- Sai~~~ –escucho una voz que lo llamaba de manera sensual, además de que esa voz se le hacía conocida, abrió los ojos y se dio cuenta de que estaba en un lugar que no conocía, era una habitación obscura que solo estaba iluminada por velas, se incorporó lentamente evaluando su situación.
- ¿Qué…? –se encontraba desorientado.
- Sai –volvió a escuchar que lo llamaban y volteó hacia el lugar de donde provenía la voz, casi muere desangrado con lo que vio- ven… –lo llamo esa persona con uno de sus dedos viéndose muy sensual
- G-Gaa-chan –Sai camino como zombi a la cama donde estaba el pelirrojo, quien solo tenía encima un bóxer negro ajustado y estaba de lado permitiéndole ver su hermoso y bien formado trasero.
Cuando llego a él, Gaara lo jalo de modo que Sai quedo encima suyo y lo beso de manera apasionada.
Sai estaba en la gloria, acariciaba y besaba todo lo que podía de su pelirrojo amante, el azabache no tenía idea de cómo habían llegado a esto pero poco le importaba.
Cuando ya sentía que no aguantaría más se quitó la ropa y le quito también el bóxer a Gaara, comenzó a prepararlo. Estaba encantado escuchando como su Gaa-chan gemía y lo llamaba en la bruma de placer que él le causaba, estaba a punto de penetrarlo…
- Esto tal vez te duela mi Gaa-chan –le dijo.
- No importa, quiero sentirte dentro de mi Sai…Sai… ¡¡¡SAI!!!
- ¡¡¡¿Qué pasa?!!! –se levantó exaltado de la cama.
- Que ya es hora de desayunar y nuestra madre me mando a despertarte, pero no me hacías caso y decías “Gaa-chan, Gaa-chan” como gimiendo, que pervertido resultaste ser otouto –se burlaba Itachi.
- Interrumpiste en el mejor momento niisan –le dijo Sai sin ninguna emoción de las que buscaba obtener su niisan, como enojo, vergüenza ¡¡¡algo!! Solo se observaba una ligera molestia en sus partes bajas. Itachi se dirigía hacia la puerta, pero antes de salir se detuvo, decidido a usar su última carta para molestar a Sai.
- Ah –dijo como quien recuerda algo se repente- antes de bajar has algo con la tienda de campaña que tienes bajo las sabanas –dijo saliendo rápidamente por la puerta, decepcionado por no haber obtenido ninguna reacción de su otouto.
- Que decepción, solo era un sueño –murmuro, se dirigió al baño de su habitación para asearse y hacerse cargo de su problemita- pero muy pronto serás mío Gaa-chan, ya lo verás, hasta el jefecito dijo que me ayudaría –el azabache se veía muy decidido.
Sai bajo a desayunar en cuanto estuvo listo. Su niisan no menciono nada de lo ocurrido en su cuarto porque de todas maneras, sabía que no obtendría ninguna reacción de él, de modo que se dedicó a molestar a Sasuke por el hecho de que por fin se había enamorado.
- Nunca pensé que mi otouto-baka se enamoraría tan rápido –dijo Itachi sonriendo maliciosamente- siempre creí que llegarías a viejo sin haberte enamorado, no sabes lo feliz que estoy Sasuke…
- Cállate baka-aniki –le dijo Sasuke furioso mientras le lanzaba una manzana a Itachi, la cual él esquivo con facilidad, iniciando de esta manera una pequeña riña que fue parada por su madre.
- Basta niños –dijo calmadamente, y su orden fue acatada de inmediato, aunque Sasuke seguía viendo de manera asesina a Itachi quien lo miraba de manera burlona.
“Que fácil de molestar es a Sasuke-baka” pensó Sai, y era cierto su niisan y él siempre lo fastidiaban solo para observar sus reacciones, motivo por el cual sus padres los regañaban, aunque ellos nunca hacían caso.
