar a que conteste lo beso con pasión, al principio se resiste un poco pero termina abrazándose a mi cuello disfrutando de nuestras lenguas que se entrelazan sensualmente, termino de recostarlo mientras continuo besándolo, bajo lentamente sus pantalones hasta que me separa sorprendido.
-Espera no, no deberías estar aquí.
Continúo bajándole los pantalones que intenta conservar. Sabes Renji mi padre sabe sobre lo nuestro. Me mira impresionado bajando la guardia dándome oportunidad de quitarle hasta la ropa interior haciéndolo cubrirse avergonzado.
-No Byakuya, no…
Me inclino para darle una lamida a su miembro que lo hace temblar. Él dice que si yo soy feliz él también ¿Y sabes lo que me hace feliz? Tú… Renji se sonroja a la vez que termino de introducirme por completo su erección a la boca. Renji jadea un poco cubriéndose la boca avergonzado mientras yo lo succiono con fuerza sorbiendo todo el líquido que brota de su punta.
-Byakuya no…ahhh, la puerta no tiene seguro podrían entrar.
Lo saco de mi boca lamiendo todo su largo hasta sus testículos los cuales succiono un poco, Renji arquea la espalda a la vez que mete sus manos entre mi cabello. Bueno en ese caso debemos darnos prisa. Una vez que veo que está lo suficientemente duro me acomodo entre sus piernas abriendo mis pantalones para sacar mi erección. Renji te amo prometo hacerte feliz.
-¿Qué? No, Byakuya, no podemos.
Antes de que diga más termino de abrirle las piernas para introducir lentamente mi erección en su interior. Jadeo un poco de lo delicioso y asfixiante que es su calor, no para de contraerse a mí alrededor, se siente tan bien. Renji se muerde los labios mientras aferra sus manos a las colchas sintiendo como comienzo a moverme dentro de él.
Haah…Renji se siente increíble. Coloco mis manos a sus costados sin dejar de penetrarlo tan fuerte y profundo como puedo, me hundo en su cálido interior totalmente excitado. Aahh…Renji…te amo. Toma mi rostro con una de sus manos besándome con deseo y lujuria mientras con la otra se masturba con fuerza.
-Byakuya…ahh…sí, así…ahhh, me corro.
Intento soportar pero termino corriéndome en su interior mientras él lo hace sobre su abdomen. Continuamos besándonos a la vez que disfrutamos nuestros orgasmos hasta que escuchamos como tocan la puerta.
-Renji, Byakuya vengan a comer pastel.
-Ya vamos mamá.
Nos levantamos con prisa arreglándonos la ropa, una vez que terminamos tomo a Renji de la mano saliendo al comedor donde su padre se encuentra cortando un lindo pastel en compañía de sus hijos.
-Vengan los dos que sino no alcanzarán pastel.
Señor, señora tengo algo importante que decirles.
-¿Qué pasa hijo?
Verán… Observo a Renji que me mira sin comprender a la vez que intenta soltar mi mano pero no se lo permito. Yo planeo irme el año que viene a la ciudad a estudiar botánica y quisiera decirles que quiero que Renji vaya conmigo. Todos me miran totalmente asombrados en especial Renji.
-Byakuya ¿Qué cosas dices?
-Así que a la ciudad ehh…
-Papá, yo no iré no te preocupes.
Quiero que vaya conmigo, la Universidad a la que entraré es pública así que él también podría ir a estudiar algo, ambos trabajaremos y viviremos tal vez no llenos de lujos pero sin en buenas condiciones y estoy seguro de que si Renji me ama y me apoya tanto como yo a él no habrá ningún inconveniente. Renji me mira con la boca abierta sin saber que decir. Por favor, se los suplico, déjenlo venir conmigo, prometo cuidarlo y hacerlo muy feliz. Sus padres me miran sorprendidos hasta que su padre se ríe un poco mientras termina de servir una rebanada de pastel.
-Puedes llevártelo.
-¡¿Qué?! ¡¿Qué cosas dices papá?! ¡Yo me quedaré y te ayudaré a trabajar a ti y a mamá!
-Silencio Renji no grites, tu padre ya lo decidió.
-Mamá…
-Hijo quiero que salgas de este lugar y te conviertas en un hombre culto e importante. No te preocupes por nosotros, parecemos más viejos de lo que estamos no lo negaré pero aún nos quedan muchos años por delante y a ti también. Tu madre y hermanos son mi responsabilidad tú ya hiciste mucho así que ve y vive tu vida junto a Byakuya que te quiere tanto. Así el día que vuelvas con un buen título podré sentirme aún más orgulloso de lo que ya me siento de ti. No discutiremos más así que ahora siéntense a comer, no es como que ya se vayan.
Renji nos mira fijamente hasta que termina riéndose, se acerca abrazándome con fuerza. Te amo Renji.
-Y yo a ti, realmente lo hiciste Byakuya…
Tú dijiste que debía hacer lo que yo quisiera y eso haré. Nada ni nadie nos separará.
------Grimmjow---------
-Yo te acompaño.
Que no joder, quédate con Ukitake ¿Qué no están jugando a la cocinita juntos? Kurosaki me abraza fuerte para luego darme una nalgada y un pequeño beso.
-Bien, largo idiota.
¿Qué forma es esa de hablarle a tu hombre Kurosaki?
