Jongin no estaba de humor. En realidad su estado de ánimo había cambiado tantas veces el día hoy que prefirió salir del retumbante ambiente.
No solo era último día como estudiante, sino también el último día de su gran y obtusa apuesta.
Hacer apuestas. Pues nunca jamás, lo volvería hacer. Maldito Oh Sehun y maldita la estupidez de Jongin en aceptar.
Hoy sería un equivalente a un año de no darse placer solitario. Nada de sexo. Como un sacerdote en castigo.
Jongin de malas, era ese sacerdote.
Sehun su mejor amigo, había propuesto la gran idea de que si Jongin no tenía sexo por un año, este la daría alrededor de 100mil dólares. Siendo el niño adinerado y consentido de la familia. Era como dar golosinas.
Jongin tuvo un arduo año ahora que recordaba. Los primeros meses fueron el infierno mismo. Era como cuando había tenido su primera vez y sus pantalones darían notificación de lo encendido que estaba, y de lo inevitable que era controlarse de bajar esas ansias. Suerte que tenía novia para ese tiempo y la chica casi igual de hambrienta como el, no dudaría en ayudar al mestizo con su problemita.
Jongin quien tenía el cabello peli-plateado, otra boba apuesta donde fue vencido ante Sehun. Había pasado por tantas situaciones que no vivió antes. Mientras no podía tocarse o hacer nada para terminarse, el chico le conseguiría otro sentido a las cosas, siempre sexuales. Dejándolo con una permanente y casi eterna erección entre sus apretados pantalones.
¿Y Oh Sehun? Oh Sehun, estaría en el disfrute de esta apuesta al máximo, siempre teniendo un ojo sobre Jongin. Estaría a la disponibilidad de provocarlo. Compraría revistas con imágenes comprometedoras y las colocaría en la mesa. Hizo lo que fuera por desafiarlo.
Una vez dejo su ordenador, justo encima de la cama de Jongin, con una porno en escena. Dos chicas haciendo de las suyas. Las favoritas de Jongin y de él claro, no lo negaría. Sabiendo la hora en que su amigo se presentaría, lo encendió y dejo que todo fluyera por su cuenta. Mientras por un lado Kim Jongin tragaría en seco o más con ansiedad. Los obscenos sonidos invadirían la habitación seguido de las ilustraciones que emitía el ordenador dejando con ojos como platos al pobre. Trataría de alcanzar la hebilla de sus jeans pues su espíritu interno, una mitad, lo empujaba y otra lo jalaba a evitar echar por la borda la cruel apuesta.
Sehun extasiado en una esquina de la habitación, brazos cruzados, inclinado de medio lado hacia la pared. Disfrutaba cada segundo de ver como Jongin se hundía en un vaso de agua. Jongin no pudo volver a su cuarto ese día.
Hasta Sehun admitía haberse dado una masturbada esa noche, después de ver algo tan crudo.
Debido a lo riguroso de su apuesta a tal punto de los días, y lo que ameritaba, Jongin tuvo que terminar con su actual novia para ese tiempo. Así mismo eliminar rastro de cualquier objeto, imagen, sitios web o personas que le causara una dura pesadilla en la parte baja sur.
¿Y ahora? Pues ahora este estilo de vida se había vuelto parte de él. Al menos hasta el día de hoy.
Tomando un sorbo a su gaseosa favorita, se abalanzó al césped que rondaba toda la casa siendo parte de la decoración de un gran jardín. Brazos extendidos hacia atrás soportando el peso de su cuerpo. El lugar ofrecía una buena vista a la ciudad. Luces deslumbraban, ocupando su atención.
¿Qué haría con su vida ahora? Tomo otro sorbo de su soda.
Jongin se dedicó un buen rato a mirar, alejándose de la realidad por completo. Muchos pensamientos venían e iban a su cabeza. Pero no importaba. Estaba ante la tranquilidad, kilómetros fuera, alejado de la ruidosa cuidad y unos buenos metros alejado de la fiesta que se celebraba a sus espaldas.
Mirando a la nada Kai como le gustaba ser llamado. Siempre fue un chico somnoliento y con esta serenidad sus ojos pedían por ser cerrados, eso hizo por un momento hasta que pisadas anunciaban un intruso en su calmado mundo y una mano se posó en su hombro.
Oh Sehun.
-¿Qué haces aquí? –Sehun preguntaba tirándose justo al lado de Jongin sus piernas flexionadas a su pecho. Jongin abrió sus ojos fastidiado y volteo su cara a re-ojear el chico.
