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¿Sólo un sueño? por The Writing Soul

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Suena el sonido del silbato.

-Es todo, por hoy terminamos-

Aliviados cada uno de los miembros del equipo se dirigen a las duchas.

-¡Kagami, Kuroko! Ustedes limpiarán- Les para en seco la entrenadora Riko Aida entregándoles a ambos un par de cubetas, escobas y trapeadores.

Ante tal injusticia Kagami iba a replicar pero en el acto es callado por Riko.

-¿Debo recordarte tu falta Taiga Kagami?- despedía una oscura y tétrica aura.

Claro que el pelirrojo sabía perfectamente a lo que se refería. Aquél día, no solamente había huido del entrenamiento, sino que, se le había encontrado en la bodega en una posición un tanto indecorosa con Kuroko; cubiertos de una sustancia pegajosa y blanquecina.

Por tanto una hora después, helos aquí.

-Tsk. ¡Esa bruja de Riko! ¡Me las pagará!- Murmuraba una y otra vez entre dientes Kagami.

-No entiendo por qué tanto alboroto- decía un calmado Kuroko- Si no te hubieras saltado el entrenamiento, esto no hubiera pasado. Kagami-kun deberías aceptar tu responsabilidad. Además, fue por causa tuya que me hayan castigado.-

-¡¿Qué has dicho?!- Kagami le toma por la playera levantándolo del suelo- ¡Tú fuiste el responsable de que me atraparán! De no ser por ti...-

Ahora que lo pensaba, Kagami tenía razón, pues de no ser por la torpeza del peli azul no se habrían caído los balones del estante dando de lleno al pelirrojo, que en aquel instante se encontraba comiendo su helado, y éste a su vez no se hubiera caído encima suyo.

-Dakara...- Hace una pausa y alza la mirada. -¿Are? ¿D-Dónde se metió?- En lo que estaba recordando el motivo de la discusión Kuroko se le había escapado de las manos.

-De todos modos. Hay que darnos prisa - como era su costumbre aparece a espaldas del oji carmín.

Sin embargo, Taiga Kagami no daría su brazo a torcer tan fácilmente.

-Te reto uno a uno. El que  enceste más veces gana- con esto había captado la atención del ex miembro de Generation of Miracles. -Si yo gano tú terminas de limpiar-.

-Y si yo gano- Kuroko le lanza una filosa mirada.

-...-

-Si yo gano...- continúa- Harás lo que yo quiera y diga.-

A pesar del repentino cambio del oji azul, Kagami reconocía su superioridad por tanto acepta el reto.

Comienza el juego.

No se hizo esperar para que el pelirrojo se llevara los primeros puntos. Sin embargo, repentinamente todo cambio.

La velocidad y efectividad en los tiros de Kuroko aumentaron,  el marcador se apretaba cada vez más.

Era la primera vez que Kagami veía en Kuroko determinación, poder y fiereza. Por primera vez se encontraba delante de un oponente infinitamente más poderoso que él. Ni siquiera cuando se había enfrentado a Generation of Miracles  se había sentido tan inferior.  Ése era otro tipo de basquetbol, uno oscuro, uno donde su luz quedaba eclipsada completamente, un juego de las sombras.

El marcador final quedó: Kagami (118) Kuroko (200)

-Ah...ha...- al termino del partido Kagami se encontraba completamente derrotado, de cara al piso.

-Entonces...-  Kuroko se pone al nivel del oji rojo- Que empiece la diversión.- Diciendo esto último besa apasionadamente al pelirrojo.

A falta de aire el peli azul se separa apenas lo justo para que el pelirrojo pudiera obtener algo de aire.

-...Kuroko...- era trabajoso para él respirar más aun siquiera hablar.

Simplemente sus labios fueron nuevamente poseídos.

Tras el primer shock, Kagami se dejó hacer. No podía negar que Kuroko era  excelente besando y...

-Estas duro- Kuroko posa una mano  en la parte baja de Kagami, sacándole un sonoro gemido.

-Mph...Joder...Kuroko- debido  al hipnótico vaivén Kagami apenas podía pensar.

-Kagami-kun desea esto tanto o más que yo.- En tez de marfil aparece una leve sonrisa- Ecchi-. Súbitamente acelera los movimientos de su mano.-Me encargaré de que experimentes el mayor placer que jamás hayas imaginado. Hare que te corras dentro de mí tantas veces que perderás el conocimiento.-

Así comienza una lucha desenfrenada de ambas partes en busca de contacto.

Desesperado y segado por la lujuria Kagami se posiciona encima de Kuroko poniendo así su hombría en la entrada del peli azul.

-Espera- Con un rápido y ágil movimiento Kuroko revierte la situación- ¿No creerás que será así de fácil o sí?