-Cierra la boca hombre tonto, ahora vete y si se te olvida el agua mineral te mato.
Sí, si… Me doy la media vuelta viendo como vuelve a meterse. Kurosaki al parecer no tiene intenciones de irse de mi casa y no tengo problema por lo que hoy haremos un asado en el jardín, Kyoraku ya está empezando a cocinar la carne en el patio trasero mientras que Ukitake y Kurosaki preparan un poco de ensalada y otras guarniciones.
-¡Hijo!
Volteo mirando a Kyoraku que sale apurado ¿Qué pasa? ¿Necesitas algo?
-No olvides el picante.
Ukitake ya te dijo que dejes de comer tanto picante viejo torpe.
-Venga ya no me regañes soy tu padre. Qué tal ¿Solo un poco?
Largo de aquí si me acuerdo traeré un poco, si es que me llego a acordar.
-Sí gracias tomaré eso como un no, largo de aquí mocoso.
Ambos nos reímos mientras yo me voy. Camino por varios minutos hasta que llego al pueblo dirigiéndome hasta el supermercado para comprar algunas cosas que hacen falta. Tomo una estúpida canasta y empiezo a agregar todo lo que necesito. Bien creo que ahora solo falta el agua mineral de Kurosaki…
-¿Grimmjow?
Giro mirando al individuo un tanto preocupado ¿Te conozco?
-Ja ja síguete haciendo el idiota ¿Ya olvidaste a tu novio de cinco meses?
Jódete no te conozco. Me doy la media vuelta listo para irme cuando siento como se abalanza sobre mí abrazándome por la cintura. Suéltame antes de que te estrelle la cabeza contra el piso.
-Grimmjow yo aún te amo, todo este tiempo no he podido olvidarte sé que han pasado casi dos años pero no puedo olvidarte. Los momentos que pase a tu lado fueron increíbles, cuando terminaste conmigo mi mundo se vino abajo…
Me giro empujándolo. Suéltame Ulquiorra.
-Grimmjow todo iba tan bien entre nosotros…
Nunca fuimos novios joder, solo follábamos es todo, nunca me gustaste solo necesitaba a alguien para pasar el rato.
-¿Cómo puedes decir eso? Yo te amaba, aún te amo y aun así me dejaste, me abandonaste como si fuera un maldito animal a pesar de que yo siempre te apoye y estuve ahí para ti.
Supongo que me aburrí de ti ahora largo.
-Sé que estás saliendo con alguien más, bueno más bien todo el pueblo lo sabe.
¿Y eso te importa por qué?
-¿También le harás lo mismo que a mí? ¿Después de un tiempo lo dejarás? ¿Lo alejarás de ti? Está bien, estaré esperando a que eso pase o a que él se harte de ti cuando sepa la clase de maldito que eres y ¿Sabes qué? Aun así yo estaré ahí para ti, para que te des cuenta que no juego cuando digo que te amo a pesar de lo que me hiciste. Tú me hiciste sentir especial…
Es una lástima que realmente no lo seas. Ahora déjame en paz.
-¿A él si se lo dices? ¿Le dices que es especial mientras le haces el amor? ¿Es eso?
Lo miro molesto tomándolo por el cuello ¡Jódete! Lo aviento contra los estantes mirándolo totalmente furioso.
-Sé que no es de aquí y se irá, así que cuando llegue el momento sabes dónde encontrarme. Grimmjow te amo, eres el amor de mi vida, él único para mí…
Pues tú no significas nada para mí. Me doy la media vuelta listo para irme pero no puedo evitar girar y ver como llora un poco, regreso tomándolo por los hombros. Ulquiorra mírame yo… ¡Carajo! Yo siento lo que te hice, realmente lo lamento, no debí de haber jugado con tus sentimientos. Éramos amigos y luego ya la jodí diciéndote que me gustabas hasta que accediste dormir conmigo, perdóname pero no puedo corresponderte.
Estoy enamorado de la persona con la que estoy saliendo, jamás en mi vida me había sentido tan feliz junto a alguien, espero lo comprendas. No pierdas tu tiempo enamorándote de un bastardo como yo, estoy seguro de que aunque yo sea el amor de tu vida aún te falta encontrar a tu alma gemela y entonces realmente serás feliz. Perdón…
Me doy la media vuelta y llego rápidamente a las cajas, pago todo y salgo de ahí tan rápido como puedo, una vez fuera respiro agitadamente. Joder, si Kurosaki hubiera venido y si…mierda, mierda, mierda. Carajo siento que me asfixio, realmente no quiero que Kurosaki sepa esto de mí, lo amo demasiado como para perderlo por mis estupideces del pasado.
-¿Piensas hacerle lo mismo que le hiciste a ese muchacho a mi hijo?
Giro a mi derecha donde se encuentra el que si no me equivoco es el padre de Kurosaki ¿Perdón?
-Ven…
Me indica que lo siga y camino en silencio detrás de él. Mierda ¿Nos escuchó? No me puede estar pasando esto, maldición… Me indica que me suba a su auto y termino haciéndolo, mierda siento que estoy temblando. Señor yo…
-¿Crees que es divertido?
¿Disculpe?
-¿Crees que es divertido ir por ahí enamorando muchachitos solo para llevártelos a la cama y una vez que te aburres los dejas? ¿Lo encuentras fascinante o algo así?