-¿Y qué contigo? ya tiraste ¿Cierto? Quita tu sucia mano de encima.
-¡Woh! Alguien está de mal genio… -Decía Sehun, una pequeña risa salió de su boca, empequeñeciendo sus ojos -¿Y tú qué? Estas fuera de castidad. –Sehun esta vez re-ojeando así como su amigo hizo hace un momento, se burlaba.
-Cierra la boca. –Jongin volvió a fijar sus ojos a la lejana cuidad tratando de olvidar a la molestia de su amigo. Sin embargo era imposible.
-Hey… Aquí esta, toma. –Oh Sehun, de la nada lanzo una paca de billetes cayendo en el estómago de Kai. Sí que era pesada.
-¿Q-que es esto? –Jongin casi olvidaba la razón por la que había hecho tal estupidez y lo había llevado a todo esto que era ahora.
-¿Acaso eres inepto, idiota…? –Sehun pregunto en tono molesto y reclamante pero nunca olvidando provocar al mayor.
-Uhg… has silencio... ¡Lo había olvidado! ¿Bien? –Jongin tomo el dinero y sin importancia descuidadamente lo tiró a un lado. En este momento las luces de la cuidad eran más importantes. –Gracias.
-¿Por nada…? Y… uhm y como… ¿harás? Digo ya no tienes que retenerte… ¿alguna chica en mente? –Por alguna razón, Sehun sin duda era un imbécil entre las personas, Jongin lo sabía muy bien. Pero había ese lado de él, que cuando se encontraba a solas y hablaba con ese tono de voz, te convencerías que podría ser una persona con quien podrías hablar, hablar de verdad. Incluso si ese era el caso, Kim Jongin no caería tan fácil.
Kai dejo que una risa agria saliera de él. –Todo es sexo contigo, ¿no…? -El peli-plateado sin ánimos de seguir prefirió callar.
-¡Oh vamos, Jongin! Tú y yo sabemos que no aguantas, aunque admito que eres admirable. –Sehun decía con esas caras de niño pudiente y refinado que le salían de cuando en vez. –Aguantas todas mis provocaciones. Demonios, yo hubiera estado con lo primero que se me cruzara por los ojos y pudiera caminar.
-Aberrado… ¿Qué sugieres? ¿Qué este contigo y pagar todas mis frustraciones? Paso…
-Uhm… no estaría mal. –Sehun informó haciendo gestos con sus hombros.
-¿Boah? Suena a que el desesperado… e-eres tú… -Kai después de la impresión, se mofó ante las insinuaciones de su amigo. Siempre desde que conoció a Sehun, el chico tenía una mente que podría decirse enferma. Claro que cuando este las sugería eran en plan de juego.
Pero el silencio que ofrecía la noche hacia que sonara distinto, en la opinión de Jongin.
¿Acaso Oh Sehun estaba bien con la idea? ¿Acaso Oh Sehun le estaba haciendo saber que no le molestaría estar con hombres? Eso emocionó a Jongin, tal vez solo un poco.
-Es el último día de clases, ¿qué esperabas? –Sehun aclaro como si fuera la cosa más obvia del mundo cometer locuras en el último día, como excusa –Además que he oído que se siente mejor si lo tienes dentro del trasero de alguien.
Jongin no pudo detener a reír desde el fondo de sus pulmones, hacía mucho que no reía. Era un poco incómodo hablar de estas cosas. Después de todo no se había corrido en mucho tiempo. Pero él era el único riendo ahora.
El ambiente se volvió muy tenso cuando consideras la idea de cómo se sentiría. Kai en cuestión de segundos, sintió un ‘tic’ prominente en la parte baja de su cuerpo. De ninguna manera. El pensamiento no se iba, era muy tentadora y el curioso. Inconscientemente debido a la tensión que se formaba no solo en el ambiente pero sus pantalones. Jongin volteo su cara a mirar a Sehun, quien tenía sus ojos seriamente clavados en él.
No entendía que ocurría, pero sentía que tenía conocimiento de lo que iba en mente de Sehun en el exacto grado donde cruzaron miradas. A pesar de que Sehun solo tenía reflejada una cara sin expresión alguna. Kai por otro lado se negaba en aceptar tal cosa. Después de ver su cara por suficiente tiempo, nervioso inclino sus ojos a otro lado.
¿Acaso sus manos sudaban?
-¿Jongin? –Su tono de voz era taladrante.
-¿U-Uh? –Jongin ni de broma volvería a ver a Sehun en la cara. El rubio lo noto e inmediatamente aclaro su garganta. Ahora eran sus dedos que no tenían control. Aun, era ahora o nunca.