-Mph-tras recuperarse del desliz Kagami entra sin miramientos al juego-Por un momento,sí, lo creí.-

-Grave error- diciendo esto se escucha un leve tintineo, tras lo cual encontramos al poderoso Taiga Kagami esposado.

Una vez habiendo sometido a su compañero, de una sola estocada Kuroko, se empala en su  hombría.

Para sorpresa de todos, con ése único acto Kagami se vino.

-Jejeje- de forma altanera ríe por lo bajo el peli azul.- Parece que la droga te ha sentado bastante bien, eh Kagami -kun-.

Por supuesto el pelirrojo no sabía a lo que se refería. ¿Cómo? ¿Cuándo? ¿Dónde? Eran preguntas que rondaban en su cabeza.

-Ha. oh  vamos Kagami-kun no me decepciones.-

Al alzar la mirada y reparar en la leve sonrisa lasciva y malvada del otro, lo entendió.

-Ma-Mazaka...-

Agua.

Kuroko había aprovechado su habilidad para cambiar el contenido de su botella por uno extraño y ajeno a él.

<<E-Eso explicaría... >> sus pensamientos fueron súbitamente interrumpidos por los bruscos movimientos del oji azul. <<Joder... ¡Qué bien se siente! Ah... Estoy... A punto de ....>>

Iba a llegar nuevamente al clímax cuando los movimientos pararon, e incluso la cálida cavidad en la que se encontraba su miembro, desapareció.

Kuroko se alejó apenas lo suficiente para hacer gozar al oji rubí de una vista paradisiaca.  Colocándose frente suyo, en cuatro, mostrando su rosada y dilatada entrada.

-Por atrás... Haz que me corra Kagami-

Y dicho y hecho Kagami lo folló tan fuerte y tantas veces como su cuerpo se lo permitió.

Extenuado yacía a un costado de Kuroko cuando éste comenzó a besarle el pecho y el torso.

-Espera Kuroko...- lanza un gemido- Ya... No puedo más...-

-Ya te lo dije. Te haré perder la razón por tanto placer - baja cada vez más, su camino de besos y mordidas.

Debido a la atención recibida el miembro de Kagami se levanta brioso nuevamente. Pero el juego sólo acaba de empezar.

La habitación se tornó oscura, al menos para Kagami. Kuroko le había vendado los ojos con una cinta, al mismo tiempo que empieza a lamer golosamente su entrada.

-Ah... Kuroko.... ¿Qué estas....? Ha... ¡Ah!-

Su virgen interior es profanada por el miembro del aparentemente inocente Kuroko Tetsuya.

-¿Pensaste que serías el único que gozaría de la diversión?- Hace una pausa- ahora tú gemirás para mi Kagami.-

-Ha. Ah. Mgh. ¡AH!-

Sus movimientos eran profundos y duros.

-¡AH AH AH! ¡KUROKO!-

No tardo en encontrar el punto sensible del pelirrojo.

-¿Aquí?- gozaba tortúrale. Dando, al principio,  con ahincó para luego bajar a un nivel exasperante sus estocadas. -Kawaii Kagami.-

-Ku-Kuroko onegai...- por la comisura de sus labios resbala saliva, reflejo del gran placer que sentía.

-Tendrás que rogarme. Implorarme por lo que quieres Kagami.-

Tragándose todo el orgullo Kagami diría las palabras que lo dejarían indefenso, a completo merced de Kuroko.

-M-Más... Quiero más...-

-Y eso te daré-

(************)

-Y eso te daré-

Esas fueron las últimas palabras que Kagami escucho.

* Beep *Beep * Beeeeeep (sonido del despertador)

-¡AAAAAAHHH! Ha- Kagami se levanta precipitadamente-¿D-Dónde estoy?- visiblemente aturdido-¿Mi habitación?-.

De inmediato recuerdos de la noche anterior vienen a su mente. Verdaderamente Kuroko lo había dejado inconsciente. Pero...

¿De verdad ocurrió?

Ciertamente no había forma de comprobarlo, no había  rastro de lo ocurrido anoche.

-¿Sólo un sueño?-

(*************)

-¡Ei Kagami! ¡Despierta!-

Al estar tan ensimismado en sus pensamientos no pudo detener el pase de Hyuga, el cual terminó en su cara.

Todos estallaron en carcajadas.

-Kagami-kun pon atención por favor-

Ésa voz era irreconocible.

-¿¡K-K-Kuroko?!-

-No quiero limpiar de nuevo las canchas-

Todo parecía normal. Todos toman de nuevo sus posiciones.

-A no ser que sea eso lo que deseas- le susurra de forma provocativa, Kuroko - Ne Kagami ¿Quieres probarme de nuevo o prefieres  que yo sea el que te pruebe  a ti?-.

Kagami se queda completamente estático mientras ve como se aleja Kuroko, quien tomando su botella de agua hace una especie de brindis.

-¿S-Ó-L-O U-N S-U-E-Ñ-O?-

FIN


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