Era casi la una de la madrugada y ella seguía ahí esperando que Sehun y Luhan regresaran de donde fuera que habían ido, escucho el motor de un auto y luego la puerta principal abrirse y sin esperar un segundo salió a ver sí eran ellos, no dijo nada y se dedico a observarlos desde lejos sonriendo enternecida al ver a Sehun entrar con el lindo peli rosa totalmente dormido en sus brazos y decidió no interrumpir, después de todo ella como el ama de llaves debía despertarse muy temprano.
Cuando logro entrar a la habitación del menor lo recostó con mucho cuidado en la cama tratando de no despertarlo, fue hasta su closet para tomar un pijama y poder colocárselo a Luhan para que así estuviera más cómodo.
-Quédate a dormir...olvídate de quién te espere hoy y quédate conmigo-pidió Luhan mientras Sehun lo cambiaba de ropa
-Iba a quedarme de cualquier manera, no tenías que pedirlo-sonrió acariciando su rostro
-Promete que no morirás jamás-pidió
-¿Por que quieres que hago algo así?
-No quiero perder a nadie más...por favor promételo-suplico
-Bien...te prometo que de ahora en adelante mi vida es tuya bonito, por eso yo moriré únicamente cuando tú me lo permitas-Luhan sonrió asintiendo en aprobación
-Entra a la cama-Sehun obedeció sintiendo como Luhan lo abrazaban de forma instantánea, el menor temblaba y escondía su rostro como sí se avergonzara de algo de lo cual no tenía que avergonzarse, estaba sufriendo por eso aun cuando estaba odiando verlo así llorar era su única forma de liberarse
-Llora todo lo que necesites bebé, no te quedes con nada-alentó ya que de esa forma todo sería más llevadero después
Luhan parpadeo dejando ir las lágrimas que aumentaban cada vez más hasta volverse incontrolable, sus hipidos casi inaudibles se volvieron lamentos de puro dolor, Sehun también sintió que lloraría al darse cuenta que su Luhan estaba sufriendo de aquella forma desmoronándose en sus brazos y que no podía hacer absolutamente nada al respecto, le dolía, le dolía mucho pero era su obligación aguantar y ser fuerte por su pequeño porque él lo necesitaba de esa forma.
Cuando el día llegó el primero en despertar fue Sehun, Luhan parecía seguir profundamente dormido a su lado, había rastros en su rostro de las lágrimas pasadas y su dormido rostro seguía reflejando algo de dolor, su mano se encargo de acariciar lentamente el rostro del menor sonriendo un poco cuando Luhan siguió el camino de su mano.
-¿Desde hace cuando estas despierto?-pregunto con tranquilidad
-No pude dormir-admitió
-Eso no está bien
-Da igual-se dio vuelta sobre la cama para ponerse de pie frenado sus acciones cuando la mano de Sehun se cerró alrededor de su muñeca
-No bonito, eso no está bien así que no me da igual
-Entonces hay que quedarnos aquí, no hay que salir, seamos sólo tú y yo-sugirió
-No es que no quiera pero debo hacer un par de cosas y por eso...
-Entonces sí da igual-su mano se zafo de la mano de Sehun siguiendo hasta el baño para poder ducharse y salir de la habitación
Sehun se dejó caer en la cama totalmente derrotado después de que Luhan se fuera, quería que estuviera bien pero no sabía de que forma se acercaba a él como la noche anterior, salió de la habitación luego de unos minutos y bajo a la sala de estar donde se encontró con BoA y otras tres sirvientas mirando la televisión maravilladas.
Miro la pantalla abriendo la boca al ver ahí la imagen de Luhan, el vestía totalmente de blanco y caminaba lentamente con una sonrisa seductora en sus perfectos labios hasta lo que parecía un elevador, una chica estaba ahí, ambos intercambiaron un par de miradas mientras las puertas del elevador se cerraba y para cuando volvieron a abrir ambos estaban besándose, sintió una oleada de celos que se esforzó en controlar ya que sólo era un anuncio en la televisión, otra sonrisa perfecta de Luhan a la chica y bajo del elevador finalizando el comercial con algo que no escucho y mucho menos le interesó, al parecer era sobre un perfume o algo así.
