Login
Amor Yaoi
Fanfics yaoi en español

Love me/Touch me like you do. por cherrymusic14

[Reviews - 7]   LISTA DE CAPITULOS
- Tamaño del texto +

Notas del fanfic:

Este fic está inspirado en la siguiente canción:

https://www.youtube.com/watch?t=67&v=gga359vkhzk

Y estará dividido en dos partes :3

Espero que sea de su agrado ^^

Notas del capitulo:

Mis hedmosaaaaaas :33 les vengo a traer este fanfic que ya desde cuando tenía en mente XDD pero bueno, ya después de mi examen profesional... mi hamster puede rodar y rodaaar~ ??

Espero que les guste x3

Siéndoles franco, sólo con él me he sentido realmente amado. Luego de varias relaciones fallidas y que la última fue la más devastadora, se me hizo muy complicado poder abrir mi corazón. Al principio sólo era una amistad bastante apegada, claro que no se comparaba con la que él tenía con su mejor amigo de la infancia, pero el hecho de compartir habitación desde las primeras giras, nos ayudó a conocernos más. Después, las salidas entre él y yo se volvieron más frecuentes, llegando al punto de pasar fines de semana juntos; aunque nos veíamos todos los días, platicaba con él vía blog, a veces él avisaba que yo estaba enfermo y se me era muy gracioso cuando casi nos enfermáramos juntos por ir a comer cosas que no. Poco a poco me fui haciendo demasiado cercano a él, y eso me aterrorizó un poco ya que había días en los que no dejaba de pensar en cómo él estaría, y cuando lo veía en el estudio durmiendo por su insomnio, en mi fea cara de mono se dibujaba una sonrisa que de inmediato cambiaba por un gesto de burla. Esos cambios a veces te molestaban un poco, pero era porque quizás mi mente se negaba a que empezaba a sentirme extraño junto a ti. Pasado el tiempo, me di cuenta de que me estaba negando a algo irremediable: me estabas gustando; sí, me estaba gustando aquel chico algo malhumorado, perfeccionista, un tanto torpe, rencoroso y depresivo. Me costó trabajo poder admitir mis sentimientos, y entre cada broma, entre cada risa y juego, te iba demostrando lo que sentía por ti. Los demás nos veían muy raro, pero no me importaba y al parecer a él tampoco… ¿Acaso él también sentía algo por mi?

Cuando confesamos lo que sentíamos, creí que tú me ibas a rechazar, pero me dijiste que querías intentarlo porque yo te había hecho cambiar la forma de ver la vida y que era lo más importante de tu vida. Fuiste la primera persona que me decía eso, no sólo me viste por mi “cara bonita” como muchas fans me ven, si no que te gustó mi boba forma de ser. Cuando te dije eso, te abalanzaste hacia mi y me abrazaste, estrujándome entre esos fuertes brazos. Escuche unas leves palabras a mi oído las cuales nunca se me van a olvidar: “Satoshi, yo no sé si tu… bueno, es que, he caído ante esa hermosa personalidad que te caracteriza, eres la razón por la que sonrío cada maldito día, Satoshi… ¿Quieres ser mi novio?” regresaste tu mirada hacia la mía y me observaste con parsimonia, mi corazón estaba por salirse de mi pecho, mis mejillas se tornaron rojizas y por la adrenalina, pena o alegría, inmediatamente te di un leve golpe en el hombro y tú me besaste una mejilla. Fue un beso delicado, tus gruesos labios se posaron en mi mejilla derecha mientras que tu mano izquierda acariciaba mi mejilla contraria; tus dedos eran un poco ásperos por las ampollas que la práctica ardua con el bajo te provocaban, pero el roce de tus dedos era tan sutil, que parecía que me tocabas con el pétalo de una rosa. Ese detalle hacia que se me erizara cada vello de mi ser, y hasta la fecha es algo sumamente tierno de su parte.