No…no yo no, señor yo…
-Guarda silencio bastardo.
Trago saliva mientras observo como me mira molesto. Deje que le explique.
-¿Qué me vas a explicar? ¿Qué le endulzas el oído a mi hijo y duermes con él diciéndole que lo amas para que apenas se te cruce otro en el camino lo botes? ¿Eso me quieres decir? Óyeme bien mocoso idiota, mi hijo no es uno de esos fulanos con los que sueles follar y tirarlo como si fuera basura. Ichigo tiene un futuro brillante por delante, no está destinado a estar con un mentiroso mediocre como tú, así que termina con esto.
Señor es un mal entendido, yo realmente amo con todo mi corazón a Ichigo, lo amo como nunca había amado a nadie antes, él es todo para mí. Yo haría lo que fuera por él, no estoy mintiendo, cometí muchos errores en el pasado pero no quiero hacerlo con él porque lo amo en serio. Por favor créame.
-Bien en ese caso si realmente lo amas tanto como dices dejarás que se vaya.
¿Qué?
-Muchacho ¿No crees que Ichigo se merece lo mejor solamente? ¿Amor, cariño, seguridad y protección?
Por supuesto.
-Y dime ¿Tú eres capaz de darle todo eso?
Yo…yo lo intentaré.
-Lo siento no me basta. No estoy diciendo que este mal, pero por dios ¿Qué pretendes? ¿Tenerlo viviendo en este lugar contigo? Sí se queda aquí no irá a una buena Universidad por lo que no conseguirá un buen empleo ¿Qué harás? ¿Lo mantendrás?
Yo lo haré si es necesario.
-¿Con lo mucho que te paga tu padre al mes? Porque tú no tienes nada, todo te lo ha dado tu padre, espero estés consciente de eso ¿Qué harás cuando Ichigo ya no soporte seguir a tu lado ya que no puedes ofrecerle nada bueno? ¿Lo abrazarás mientras llora? ¿Lo obligarás a que se quede? ¿Volverás a endulzarle el oído? Y mira que eres bueno en eso ¿Qué harás cuando lo veas cruzar la puerta por ya no soportar una vida miserable a tu lado? ¿Podrás ser lo suficientemente hombre como para dejarlo ir? ¿Podrás con toda la presión tu solo? Dime muchacho ¿Tu amor y tus intentos podrán con eso?
Lo miro totalmente agobiado, la desesperación me abruma sintiendo como mi corazón se rompe.
-¿Qué harás muchacho? Contesta… Todos saben que tu madre dejó a tu padre por la misma razón, porque tu padre nunca le dio lo necesario ¿Qué harás cuando Ichigo te deje por qué no eres capaz de darle lo que él necesita?
Perdóneme señor pero usted no tiene derecho a hablar sobre mi familia. Esa mujer se fue por cobarde y en cuanto a mi padre no le permito que hable mal de él. A mi puede decirme lo que usted quiera, que soy un bastardo, mentiroso, una basura pero no mi padre, él es el hombre más grandioso que he conocido en toda mi vida. Es el hombre más honesto y trabajador que pueda existir. Y creo poder decirle que se equivoca, Ichigo no me dejará porque él no es un interesado, Ichigo me ama tanto como yo a él, trabajaré muy duro día a día para darle absolutamente todo lo que él necesita.
-Por dios ¿Es que quieres arrastras a Ichigo a tu miseria? Si estas feliz con tu taller y tus amiguitos casuales está bien pero deja a mi hijo, no lo involucres contigo. Si de verdad lo quieres lo dejarás ir, si realmente te preocupas por él y lo amas tanto como dices lo harás. Sí quieres tanto a Kyoraku-san como dices debes saber de los esfuerzos que hacemos los padres por ver que no le falte nada a nuestros hijos ¿Cómo crees que me siento al ver que mi hijo se quiere echar a perder la vida en un lugar como este? ¡No seas egoísta! ¡Piensa en él!
No resisto más bajándome y caminando, escuchando como él hace lo mismo siguiéndome y jalándome para que lo mire.
-¿A dónde crees que vas? ¿Es lo único que sabes hacer? ¿Huir?
Usted no es nadie para decirme eso. Si Ichigo está conmigo es porque quiere, no lo estoy obligando y si él se quiere ir de mi lado algún día yo no se lo impediré pero para que eso no pase trabajaré muy duro en convertirme en una mejor persona para ser digno de merecerlo. Ahora si me disculpa tengo que irme.
-¡Cuánto descaro!
Está a punto de golpearme, de inmediato cierro los ojos pero algo pasa, los abro viendo a Kyoraku detenerlo colocándose frente a mí ¿Qué haces Kyoraku? No te metas. Me ignora mirándose fijamente con el padre de Kurosaki.
-Isshin-san buenas tardes ¿Pasa algo? Sí este mocoso idiota que tengo como hijo le hizo algo para molestarlo me disculpo enormemente, perdónelo por favor pero no puedo permitir que lo toque, soy el único que puede levantarle la mano.
-Kyoraku-san que bueno que lo veo. Claro que tengo un problema, el problema es que su hijo está jugando con el mío.
-Sí lo dice por la relación que sostienen le garantizo que Grimmjow no está jugando con Ichigo-chan, mi hijo lo quiere y se preocupa por él de verdad.
