La Orden Draconis por Vane7

Blaise corría rápido por los pasillos de Hogwarts tratando de llegar a tiempo al aula de Transformaciones, por suerte había encontrado su libro nada más entrar a la habitación, ubicado en la mesa de su escritorio lo tomo rápidamente, para luego retomar nuevamente su carrera, esta vez en dirección contraria.

Corría a todo lo que le daban sus fuerzas, pues sabía que ya solo disponía de unos minutos para llegar al aula, tan concentrado iba en correr lo más rápido posible para poder llegar, que no vio venir lo que ocurrió después.

Un chico Ravenclaw de 7mo año aparentemente, debido a su complexión alta y de musculatura desarrollada, que aun con el uniforme de su casa se podía apreciar, lo tomo fuertemente del brazo deteniendo súbitamente de esta manera su carrera, logrando con esto que el casi cayera al piso, de no ser porque era sujetado fuertemente por aquel chico, que lo retenía con un fuerte agarre por el brazo derecho.

-¿A dónde con tanta prisa?- pregunto arrogantemente el chico de piel bronceada, cabello castaño oscuro y ojos negros, mientras le sonreía de lado a Blaise, quien solo lo miraba desde abajo, ya que el chico además de ser de un físico fuerte y musculoso, también era muy alto, tanto que le sacaba una o hasta dos cabezas al Slytherin .

-A ningún lugar que te importe- le respondió Blaise desafiante y aburrido a la vez, "Otro estúpido que cree que puede meterse conmigo" pensó aburrido por la situación, ya que por lo general todos se creían con el derecho de molestarlo solo por ser un Slytherin- ahora déjame inmediatamente o te hechizare hasta el próximo siglo imbécil- le espeto con desprecio en sus palabras, y una mirada afilada, como si hablar con el chico fuera algo denigrante para él.

-¿Te crees mucho verdad?- dijo ignorando las palabras del Slytherin, pero sin poder evitar dejar translucir, que sus palabras le habían molestado- paseándote por allí como si fueras una especie de Dios- le dijo acariciando delicadamente su barbilla con la mano que tenia libre, contradiciendo con este acto sus palabras llenas de desprecio, ante lo cual Blaise aparto el rostro rápidamente de aquel contacto.

-Suéltame imbécil- espeto molesto el Slytherin forcejeando en el agarre, buscando liberarse del Ravenclaw, por lo cual el otro chico, tomo fuertemente a Blaise entre sus brazos, dejándolo encerrado en ellos, de tal manera que no pudiera liberarse de él, pegando totalmente sus cuerpos.

-Tan hermoso- susurro el Ravenclaw mirando el rostro del Slytherin, para segundos después, hundir su rostro en el cuello del moreno, al tiempo que absorbía el dulce aroma que desprendía la delicada piel morena del Slytherin- delicioso- murmuro al pasar la lengua sobre la piel de su cuello, queriendo saber cuál sería el sabor de esa morena serpiente.

-¡Suéltame!, ¡Déjame!- grito esta vez Blaise con el pánico reflejado en su voz, este tipo no tenia intensiones de molestarlo con golpes, palabras o hechizos, podía sentir el deseo que mostraba hacia él, cada acto de ese desconocido no tenía nada de burla o intensiones de intimidación, y eso lo aterrorizaba, pues eso solo significaba que era completamente sincero, con el deseo y lujuria que demostraba hacia él.

-Cálmate pequeño- le dijo firmemente, reforzando el agarre sobre el pequeño cuerpo del Slytherin- prometo que lo disfrutaras-susurro en su oído con lo que pretendió ser un tono seductor, pero que a Blaise solo le sonó como una sentencia aterradora y cruel.

Blaise abrió de sobremanera los ojos, no podía creer lo que estaba pasándole, ¿Por qué a él?, sabía que era hermoso, pero... ¿Enserio tendría que perder su virginidad de una manera tan cruel y horrible?, obligado por un chico al que ni siquiera conocía, la tristeza invadió su ser, nadie vendría a ayudarlo, aun cuando alguien pasara por el pasillo, sabía que nadie le ayudaría, las únicas personas que lo hubieran ayudado, en ese preciso momento estaban en clase.