-Wow-fue lo único que salió de os labios de BoA
-No sabía que ese anuncio seguía transmitiéndose-la voz del menor rompió el silencio llamando la atención de todos los demás
-¿Realmente es usted el del anuncio en la televisión?-pregunto una asombrada BoA
-Sí, antes era modelo-sonrió
-¿Antes, ya no lo es?-quiso saber
-No BoA noona ya no lo soy, deje el modelaje para estar al lado de Sehun-mintió, en parte claro estaba porque si tenía que ver con Sehun al final
Las otras dos empleadas miraron asombrado a Luhan comenzando a murmurar algo sobre que el señor de la casa tenía por novio a una celebridad pero eso era lo último que a Sehun le importaba y que únicamente se mantenía mirando a Luhan.
-Buena días amor-saludo Luhan en cuanto se dio cuenta de su insistente mirada, plantando un beso suave en los labios sólo que en esa ocasión se había sentido diferente, ya no se sentía falso y con sabor a papel
-Buenos días-saludo de vuelta-Te veías hermoso en el anuncio-aquello fue inesperado para Luhan y se sonrojo de forma involuntaria
-Gra-gracias-tartamudeo
-Ven hoy desayunaremos en el jardín-informo
Luhan asintió permitiéndole tomar su mano para ir al jardín, BoA dio órdenes para que todo fuera a servirse al jardín para ambos, todo estaba bien o así fue para Luhan que vio a una de las sirvientas sonreírle descaradamente a Sehun, hasta ahí había llegado toda la tranquilidad de la mañana y Luhan ya no estaba nada feliz.
-¡Lay!-llamó al jardinero en cuanto lo vio
-¿Qué necesita señorito Luhan?-pregunto el chico acercándose al peli rosa
-Nada realmente, simplemente quería saludarte, me gusta hablar contigo-sonrió divinamente para el jardinero que sonrió de forma nerviosa al notar la mirada de Sehun sobre su persona
-Sí bueno...a mí también me gusta hablar con usted pero...
-No te pago para socializar así que lárgate a trabajar-ordenó Sehun molesto
-Sí señor, que tenga un hermoso día seño...
-Luhan-interrumpió-Solo llámame Luhan-pidió
-Muy bien, hasta luego Luhan-hizo una reverencia para finalmente alejarse de la mirada acecina de su jefe
-No tienes que ser tan idiota con él-dijo con el ceño fruncido
-No tendría que tratarlo mal sí tú no estuvieras coqueteando con el jardinero a la primera oportunidad que tienes-soltó fastidiado
-Yo puedo hacer lo que quiera con mi vida además yo no digo nada respecto a lo cínico que eres al estar coqueteando con las sirvientas dejándome a mí como un imbécil-contraataco
-Lo que menos me importa es lo que la servidumbre piense pero tú no vas a hacerme ver como un imbécil al cual le ponen los cuernos-sentenció
-Así que es eso...yo puedo quedar como un insignificante idiota incapaz de complacer a su pareja, no pues muchas gracias por lo que me toca-soltó con sarcasmo
-Luhan yo no quise decir eso y lo sabes-se defendió
-No, yo ya no sé nada y realmente estoy harto de todo esto, todo lo que haces es tratarme como sí no valiera nada y eso no es así, yo valgo mucho y no sé ni porque aún estoy soportándote, no sabes cuánto te desprecio ahora mismo-el menor se levanto de su asiento y se fue antes de que comenzara a llorar como el idiota que era
-¡Luhan ven aquí ahora!-ordenó
-Jodete-respondió con la voz elevada-Fuera de mi camino-pasó empujando un poco a un par de sirvientas que se reían de él
Subió de a dos las escaleras hasta llegar a su habitación encerrándose en ella, ya no podía más con eso, estaba cansado y había un raro sentimiento en su corazón que se encargaba de martirizarlo cada vez que de Sehun se trataba, la noche anterior le había parecido algo más que inolvidable y Sehun tan sólo le habían bastado escasos segundos para arruinarlo, ya no podía más.
