“Sí, bueno. Me gusta Dara.”
Verlo sonrojado me causó ternura. Y el que tenga los ojos brillosos lo hacía ver increíblemente lindo. En ese tiempo yo creía que le tenía solo cariño, y que nunca jamás pasaría de eso. Pero nunca pensé que esas pequeñas cosas que me gustaban de él, serian esas inmensas montañas que no me dejan ser feliz ahora.
Chanyeol es lindo. (A pesar de que parece drogado todo el día) Tiene una de las mejores sonrisas que he visto. (Excepto cuando sonríe molesto. O demasiado feliz. O cuando está en sus lapsus de hiperactividad.) Su manera de ser lo hace un niño. Uno tranquilo, uno feliz, un… niño. Simplemente eso. La ternura, la ingenuidad y la pureza de un niño. Chanyeol es un niño. Uno grande. Uno demasiado grande.
“Hyung, ¿Por qué eres muy bajito?”
“Park. Chanyeol.”
“No te molestes, Beak –Hyung. Ser bajito te hace más abrazable~”
“¿Esa palabra existe?”
“No estoy seguro”
Chanyeol es el único chico que puede sacarme de la depresión más abrumadora que me ataca y, aunque suene ilógico, también me puede volver a tirar hacia esa misma.
Es que Chanyeol no lo sabe, pero desde hace mucho me gusta. Y he tratado, enserio, he tratado de llenar el espacio que uso con el dentro de mi corazón con otra persona, pero simplemente, es imposible. Lo intenté. Enserio lo intenté.
“¡Oh, Byun Beakhyun!, ¡Me encanta tu delineador!”
“¡Gracias! Este es uno de mis favoritos, te puedo prestar alguno. Si quieres”
“Seria genial, los que uso yo, me causan un ligero ardor, y…”
“Y… una comezón insoportable”
“¡Es cierto! ¡Tú si me entiendes! Ahora me pareces más guapo.”
“Gracias nonna, me gusta ser alagado por una chica tan linda como tú”
“¿Crees que soy linda? Awww, eres muy lindo.”
“Llámame Beak, nonna, seamos amigos.”
“Llámame Tae, aunque casi nunca me llamas Taeyeon, pero, igual, me gustaría que me llames Tae.”
“Muy bien Tae~ ¿Te gustaría salir un día de estos? Podríamos comer un helado… o algo…”
“¿Cómo una cita?”
“Como una cita.”
“Encantada.”
Salir con Tae, fue, en su tiempo, perfecto.
Me cayó genial el hecho de que siempre me escuchara y estuviera atenta a mí, el hecho de saber que le importaba, el hecho de sentirme querido... y amado.
Taeyeon, es mayor que yo, tiene un rostro bonito, un cuerpo fino y una preciosa vos, al inicio, ella fue la que me endulzo y me llevo a su mundo con gran facilidad, siempre mostrándose segura y experta. Pero, cuando se abría realmente, era todo un lujo ver algunos de sus sonrojos, incluso, su vos nerviosa. A mí, me parecía preciosa.
Bueno, aún lo es, pero, cuando empezamos la relación (Ignorando el que dirán, y el hecho de hacer pública nuestra relación) ella me parecía la mujer más hermosa del mundo, y estar a su lado, de cierta manera me ayudaba a olvidad a Chanyeol, momentáneamente. Es decir, estar con ella era reconfortante. Era lo mejor que podía pasarme, sobre todo al saber que ya había un alguien dentro del corazón de Chanyeol, un alguien que lo hacía suspirar, rebotar de un lado a otro e incluso, verse más guapo y lindo que de costumbre.
Tae podía lanzarme una cuerda y sacarme del vacío en donde estaba con solo darme una de sus bellas sonrisas. Todo iba bien.
Hasta que la legión Kris atacó.
“Hyung, ¿Ya me contarás quien te hace suspirar?”
“Estoy enamorado, Channie”
“Yo también lo estoy, si tú me dices, yo te diré”
“Oh… enamorado, ¿De quién?”
“No te diré”
“Estoy saliendo con Taeyeon. Hace un mes”
“¿Con nonna Tae? ¡Pero ella es mayor que tú! ¡Y es increíblemente preciosa!”
“¿Estas insinuando que soy feo?”
“Claro que no Hyung. Tu eres hermoso, el hombre más guapo que conozco. Claro, después de Kris… el… es perfecto.”
“Así que Kris… Yi Fan ¿Uh?”
“Así es, es mi novio, hace dos días, ya lo amo.”
“No se lo has dicho, ¿Cierto?”
“Se lo repito siempre Hyung, ¿Por qué no lo haría?”
“Oh… Yeol…”
“¿Hice algo malo?”
“…No… nada de eso… me pone feliz tu relación…”
“¡Gracias Hyung! ¡A mí me hace feliz saber que hay un amor dentro de tu corazón al fin!”
“Siempre ha habido alguien, Chanyeol, siempre”
“¿Ah sí? ¿Quién?”
“No sé Yeol, dímelo tú.”
“¿Yo? ¿Cómo voy a saber quién te gustaba? Dame un pista Hyung”
“Jamás te lo diré”
“Hyuuuuuuuuung~”
El hecho de que una persona tan encantadora como Park Chanyeol, estuviese soltera, era una perfecta opción, que no era real. Lo perfecto no existe, dicen.
Chanyeol merecía conocer a alguien y enamorarse mucho, desde que, su amor platónico, Sandara Park, no le ponía ni la más mínima atención. Era si, como para esa chica, el bello Yeol no existiera. Una estúpida zorra, que en su momento, odié y deteste, sobretodo, cuando vi a mi bebé llorar por ella.