Salieron con rumbo a la escuela nada más terminar el desayuno, quien los llevaba era Itachi, pues este tenía curiosidad. Básicamente, deseaba conocer a las personas que habían robado los corazones de sus hermanos menores.
- Nos vemos luego niisan –se despidió Sai bajando del automóvil, Sasuke solo hizo un movimiento de cabeza y bajo de igual manera, ambos se dirigieron hacia donde estaban los otros miembros de la pandilla Jinchuriki, pues esperaban a que llegaran los dos rubios. Los estudiantes miraban curiosos al grupo de chicos que había casi duplicado el número de miembros de un día para otro.
- Hay nuevos miembros, al parecer los rumores eran ciertos –murmuro un chico.
- Ah, que lastima seguro no vieron mi pelea y por eso no fui escogido –decía otro.
- Sai-sama y Sasuke-sama están allí ¡¡¿Por qué yo no fui escogida?!! –se quejaba una chica.
- Tal vez porque no luchaste nada bien –se burló un doncel.
- Hump, pues es una lástima que yo no haya querido luchar, si no seguro estaría junto a Sasuke-kun –decía una peli rosa.
- Ja tu no luchaste porque tenías miedo Sakura-frentona –le dijo Ino que había alcanzado a escuchar lo dicho por la chica.
- ¿Qué dijiste Ino-puerca? –las chicas parecían lanzar rayos por los ojos, la tensión se sentía en el aire…
- ¡¡¡Ino deja de jugar!!! ¡¡debes estar aquí para recibir a Naru-sama!! –Yagura corto lo que parecía sería una pelea interesante. No le parecía bien que su imouto estuviera perdiendo el tiempo en alguien que no lo valía.
- Ya voy neesan –contesto la chica y se fue ignorando a Sakura.
- Solo se cree porque fue escogida la muy perra –murmuraba con rencor la plasta rosa.
- Lo siento neesan –se disculpó Ino en cuanto llego con su hermana.
- Más te vale que no vuelva a pasar, no te distraigas en cosas que no valen el tiempo que pierdes –le respondió fríamente, no le agradaba que esas chicas se peleasen en cuanto se veían- el tiempo que pierden en discusiones estúpidas, lo podrían emplear en algo productivo como entrenar, por ejemplo –la miro de manera severa y la otra solo bajo la mirada, pues sabía que era la verdad.
Los demás sabían que Yugito era severa solo porque de verdad quería a su imouto y era mejor que la chica aprendiera con ellos lo duro que era su mundo a que lo aprendiera en las calles, sola.
- Gaa-chan –En cuanto llegaron con el grupo, Sai fue de inmediato a ver a su queridísimo Gaara, quien solo lo observo fastidiado- Buenos días Gaa-chan –dijo abrazándolo, ganándose un hermoso gancho al hígado que lo dejo tendido en el suelo.
- Idiota –fue lo único que dijo su mellizo que lo miro sin siquiera una pizca de compasión. Los otros ya ni importancia le dieron, pues ya se les estaba haciendo común el trato entre ese par.
- Pobre Sai –dijo Itachi, quien observaba todo desde su auto- tiene exactamente el mismo carácter que su hermana Temari, combinado con el de Kankuro y con un toque del mal genio de Sasori, su otouto sí que le daba lastima, con lo que tendría que lidiar para conquistar a su alma gemela.
- Que malo, eres Gaa-chan, yo solo quería apapacharte –el masoquista de Sai se levantó y volvió a ir en busca de Gaara que se había alejado de él y deseaba que ya llegasen Naru y Menma.
- Y yo solo deseo golpearte –respondió furioso el pelirrojo.
- Mmm –Sai parecía estar considerando algo y luego se abrazó de nuevo a Gaara- solo porque eres tú, vamos golpéame –dijo soltándolo y abriendo los brazos, dándole la oportunidad a Gaara de asestarle un muy buen golpe.
- En definitiva ese chico es masoquista –declaro Roshi, claro que todos estaban de acuerdo con él.