Una única lagrima cayo por las mejillas del Slytherin, se sentía tan solo y desprotegido en esos momentos, "Si tan solo..." pensó el Slytherin con tristeza "Si tan solo alguien me ayudara".

-¡Suéltalo en este mismo momento IMBESIL!- rugió un fuerte voz en el pasillo.

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Ian caminaba por los pasillos de Hogwarts rumbo a la dirección, guiado por la Profesora McGonagall, la cual a petición del director lo estaba escoltando hacia esta para tener una pequeña entrevista con el director antes de incorporarse a sus respectivas clases.

-Tarta de limón- pronuncio la contraseña la profesora hacia la estatua, la cual dio paso a las escaleras que dirigían hacia la oficina del anciano director- Joven Leblanc pase por favor- lo invito a proseguir McGonagall.

-Si- contesto simplemente Ian, mientras se disponía a subir por las escaleras.

Una vez llego al final de dichas escaleras se encontró con una gran puerta, de lo que el supuso seria la posterior oficina del director, llamo educadamente a la puerta, pidiendo de esta manera permiso para entrar.

-Pase por favor joven- se escucho la amable voz del director, del otro lado de la puerta.

-Buenos días director- saludo educadamente Ian mientras ingresaba en la habitación.

-Buenos días joven Leblanc- saludo el director con una cálida sonrisa, mientras le indicaba con un gesto las sillas ubicadas frente a su escritorio y el mismo tomaba asiento en su respectiva silla- tome asiento por favor.

-Bien- acepto y se ubico en una de las sillas, mirando fijamente al director, algo le decía que ese anciano sabia más de lo que aparentaba acerca de él- ¿Puedo preguntar la razón del porque me encuentro aquí?.

-Por supuesto- contesto sonriente el director- como nuevo alumno que es, lo he mandado a llamar para informarle como será su estadía en este colegio.

-Entiendo- acepto Ian, aun receloso del anciano.

-Como se imaginara debemos ubicarlo en una casa de...

-Deseo estar en Slytherin- interrumpió Ian, expresando su elección, después de todo si estaba en ese lugar no era más que por Draco-tengo conocidos en esa casa, y me sentiría mas cómodo y en confianza allí- prosiguió.

-Entiendo sus razones, pero me temo que la casa en donde quedara será una elección del destino- dijo con voz amable Dumbledore- o más propiamente del sombrero seleccionador- sonrió, señalando hacia donde se encontraba dicho personaje- en la cena de hoy se realizara la elección de su casa, frente a todo el colegio- informo Dumbledore.

-Bien- acepto molesto por la situación, solo esperaba que ese bendito sombrero lo dejara junto a Draco- si eso es todo ¿Puedo retirarme?.

-Por supuesto- acepto el director- le recomiendo visitar los jardines o el lago del colegio, debido a que todos los alumnos en estos momentos se encuentran en clase, podría disfrutarlos con mayor tranquilidad- expreso de manera amable, pero con una mirada que Ian no supo comprender por completo, "Definitivamente este viejo...debo estar al pendiente, parece conocer demasiadas cosas", pensó desconfiado.

-Claro- acepto, y con una inclinación se retiro de la oficina.

Una vez en los pasillos de Hogwarts pudo percatarse que las palabras del director eran ciertas, no había nadie en estos, debido a las clases, era algo seguro que no podría ver a su Dragón, al menos hasta el final de estas.

-Maldición- refunfuño el castaño- de no haber sido por la estúpida reunión con el director, tal vez podría haber visto a Draco antes de sus clases- se lamento.

Ian soltó un fuerte suspiro, la impaciencia por ver a su lindo y pequeño Dragón lo carcomía por dentro, eran tantos años sin verlo, solo teniendo noticias suyas por cartas, y viéndolo en fotos que tenía ya demasiado gastadas de tanto observarlas y acariciarlas.

-Solo estoy a unos pasos de ti mi pequeño Dragón y aun debo esperar- se lamento Ian- haaa definitivamente esta espera me volverá loco- se revolvió el cabello frustrado por la situación.

Pero el sonido de unos golpes y gritos a la distancia llamo su atención, algo estaba pasando y el no podía quedarse sin hacer nada, rápidamente se dirigió hacia la fuente de ese escándalo, si alguien necesitaba ayuda él se la daría, después de todo en algo tenía que distraerse mientras esperaba que las horas pasaran, para finalmente ver a su Dragón.