Mi relación andaba bien, la de Yeol también. No había ningún problema, hasta que, el bastardo de Kris, se folló a Yeol en el baño. De mi cuarto.
Ese día, recuerdo haber llegado tarde, en una salida que tuve con tae, (Que para ese tiempo, ya se las olía, sobre alguien más dentro de mi corazón) estaba cansado pero, feliz. Pude ir a ver en vivo las grabaciones sobre una de las canciones que hacia el trio de las GG, en donde tae en una de la integrantes, y, debo reconocer, sus voces suenan geniales.
Como decía, estaba feliz. Pero, al entrar a mi cuarto, mi felicidad se fue por un tubo.
“¡Ah! ¡Ah! ¡Ah! Yiii Faaaaaaaaaaan! ¡Ah! ¡Ah!”
“Oh, sí, nene. Humm. ¡Oh!”
Recuerdo que, las lágrimas se agruparon en mis ojos, y, con lo masoquista que mi cuerpo era, decidió en ese momento quedarse inmóvil, escuchando los gemidos celestiales de Chanyeol y los de Kris, el sonido de la ducha y de sus cuerpos al chocar. Fui un estúpido. Un estúpido que en esa noche le conto a su novia que había escuchado a su mejor amigo follando con su novio, y se le había partido el corazón, un estúpido que, solo se durmió, cuando su novia le empezó a cantar para relajarlo un poco. Y, ese estúpido que, milagrosamente, aún conserva a su novia, después de esa noche.
“Yo me enamoré de ti, Beak, yo puedo des-enamorarme también. Solo necesito tiempo”
Escuche eso, un día después de la llamada… hace cuatro meses.
Y reconozco, que su madures y estilo, me han ayudado a superar los problemas que poco a poco se me adjuntaban en los hombros, los que me provocaba un Chanyeol muy risueño, uno molesto o uno lloroso. Park Chanyeol es el génesis y el apocalipsis de mis problemas sentimentales.
“Yi Fan tiene trabajo en China. Se irá mañana.”
Lo malo de la reacción de esos dos, era que, como personas públicas, se exponían a mucho, y, sobretodo, al ser Kris un miembro chino, las giras y presentaciones se alargaban en ese país, durante mucho tiempo, tiempo en el cual, Yeolie se descocía llorando en mis brazos cuando el bobo de Yi Fan no lo llamaba.
“Creo que vamos a terminar. Él está muy frio y distante conmigo.”
Mi bebé cada día perdía más peso, junto con esa alegría y carisma que lo caracterizaba, cada día su rostro se volvía mas sombrío, andaba triste de un lugar hacia otro, ya no era como antes. Ni siquiera cuando Sandara “lo rechazó” se puso tan mal. Era doloroso hasta verlo.
Las giras en China terminaron, Kris regresó, y esos fueron los tres días más hermosos y dolorosos de mi vida. Chanyeol volvió a sonreír… y a caminar raro…
Lo escuche muchas veces más, susurrando e implorando el nombre de Kris entre gemidos, le vi las marcas en su piel, y lo deseé. Fue la primera vez que deseé a Chanyeol, para algo más que besos y caricias… también fue la primera vez que estuve con Taeyeon… pensando en Chanyeol… y, aunque suene doloroso para ella… ella… lo sabía.
Oh, bella Tae, has aguantado tanto junto a mí.
Como mencioné, los tres días más hermosos de mi vida. Pero, todo lo bueno, tiene su final.
“Kris inició una demanda. Abandonará el grupo.”
Ver a mí bebe tan destruido. Me destruyo más.
La partida de Kris dejó a todos muy tristes, yo lo sentí mucho, no es como si lo odiara ni nada, además, Kris era un buen tipo, y, si el tiempo que estaba aquí, hacía feliz a mi bebé, entonces también me hacía feliz a mí.
Pero la torre más alta de EXO abandonó el grupo.
Por una fracción de segundo, todos se vinieron abajo.
Chanyeol volvió a deprimirse, de nuevo andaba en modo zombie de un lado otro, de nuevo dejo de reír. Su relación se quedó en pausa por bastante tiempo, y, el enterarse de que Kris era doble cara con Tao lo destruyó. Ninguno de los dos sabía que existía otro en la vida de Kris.
El bastardo.
La carrera de Kris no se quedó en pausa, el empezó a actuar estupendamente, como siempre, y, bobamente, Chanyeol aceptaba las pequeñas fracciones de tiempo que le dejaba Kris.
Un tiempo después, Kris volvió a ser amigo de todos en EXO, Chanyeol y Tao volvieron a hablarse, aunque Kris eligió a Tao.
Y eso lo derrumbó.
Luhan también abandonó EXO, Sehun se quedó en el aire, y Tao, muy amigo suyo, lo levantó y lo sujeto. Tao prefirió a Sehun, y ahora están juntos, Kris quedo en el aire, y volvió a reclamar posición sobre Chanyeol.
Pero esta vez mi bebé, creció.
Le dio un puño fuerte en la cara y otro en el estómago. Le dijo que no vuelva con su hermoso y perfecto rostro de nuevo delante de él, a suplicar por su amor, también le dijo que aunque no lo había olvidado, no regresaría con él, nunca, jamás. Y bueno. No regresaron. Pero si follaron.
Lo que nos lleva al presente.
-Hyung, Kris dice que si encuentro a alguien con quien follar y que me guste, más de lo que me gustaba con él, entonces va a dejarme en paz.- “Kris” así lo llamaba Yeol cuando estaba enfadado con él, como siempre, Yeol me contaba uno a uno, todos los avances o retrocesos en su relación, y esta vez, Kris era un estúpido con letras mayúsculas.
-¿Y qué le dijiste?- le pregunto, sentándome en mi cama, junto a él.