Era un estúpido por ser tan malditamente débil con Sehun, ¿así de patético y desesperado estaba?, aceptaba todo lo que ese tipo hacia y aún cuando ya sabía que sería mucho peor seguía permitiendo que todo le afectara, ¿así de débil era?, claro que era débil y más allá de estúpido pero… ¿que hacia?, ser fuerte, era más que obvia la respuesta y entonces ¿por qué se conformaba con miserables muestra de cariño?, eso no podía ser posible, sus padres estarían tan decepcionado de ver en lo que se había convertido.
"Vuélvete un hombre y date tú lugar que tú vales más que todo en este maldito lugar" esa vocecita en su cabeza se lo había repetido tantas veces que ya había perdido la cuenta y entonces ¿por qué la ignoraba?, tal vez sólo porque era un estúpido ingenuo que al haber visto un poco de bondad en el corazón de Sehun pensó que había algo más que un imbécil que disfrutaba de lastimarlo.
"Despierta imbécil, él es un bastardo y nada de lo que un mocoso ingenuo como tú haga hará que eso cambie", y si ya sabía eso que rayos seguía esperando que pasará, no era bueno y mucho menos sano seguir de esa forma y debía enfrentarlo, ya no podía dejar que todo siguiera como estaba o iba a terminar muy mal.
*****
-¿Qué demonios le hiciste ahora?-pregunto una muy molesta BoA
-Tan sólo no digas nada está vez noona-pidió
-No, nada de eso Sehun, ya no eres un maldito niño, se supone que eres un hombre hecho y derecho ¿por qué no actúas como tal?-reprendió al rubio como sí hablará con un niño-¿Qué ganas haciendo todo esto?, únicamente le haces daño y no únicamente a él, no soy estúpida y sé que odias esto y no comprendo que pasa entonces
-Que soy un imbécil eso pasa y por eso lo hago, Luhan ayer tuvo el día más horrible de su vida y mi deber debería ser el hacer que este mejor y feliz, borrarlo todo para únicamente hacerlo sonreír y en cambio lo lastimó más, cualquiera se hubiera alejado ¿por qué él no lo hace?-le pregunto desesperado mientras se abrazaban a ella escondido su rostro en el vientre de aquella gran mujer que amaba como si fuese de su familia
-Es porque te ama y por eso te soporta pero el amor no es tan fuerte Sehun y se puede acabar-explicó acariciando con cariño el cabello de Sehun
En cuanto Sehun escucho aquello se levanto de golpe empujando a BoA con fuerza, eso no podía pasar de ninguna forma, ella trato de acercarse nuevamente sólo para ser rechazada mientras el rubio salía de ahí con una expresión indescriptible, eso no estaba bien de ninguna forma, Luhan no debía amarlo, él era malo, era cruel y despiadado, era basura y no podía ni merecía tener el amor de Luhan, él era bueno, dulce, tierno, inocente, puro y cálido, era más que perfecto y merecía algo mejor.
Se pasó todo el día encerrado en su habitación sabiendo que Luhan estaba de la misma forma y era horrible saberlo, estaba todo mal, se suponía que el único que sufriera debía ser él pero lo estaba lastimarlo demasiado y no podía con eso.
-¿Qué hago, qué hago?-se preguntaba angustiado era la primera vez desde hacía mucho que sentía miedo de verdad
"Arréglalo" sugirió esa vocecita en su cabeza, se acerco a la puerta yendo directo a la habitación de Luhan pero la encontró vacía, busco por toda la casa sin encontrar absolutamente nada hasta que fue al jardín, Luhan estaba ahí con Lay plantando margaritas en el jardín, suspiro aliviado ya que había llegado a pensar que Luhan había escapado pero no era así, camino para llegar a él deteniéndose en seco al ver la sonrisa brillante y sincera que Luhan tenía aún cuando estaba todo lleno de lodo, era feliz, se le veía en la mirada y para él fue lo peor, ya que eso significaba que todos podían hacer feliz a Luhan menos él.
