Minseok estaba sentado en el sofá mirando a Chen casi con desesperación, el día había llegado por fin y podría hablar finalmente con Luhan, el castaño le estaba terminando de dar una explicación de lo que debía y no debía decirle a Luhan, le había dicho a que Luhan estaba en peligro y aunque al principio había duda sobre eso una vez que había mencionado a Victoria todas sus dudas desaparecieron y ahora sabia que debía ser muy cuidadoso.
-Bien ahora sí, vamos a llamarlo-sonrió sacando su celular
Su mirada apenas se aparto de Chan cuando lo vio marcar el número, lo vio sonreírle cálidamente y trato de sonreír también pero únicamente hubo un mueca, hasta donde estaba sentado podía escuchar el tono de la llamada entrante y le desesperaba cada segundo que pasaba que no respondían.
-Hola Sehun ¿cómo estás?-pregunto en cuanto atendieron su llamada
-Bien, ¿qué pasa?-pregunto Sehun
-Bueno realmente la llamada no es para ti-sonrió mirando a Minseok con una sonrisa
-Oh ya entiendo, espera un poco, voy a despertarlo-escucho leves ruidos durante un rato y entonces por fin oyó su voz-¿Hola?-era Luhan, su Luhan, apenas lo había oído y ya estaba llorando
-Espera un poco pequeño te tengo una sorpresa-sonrió algo triste al ver a Minseok así de emocionado-Aquí tienes-le entrego el teléfono, estaré en la habitación, no me quedo porque sabes que me duele, confió en ti-le dijo el castaño para después irse dejándolo con el celular en las manos que le estaban temblando
-¿H-Hola?-hablo vacilante
-¿Minnie, Minnie de verdad eres tú?-pregunto el otro con la voz algo quebrada también
-Si Lulu, soy Minnie
-Oh dios-sollozo-Te he extrañado tanto Minnie
-Yo también Lulu, te extraño mucho, mucho-aseguro
-¿Cómo estas, dónde estás?-pregunto rápidamente
-Estoy bien Luhan, no puedo decirte donde pero estoy muy bien, ¿cómo estás tú?-pregunto antes de escuchar un por qué
-Estoy bien Minseok, lo prometo
-Te creo… ¿dónde estás?-pregunto preocupado
-Lejos…estoy con Sehun el está cuidando de mi-hablo como si estuviese prometiéndole algo
-¿Sehun?
-Es una larga historia que te contare después ¿eta bien?
-Bien… Lulu yo…estaba tan preocupado por ti, no sabía nada y Victoria solo me decía que estabas en París pero sabía que era mentira y…estoy tan feliz de escucharte-sollozo
-Gracias Minnie, gracia por todo lo que has hecho, te quiero tanto-eran un desastre ambos lloraban
-Yo también, sabes que te amo-dijo
-Yo también te amo Minnie-respondió, siempre le había dicho a Luhan que lo amaba pero él otros siempre creía que era tan solo como amigos y sabía que en esa ocasión no era diferente
-¿Somos un desastre, no?-rió tanto como su voz quebrada se lo permitía escuchando a Luhan hacer lo mismo-Lloramos por todo
-Lo sé pero te extrañaba tanto que es inevitable
-Quiero verte
-Yo también Minnie, pronto nos veremos, lo prometo
-Bien…yo Chen dijo que no podía tardar así que…
-¿Estas con Chen?
-Si
-Me alegra tanto, él va a cuidarte así que confía en él por favor-pidió
“Si supieras” pensó para sí mismo antes de contestar con un simple y débil “lo hare”.
-Hasta pronto Lulu, esta no será la última llamada lo juro
-Lo sé, cuídate mucho, te quiero
-Yo también te quiero-la llamada finalizo con esas palabras y más lágrimas, había tanto que quería decirle pero no era el momento, limpio sus lagrimas y se puso de pie con una amplia sonrisa en los labios, entro a la habitación y sin decir nada abrazo al castaño por la espalda-Gracias Jongdae, muchas gracias
-Todo sea por tu felicidad-respondió apenas entrelazando sus manos
-Jongdae-volvió a llamarlo haciendo que se estremeciera, era estúpido pero le fascinaba cada vez que el rubio lo llamaba por su nombre
-¿Qué pasa Minnie?-pregunto aún sin verlo
-Luhan me dijo que si estaba contigo estaría bien, confía en él por eso ya no tratare de escapar-prometió
-Me alegra escuchar eso-sonrió un poco-Me hubiese gustado que lo hubieras decidido por ti mismo pero igual estoy feliz-aseguro
-Pero…hay algo que él me pidió que hiciera y que yo ya hacía por mi mismo
-¿Y que es eso?-pregunto curioso arreglándoselas de alguna forma para poder darse la vuelta y poderlo ver a los ojos
-Yo ya confiaba en que estaría seguro a tú lado sin que él me lo pidiera-confeso sonrojándose cada vez más a medida que hablaba
-Lo sé y eso me hace muy feliz-sonrió
Acerco sus labios a los del menor rozándolos apenas, Minseok respondió tímidamente al contacto moviendo sus suaves labios lentamente, un beso tierno, labios apenas rozándose entre sí pero totalmente perfecto para él, todo lo que proviniera de Minseok para él era perfecto y lo enamoraban cada día más así el rubio le correspondiera o no pero de cualquier forma él iba a esforzarse hasta tener su amor por completo.