-Que follaría contigo.-
Park Chanyeol diciendo que follará con migo.
¡Esto es de locos!
¿Cómo es posible que se atreva a jugar de esta manera con migo?
-¿Qué?- le pregunto, perplejo, parpadeando y mirándolo atónito.
El me mira indiferente, como últimamente lo hace con todo el mundo, su felicidad es algo que muchos se han acostumbrado a recordar en el pasado, pero no vivirla en el presente.
-Sí, bueno. Hyung, ¿Quieres follar con migo? –
-¡¿Qué?!-
-Sé que tienes novia, y que la amas, pero, tú eres la única persona en la que yo confió. Eres mi mejor amigo, y, si me ayudas, podría volver a ser como antes.-
-¿Ser como antes? ¿Mi bebé de vuelta?- una minúscula sonrisa a nacido en los labios de Yeol, sonrió satisfecho. Es un logro. Al menos ya no me mira con ese rostro neutral.
-Tu bebé.- me anuncia.
Yo sonrió. Le jalo las mejillas y le obligo a sonreír. Él se queja de dolor.
-Si rieras más, no te dolería.- le molesto. Ahora me sonríe, enseñándome los dientes. Creo que un resplandor me ha cegado.
-¿Me ayudaras Beak?- su mirada suplicante me incita ternura y también miedo.
-Yo… Chanyeol… yo... jamás he estado… con un… hombre…. Yo…-
-Yo te enseñaré Hyung. ¿Confías en mí?-
Claro que confió en ti. Lo hago desde hace mucho.
-Sí.-
-Bien.-
Chanyeol se acerca a mí y me sonríe. Pero su sonrisa no le llega a los ojos. Me siento triste. No me gusta ser solo usado por Chanyeol, él no se siente feliz con esto, él no lo quiere hacer, sé que no quiere hacerlo.
Chanyeol me besa la frente despacio, esta encorvado hacia a mí, inclina la cabeza un poco, acerca su nariz a la mía y me sonrojo de golpe. ¡Esta tan cerca!
-Hyung, ¿Por qué eres muy bajito?- una chispa recorre desde mi mente hasta mi corazón, que empieza a latir muy fuerte, rebotando contra mi pecho escandalosamente.
-Park. Chanyeol.- finjo enfado. Sé que tengo la cara roja y la risa que intenta reprimir Chanyeol me confirma que no parezco nada molesto.
-No te molestes, Beak –Hyung. Ser bajito te hace más abrazable~- me dice, las mismas palabras, es como antes. Es el antiguo Chanyeol, es mi bebé.
-¿Esa palabra existe?- le pregunto ladeando la cabeza, Chanyeol me acerca más a él, abrazándome con un brazo, el ladea la cabeza pensando.
-No estoy seguro- me contesta, me mira y ¡Oh Sorpresa! ¡Está riendo! ¡Sus ojitos saltones han vuelto! ¡Ese! ¡Ese es mi bebé!
-¡Chanyeol!- digo levantándome. Le cojo de las mejillas y le miro a los ojos. Riendo. -¡Has reído!- le anuncio.
-¿Enserio?- las mejillas de Yeol se levantan solas, sus ojos brillan y de nuevo, me muestra sus dientes, dándome la sonrisa más perfecta que alguna vez le he visto.
-Eres muy guapo, bebé~- le canturreo. Chanyeol me acerca a él, me abraza y me atrae hacia abajo.
-Tú también lo eres, Hyung.- me dice, sobre los labios. Y luego me besa.
Por primera vez en toda mi vía, en todo el tiempo que lo conozco, los labios de Chanyeol están sobre los míos, y me gusta, sentir el calor de sus labios me gusta.
Pero no sé cómo hacerlo.
A sí que, torpemente, entreabro los labios, mis manos se envuelven en su cuello y el me levanta, me cómoda encima suyo, sentándome con las piernas abiertas, acomodándome, con una de mis piernas a cada lado de su cuerpo, puedo sentir su calor, sus manos se pasean sobre mi espalda, mis labios empiezan a sincronizarse con los suyos, sus dientes me muerden ligeramente y un jadeo se me escapa de los labios, abro la boca y ¡Oh maravilla! La lengua de Chanyeol me invade, y, me gusta la sensación.
Jamás había besado antes así a alguien, ni siquiera a mi novia, pero parece que Chanyeol está acostumbrado. Una punzada atraviesa por mi pecho y me detengo.
-¿Piensas en tu novia?- me pregunta, yo agacho la mirada, porque… no estaba pensando el ella esencialmente… -Olvídala un minuto.- sus manos frías acarician mis caderas, su tacto me hacen temblar. –Me gustan tus labios. Pensé que me costaría mucho acostumbrarme a ti, pero, la verdad es que me gustas mucho.- Siento que me sonrojo, me muerdo los labios cuando él me araña suave. –Siempre tuve curiosidad sobre ti, Hyung. Pero, nunca pensé que me gustarías tanto. ¿Estás listo?-
A la mierda lo que haiga pasado en el pasado. El presente es ahora, es Chanyeol.
-Sí.- mi vos apenas suena, Chanyeol me levanta los brazos y me quita con facilidad el polo, estoy semidesnudo, pero, me siento desnudo. Sus ojos penetrantes, totalmente negros y atrayentes me miran con deseo, me siento una presa en la mira del cazador. Tan vulnerable.
-En serio, eres hermoso.- mi piel quema. Las manos ahora tibias de Yeol me acarician la espalda, jadeo involuntariamente cuando la lengua de Yeol se pasea por mi cuello, de un lado a otro, suave y lento, torturándome. – ¿Se siente bien? Me gusta tu sabor.-
-S-sí.- susurro. No soy capaz de controlar mi cuerpo.