-Bien en ese caso dígale a su hijo que si tanto lo quiere entonces no tendrá por qué oponerse cuando me lo lleve.
El padre de Kurosaki se da la media vuelta listo para irse.
-Isshin-san…
Gira mirándonos ¿Qué mierda piensa hacer Kyoraku?
-¿Sí?
-¿Recuerdas cuándo nos conocimos?
-Tal vez.
-Estoy seguro de que sí. Me pediste que arreglará la camioneta que traías para poder impresionar a Masaki-chan de la cual te enamoraste aquel verano que viniste aquí ¿Lo recuerdas? ¿Recuerdas los problemas que tuviste con sus padres cuando ustedes dos no querían separarse? Y una noche simplemente llegaste con prisa a mi casa pidiéndome que te diera un poco de gasolina ya que ambos escaparían. Cuándo yo te pregunte si no era muy precipitado me dijiste que ella era la indicada y que aunque sus padres y los tuyos se opusieran tu harías todo por hacerla muy feliz.
Esa noche escaparon de aquí y nadie supo de ustedes por un tiempo, ni siquiera los padres de ambos y cuando volvieron tres años después ya estaban casados y ella estaba embarazada de Ichigo-chan. Ya nadie pudo oponerse y aquella vez cuando nos volvimos a ver me dijiste que había valido la pena y que volverías a hacerlo una y otra vez porque ella era todo para ti. Dejaste a tu familia, la escuela, tus obligaciones… Todo absolutamente por una muchacha que acababas de conocer aquí, en este lugar. Y te aseguro que esa linda muchachita te dio los años más felices de tu vida así que te pregunto yo a ti ¿No crees que estás siendo muy duro con mi hijo?
-Basta Kyoraku, es diferente. Cuando me fui con ella trabaje muy duro y conseguí un buen empleo y aun así continúe en la Universidad para después llevármela a la ciudad. La amaba y quería lo mejor para ella, además tú hijo y yo somos muy diferentes.
-¿Lo dices por el dinero? Es verdad que tu familia es de las mejores y que tienen grandes negocios. En mi caso yo por egoísta corte todo tipo de contacto con mi familia, pero sí de estatus te preocupa los abuelos de Grimmjow lo aman y están siempre dispuestos a ayudarlo.
-He dicho que basta, Ichigo es menor de edad. No me interesa su amor, ni el dinero, ni de qué familia viene, ni su estatus. Lo único que quiero es que no se quede en este lugar y menos con tu hijo. Realmente no necesito tus consejos, eres el menos indicado para decirme eso, dejaste a tu familia por irte a perseguir un sueño tonto, embarazaste a una mujer con la cual ni siquiera te casaste y que encima te dejó, tu hijo es un mediocre al igual que tú. No quiero eso para Ichigo…
Sin decir más se metió en su auto y se fue. Kyoraku permanece en silencio, voltea sonriéndome y abrazándome. No puedo evitar hacer lo mismo. Lo siento, lo siento, carajo perdón él te dijo esas cosas por mi culpa.
-Tranquilo Grimmjow, simplemente está enojado y es de entenderse pero ya comprenderá que en el corazón no se manda. Ahora vámonos que ya nos deben de estar esperando.
¿Por qué estás aquí?
-Después de todo si me hacía falta un poco más de picante pero creo que puede esperar.
Me quita la bolsa de las compras para caminar de regreso a casa. Kyoraku ¿Tú crees que yo deba dejar ir a Ichigo? Tal vez su padre tiene razón y yo no soy lo suficientemente bueno para él. Se detiene suspirando para voltear y darme un fuerte puñetazo que me hace gritar para luego tomarme del cabello agresivamente mirándome molesto.
-No recuerdo haber criado un hijo tan cobarde y patético que apenas le dicen que no puede se lo cree. Hijo si amas a ese muchacho lucha por él, no quiero que te arrepientas toda tu vida por no hacer lo que realmente quieres. Que se van a enojar los demás ¡Que se jodan! ¡Es tu vida!
Yo solo quiero que Ichigo sea feliz.
-Grimmjow mírame, tú corazón es fuerte, ten el valor de hacerle caso. Eres mi hijo y si tú eres feliz yo lo soy, no quiero verte miserable el resto de tu vida, el pasado está atrás no lo mires, mejor piensa en el futuro que te depara alado de Ichigo. Si lo amas todo saldrá bien pero sino bueno eventualmente terminará pero no tendrás nada de que arrepentirte, te juro que los golpes que te daré sino le dices que lo amas no se compararán con el dolor que sentirás si lo dejas irse. Ahora mueve el culo, tu novio y el mío nos esperan. Joder ahora si estoy enojado…
Me toma de la muñeca llevándome así todo el camino, no puedo evitar sonreír y saber que tiene razón. Al llegar encontramos a Kurosaki sentado en el pórtico junto a Ukitake que espera de pie, en cuanto nos ven se acercan a nosotros. Kurosaki corre hacía mi tomándome del rostro.
-Grimmjow ¿Qué te pasó en la cara? ¿Estás bien?
-Shunsui ¿Qué pasó? Se tardaron mucho, empezábamos a preocuparnos.