Después de que nos confesamos, sus detalles empezaron a llegar hasta mi departamento: recibía un ramo de rosas rosas cada viernes, cada fin de semana significaba ver películas infantiles, aunque a veces parecía que las veías a fuerzas, a los 5 minutos te veía riéndote junto conmigo, también eran días de comer pizza, palomitas, crepas dulces y soda de manzana y piña, sabía que íbamos a subir de peso, pero no me importaba, subiríamos de peso los dos al mismo tiempo. Mi colección de Pixar aumentaba por tu culpa, a veces te desaparecías en los ensayos, y regresabas con una Cajtita Feliz de McDonalds y todo por que en ella venían mis personajes favoritos. Me regalabas varios peluches cada mes, festejando nuestro aniversario, y cuando me enfermaba, tenía enfermero particular, aunque a la siguiente semana fueras tú el enfermo.

Pasados unos meses, en nuestro 8vo aniversario, preparaste una sorpresa… a veces me pregunto, si no fuiste tú el que me cambio la vida. Era la primera vez que alguien era tan detallista conmigo, era la primera vez que alguien daba todo de sí para verme feliz, aunque mis caprichos fueran un tanto bobos, era la primera vez que dedicaban tanto tiempo en mí persona. Todo tu departamento estaba adornado con pétalos de rosas rosas y el perfume de estas inundaba cada espacio de las habitaciones, había velas aromáticas y una luz tenue la cual lograste gracias a unas lámparas de papel color rojas. Sabía que todo lo habías preparado para un solo fin, y yo estaba nervioso, pero al terminar la cena, me tomaste de la mano y me llevaste al sofá, ahí nos sentamos por unos largos minutos, no querías forzar nada y esperaste hasta ver que yo estuviera tranquilo, me abrazaste tiernamente, percibí tu perfume más cerca de mi rostro, yo no pude más y comencé a besarte. Poco a poco empezamos a caer en un exquisito frenesí que era auxiliado por todos los aromas tan dulces y suaves de las rosas y velas que habías colocado, era el ambiente perfecto y sólo me deje llevar por tu dulzura y ternura. Hasta la fecha, me sigues besando y tocando de esa forma, sin prisas, sin lujuria, tus manos acarician cada centímetro de mi ser, y lo hacen como si estuvieran tocando a una muñeca de porcelana, para poder deleitarte con mi piel, ya sea con besos o caricias, siempre pides permiso, a excepción de algunos besos robados y algunos manoseos subidos de tono, pero he de admitir, que soy yo el que te provoca, pero en si, a ti te gusta ser sutil conmigo. Nunca entraste en mi de forma brusca, siempre lo haces despacio y con preservativo, siempre utilizas algo para que no me duela, lo que menos quieres es lastimarme y yo adoro ese detalle. Cada que estoy por llegar al clímax, me miras a los ojos y me dices palabras tiernas al oído o me besas para que pueda relajarme un poco, aunque eso es imposible cuando estoy por explotar de placer. A veces me siento culpable cuando te realizo un leve chupetón, cuando mis gemidos son bastante fuertes o cuando te ensucio después del orgasmo, pero tú sólo me sonríes, me besas, me abrazas y me susurras al oído palabras bonitas.

Esa forma tan tuya de amarme, es tan única que ha hecho que me enamore más y más de ti.

Hoy he despertado a tu lado, con algo de sueño y cansado, pues la noche fue “productiva” para los dos, pero, hay algo importante que quiero decirte, así que me erguía y veía como tú estabas leyendo un libro, esperando a que despertara.

-          Shuu, Hideyuki Nagai, ¿te puedo pedir algo?

-          ¿Qué pasa mi niño? ¿tienes hambre?

-          Nope, sólo quiero… sólo quiero que me prometas algo.

-          Tú dime. – me veías con un poco de curiosidad.

-          Sólo, sólo ámame como siempre lo has hecho, ámame como sólo tu lo haces, nunca dejes de amarme de esta manera. – abrazándote, te decía esto mientras tú de nuevo me tocabas sutilmente el rostro.

-          Lo prometo, y ten por seguro que siempre será así, porque no puedo amarte de otra forma. —

Y así ha sido la forma en la que él siempre me ha amado… y yo, Satoshi Ishikawa, amo que me ame así.

Notas finales:

qué tal?! x33 ahldaishdlahsd morí por tanta cosa que narré!! <3

Tenía mucho que no redactaba algo tan romanticón ?? y pos ahí esta XD

Espero para mañana tener la segunda parte que espero sepan por quién estará narrada XD

Me largo a soñar con este par de mensos <3

OYSM!


Si quieres dejar un comentario al autor debes login (registrase).