Mis manos están sobre sus hombros, y si Yeol no tuviera un polo, seguro estaría enterrando mis uñas en su piel.
-Tan perfecto.- susurra. Me besa distorsionada mente, porque, con gran facilidad me eleva, y luego me vuelve a echar sobre la cama, los microsegundos que se aleja de mí, los utiliza para sacarse el polo con un poco de salvajismo.
El cuerpo perfecto de Yeol.
Sus hombros anchos, sus brazos tonificados. Su torso, su ombligo. Mierda. Chanyeol está bueno. No sé qué hacer, pero lo deseo. Y mi deseo me hacer mover involuntariamente, tocando y deleitándome con lo tersa de su piel.
-Chanyeol.- susurro. Aunque mi vos suena ronca.
-Beakhyun.- la vos de Chanyeol me hace sentir la misma sensación como si, miles y miles de hormigas caminaran sobre mi piel. Sus roces me hacen sentir caliente. Y como me pongo caliente. Un bulto empieza a crecer en mis pantalones. Me avergüenzo.
La risa de Yeol me seduce, me hace entrar en un trance irreversible, del que, estoy seguro, no quiero salir. Yeol se acerca a besarme de nuevo, sus labios expertos me roban el alma en cuestión de segundos, me aferro a él, me dejo llevar de la sensación de sentir su húmeda lengua y la gloriosa sensación de sus manos tratando de zafar el botón de mi pantalón.
Yeol abandona mis labios y vuelve a mi cuello, eta ves, duele, va dejando marcas, mordidas, chupetones, sus manos siguen forcejeando con mi pantalón, le oigo un suspiro molesto, me burlo.
-Si rompes mi ropa, te destruyo.- le amenazo. Él se ríe, me mira a los ojos y me hace un puchero, yo rio y, con gran facilidad, desabotono y bajo el cierre de mi pantalón, el me mira confundido. –Más vale maña que fuerza.- me burlo.
-Siempre tan complicado.- gira los ojos. –Desventajas de ser perfecto, Hyung.- me quita el pantalón, llevando mi ropa interior con él, me siento desnudo, mi miembro está más que despierto, me avergüenzo. Trato de tapar mi miembro con mis manos. Él se burla. –No está tan mal.- me anuncia, ladeando la cabeza. –He visto mejores.- es cierto, ha estado antes con Kris, ¿Kris es mejor que yo? ¿Es más guapo? ¿Es más inteligente? Oh, bueno, lo que importa ahora. ¿La tiene más grande? Mis ojos se entristecen con gran rapidez, seguro Chanyeol me está comparando justo ahora, seguro se irá en cualquier momento, seguro le resultaré aburrido. Seguro después de esto correrá a los brazos de Kris otra vez. –Beakhyun.- la vos ronca de Chanyeol me hace despertar del mar de pensamientos en el que me estaba sumergiendo, parpadeo rápido varias veces, el me mira con deseo. De nuevo. Me confundo. Se acomoda entre mis piernas, empezando a desabrochar su pantalón, ¿Qué? ¿No se irá? –Estoy jugando.- claro, esto es un juego, un juego en donde el único ganador seré yo, porque, pierda o gane el partido, a Chanyeol no le importa.
-Yeol, yo… no estoy seguro…- me tapo la entrepierna con mis manos, Yeol me coge de las muñecas y las aparta, llevándolas sobre mi cabeza, su cara esta tan cerca de la mía, que puedo ver de frente esos ojos negros tan seductores que tiene. Siento que me derrito.
-Eres perfecto, Hyung. Solo estoy jugando. Me gustas. Me gusta estar contigo ahora. Me gusta.- una sonrisa involuntaria se escapa de mis labios, él me sonríe y me besa. Su lengua se enreda con la mía con bastante facilidad, es como si nos viniéramos besando toda la vida, es como si nos conociéramos desde siempre. Se me hace bastante fácil devolverles los besos con la misma intensidad y deseo con la que me besa. Se separa de mí y me muerde ligeramente el labio. Gimo de dolor, mintiendo. Porque me ha encantado.
-Yeol~-
-Debería castigarte. Sí. Debería.- ladea la cabeza y piensa, una sonrisa maliciosa de medio lado me indica que ya tiene una idea bastante retorcida en mente. –Oh, esa cara tuya me gusta… te ves tan… violable…- Yeol sujeta ambas de mis muñecas con una mano, la otra mano la usa para masturbar mi miembro con fuerza, arrancándome gemidos ahogados, ¡Me ha cogido de sorpresa! Y dentro de unos minutos, ¡Me va a coger! -Sí, haré que supliques.- arqueo una ceja, Yeol deja de moverse, me mira directamente a los ojos y se lame los labios, su mano sube acariciando mi abdomen hasta mis botones rosas, aprieta el derecho y muerde el izquierdo. No sabría cómo explicar la sensación.
-Yeol. Mierda. Sí.-
Una risilla se oye en mi oreja, su lengua lame mi lóbulo, su mano masturba mi miembro de nuevo, ¡Santa mierda! ¡Yeol hace maravillas con esa lengua suya!
-Beak, eres irresistible.- Yeol me arrima el bulto que tiene aún entre los pantalones y me sorprendo a mí mismo tratando de buscar más de ese mismo contacto. –Uh, mírate… joder. Eres tan guapo.- mis piernas se enredan en la cintura de Yeol, buscando mas contacto. No tengo idea de que va a pasar, ni como debo de hacer las cosas, pero el deseo y el instinto me mueven involuntariamente, cegándome de placer. –Y tu cuerpo es tan suave… y fino… uh.- Yeol besa mi cuello, lo lame, lo muerde y lo araña con los dientes, mi cuerpo tiembla, ligeramente, me doy cuenta de que tengo la espalda encorvada para atrás, levantando el torso, dejando mi cuello expuesto ladeado hacia la derecha y los labios mordidos. –Mírate, uh, eres irresistible.-
-Yeol~-
-Y esa voz tuya. Mierda Beakhyun, creo que yo será el que suplique por follarte a este paso.- una sonrisa se escapa de mis labios. Lo encaro, mirándolo a los ojos y me pierdo.