Estamos bien, Kyoraku tú y Ukitake coman, yo llevaré a Kurosaki a dar un paseo. Kyoraku sonríe y asiente para después tomar por la cintura a Ukitake y llevárselo, por mi parte tomo la mano de Kurosaki llevándomelo.
-¿A dónde vamos? Grimmjow dime ¿Qué te pasó?
Ven, no está tan lejos…
-----Ichigo--------
Grimmjow toma mi mano llevándome, caminamos por varios minutos en dirección al bosque ¿A dónde vamos?
-Ya lo verás.
¿Falta mucho? Grimmjow debiste haberte puesto hielo en ese golpe. Ya dime que pasó.
-No necesito nada, sí ya te cansaste ¿Quieres que te cargue?
¡Claro que no! Solo estoy preocupado, me estás asustado.
-¿Confías en mí?
Por supuesto.
-Entonces no hay nada que temer.
Aprieto su mano aún más fuerte haciéndolo sonreír, nos adentramos al bosque deteniéndonos después de media hora ¿Es aquí? Ahora si estoy cansado.
-No es aquí pero vi que te estabas muriendo.
Tonto. Lo abrazo fuertemente intentando recuperar un poco de aliento por el largo trayecto. Me abraza con fuerza depositando pequeños besos en mi cuello mientras acaricia tiernamente mi espalda. Grimmjow…ahh. Sin siquiera pensarlo deslizo mis manos por su abdomen bajando hasta su pantalón el cual desabrocho sin dejar de mirarlo fijamente.
-¿Quieres que te folle aquí Kurosaki?
Aquí, por allá…en todas partes. Me sonríe coquetamente, lamiéndose los labios detenidamente a la vez que me dedica una mirada fiera y salvaje, antes de darme cuenta me da la media vuelta pegándome contra un árbol. Me baja los pantalones con prisa mientras yo aferro mis manos a la corteza. En cuanto se arrodilla giro mi rostro mirándolo nervioso. Grimmjow espera…
-Vamos Kurosaki, déjame probarte.
Me hace abrir las piernas para luego separar mi trasero con sus manos, jadeo descontrolado al sentir como lame mi entrada. Grimmjow…ahhh…no, espera…haaah. Siento que las mejillas me arden de la pena al sentir como succiona mi pequeña cavidad comenzando a introducir su lengua. Ohh joder, su lengua húmeda y caliente está dentro de mí, siento que me moriré de la vergüenza y el placer en este precioso momento.
Giro mi rostro mirando lo que hace, de inmediato nuestras miradas se cruzan, jadeo aún más al sentir su mirada lasciva clavada en mí mientras continua lamiéndome sin descanso. Haah…sí, así…ahhh, más. Aferra sus manos a mi trasero clavándome su lengua profundamente, siento mi cuerpo arder en lujuria, no ansío nada más que tenerlo dentro de mí. Se levanta lamiéndose los labios sonriendo victorioso.
-¿Quieres más?
Sí…
-Dime ¿Qué es lo que quieres?
Sin poder responder grito un poco al sentir como introduce tres dedos dentro de mí, los empuja moviéndolos sin control en mi interior mientras continua mirándome como si quisiera devorarme. Haahhh…Grimmjow…más.
-¿Así?
Los empuja y mueve como si quisiera atraer algo haciéndome jadear descontrolado. Grimmjow no más…ahhh, me correré.
-Suplícame.
Idiota…ahhh…fóllame…ahora, hazlo. Alcanzo a escuchar una pequeña risita perversa por parte de Grimmjow que sin más saca sus dedos haciéndome estremecer tan solo para sustituirlos por su muy gruesa erección. Me muerdo los labios de la desesperación que me invade, me penetra lenta y tortuosamente. Haahh…sí….ahh. Aferra sus manos a mi trasero dándome una dura estocada terminando de introducirla por completo.
-Joder Kurosaki, tienes un culo de infarto.
Sonrío aún más al sentir como empieza a chocar sus caderas duramente contra mí, mi cuerpo tiembla con cada embestida que me da, ambos jadeamos extasiados del placer que nos rodea. Haah…Grimmjow…más duro, házmelo más duro. De inmediato empieza a hacerlo, estoy por caer pero rápidamente me toma de un brazo y luego del otro, me jala fuertemente contra él tomándome por las muñecas y dándose impulso.
Grito descontrolado sintiendo como clava en lo más profundo de mi interior su gruesa erección que lejos de terminar se pone más dura. Algunas lágrimas corren por mi rostro a la vez que lamo la saliva que escurre por mis labios. Grimmjow…ahh…así, no pares…haaahh…ya casi. Dirige una de sus manos hacía mi erección pero de inmediato me muevo agitado. No…haahh...no, quiero correrme con solo sentirte dentro de mí.
-Eres un pervertido Kurosaki ¿Tanto te gusta?
Si…haahh…más. Me jala agresivamente del cabello soltándome, de inmediato vuelvo a aferrarme a la corteza del árbol mientras mis jadeos y gemidos se escuchan por todo el lugar, me da una dura nalgada que me hace temblar, montones de dulces escalofríos me recorren el cuerpo haciéndome saber que estoy cerca. Choco mis caderas contra él aún más desesperado hasta que por fin me corro disfrutando totalmente a pesar de que sigue entrando en mí con rudeza.
-Haahh…mierda, me estás apretando mucho…ahh.