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Draco se encontraba inquieto, la hora de transformaciones aun no había empezado por lo cual McGonagall no se encontraba en el aula, no podía dejar de sentir esa inquietud de que algo no andaba bien.

-Iré a buscar a Blaise- dijo súbitamente el rubio levantándose de su asiento.

-Pero Draco- lo detuvo Theo tomándolo de la mano, para detener su partida- Blaise ya debe de estar por volver, además no puedes dejar la clase, McGonagall llegara en cualquier momento y últimamente has bajado tus notas en su materia, no te conviene tener más problemas con ella- le recordó el castaño.

Draco bajo la mirada con tristeza, pues sabía que su amigo tenía razón, por las bromas, burlas, hechizos y demás cosas que los alumnos le hacían, le era muy difícil concentrarse en clase y hacer los deberes, por lo cual últimamente habían estado bajando sus notas; se llevo una mano al pecho, donde sentía como su corazón latía acelerado, algo le decía que debía ir por Blaise.

-Tal vez Ron pueda ir por Blaise- sugirió Harry tratando de dar una solución al problema, después de ver la cara de angustia del rubio, ya que no le gustaba ver esa expresión en su rostro.

-¿Qué? ¿Y yo porque?- se quejo de inmediato Ron, pues no deseaba tener que andar corriendo por los pasillos, solo para encontrar a esa rara serpiente, mas aun después de lo ocurrido esa mañana, algo extraño había ocurrido con él, y temía que volviese a pasar lo mismo, aunque seguía pensando que todo había sido provocado por la falta de comida en su organismo; si definitivamente, era por eso y nada más que por eso.

-Ron, tu eres prefecto, puedes poner de excusa que tuviste que arreglar un conflicto entre alumnos de menor grado, si es que llegas a tardar demasiado en encontrar a Blaise- explico Harry a su pelirrojo amigo.

-Hermione también lo es ¿Por qué no va ella?- rebatió de inmediato Ron, definitivamente no era seguro para el estar cerca de esa extraña serpiente, y no lo obligarían a hacerlo.

-Porque Hermione no querrá perderse la clase- contesto exasperado Harry por la negativa de su amigo- además admitámoslo, si ella no llega a estar en la clase ¿Después quien nos explicara de que va todo y ayudara con los deberes?- cuestiono el oji-verde, ante lo cual el pelirrojo solo pudo asentir resignado, a la tarea que tendría que desempeñar.

-Está bien, iré por Zabini- acepto a regañadientes, mientras se dirigía hacia la puerta del salón, para agregar antes de salir- pero que conste que no lo hago por gusto.

Todos asintieron ante lo dicho por el pelirrojo, dándole la razón, ya que no querían iniciar una discusión en esos precisos momentos, cuando lo importante era que fuera por el Slytherin.

-¿Ya estas más tranquilo Draco?- preguntó amable Harry hacia el rubio quien aun mantenía su mano fija en el pecho.

-Si- sonrió Draco hacia el azabache, mientras dejaba caer la mano de su pecho, ya que por alguna extraña razón, en el preciso momento que Ron salió del aula, había dejado de sentir aquella extraña sensación, que le oprimía el pecho y lo llenaba de angustia- muchas gracias Harry- le agradeció el rubio, dejándole un rápido beso en la mejilla.

Después de esto el rubio se dirigió mas tranquilo hacia su asiento, el cual compartía con Blaise, pero el cual en esos momentos se encontraba ocupado por Theo, bajo la atenta mirada de Harry, que por alguna extraña razón, sentía que ese simple gesto del Slytherin, había valido el tener que lidiar con la cabezonería de su amigo, el cual estaba seguro mas adelante le reclamaría por obligarlo a buscar a Zabini.

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-¡Suéltalo en este mismo momento IMBESIL!- grito fuertemente Ron, aunque mas pareció el rugido de un león que el grito de un joven mago.