- Ya viene Naru-sama –informo Yugito- así que compórtense, nuevos deben hacer lo que les dijimos –les dijo a los miembros nuevos en Jinchuriki.
- ¿de verdad tenemos que hacerlo? –preguntaba con el ceño fruncido Sasuke.
- Claro, eso ya es tradición, demuestra su rango como nuestro líder –respondió Gaara mientras apartaba a Sai que se le había pegado como garrapata (otra vez).
- Ya deja de quejarte Sasuke-baka, además debes comportarte. Después de todo el jefecito muy fuerte, seguro más fuerte que tú –le dijo con una sonrisa burlona y con los ojos le dijo algo así como “Que vergüenza que la persona que ames sea más fuerte que tú, seguro él te protegerá. No te preocupes serás algo así como su damisela”.
- No creo que ese dobe sea más fuerte que yo –le respondió con altanería mientras con los ojos le decía “Deja de tentar a tu suerte, copia barata”.
- Pues créelo –le dijo Han, mientras las bestias con cola lo fulminaban con la mirada.
Ya no dijeron nada más porque el automóvil de los mellizos rubios había llegado.
Se repitió lo del día anterior, Menma bajo primero se dirigió al grupo de chicos, se volteó y todos se inclinaron para recibir a Naru (incluido Sasuke, aunque este lo hizo a regañadientes).
Naruto bajo con mucha más confianza que el día anterior.
Muchos se sonrojaron al ver bajar a semejante ángel, pues hoy si se estaban tomando su tiempo en observarlo.
Vieron como se le pegaba el uniforme al cuerpo, un cuerpo hermosamente formado, complementado con su piel acanelada, el cabello rubio, los ojos cual zafiros y la sonrisa que iluminaba hasta el más obscuro de los corazones.
Era un ser perfecto, y eso sin contar con su fuerza y la influencia de su familia.
- Buenos días –saludo Naru radiante a todos ellos.
- Buenos días juuby –regresaron ellos el saludo.
- Vamos –les indico que se dirigieran junto con él para irse ya a su salón, pues todos ellos estaban en el mismo, aunque todavía faltaban unos 30 minutos para que iniciaran las clases.
- Qué suerte que estemos todos juntos en el aula 1 A ¿No cree Naru-sama? –le pregunto Yugito mientras observaba de reojo a Menma.
- Si es una suerte –Naru miraba de reojo a Sasuke. Y la verdad la gran mayoría estaba de acuerdo con la chica, pues el que todos estuviesen en el mismo salón era algo de verdad afortunado para ellos.
- Eh –un chico de cabellos platinados, de ojos claros y buen cuerpo se les acerco un poco antes de llegar a su salón, miraba decidido al grupo mientras un sonrojo bastante notorio adornaba sus mejillas y se veía claramente su nerviosismo, era obvio que iba a declarársele a alguien- disculpe soy Kouryuu Aragi del aula 1 B (este chico me lo invente yo), ¿puedo hablar con usted…Naruto-sama? –al oír esto los varones de las bestias con cola le dirigieron una mirada asesina, las chicas pues…miraron la reacción de Sasuke que se veía muy calmado pero en sus ojos claramente ardía una llamarada de ira, de los nuevos Kiba estaba perdido no sabía que pasaba, a Shino no le interesaba, Shikamaru lo consideraba problemático y a Neji le parecía que el chico era un idiota suicida, Juugo solo esperaba que no se pelearan, él estaba calmado y Sai le dirigía una mirada burlona a su hermano.
- Eh… –Naru tenía una mirada de resignación- claro –termino por aceptar, solo por cortesía y porque quería alejar al pobre chico de los algunos varones sobreprotectores con ansias asesinas.- quédense aquí chicos, ya vuelvo –su mirada decía “no lo toquen, yo me encargo”.
- Ese maldito –fue el murmullo que salió de los sobreprotectores al ver alejarse a Naru en compañía de ese chico.