Grimmjow se acerca aún más besando y mordiendo mi cuello, metiendo su nariz entre mi cabello.
-Me encantas Kurosaki, tu aroma me vuelve loco.
Sonrío a la vez que escucho pequeños gemidos que salen de sus labios cuando por fin se libera dentro de mí. Se siente tan bien, está tan caliente y lentamente empieza a escurrir por mis muslos mientras Grimmjow continua depositando pequeños y suaves besos sobre mi cuello. Sale de mi haciéndome temblar, de inmediato me giro aferrándome a sus brazos. Sus labios sobre los míos no se hacen esperar, su lengua se desliza suavemente por toda mi boca a la vez que me abraza fuertemente. Te quiero…
-Y yo a ti tonto.
Después de acomodarnos la ropa me sonríe tomando mi mano, caminamos un poco más llegando a un pequeño riachuelo, se quita los zapatos indicándome que haga lo mismo, nos sentamos en la orilla refrescándonos con el agua fresca que corre por las pequeñas piedritas que van siguiendo un caudal que desconozco. Miro en silencio los enormes árboles que nos rodean llenos de flores y algunos con copas inmensas que dejan que los rayos de sol se cuelen a través de ellos.
-Kurosaki ¿Te puedo contar algo?
Lo miro sin comprender pero rápidamente asiento tomando su mano, me sonríe y suspira mirando el agua fluir sin detenerse.
-Sabes yo realmente amaba a mi madre, cuando era pequeño hacía lo que fuera por verla feliz, cada noche que ella lloraba yo la consolaba y le juraba que todo estaría bien mientras estuviéramos juntos. Algunos de sus novios se atrevían a levantarle la mano y con tal de que no la lastimaran dejaba que me dieran palizas que me dejaban casi muerto. Ya que ella no ahorraba dinero y solíamos terminar en la calle yo tenía que trabajar aunque era un mocoso de ocho, nueve años.
Cargaba cosas o limpiaba aceras, lo que fuera con tal de que me dieran una maldita moneda que nos salvara de terminar en el olvido sino pagábamos la renta. Y cuando ella llegaba a darme dinero lo ahorraba, cualquier niño se lo gastaría en dulces o juguetes pero no yo, yo amaba a esa mujer por sobre todas las cosas. Un día me dijo que estaba harta de esa vida que llevábamos y que por fin había entendido que al único hombre que necesitaba era a mí ¿Sabes lo feliz que me hizo escuchar eso? Ella por fin había comprendido que mi amor era lo único que ella necesitaba realmente.
El día siguiente se portó dulce y me llevó a la feria, comimos muchos dulces y ella me trató como su más preciado tesoro, fue el día más increíble de mi vida. De regreso a casa me quede dormido, cuando desperté me di cuenta que estábamos en carretera, fingí que no sabía lo que pasaba. Cuando llegamos a un pueblo desconocido ella me dijo que había conocido a un hombre grandioso digno de respeto pero que si quería iniciar una vida nueva no podía llevarme con ella. No podía llevar al niño que le recordaba al hombre que la hizo sufrir tanto. Así que sin más se detuvo frente a una casa que en mi vida había visto y sacó una mochila de la parte trasera. Llore suplicando que no le estorbaría pero ella lo único que hizo fue darme un beso en la frente y abrirme la puerta para que me bajara.
Lo hice y sin reparo alguno se fue, creí que volvería por mí así que toque la puerta y conocí a Kyoraku el cual me recibió con todo el amor del mundo. Él y el estúpido de Ukitake no hacían más que mimarme y llenarme de regalos, me llevaban a cualquier lado con tal de verme sonreír. Lentamente me fui acostumbrando a vivir con Kyoraku, él me amaba sinceramente y con todo su corazón, un hombre que no me había visto crecer sin embargo yo era su adoración. Lentamente fui olvidando el dolor que me causo esa mujer que me traicionó al abandonarme porque claramente nunca volvió por mí.
Hice amigos, el trabajo me gustaba, mi nueva familia era genial, en la escuela todo era perfecto. Estaba por iniciar mi último año en la Universidad cuando entró un nuevo profesor el cuál un día me llamó por la tarde a su oficina, en cuanto abrí la puerta fue como si la vida me golpeará diciéndome que no podía ser feliz. Ella estaba ahí sonriente tan hermosa como la recordaba como si no hubiera pasado ni un día desde que partió lejos de mí. Pero no fue todo, detrás de ella había dos niños como de unos 9 y 7 años que me sonreían mientras abrazaban las piernas de esa mujer. Después de eso el que se supone que era mi maestro llegó y la abrazo un poco, sentí que mi mundo se iba de cabeza en cuanto ella me miraba tiernamente ¿Sabes lo que me dijo?
“No te pido que me perdones pero quiero que veas que ahora soy muy feliz y si tú quieres puedes ser parte de mi felicidad, me costó mucho trabajo contarle a mi esposo sobre ti pero en cuanto supe que ibas en esta escuela supe que era el destino que me daba una segunda oportunidad. Hijo ¿Por qué no vienes a vivir con nosotros y dejas al vago inútil de tu padre?” Salí corriendo tan rápido como pude de ahí. Jamás había escuchado palabras tan crueles antes pronunciadas, estaba molesto. No porque me hubiera dejado y ahora quisiera ser parte de mi vida sino por lo que había dicho de Kyoraku. Cómo si ella supiera lo que realmente era una familia. La mujer que abandono al amor de su vida y a su hijo.