Ron había echado a correr por los pasillos de Hogwarts, con rumbo a las mazmorras de Slytherin, con la esperanza de encontrar por el camino a Zabini, y así poder volver rápido al aula ya que no deseaba tener que lidiar con una McGonagall enfadada porque llegaban tarde a su clase, pero grande fue su sorpresa al encontrar a la morena serpiente en brazos de un Ravenclaw apenas doblo en la esquina de unos pasillos, casi cerca de Slytherin.

Una extraña sensación lo embargo al ver la escena del Slytherin en brazos del Ravenclaw, el cual obviamente era mucho mayor, "Ese estúpido" pensó con ira el pelirrojo "Yo buscándolo como un idiota por todo Hogwarts, mientras el está en brazos de un idiota, que sabrá Merlín que es de él" pensó aun mas enfadado.

Ron estaba a punto de darse la vuelta para salir de allí, cuando escucho lo que ellos decían, fue casi un milagro que lo hiciera, pues el Ravenclaw hablada casi en susurros; sin embargo el Slytherin prácticamente gritaba cada palabra, y por el tono de su voz, además claro esta de sus palabras, eso no era una reunión de enamorados, o algo parecido.

El Gryffindor se dio la vuelta rápidamente para ver qué era lo que sucedía, pues ya antes se había dado la vuelta para marcharse, y lo que vio al ver a los chicos, lo desconcertó; el Ravenclaw mantenía prisionero entre sus brazos el delgado cuerpo del Slytherin, estrechándolo entre estos con tal fuerza que prácticamente no había espacio disponible en el cual los cuerpos de los 2 chicos no estuvieran en contacto, todo esto no hubiera sido tan desconcertante de no ser por la expresión y gestos del Slytherin.

Ron observo fijamente al Slytherin, este luchaba y se retorcía tratando de liberarse de la prisión que componían los brazos del Ravenclaw alrededor de su cuerpo, en un momento dado escucho lo que el mayor le decía al moreno y creyó caerse de bruces ante lo que vio, de pronto el Slytherin dejo de luchar y su mirada mostro una infinita tristeza y dolor.

El pelirrojo no entendió de inmediato la reacción del Slytherin, solo hasta que vio como una lagrima rodaba por su delicado y hermoso rostro, fue consciente del porque de todo aquello, el Slytherin se sabía solo, con un tipo que obviamente lo tenía inmovilizado, sin posibilidades de escape, brevemente se pregunto si el Slytherin no tenia esperanza de que algún estudiante lo ayudara, pero a juzgar por la expresión tan frágil, desolada y totalmente desvalida de este, Ron estuvo casi seguro que la respuesta era un"no".

Consternado por la situación no fue capaz de reaccionar hasta que vio, como el Slytherin cerraba los ojos, resignado a su destino, mientras el Ravenclaw descendía hasta su cuello, comenzando a besar y saborear la piel que se mostraba ante él, como si de un manjar se tratara, mientras sus manos que hasta hace unos segundos estaban fijas alrededor del Slytherin, comenzaban a acariciar el cuerpo de este, sin descuidar en ningún momento la prisión que cernían sobre el menor.

Ron contemplo con incredulidad la imagen que se mostraba ante sus ojos, el chico Ravenclaw, se cernía sobre el delgado y ahora más que nunca frágil cuerpo del Slytherin, el cual temblaba y cerraba los ojos fuertemente, suponía que tratando con esto de impedir que las lagrimas se derramaran por su rostro, jamás creyó ser testigo de algo como esto en su vida.

-¡Suéltalo en este mismo momento IMBESIL!- Fue el rugido que vibro en las paredes de ese pasillo, Ron no entendía exactamente qué estaba pasando con él, pero por alguna razón en esos momentos estaba totalmente lleno de una ira ciega y letal, en la que solo podía pensar en destrozar a hechizos y golpes al idiota Ravenclaw que se encontraba frente a él.

-Weasley, no te metas y vete de aquí- espeto molesto el Ravenclaw, por ser interrumpido, ignorante del peligro que corría, pues no había nada peor que un león enojado y furioso, sin contar que de por si Ron tenía un carácter demasiado...fuerte.

-¡ALEJATE DE EL!- grito iracundo el pelirrojo, en cuanto vio que el Ravenclaw se disponía a tomar nuevamente a Zabini del brazo.