*****
Sehun lo había estado observando todo el tiempo que había durado la llamada y en cuanto esta había acabado el rubio le había limpiado las lágrimas y lo había abrazado protectoramente, estaba mal que Luhan tuviese todo tan difícil pero confiaba en poder ponerle fin a todo muy pronto.
-¿Estas mejor?-pregunto con cuidado
-Muchas gracias Sehun-sonrió-Gracias por cuidar de mí y por cuidar también de Minnie
-Si es importante para ti eso lo hace importante para mí también-mentira estaba muerto de celos sobre todo cuando lo había escuchado decirle que lo amaba pero no podía estallar ahí
Le dedico una última sonrisa y beso su mejilla antes de levantarse de la cama e ir a la ducha donde podría maldecir todo lo que quisiera y culpar al agua fría o a cualquier otra cosa que se encontrara ahí, no sabía si el menor iba a creerse eso pero mejor que nada eso era seguro.
Una vez que estuvo dentro del baño e deshizo de su pijama y se adentro bajo el agua caliente, eso lo ayudaba a relajarse pero aún no podía quitar esa horrible sensación y aquellas palabras seguían repitiéndose como una grabación sin fin dentro de su cabeza, “Yo también te amo Minnie”, dolía insoportablemente aunque sabía que Luhan no lo había dicho más que con el amor de un amigo, si hacia dolía en ese momento no quería saber como dolía cuando el de verdad se enamorara de otro.
-Sehun-llamo Luhan, giro a la puerta pero no vio a nadie, los brazos del menor lo rodearon sorprendiéndolo inmensamente, estaba ahí en la ducha tras él
-¿Qué pasa bonito?-pregunto tan tranquilo como pudo
-Yo…yo quiero…-recargo su rostro en el hombro del rubio sin saber cómo decirlo, de hecho aun no estaba seguro porque había entrado en primer lugar, no si sabia pero ara algo de explicar sólo necesitaba tenerlo cerca tanto como pudiera
-¿Estás seguro?-pregunto dándole la oportunidad al menor de decir que NO
-Si-respondió casi en un susurro
El estar entre los brazos de Sehun era único y maravilloso, la forma en cómo lo besaba con cuidado como sí tuviese miedo de romperlo lo hacía sentirse como el ser más amado del mundo, estaba perdido en cada lenta caricia y beso con textura de algodón que antes de lo que se imagino su cuerpo ya se encontraba entre la pared fría y el cuerpo mojado del rubio.
-Sehun-suspiro anhelante y sorprendido en cuanto el rubio comenzó a acaricia su intimidad
-Será diferente-prometió besando castamente sus labios
No entendía a que se refería exactamente en ese momento pero logró comprenderlo luego de unos minutos, los besos llenos de dulzura que el mayor repartió por casi toda su piel, las delicadas caricias que le proporcionaba y esa forma de mirarlo le ayudaron a comprenderlo.
Era diferente a las otras veces, era como si hubiera algo más tras todas esas acciones, se sentía como sí le estuviera haciendo el amor y no fuese un simple arrebató pasional como las demás veces.
-Luhan-gimió sobre su oído cuando él comenzó a acariciarle la espalda con suavidad
-¿Qué...estamos haciendo?-no lo entendía y algo en todo eso le asustaba
-Eres hermoso-alago con la más dulce de las sonrisas adornado sus labios-Date la vuelta-pidió
Obedeció en silencio colocando sus manos en la pared mojada, los labios de Sehun le besaron la nuca y los hombros mientras sus manos le recorrían el pecho y los costados lentamente, haciéndolo jadear y pegar su frente a la pared.
La mano derecha del rubio viajó de su pecho a sus costado le acaricio la cintura y la cadera antes de que uno de sus largos dedos se presionara suavemente en su entrada arrancándole un audible gemido.
-Relajante
El primer dígito invadió su cuerpo y a diferencia de las demás veces gimió placenteramente, el mayor lo movió con mucha lentitud y cuidado para no lastimar haciendo lo mismo con los siguientes intrusos.
La lentitud y cuidado con la cual Sehun lo preparó para recibirlo fue una tortura realmente placentera que lo dejó hecho un manejo de gemidos y temblores, Sehun lo hizo girarse para quedar de frente y sonrió suavemente antes de volver a besarlo, dejó que su lengua se adentrarse a su boca acariciando cada rincón de ella dejándolo ahogar sus gemidos cada vez que sus cuerpos se friccionaban suavemente, cerró los ojos disfrutando de cada pequeña nueva sensación que le recorría el cuerpo al igual que el agua tibia de la regadera.
