-Aahhh… aaaaahh…- gemía Law debajo de Kid, siendo embestido con fuerza y a punto de venirse en su propia mano con la que se masturbaba.
No tardó mucho en llegar al orgasmo, arrastrando al pelirrojo consigo.
-Aaaaah!!.. No aprietes tanto…-dijo Kid sonriendo, lo decía sarcásticamente. Le encantaba estar dentro del mayor, se sentía jodidamente bien.
El recién mencionado se dejó caer en el pecho de Law, acomodándose y restregándose contra él. No quería que se fuera aun.
-Eustass-ya, comprendo que eres un animal que marca su “territorio”, pero yo no soy nada tuyo… quiero recordártelo…- eso le había dolido a Law. Le había dolido el haberlo dicho ya que sabía que al pelirrojo le daba igual lo que hacían. Que solo lo quería para pasar el rato.
De lo que no tenía idea es que a Kid si le gustaba estar con él, y no solo para eso.
Eustass gruño enfadado y se hizo a un lado, tenía miedo de decirle lo que sentía por él y que Law, conociéndolo bien, se riera en su cara.
-como sea, ¿Por qué no te quedas un rato más? Te aseguro que no perderemos el tiempo Trafalgar…- eso lo dijo en un tono bastante sugerente.- ¿o es que Doflamingo de nuevo te trae para acá y para allá?
Law trago saliva. Siendo que Kid no era nada suyo y no lo veía tan seguido –dígase una vez cada cuantos meses ya que el pelinegro viajaba demasiado- era obvio que no era el único con el que mantenía ese tipo de “relación”. Pero claro, Kid no estaba ni enterado.
-no es eso, es solo que tengo que trabajar, y tú me quitas demasiado tiempo…- mentira. El menor había acertado con lo de Doflamingo, y no lo traía para arriba y abajo en el sentido laboral. Sino en el otro sentido.-… así que con permiso…-
-vaya… qué fácil es tu vida. Trabajas un poco, sales temprano y aun así ganas más dinero del que yo ganaría en un año, desearía ser tu Law…-
-en tus sueños quisieras ser yo Eustass-ya, no es tan fácil como lo haces sonar…- Law hablaba mientras se cambiaba.- mi trabajo no es para nada fácil… sabes que Donquixote-ya no es una persona muy buena que digamos…-
-¡venga! Pero si Penguin me ha dicho que tu jefe te subió el sueldo aún más que a los otros solo porque le gustas…- se notaba el tono de celoso en la voz de Kid, pero Law estaba demasiado centrado en sus pensamientos como para notarlo.
-Kid, no hables de más, que no aguantarías ni un mes siendo yo…-
-bah, seria pan comido… bueno, no tanto ya que no te gusta. Pero sabes a lo que me refiero.-
Law alzo una ceja y en una milésima de segundo se le vinieron varias cosas a la mente.
La primera que podría usar sus poderes para cambiar su cuerpo con el de Kid y que se diera cuenta de que no era nada fácil.
La segunda que podría arriesgarse a que también supiera sobre su otra relación con su jefe. Y la tercera que Kid podía irse a la mismísima mierda, su orgullo era primero.
En cuanto resolvió todo aquello en su mente lo único que se escuchó de él fue un “¡Room!” y pronto estaba acostado en la cama, justo donde Kid estaba, bueno, donde el estaba ahora. Porque habia cambiado de cuerpo con Kid.
El menor, de pronto sintió que estaba parado y vestido. Maldito Trafalgar.
-más vale que arregles esto enano hijo de puta…- amenazo Kid viendo a Law en su cuerpo muy feliz de la vida y como si no pasara nada. Pero Law por su lado estaba bastante bien.
-yo con gusto lo haría, pero ya no tengo mis poderes. Supongo que puedes hacerlo por ti mismo, después de todo “es muy fácil ser tu Law” porque ahora eres yo Kiddy-ya… por cierto, más vale que corras, tienes un vuelo en 45 minutos y no olvides nada- “Kid” se paró de donde estaba y empezó a recoger las cosas de “Law” para que se fuera al aeropuerto.- el auto esta estacionado en frente, no me hagas perder mi trabajo…-
-¡ESPERA CABRON! ¡¿Vuelo?! ¡Yo no tengo ningún vuelo!- Kid estaba bastante cabreado.
-¡ahora eres yo: Trafalgar D. Wartel Law! ¡Y recuperaras tu cuerpo cuando sepas usar mis poderes y te des cuenta de que mi vida no es tan fácil “TRAFALGAR”!-
Kid se quedó callado, Law en su cuerpo sí que se veía bastante molesto, además de que se dio cuenta de que la diferencia de estatura era muy diferente. Se sentía diminuto en el cuerpo de Law.
-¡ha! ¡Pues que así sea! ¡Ten suerte aprendiendo a usar mis poderes “Kid-ya”!- el ahora pelinegro se apartó tomando el maletín que Law cargaba cuando habia llegado y salió de ahí enojado. Cuando estuvo en el auto se puso a revisar las cosas y el maletín. Ahí estaban los boletos y las tarjetas de crédito de Trafalgar, solo tenía que ir a empacar y obviamente sabia donde se estaba hospedando el ahora pelirrojo.
Cuando al fin hizo todo lo que tenía que hacer, se dirigió al aeropuerto para tomar “su” vuelo. Al llegar dejo encargado el auto en administración y literalmente salió corriendo hacia el portal de abordaje, habia llegado justo antes de que cerraran.
Ya en el avión busco su asiento en primera clase y sonrió.
-estúpido Trafalgar…-murmuro mientras se sentaba y ordenaba que le trajeran una botella de vino.
***
-pobre Eustass-ya…- decía un sonriente Law mientras se daba un baño en la bañera de “su” casa.- no sabes lo que te espera…
***
Unas horas más tarde, en la madrugada, el avión llego a su destino y Kid despertó por la voz del piloto hablando por el transmisor.
Una vez bajo del avión fue directo a la sala para los recién llegados.
Pero se quedó completamente paralizado cuando vio que, ahí parado frente a él, con un traje formal y con su inseparable abrigo de plumas rosa, estaba nada más y nada menos que Donquixote Doflamingo, recibiéndolo con una gran y nada inocente sonrisa.
“esta me las pagas Law”