- Otro más que se le declara a Naru-sama… –dijo Yugito sonriendo maliciosamente.
- Y eso que es el segundo día, pero ya verás que a este le seguirán muchos más… –Fuu le sonreía cómplice, por cómo se veían los chicos estaban cumpliendo su objetivo.
- Además ahora se sabe que es un doncel lo cual seguro hará que muchos varones se le acerquen con otras intenciones –un aura obscura rodeaba a varios varones, pero el aura de Sasuke era la más negra.
- Cierto, cierto. Después de todo no es el primer varón que se le declara y eso que antes desconocían su estado como doncel –la sonrisa de Yugito y Fuu se hacía más grande al igual que el aura de las bestias con cola y Sasuke, los restantes se alejaron discretamente, no fuera a ser que ellos se vieran envueltos en lo que sea que desearan hacer, o que los ocupasen para sacar su ira, era mejor mantener distancia.
- Yo voy por Naru –Menma se dirigía a la zona por donde habían desaparecido esos dos, dispuesto a golpear al chiquillo insolente que deseaba declarársele a su tierno otouto.
- El jefecito no parecía querer que fueran –Sai tomo del brazo a Menma, sonriendo como siempre hacia.
- Es mi otouto y yo hago lo que quiera –se soltó del agarre del azabache y sujeto a Sai por el cuello, pues siempre se ponía furioso cuando algún idiota se le acercaba a su pequeño Naru con intenciones más allá de la amistad, los otros parecieron calmar sus ansias de sangre, concentrándose en calmar a Menma antes de que Naru regresara- ¿entendiste? O ¿se te ha olvidado quién soy? Créeme que puedo recordártelo y estaré más que feliz de hacerlo –al parecer este varón rubio deseaba sacar su ira en ese instante, aunque sabía que ese chico decía la verdad.
- Ya déjalo Menma –Yugito puso su mano en el hombro del varón- te estas comportando como un niño, cálmate.
- Cierto, además sabes que lo que dice este baka es la verdad –Gaara también intervino- ahora bájalo –ordeno con voz seria, se veía enfadado, al parecer al pelirrojo no le parecía que alguien que no fuera él golpeara a Sai.
- Lo siento –Menma bajo al chico- Me he exaltado demasiado…no volverá a pasar, descuidad Gaara no golpeare a tu chico, todos sabemos que ese honor es todo tuyo –Menma se calmó, y no resistió las ganas de hacerle burla a Gaara.
- N-no sé de qué hablas idiota –Gaara desvió la mirada, pues se había sonrojado y no quería que lo notaran (claro que fue un esfuerzo inútil, pues todos se dieron cuenta), la tensión desapareció con esto.
- Yo sabía que si me querías Gaa-chan –Sai se le acerco sonriente- ahora ven –jalo a un confundido Gaara en dirección a la salida- debemos informarles a nuestros padres que nos casaremos
- ¡¡¡¿Qué?!!! –la cara de Gaara competía con sus cabellos, jalo su mano soltándose del agarre de Sai.
- ¡¡¡Kyyaaaaaaa!!! –las chicas y el doncel presentes (Yugito, Fuu, Ino y Kiba) parecían muy emocionados con la idea, y no encontraban nada raro en el hecho de que se acabaran de conocer apenas el día anterior.
- Pues es lo más obvio si me correspondes solo queda casarnos y someterte después al mismo tratamiento que Yahiko-san. –con esta afirmación Gaara se había quedado convertido en estatua- Aunque no he pensado como convencer a Tsunade-sama de hacerlo…
- Yo te puedo ayudar –Roshi intervino sonriendo burlesco, pues al igual que los demás varones disfrutaban del espectáculo- conozco a Tsunade-sama, fui varias veces con mi niisan Yahiko a verla –parecía que solo les faltaban las palomitas para disfrutar por completo de ese embrollo.
- ¡¿Yahiko-san es tu hermano?! –los que no sabían esto se sorprendieron y es que… ¡¡¡No se parecían en nada!!!