Ante el grito del pelirrojo, Blaise que había permanecido con los ojos cerrados, aun cuando el Ravenclaw lo soltó para enfrentarse al Gryffindor, finalmente reacciono y abrió los ojos, en ellos aun se podían ver el terror y el miedo por el que había pasado, además de los rastros de lagrimas no derramadas.

Ron quedo impactado por la mirada del Slytherin, parecía la de un animalito salvaje, llena de miedo y terror, el cual ante cualquier amenaza saltaría sobre él con todo, mas por instinto que por cualquier otra cosa, verdaderamente el Slytherin debía estar demasiado afectado, si se mostraba de una forma tan sincera y transparente ante él.

-Tú no me mandas- contesto furioso el Ravenclaw- y tu- señalo a Blaise, el cual cada vez se alejaba mas de el- ven aquí que...

Pero no tuvo tiempo de nada, en cuanto intento acercarse al Slytherin este saco la varita y de un rápido movimiento le quito la varita al Ravenclaw, dejándolo desarmado ante Ron, que no desaprovecho la oportunidad y se lanzo a golpear la mayor con todo lo que tenia.

El Ravenclaw golpeaba y esquivaba cada golpe del pelirrojo como podía, pues en verdad como todo mago sin bases muggle, como las que tenia Ron por su padre, no tenía demasiado desarrollada su habilidad para la lucha, a no ser que fuera con varita en mano, sin embargo Ron siempre había tenido un gusto y talento innato para este tipo de actividades de lucha, ante lo cual, todo aquel que lo viera luchar, debía reconocer que en definitiva era un genio en ello.

Ron había logrado conectar muchos de sus golpes con el rostro del Ravenclaw, por lo cual este prácticamente tenía la cara bañada en sangre, mientras que Ron solo lucia unos cuantos golpes en el pómulo derecho y una cortada en la ceja izquierda.

El Ravenclaw se desplomo en el piso después de un último golpe del Gryffindor en el estomago, el cual seguramente le habría roto unas cuantas costillas, ya que aparte de todos los golpes en el rostro Ron se había asegurado de no solo marcarle la cara con sus puños, sino también de dejarle múltiples golpes y hematomas por todo el cuerpo, tanto así, que casi podía estar seguro que no había parte del cuerpo de ese chico que no hubiera recibido al menos un golpe.

Al desplomarse el Ravenclaw, el pelirrojo se volvió hacia el Slytherin que se encontraba pegado a una de las paredes del pasillo, aun tenía esa mirada de animalito salvaje, pero también parecía estar un poco mas calmado que antes.

-¿Estás bien?- pregunto el pelirrojo con una sonrisaforzada, debido al dolor en su estomago, ya que aun siendo en Ravenclaw el másgolpeado y definitivamente el mas lastimado en esa pelea, el chico habíalogrado asestar varios golpes, que en definitiva habían dañado al pelirrojo.

-Sí, yo...- trato de hablar el Slytherin, pero se vio interrumpido al ver con horror como el Ravenclaw se levantaba del suelo, y con una varita apuntaba hacia el pelirrojo, quien aun permanecía de espaladas hacia él, mirando a Blaise, quien palideció al darse cuenta, que en su prisa por refugiarse contra la pared, había dejado caer la varita que le quito al Ravenclaw, la cual sostenía el chico en esos momentos, mientras apuntaba hacia el Gryffindor.

-Desmaius- se escucho una nueva voz.

Al escuchar el hechizo, Ron se dio vuelta rápidamente para enfrentarlo, al mismo tiempo que cubría con su cuerpo a Blaise, quien simplemente se quedo tras el pelirrojo, aunque igual alcanzo a ver como caía inconsciente el cuerpo del Ravenclaw.

-¿Quién eres tú y que ha pasado?- interrogo el pelirrojo, mientras aun ocultaba al moreno Slytherin atrás suyo.

-Yo soy un alumno nuevo de este colegio- respondió Ian tranquilamente- venia caminado por los pasillos cuando escuche este escándalo- señalo el lugar en general con un gesto de sus manos- y como estaba aburrido sin hacer nada, decidí venir a ver qué pasaba- explicaba el castaño con un tono tranquilo y despreocupado- entonces vi que este chico te apuntaba con la varita, aun cuando tú estabas de espaldas- señalo más serio, ya que le disgustaba la gente cobarde que atacaba a traición- no soporto a gente tan estúpida y cobarde, incapaz de luchar de frente por lo cual decidi intervenir y hechizarlo- señalo lo ultimo como si nada.