Tome mi auto y conduje tan rápido como pude, estaba furioso. Ella formó una nueva familia y de verdad se veía feliz, por un momento me sentí celoso de esos niños ¿Por qué ellos sí y yo no? Yo la ame y la protegí cuando los demás no lo hicieron ¿Por qué me había hecho eso? Yo hubiera dado lo que fuera por ella y aun así no le importe en lo más mínimo. Antes de darme cuenta había chocado, no fue grave pero cuando desperté vi a Kyoraku llorar de la alegría. Me di cuenta que yo también tenía a alguien solamente ahí para mí, pero a pesar de eso decidí alejarme de los demás. Claramente no pude regresar a la escuela debido a que implicaría seguir en contacto con ella.
Simplemente deje de creer en los demás, el único al que podía acercarme sin miedo era a Kyoraku, sé que él jamás haría nada que me dañara porque me ama de verdad. Creí que todo estaba perdido hasta que llegó un tonto de cabello naranja que me demostró que no todos son malos y me quieren hacer daño. Me hizo volver a creer en las personas y en el amor y cariño sincero, me regresó esa confianza en mí mismo que perdí aquel día. Sé que si tengo a ese tonto de cabello naranja y al torpe de Kyoraku y hasta a Ukitake no necesito nada más para ser feliz.
No puedo evitar llorar descontrolado al igual que Grimmjow que me sonríe y acaricia mi rostro.
-¿Quieres saber cómo se llama el idiota más grande del mundo que se enamoró perdidamente del tonto de cabello naranja?
Asiento mientras tomo su rostro uniendo mi frente con la suya viendo como las lágrimas no paran de caer.
-Grimmjow… Apuesto que también quieres saber el nombre de ese tonto de cabello naranja que me cambió la vida por completo.
Sonrío mientras algunos sollozos se escapan de mis labios.
-Kurosaki Ichigo.
Lo abrazo tan fuerte como puedo y él a mí, siento sus lágrimas calientes caer en mi hombro mientras acaricio su espalda y cabello. Me despego besándolo suavemente y sonriendo. Grimmjow, mírame. Yo te amo y nunca te dejaré ni mucho menos te traicionaré. Siempre que me necesites estaré ahí para ti ¿Me oíste? Te amo… te amo tanto. Se ríe mucho secándose las lágrimas.
-Idiota ¿Quién te crees que eres para decirlo antes que yo? Ven aquí.
Toma mi rostro dándome otro dulce beso y mirándome fijamente con una bella sonrisa en el rostro.
-Te amo Kurosaki Ichigo, te amo más que nada en este mundo. Tú me haces una mejor persona, no quiero vivir una vida en la cual tú no estés a mi lado.
Lo abrazo tan fuerte como puedo sintiendo como llena mi rostro de pequeños y dulces besos. Te amo quiero estar contigo siempre. Me sonríe para luego levantarse y ayudarme, nos volvemos a colocar los zapatos para volver a emprender el viaje. Caminamos tomados de la mano por algunos minutos más cuando no puedo evitar abrir la boca de la emoción al ver que al final del bosque hay un enorme campo de lavanda que surca un monte entero. Grimmjow…
-Kurosaki yo… yo cometí muchos errores en mi pasado pero te juro que de ahora en adelante no volveré a hacerle daño a nadie, especialmente a ti. Lo juro…
Sonrío apretando más su mano, caminamos metiéndonos entre las lindas flores dejándonos envolver por un aroma dulce y seductor, totalmente refrescante y sutil. Nos recostamos uno alado del otro mirando el cielo adornado con esponjosas nubes que parecen algodones mientras sentimos la delicada fragancia de la lavanda por todo el lugar. Me pego a él tanto como puedo tomando su rostro haciendo que me mire ¿Prometes amarme por siempre?
-Lo prometo.
¿Y cuándo tenga treinta años?
-También.
¿Cuándo tenga cincuenta?
-Lo juro, te amaré cada día más que el anterior pero menos que el día siguiente. No importa cuánto tiempo pase te amaré hasta el fin de los tiempos.
¿Qué tal cuándo deje de ser joven y lindo con este rostro que tengo que tanto te gusta?
-Aun cuando lo único que te quede sea un alma vieja y pesada te seguiré amando y prometo ayudarte a sostener la carga.
¿Lo juras Grimmjow?
-Lo juro ¿Tú también me amarás cuando nadie más lo haga y siempre estarás ahí para mí verdad?
¡Lo juro! ¡La eternidad es poco para decirte que siempre estaré a tu lado!
-Bien en ese caso no hay más que decir.
Sonreímos dándonos un dulce beso cuando escuchamos el sonido de un claxon, levantamos la vista viendo a Kyoraku-san y a Ukitake-san en la orilla de la carretera saludándonos. Nos paramos yendo con ellos que nos sonríen alegres.
-Sabía que estarían aquí, ya no tarda en anochecer y el camino de regreso caminando es peligroso así que vengan hora de irnos.