¡Qué guapo es! ¿Desde cuándo me gusta tanto? ¿Desde cuándo siento estas cosas tan fuertes dentro de mi pecho? ¿Es por el negro de sus ojos? ¿Es por lo bonito que puede llegar a ser? ¿Es por su inocencia cuando sonríe? ¿O por esos ojos que me violan justo ahora? ¿Por qué me gusta tanto Yeol? Mierda. Estoy perdidamente enamorado de Yeol.
-Eres tan guapo Yeol.- le susurro, cerca de sus labios, el me mira perdido unos segundos, luego me besa. Sus labios se enredan con los míos de nuevo, el empieza a mover su cuerpo, fingiendo penetración, mi cuerpo reacciona moviendo las caderas, acompañándolo en su compás rítmico.
-Quiero tomarte ahora.- me dice, sobre los labios.
Se aleja de mí, termina de quitarse toda la ropa, mis ojos se pierden en cada parte de su cuerpo, ¿Por qué es tan perfecto Yeol?
Yeol sube a gatas a la cama, se acomoda entre mis piernas, su miembro mas que despierto rosa mi entrada, mierda. Me va a doler. Mi cuerpo se tensa al instante, mis hombros se contraen y mi mirada se llena de terror.
-No tengas miedo, beakkie. No te haré daño. Confía en mí.- me dice, con vos dulce. Mi cuerpo se relaja de golpe, confió en Yeol, confió.
Sus manos grandes acarician mi piel, su lengua juega de nuevo con mi cuello, sus dedos se mueven hace arriba, dibujando figuras amorfas sobe m piel en su camino. Yeol coloca dos de sus dedos en mi boca, trata de meterlos, lo miro confundido, ¿Qué se supone que está haciendo?
Sin embargo, logra meter sus dedos dentro de mi boca, jugando con mi lengua, y solo para no quedar mal, le lamo los dedos, mirándolo a los ojos.
Oh, mierda, sus ojos.
Yeol me mira con frustración, con deseo y con lujuria, todo a la vez. Su miembro rosa mi entrada de arriba abajo, ahora mismo yo, tengo ganas inmensas de follar, pero no sé cómo, así que solo me dejo llevar.
Cuando estuve con Taeyeon, ella fue la que manejo la situación, al principio ayudándome con mi problema, luego dejándose usar para saciar mi propio beneficio, mientras yo gritaba y gemía el nombre de Yeol, es extraño que aun sigamos juntos, a pesar de todas las cosas por las que hemos pasado.
Mi mirada perdida se fija asustada en un solo punto. Los dedos de Yeol. O bueno, el dedo.
Yeol ha metido uno de sus dedos por mi entrada, no me quejo del dolor, pero sí de lo incomodo que se siente. No es tan placentero esto.
-Yeol, ¿Qué estás? Oh, sí.-
El dedo de Yeol juguetea dentro de mí, entrando y saliendo, y resulta que esa sensación, me gusta. Se siente incómodo pero, me gusta. Mis caderas se mueven buscando más introducción.
Ahora entiendo, Yeol me está follando con su dedo. Y me gusta.
-Eres muy estrecho, beakkie.- me susurra. Sus labios se unen de nuevo con los míos, su lengua se enreda otra vez con la mía, su dedo sigue entrando y saliendo de mí, mis manos se enredan en su cabello, el beso logra acallar un pequeño aullido de dolor. –Oh, mira esa cara tuya, podría correrme justo ahora.- un dedo más entra en mí, y esta vez, si dolió, Yeol me está preparando, eso es obvio, está tratando de ser suave, y si yo tengo unas inmensas de follar, ¿Cómo se siente Yeol? Que está siendo muy paciente. Para ayudarlo, y ayudarme a sentirme menos incómodo, me levanto solo un poco, buscando su cuello, hago lo mismo que el me hizo, mi lengua juega con su cuello, probando su sabor, dejando chupetones, marcas, marcándolo.
Porque, en este momento, aquí y ahora. Chanyeol es mío.
-Aaah. Duele.- susurro. Un dedo más entra en mí, mis brazos se envuelven en su cuello y escondo mi cara, Yeol me acaricia el cabello y me besa el hombro, tratando de relajarme, seguro.
-Tranquilo Hyung, tranquilo, no pongas tenso tu cuerpo.- Yeol mueve sus dedos, y esta vez, parece que me acaricia, despacio, mi cuerpo se acostumbra rápido, en un momento mas, yo mismo soy el que se está moviendo contra sus dedos. -¿Estás listo?- me pregunta, oh, esa vos tan ronca que tiene. Me encanta.
Lo miro a la cara, le tomo de las mejillas y me muerdo el labio, Yeol saca sus dedos de mi cuerpo. Sus ojos son tan atrayentes… como un par de imanes.
-Fóllame, Chanyeol.-
-Carajo.-
Un gruñido se le escapa de los labios. Mi cuerpo se mueve salvajemente cuando Yeol me penetra. Con fuerza.
-AAAAAAAAAAAH.- tiro la cabeza hacia atrás, como el resto de mi cuerpo. Me ha dolido. Me ha gustado. Me ha encantado. Pero me ha dolido. Mierda, se siente bien.