-Bueno, pues...- el pelirrojo no sabía que decir, ese chico que había salido de la nada, era un poco extraño en verdad- gracias- concluyo al fin, ante lo cual el castaño simplemente se encogió de hombros y asintió.

-Deberías ir a la enfermería- señalo Ian, al ver el aspecto de Ron, para después enviarle una mirada aburrida al Ravenclaw y decir- y supongo que el también debería ir.

-Lo mío no es algo grave- señalo Ron- pero supongo que el si necesita ir a la enfermería- concluyo Ron viendo el estado en el que había dejado al Ravenclaw.

- Weasley...- llamo tímidamente Blaise, aun estaba enShock por todo lo pasado con el Ravenclaw, por lo cual Ron no vio extraño la actitud tan distinta del Slytherin.

El pelirrojo se giro y vio como el Slytherin estaba prácticamente apoyado en la pared del pasillo, con una palidez más que notoria en el rostro.

-Me siento mal- pronuncio apenas el Slytherin- yo...

No termino de hablar Blaise, debido a que su cuerpo simplemente no soporto mas y se desvaneció, alcanzando Ron a atraparlo entre sus brazos, antes de que este tocara el suelo, aun cuando estaba cansado y visiblemente lastimado, Ron tomo a la morena serpiente entre sus brazos y lo cargo al estilo princesa, mientras emprendía el camino hacia la enfermería.

-¿Quieres que te ayude con él?- pregunto Ian, viendo el estado del pelirrojo, Ron simplemente negó con la cabeza, mientas seguía su camino- entonces supongo que me tocara llevar al chico estúpido- comento Ian, mientras con un movimiento de su varita hacia levitar el cuerpo del Ravenclaw y seguía al pelirrojo.

-Es lo mejor- concluyo el pelirrojo sin detener su andar- aunque si por mi fuera lo dejaría allí, al muy maldito- dijo con un tono molesto y enfadado.

-Si bueno, ¿Qué se le ha hacer?, hay que ayudarlo de todos modos, y llevarlo a la enfermería- dijo Ian encogiéndose de hombros, pero al observar al pelirrojo se dio cuenta de algo- oye, sabes que no es necesario que lo lleves en brazos, ¿Verdad?- comento con un tono burlón- es decir, un hechizo de levitación y otro de seguimiento y listo.

-¿Ehh?, y-y-yo claro, es solo que...- decía todo nervioso el pelirrojo, en verdad no había pasado por su mente en ningún momento que pudiera hacer eso con el Slytherin, y aun ahora que el chico nuevo se lo había mencionado, no tenía intenciones de hacerlo- ya estamos cerca, no hay necesidad, mejor apresurémonos- concluyo imperativo el pelirrojo, mientras aceleraba el paso.

-Bien- fue todo lo que respondió Ian, con una sonrisa en el rostro, divertido por el actuar de ese chico pelirrojo.

-Por cierto ¿Cómo te llamas?- cuestiono Ron, tratando de cambiar de tema.

-Cierto, no te lo dije- recordó Ian- mi nombre es Ian, Ian Leblanc- concluyo el castaño con una sonrisa amable.

-Mucho gusto Ian, yo soy Ron, Ron Weasley- se presento Ron- y el chico desmayado que llevo se llama Blaise, Blaise Zabini- concluyo con las presentaciones el pelirrojo.

"¿Blaise?" se pregunto extrañado Ian, para sus adentros, no podía ser uno de los mejores amigos de su Dragón, ¿Verdad?, miro al chico desmayado en los brazos del pelirrojo, el chico que el mismo llevaba levitando y por ultimo al propio pelirrojo, no parecía ser el mejor momento para preguntas, lo mejor sería esperar a que fueran atendidos, y el morenito despertara, para hacer preguntas.

Ian pensó que sería en verdad extraño, conocer de tal forma a uno de los mejores amigos de su Dragón, pero bueno, al menos habría estado en el lugar correcto cuando se lo necesito; dejando atrás todas las preguntas y dudas, siguió al pelirrojo por los largos pasillos hacia la enfermería.