Ambos asentimos subiendo al lindo Malibu de Kyoraku-san, durante el camino Grimmjow tomo mi mano todo el tiempo, lentamente nos quedamos dormidos por un rato pero en cuanto llegamos cenamos la comida que ya no disfrutamos por la tarde riéndonos y platicando. Realmente me siento tan bien estando con Grimmjow, solo espero que mi padre pueda comprender mis sentimientos. Ukitake-san me comparte algunas más de sus recetas mientras observo de reojo a Grimmjow que platica en la cocina con su padre.
-Entonces ¿Qué piensas hacer Ichigo-kun?
¿Perdón?
-Ya sabes cuando termine el verano.
Ukitake-san yo… Yo quiero quedarme aquí con Grimmjow y ustedes pero mi padre no está muy feliz con la idea.
-Ya veo que alegría. Siento lo de Isshin-san pero sabes que cuentas con nuestro apoyo.
Gracias. Grimmjow y Kyoraku-san regresan después de un rato, continuamos platicando por horas hasta que vemos que pasa de la media noche. Como los tres tienen trabajo mañana nos subimos a descansar, después de un baño rápido con Grimmjow nos metemos a la cama.
-Kurosaki te amo pase lo que pase ¿Sí?
Lo miro un poco curioso pero termino sonriendo. Yo también a ti. Me recuesto sobre su pecho sintiendo sus suaves caricias sobre mi piel hasta quedarme totalmente dormido. Al despertar y sentir los rayos del sol sobre mi rostro brinco estirándome un poco. Miro que Grimmjow no se encuentra a mi lado. Me cambio y bajo encontrándome con Kyoraku-san y Ukitake-san que comen un poco en la cocina. Buenos días… ¿Y Grimmjow? Kyoraku-san, sonríe pasándome un vaso de leche.
-Él salió.
No me dijo nada.
-Bueno pues… supongo que no.
¿Pasa algo? Los dos se miran entre sí para después sonreírme.
-Ichigo, no estamos ocultándote nada. Grimmjow salió probablemente lo verás luego.
Él jamás se va sin avisarme por las mañanas. Ambos permanecen en silencio mientras yo los miro curioso ¿Puedo saber a dónde fue?
-No creo que sea una buena idea…
-Está bien te diré.
-Shunsui…
-Grimmjow fue a hablar con tu padre.
¿Qué? ¿Por qué? ¿Para qué?
-Él dijo que necesitaba saber qué es lo mejor para ti.
No comprendo.
-Grimmjow te ama Ichigo solamente quiere saber si realmente lo mejor para ti es que te quedes.
Eso es una tontería. Antes de que siga hablando salgo corriendo, corro tan rápido como puedo hacía mi casa rodeando el lago, de inmediato una enorme desesperación se apodera de mí. No soporto la idea de que mi padre pueda decirle algo ofensivo a Grimmjow. Después de varios minutos estoy a punto de llegar cuando veo a Grimmjow salir dirigiéndose hacia su auto ¡Grimmjow! Me busca con la mirada hasta que me localiza, llego hasta él intentando recuperar el aliento.
-Kurosaki ¿Qué haces aquí?
Kyoraku-san dijo que viniste a hablar con mi padre ¿Por qué? ¿Te dijo algo malo? Me mira serio para después sonreír un poco y acariciar mi cabello. Grimmjow… lo siento, si mi padre te dijo algo malo me disculpo. Es un torpe que no entiende de razones.
-Tienes razón, sin embargo tienes una gran vida por delante, vas a hacer grandes cosas y yo no puedo entrar en ese camino.
¿Qué? No, espera Grimmjow ¿Qué cosas dices? ¿No estás dispuesto a arriesgar todo por mí?
-Por supuesto, absolutamente todo.
Tomo su rostro pegando mi frente con la suya. Entonces déjame amarte, déjame quedarme contigo, por favor te lo suplico. Tú eres lo mejor para mí… Me mira fijamente totalmente preocupado hasta que termina suspirando.
-Kurosaki óyeme, tu padre y yo hablamos… Tú regresarás a la Ciudad al final del verano.
¿Qué? De inmediato me despego ¿Por qué? ¿Por qué haces esto? ¿No dijiste que no imaginabas una vida en la que yo no estuviera a tu lado? Grimmjow no, no me iré.
-Sí lo harás carajo. Te irás y luego…
¡No! ¡No! Lo empujo sintiendo como mi corazón podría salirse por mi boca. Se acerca a mí pero de inmediato me alejo. No… ¿Por qué?
-Joder déjame explicarte.
No quiero oírlo, si me amas me pedirás que me quede. Dímelo Grimmjow, pídemelo, pídeme que me quede aquí contigo ¡Hazlo, pídemelo! Sí lo haces seré todo tuyo por siempre nadie podrá separarnos. No puedo evitar llorar descontrolado mientras me aferro a sus hombros. Grimmjow pídemelo…
-Kurosaki te irás al final del verano pero déjame explicarte.
Lo aviento furioso. Sí así de fácil llegaste a ese acuerdo sin siquiera consultarme pueden joderse los dos, maldito egoísta idiota. Salgo corriendo tan rápido como puedo alejándome de él que ni siquiera intenta detenerme ni seguirme, las lágrimas no paran de caer a la vez que siento como mi corazón se quiebra en mil pedazos ¿Por qué? ¿No dijo que me amaría por siempre? Maldición ¿Qué voy a hacer?