-Carajo Beak, quiero partirte el culo justo ahora.- Yeol aprieta con fuerza mis caderas, seguro conteniéndose, tratando de no… hacerme daño. Quiero ayudarle, pero soy incapaz de moverme, mi cuerpo está extendido en la cama, mis manos aprietan con fuerza las sabanas, mis piernas más sujetadas a su cintura que nunca. –Beak, dime que ya estás listo, por favor~-
Su vos suena suplicante, me rio.
-¿Quién suplica ahora, Channie?- le molesto, mirándole a los ojos. El sale y entra de nuevo en mí como protesta. -AAh.-
-Por favor… Por favor…- una vez más, Yeol me penetra. Suave, lento, su miembro acaricia mis paredes, que aún están asfixiándolo un poco, debo relajarme, por mi bien y el suyo.
-Tómame, párteme el culo, Chanyeol.- ¿De dónde ha salido eso?
-Oh mierda.- su vos ronca me enloquece. Se empieza mover despacio, mi cuerpo se mese de arriba a abajo debajo de él, me aferro a él, y accidentalmente le araño los hombros. El gime.
Definitivamente, cuando terminemos, será muy notorio lo que pasó.
Mi cuerpo se relaja cuando las manos de Yeol me acarician con las uñas, ahora olvido el dolor y solo me concentro en el placer, su respiración irregular choca contra mi cara cuando él se agacha a besarme, Sus besos son mi perdición, cada vez que siento sus labios, mis brazos se enredan en su cuello, haciendo que el beso se convierta en un beso desquiciado, fogoso, alborotado y necesitado. El cuerpo de Yeol empieza a destilar, al igual que el mío, el empieza a moverse más rápido, y yo le ayudo moviendo mis caderas para encontrarlo, ¡Demonios! Esto se siento genial.
-¡Ah! ¡Ah! ¡Chan! ¡Ah! ¡Yeol! ¡Aaah! Mierda, así.-
-Oh, Beak, mierda, tan apretado. Sí. Así, oh.-
Yeol coloca mis piernas por encima de sus hombros, haciéndome muy difícil respirar, pero, lo que me hace sentir se vuelve… inmejorable.
Un punto exacto. Un botón dentro de mí, se activa, llega a cierto lugar dentro de mí que me hace retorcer de placer. Mierda. ¡Se ha sentido genial! ¿Qué ha sido eso? ¡Ah sido genial!
-Oh, sí, ¡Chanyeol!-
-¡Beakhyun!-
Yeol empieza a embestirme más rápido y sin piedad, y todo son en ese punto exacto que me hace enloquecer, Yeol es bueno, maldición, es perfecto.
Mi teléfono empieza a sonar en algún lugar de la habitación, ese timbre, es Taeyeon, no sé qué cara tengo, pero, no es como si me importara contestar el teléfono justo en este momento.
-Deberías…oh. Deberías contestar. Oh.- me dice Yeol. Yo rio. Mirándolo con malicia.
Yeol acomoda mis piernas a ambos lados de su cuerpo y se agacha a besarme distorsionada mente, su sonrisa juguetona me encanta.
-¿Debería Channie?- le pregunto. -¡AAh! Mierda.-
-No lo sé, humm. ¿Eso quieres? Oh.-
Nunca deja de penetrarme, ¿Cómo pensar on claridad justo ahora?
Tae me llama, y ella solo me llama cuando es importante. Pero en este momento me importa un carajo. Yeol me está dando duro y me gusta. Además, tae después, entenderá.
Chanyeol se acerca a mí, su pecho choca contra el mío cada vez que me embiste, mi manos se enredan en su cuello y, sin descaro, le gimo su nombre al oído, el me muerde con fuerza el hombro como respuesta, mi piel se siete tan caliente, su piel también, estamos haciendo fricción, aunque también hay mucha penetración, oh, sí, Yeol me hace ver esas jodidas estrellas de las que todos hablan.
Araño su espalda, el gemido ahogado de Yeol me enloquece, ¿Por qué es tan perfecto? Chanyeol, eres tan bueno que no te imaginas, ojalá esto duro para siempre.
Pero sé, que nada dura para siempre.
Empiezo a sentir unas cosquillas en mi vientre.
El me acaricia y me masturba, penetrándome a mismo tiempo, el placer invade cada célula de mi cuerpo, y se escapa por cada poro de mi piel, y que Yeol me este regalando la mirada más orgásmica que nunca jamás le he visto a alguien alguna vez, no ayuda a contenerme.
-Yeol, yo... humm, ¡ah! … yo...-
-Lo sé, humm. Tran-tranquilo. Oh.-
La mano de Yeol masturba mi miembro con más fuerza, su lengua juega con mi cuello de nuevo y yo solo puedo gemir, arañando cada parte de su piel que pueda llegar a tocar.
Me libero, sobre la mano de Yeol con un grito horrorizado pero, con una cara de satisfacción.
-Lo siento.- susurro, el sigue embistiéndome.
-No te humm.- algo caliente me llena, Yeol cae de bruces sobre mí y respira en mi cuello, mi piel se eriza. Oh, sí. Ha estado genial. –Preocupes.- susurra, con voz cansada.
-¿Gracias?- le pregunto. El ríe.
-Eso ha sido- mi celular suena de nuevo, interrumpiéndolo. Él lo toma molesto de la mesita de noche. Y contesta.
-Hola.-… Yeol tiene cara de pocos amigos, su pecho aun sube y baja, haciendo notoria su irregular respiración, -Esta aquí, ¿Necesitas algo?... dímelo a mí, yo se lo diré.- Yeol sale de mi cuerpo y siento que algo se escurre entre mis nalgas, me siento asquerosos, pero inundado de placer. Ha sido perfecto. ¿A Yeol le habrá gustado? –Escucha Nonna Tae.- dice Yeol, su vos suena ronca aun. –Te amo, Beakhyun.- un suspiro. -¿Contenta? Sí, sí, ya le iré lo demás luego, ahora eso es lo más importante. Él te devolverá la llamada luego. Adiós nonna.-
Mi corazón se detiene.