- Si, y no se preocupen por su reacción, siempre es lo mismo.
- Oigan… –Neji intervino de repente- ¿alguien sabe dónde está Uchiha Sasuke? Hace un rato que no lo veo –con este cuestionamiento todos detuvieron lo que hacían, Sai planeando su boda, las chicas y el doncel planeando su vida de casados, los chicos sus burlas y Gaara sus planes de asesinato. El pobre Neji había hecho que la guerra volviera sin saberlo.
- ¡¡Demonios!! ¡¡Seguro se fue siguiendo a Naru!! –Menma se puso histérico de nuevo. Yugito y Fuu suspiraron.
- ¡¡¡Ahora sí!! –los chicos se exaltaron de nuevo- ¡¡Vamos a buscar a Naru-sama!!
- ¡¡¡Basta!!!
- ¡¡Ya fue suficiente!! –Fuu y Yugito ya se habían cansado de las niñerías de esos tontos.
- Pero
- ¡¡¡Sin peros!!! –se veían muy enfadadas.- Naru-sama/ el jefe se enfadara mucho con ustedes.
- ¡¡Nos están dejando en ridículo!! –Fuu señalo alrededor y se vio que estaban rodeados que estaban rodeados de chismosos.
- ¡¡¡Caminen al salón, pero ya!!! –Yugito parecía querer golpear a alguien en cualquier momento, de modo que todos se fueron rápidamente en dirección a su aula.
- Pero si nosotros no hicimos nada… –Neji no entendía porque ellos también habían sido regañados. Sino solo se limitó a asentir, dando a entender que estaba de acuerdo en lo que decía Neji.
- Las mujeres y donceles son problemáticos –fue la contestación de Shikamaru.
Y así estos fueron llevados a su aula, pues casi era hora ya de entrar a tomar sus clases.
Por otro lado…
- Y bien –Naru había seguido al chico hasta los jardines de su abuela- ¿de que querías hablar?
- Pues yo… –su sonrojo aumento- Naruto-sama he estado enamorado de usted desde 3ro de secundaria ¡¡Salga conmigo por favor!! –el chico hizo una reverencia y se lo pidió con una voz suplicante.
- Lo siento mucho –Naru le sonrió- pero estoy enamorado de otra persona –fue directo al punto, pues estaba seguro que el otro le preguntaría el porqué de su rechazo.
- Entiendo –parecía que Aragi esperaba esa respuesta, su cara estaba resignada- ya me esperaba esa respuesta
- ¿eh? –eso lo tomo por sorpresa- ¿Por qué esperabas que te respondiera eso? –no pudo evitar preguntárselo.
- Eso porque… –el chico le sonrió nervioso al ver el interés que mostraba de repente Naruto- siempre me la he pasado observándolo aun cuando creía que era un varón, y me di cuenta que desde que vio pelear a ese chico Uchiha Sasuke su mirada cambio, además de la noticia de que era un doncel, por eso me decidí a decláramele. Quería que siquiera supiera de mis sentimientos por usted –Naru estaba sonrojadisimo.
- Jeje si –Naru se veía hermoso sonrojado- no sé qué rayos me paso, pero desde que lo vi no he podido dejar de pensar en él, en Uchiha Sasuke –Aragi vio algo que estaba a las espaldas del doncel rubio, sonrió tristemente pero luego su mirada se tornó decidida.
- Lo sabía, pero yo solo quiero que sea feliz por eso –lo jalo de repente pegándolo a él- perdóneme Naruto-sama –dijo antes de besarlo.
¡¡Aragi ha besado a Naruto!! ¿Por qué habrá dicho eso antes de besarlo? ¿Qué vio Aragi detrás de Naru como para tomar la decisión de besarlo? ¿Dónde estará Sasuke? ¿Gaara sentirá algo por Sai? ¿Sai se saldrá con la suya y se casara con Gaara o Gaara lo matara antes? Pues esas son cosas de otro capítulo…
Continuara….