Sus brazos se aferraron al cuerpo de Sehun cuando el mayor lo levanto permitiéndole enredar su piernas en su cintura, el mayor tomo su mano derecha quitándole el condón que ya no recordaba que llevaba y que había tomado de uno de los cajones del buro, lo abrió con ayuda de su boca y se lo colocó todo ante su atenta mirada.
-Sehun-gimió ansioso
-Quería verte Luhan...tú rostro...mientras te hago mío de nuevo-su voz estaba ronca y la pasión que se reflejaba en sus ojos jamás la había visto
“Suyo” desde cuando él era algo de Sehun, no lo sabía pero tendría que averiguarlo.
Sus uñas se enterraron sobre la pálida piel de los hombros del rubio cada vez más a medida que entraba en el, ambos respiraban agitados, ambos sentían el corazón latiendo con demasiada fuerza, ambos se miraban a los ojos tratando de confesar todo lo que con palabras les era imposible decirse.
Cada embestida fue lenta siempre dando en aquel punto que lo hacía ver un arcoíris de todos los colores, sus manos tocaban en los lugares perfectos aumentando cada sensación y cada beso fue perfecto y mágico para el haciéndole imposible dejar de gemir el nombre del hombre que volvía a enloquecerlo.
Sentía como sí pudiera tocar el cielo y el infierno a la vez explotando en un devastador orgasmo gritando el nombre de Sehun, el mayor término junto a él gimiendo una última vez su nombre.
Ambos se mantuvieron abrazados con los ojos cerrados tratando de recuperar el aire que les faltaba, Luhan fue el primero en abrir sus ojos observando cada detalle perfecto del rostro de Sehun.
Cuando el rubio pudo recuperarse lo puso en el suelo con mucho cuidado sin dejar de abrazarlo, todo él estaba temblando sin control y de no ser por los brazos de Sehun habría terminado el suelo, el mayor apagó la regadera y se deshizo del preservativo antes de cargarlo nuevamente envolviéndolo en limpias y suaves toallas en el proceso.
Lo llevó hasta su cama y lo recostó en ella con mucho cuidado separándose sólo para poder ir a colocarse su ropa interior regresando a su lado después.
-¿Te lastimé?-pregunto un tanto preocupado acariciando su rostro con la punta de los dedos
-Estoy bien-pudo responder
-Me alegra escuchar eso-sonrió tomando su mano para besar sus nudillos con suavidad.
Todo estaba pasando como sí de un sueño se tratase y no le importaba porque sí era un sueño él quería dormir por mucho, mucho tiempo más entonces.
*****
El pequeño hombrecito entro apresurado a la habitación siguiendo a la elegante y bella mujer que había irrumpido a la mansión sin previa habitación, Jung la esperaba de espaldas a su escritorio mirándolo todo desde la ventana de su despacho.
-Señora Victoria por favor no puede…
-Está bien deja que ella se quede aquí, yo me encargo desde ahora-el temeroso hombrecito miro a Jung antes de asentir nervioso y retirarse dejando al anciano hombre con Victoria-Victoria cariño ¿qué te trae por aquí?-pregunto con aquella falsa sonrisa que siempre portaba
-No me vengas a mí con falsa cordialidad viejo-respondió con su bello rostro contraído en una mueca desagradable-¿Se puede saber que rayos hace el imbécil en turno que se está tirando a mi sobrino en MI empresa?-pregunto molesta arrojando sobre el escritorio de Jung un montón de fotografías de Sehun
-Vaya así que Hunnie está jugando ahora al señor empresario-se burlo
-No me importa que rayos este haciendo ese imbécil lo quiero fuera de mi camino ya-ordeno
-Deberías medir bien tus palabras querida podría cortarte la lengua-amenazo borrando su sonrisa habitual
-No me hagas reír-se burlo ella-Tú no me harías nada jamás por la simple razón de que la que te costea todo esto soy yo-le recordó
Jung frunció el ceño mirando con odio a la bella mujer frente a él, Victoria era una desgraciada y tal vez molestándola iba a acabar muy mal, eso mujer era el mismísimo demonios, había vendido a su propio sobrino a él y también había provocado el accidente de los padres de Luhan haciéndose pasar por los ojos de todos como la pobre y desconsolada hermana y cuñada que sufría con la perdida de las dos personas que más odiaba, ella no tenia escrúpulos.
-¿Y qué quieres que haga?-pregunto ya resignado
-Deshazte de ese tipo cuanto antes-ordeno
-Muy bien pero no puedo hacerlo aún ya que…
-¿Tiene lo tú que quieres, no?-sonrió con malicia-Yo te vendí a Luhan para que hicieras con él lo que quisieras y quien lo tiene en sus manos es otro, debe ser frustrante eso ¿no es así?-pregunto buscando molestar a Jung aún más de lo que ya lo estaba con eso
-Yo me encargare de Sehun ¿por qué no te vas?-pregunto forzando una sonrisa
-Claro, se me hace tarde, nos vemos después Jung-se despidió con una sonrisa en sus perfectos labios-Oh si y la próxima vez que venga espero ver a mi hermoso sobrino Luhan de tu brazo recibiéndome-comento con una sonrisa más amplia
-Así será tenlo por seguro-afirmo.