Mi respiración se detiene.
Mi cuerpo entra en modo pausa, mis ojos se salen de sus cuencas, mi rostro empalidece.
-¿Qué?-
-Valla, ¿Has visto a un fantasma?- me pregunta, riendo, -Bueno, nonna Tae, dice que te ama.-
Oh, era eso.
Vuelvo a respirar, Chanyeol se acomoda a mi costado de la cama, con mi celular en su mano, su brazo largo y fuerte me rodea y me atrae hacia él, dejando mi cabeza sobre su torso, en este momento, agradezco que no sea capaz de ver mi rostro.
Chanyeol, no juegues así.
Su piel huele a sudor, combinado con mi esencia, así que, como huele a mí, yo también huelo a él, ¿Cierto? ¿Eso es bueno?… ¿Cierto?
El placer todavía sigue recorriendo cada vena de mi cuerpo, ya no en el mismo nivel que hace un minuto pero, todavía me siento ligeramente cegado. Yeol está acariciando los cabellos de mi nuca, enredo mis piernas con las suyas, cuando una briza me acaricia, mi cuerpo tiembla ligeramente.
-Gracias por el recado.- susurro, mis labios acarician su hombro al hablar. -¿Algo más?-
-Si te digo lo que me dijo, te irás corriendo, y yo, todavía quiero quedarme un rato más así.- me dice. Sentimientos encontrados, ¿Me siento preocupado por Tae? o ¿Me derrito por sus palabras?... difícil elección.
-¿Le pasa algo malo?- le pregunto, mirándolo a los ojos. El niega, sonriéndome.
-Nada de eso, está muy bien, diría yo.- me contesta, eso me tranquiliza.
-Soy infiel.- susurro, aunque, ya lo soy, mentalmente, desde hace mucho, y Tae lo sabe.
-Lo siento. Pero, no me arrepiento.- me dice. Le miro sonriendo.
Yeol choca su nariz con la mía, una sonrisa se le escapa de los labios, y, valla. Como le extrañaba cuando hacia ese tipo de cosas.
Chanyeol era así conmigo antes, antes de que llegue Kris se enamoré y se deprima, antes.
Cariñoso, atento, simpático, buen amigo, consejero, tierno y dulce. Los que no sabían que éramos mejores amigos, decían que éramos novios, y, eso, no nos molestaba.
Mi bebé ha vuelto.
Bueno, por ahora.
-Yo tampoco. ¿Te gustó?-
-Sería poco. Me ha encantado.- me dice. –Y ni eso, algo más, seguro.-
Me sonrojo de golpe, su risa me acaricia, me hace sentir tranquilo.
-Opino lo mismo.-
Nadie dice nada, solo estamos ahí, juntos, mirándonos, sonriéndonos. Besándonos.
Un beso más me sorprende, pero lo recibo gustoso. Este beso me sabe a despedida, es un beso suave, lento, moldeando bien la boca y girando bien la lengua, temo dejar de besarlo porque pienso que será el último.
¿Será el último?
-Beakhyun, me gustan tus labios.- me susurra. Le sonrió con los ojos cerrados.
¿Cuándo los cerré?
-A mí los tuyos.-
-Tengo una decisión.- me dice. Mi cuerpo tiembla. Pero, automáticamente sus brazos me tranquilizan.
Me aferra a él, como si fuese la última vez, como si nunca más fuese a abrazarme de nuevo.
Mierda.
Chanyeol, si te olvidas de mí. Me muero.
-¿Cu-cuál?-
-Para ser justos, es mi primera vez, estando arriba, y ha sido genial. Yo siempre he estado abajo, y, se, cómo te sentías, y por eso trate de ser lo más suave contigo. Tengo una respuesta para Kris, pero, también tengo una pregunta para ti.- lo miro a los ojos, el me mira tranquilo, aunque de rato en rato, ese tic que tiene en el ojo, ese que solo aparece cuando está nervioso, lo delata.
-Es mi primera vez ¿Abajo?- le pregunto, el ríe y asiente con a cabeza. -¿Qué me quieres preguntar?-
-Sé que tienes novia, y que se aman, y, yo no te amo, pero me gustas. Por algo se empieza ¿No?-
-¿Cuál es el punto?-
-Kris cero, Beakhyun, uno.- susurra.
-“Bueno Channie, ¿A quién le das el punto? ¿Quién se ve mejor con delineador? ¿Ella o yo?”-
-“Esto es fácil, el ganador, que destruye automáticamente a su contrincante, es Beakhyun. Así que; Nonna Tae cero, Beakhyun, uno. Se una buen perdedora, nonna.”-
-“¨ ¡Ya vez! ¡No lo digo yo! ¡Lo dice Channie, acabo de destruirte!”-
-¿Acabo de destruirlo?-
¡¿QUÉ?!
Yo, Byun Beakhyun, ¿Acabo de destruir a Yi Fan?
¡No puedo creerlo! ¡Le gané! ¡Yo!
-Reconozco que, desde que te conocí, me pareciste bastante guapo, y que, más de una vez he fantaseado contigo pero, la realidad supera, y por mucho, la ficción. Me gustaría que, esto que acabamos e hacer, se repita. Y mucho.-
¿Este es un buen momento para decirle todo lo que yo siento?
No, creo que aún, no.
Pero, con esta información, lo haré pronto.