Luhan noto su presencia y se mantuvo mirándolo a los ojos, Lay comenzó a decirle algo que el peli rosa estaba ignorando y sin decir nada Luhan giro el rostro y lo beso, Lay sólo permanecía en shock dejando que Luhan se pegara a su cuerpo y fue entonces que los papeles se invirtieron y fue el quién sintió lo mal que Luhan se había sentido antes, su corazón había dejado de latir rompiéndose en miles de pequeños fragmentos aún después que vio a Luhan alejarse de Lay y pedir una disculpa para caminar en su dirección pasando a su lado sin decirle nada.
Quiso llorar pero no lo hizo y sin decir nada siguió a Luhan hasta su habitación, el menor no le dirigió la palabra en ningún momento, ni siquiera cuando entró a la habitación con él mientras se dedicaba a buscar lo necesario para una ducha para borrar así todo rastro de lodo de su cuerpo.
-¿Tienes algo que decir o sólo te quedarás ahí como un estúpido?-su voz fue helada volviendo todo aún más doloroso para Sehun pero se lo merecía por eso no tenía derecho a quejarse
-Quería disculparme por lo de antes Luhan-casi susurro
-Sí bueno ya lo hiciste, ahora puedes irte-señaló la puerta aún abierta
-No Luhan no entiendes yo...-quiso acercarse pero se detuvo sorprendido cuando Luhan tomo unas tijeras y las empuño en su contra
-Sí das un pasó más no respondo, no te quiero cerca-advirtió mirándolo con algo que parecía asco
-Luhan...
-¡Lárgate ahora no quiero seguir viendo tú maldito rostro, déjame solo!-ordenó
Sehun apenas se movía y hasta respirar le parecía difícil, esa mirada le había calado hasta el alma, ¿eso era lo que iba a significar que Luhan lo odiara?, sí era así no lo quería pero no tenía más opción ya lo sabía por eso sólo dio media vuelta y se fue dejándolo, sí Luhan deseaba estar solo eso iba a tener.
Nadie lo molesto después de eso, BoA le había llevado su cena y merienda a la habitación como se lo había pedido, no quería ver a Sehun mientras fuera posible, sabía que no iba a poder mantenerse encerrado para siempre pero lo evitaría lo máximo posible.
Por la noche no tuvo ningún problema para dormir ya que al parecer Sehun esa noche no había llamado a nadie a su habitación cosa que muy en el fondo le alivio y alegro, a la mañana siguiente le pareció raro el profundo silencio que había en la mansión por lo que salió a revisar a que se debía, le pareció extraño no ver por los pasillos a ninguna de esas brujas que trabajaban ahí mientras él seguía caminando a la cocina donde por fin encontró a alguien.
-Buenos días señorito Luhan-saludo BoA la cual parecía triste
-Buenos días noona, ¿donde están todos?-pregunto al darse cuenta que parecía que sólo ella y él estaban en casa
-Sehun les dio unos días libres, él también se fue-explico
-¿Se fue, a donde?
-No nos dijo, lo único que dijo fue que usted no quería verlo y por eso lo dejaría aquí por unos días, hizo que todos a excepción mía y de Lay se fueran, ¿qué pasó?-pregunto preocupada por lo mal que se veía Sehun cuando había hecho todo eso
-¡Genial!-hablo felizmente ignorando la preocupación de BoA-Vamos noona desayunemos en el jardín-pidió sonriente
No lo iba a disimular el hecho de que estaba feliz de saber que Sehun no iba a estar ahí, no quería verlo más aunque era consciente que el rubio no iba a desaparecer para siempre pero por eso aprovecharía su ausencia para relajarse tanto como pudiera.
Una semana pasó donde él parecía totalmente feliz de no ver a Sehun, BoA estaba preocupada lo sabía pero a él parecía no importarle aún cuando muy en el fondo extrañaba al rubio pero era hora de crecer y dejar de ser tan idiota por eso se negaba a cualquier sentimiento de tristeza que pudiera traer el rubio, así estaba bien, solo él.