-¿Y Tae?- le pregunto, no sé si su plan es solo usarme, o si quiere que este con él, o con los dos.
-Termínale. Quiero que seas mío, y, todas esas marcas es ese cuello tan bonito que tienes, me servirán como aval.- sonrió, el me sorne de vuelta y me besa.
Sus labios de nuevo conectados con los míos, ¿Por qué este beso se siente distinto? Ya no siente tristeza, ni despedida, siento cariño… amor.
-Eso sería malo. Lo haré cuando la vea.- susurro.
-Genial. Hazlo ahora, Las GG están visitando a Súper Junior, Shinee y EXO. Están aquí.-
-¿Qué?- me levanto de golpe, buscando mi ropa con los ojos. -¿Por qué no me lo dijiste antes?- doy vueltas por mi cuarto recogiendo mi ropa y colocándome rápidamente, Yeol me mira haciendo puchero, ya sentado, en la cama.
-Te dije que te irías corriendo.- se queja. Me hace reír. -Hasta asustado/sorprendido, te ves bonito. Tú siempre te ves bonito, y ¡Oh! Ese sonrojo combina perfecto con tu polo, Hyung.-
-Yeol.- le amenazo, el ríe. Corre hacia mí, desnudo y me besa. Le devuelvo el beso sin chistar.
-Hyung.- me susurra. –Sé mi novio. Yo te amaré como jamás nadie lo hizo ni hará, no ahora, y quizás, mañana todavía, pero, lo haré, no es difícil hacerlo, siempre ha existido esa conexión contigo, ese “Algo” que me empuja a ti. Siempre. Por favor.-
-Déjame arreglar las cosas con Tae.- le susurro acariciando sus mejillas, él me sonríe, me atrae y me besa.
En unos minutos estoy abajo, en la salita del edificio, las GG están con los chicos, Suho las atiende amable, como siempre, Chen es el encargado de no aburrirlas, y Do. Bueno, el solo trata de no matar a nadie que mire a Jongin. Tan tierno.
Hay cámara por todas partes, sé que me están grabando, así que actuó con precaución, entro saludando a todos y la veo, tiene una sonrisa que no llega a sus ojos, una fingida. La igualo.
Saludo al resto de sus compañeras y me acerco a ella, un ligero beso en la mejilla es nuestro saludo, pero, ella me susurra al oído.
-Estabas con él, ¿cierto?- le miro a los ojos, le doy la espalda a la cámara, tapándome y tapándola, ellos encontraran luego un buen ángulo para filmar, pero, por ahora, aprovecho.
-Sí.- susurro.
-No hablo del estar, en sentido de compañía, hablo del otro estar.- me dice
-Sí.- le repito. Y para mi sorpresa, ella sonríe.
Y esta sonrisa le llega a los ojos, es una sonrisa perfecta, esa que solo me muestra cuando esta realmente feliz.
-¡Al fin lo has conseguido!- me dice, sus delegados brazos se cuelgan de mi cuello, la sujeto de la cintura confundido.
-¿Qué?-
-Estoy orgullosa de ti. No te preocupes por mí, aun te amo, pero, por lo que sé de él, así siga enamorado de Kris, le gustas, sé que le gustas, solo es cuestión de tiempo, beakkie~- me canturrea.
-¿No estas enfadada?- le pregunto, acariciando su mejilla, al otro lado, Yonna nos mira risueña, le sonrió.
-No enfadada. Dolida. Porque, Yeol te alejara de mí.-
-No pasara eso si tú no quieres.- le digo, ella niega con la cabeza.
-No quiero. Pero, sí pasara. Eres libre. Ve con Yeol. Te mereces ser feliz. Seamos amigos, tu sígueme tratando como hasta ahora, no te hare escenas, ni te molestare, incluso, pedo seguir siendo tu nova para la prensa, si quieres~ Sé feliz Beak, por favor.-
Sus ojos acuosos me indican que le duele lo que dice, la acerco hacia mí y la abrazo, con fuerza, ella me corresponde, debe ser fuerte, hay cámaras y no puede romperse justo ahora, debe ser muy fuete, como siempre me ha demostrado que lo es.
-Gracias Tae. Te quiero.- le susurro. Ella se aferra más a mí.
-Siempre me has querido, desde el inicio, nunca fue amor.- susurra.
-Lo siento si no te hice sentir amada completamente, encontraras a alguien que te amé, lo prometo, yo mismo te buscaré uno, uno bueno, y si ese alguien te hace daño, yo mismo le romperé los huesos.- ella ríe.
-No serías capaz de hacer eso, malograrías tu manicura.- me dice, yo rio.
Nos separamos y nos miramos cara a cara, la tomo de las mejillas y le doy un beso en la frete.
-Gracias Tae.- le susurro.
-Mereces ser feliz, Beakhyun, y, tu felicidad, es Chanyeol.-
Cuando las chicas se van, me despido, como el resto de los miembros presentes, algunas cámaras se apagan, otras acompañan a las chicas, Yeol está aquí, llego después de mí, y nunca se fue, el vio todo pero no estoy seguro de cómo lo entendió.
¿Debería darle explicaciones?
-Ella te ama.- me dice, cuando se acerca a mí.
-Lo hace.- le contesto, el agacha la mirada. –Me ama tanto, que me dejo libre.-
Dicen que el aire es fundamental para vivir, pero, yo opino, que es falso.
Lo único fundamental para vivir, son las sonrisas de Yeol. Esas sonrisas gigantescas, esas que pone cuando se droga, esas donde hace que sus bonitos ojos se achinen y brillen, esas sonrisas… y, como olvidar sus besos, eso es, lo segundo importante.
Con esas dos cosas, estaré bien el resto de mi vida.
Pau - Pau