Sehun poso su mano delicadamente sobre el muslo de Jongin que se extendía a lo largo. Haciéndolo casi saltar del susto, Jongin estaba nervioso y no lo sabía. Sehun igual, pero tragando sus nervios vivos. Jongin a pesar de la acción, su cara expresaba inquietud e impresión pero su cuerpo no se movió ni un milímetro. La mano de Sehun abarcaba parte de su media pierna. No quería pensar cómo se sentiría en su miembro.
-¿Hace cuánto no te dan una buena mano, Jonginnie…?
-Yo…- Jongin re-lamio sus labios, demonios que tenía sed. –D-Desde… hace un año Sehun… ¿n-no es obvio? –Jongin trato de sonar todo ‘cool’ Pero él sabía que era la peor actuación de su vida. Estaba titubeando después de todo. -¡A-a…! –Ni siquiera podía formular alguna palabra pues Sehun deslizaba su mano a los lados de su muslo, lentamente yéndose a su entrepierna.
‘Tic’
-S-Sehun, creo que es mejor-… Oh mierda. –Jongin mordió sus labios reprimiendo salir un suspiro de placer. Sehun atrevidamente deslizaba su mano aún más, palpando la erección de Kai. Ahora el re-lamia sus labios.
-Se siente bien, ¿no…?
-Se…hun. –Jongin apretando sus ojos, no tenía idea de lo que ocurría, solo que se sentía bien y quería más. Su cara se calentaba y seguro pronto mejillas levemente se oscurecerían de rosa.
-Maldición Kai, si te vieras… Podría comerte ahora mismo. –En un tono bajo, casi como un murmuro dijo Sehun. En medio de un acto de desesperación por sentir algo contra él, mientas daba un poco de placer a Jongin, conectó en un gruño sus labios con los de Kai.
Kai no correspondió al instante, muy impactado para comprender pero particularmente lo regreso. Era torpe ya que Jongin aun intentaba respirar con normalidad.
El rubio de cabellos color miel en ventaja, provocaba al otro introduciendo el húmedo músculo. Entrelazando su lengua con la de Kai. Pero cuando el peli-plateado buscaba por más este la retiraría juguetonamente, solo por molestar al mayor. Se robaron uno que otro beso que terminaban en chupones. Pero el show debía continuar.
-Uhm…Jongin… -Sehun harto de solo tocar, ya con una notoria erección decidió acabar al mayor de una buena vez. Removiendo los pantalones de Kai lo más rápido que pudo. Sus alientos se perdían en el aire. Jongin solo observaría a Sehun, y Sehun relamería sus labios para bajar su cabeza y trazar besos mojados entre la textura de tela que recubría el miembro de Jongin, necesitando ayuda. Entre los besos que parecían ingerir el miembro de Jongin, este tuvo que rodar sus dedos entre su cabello apretando levemente ya que Sehun estaba usando su lengua como nunca. Kai aventó su cabeza hacia atrás dejando ver su largo cuello. Un pequeño gimoteo abandonando su cuerpo.
-Arg-…Sehun. –Kai no soportaba más o en realidad quería más. No sabría responder eso si se lo preguntaran.
¿Cómo era la lengua de Sehun tan húmeda? Claro que Sehun comenzaba a tener incomodidad en su ángulo mandibular (para no solo destacar su propia erección) por tener su boca tanto tiempo abierta, y tenerla en constante trabajo, siendo este su primer soplo. Babear no era malo después de todo. Sería una perfecta lubricación, porque a Sehun no le importaba dar chupones a Kai por toda la noche y tal vez el resto de su vida. –Maldición me voy a correr.
-No tan… rápido. –Dijo Sehun limpiando la esquina de su boca, aun había tiempo, para ingerir completamente el miembro de Kai. Bajando lo que restaba de su bóxer. Kai al fin tenía su miembro libre y Sehun no le dio tanta libertad pues rodeaba con ansias la glande hasta bajar del todo, tomando el resto de la superficie que no alcanzaba su boca, con su mano.
-¡Mierda!… Sehun ugh… -Kai entrelazó su dedos de nuevo en el cabello del semi-rubio esta vez con más fuerza evitando mover su pelvis más de la cuenta contra Sehun. Eran solo una pocas bombeada entre esas tres acciones para que Kai se terminara, contrastando sus leves movimientos de pelvis con las chupadas de Sehun. Líquido seminal corría a los lados, vía abajo, Sehun no tragaría eso jamás.
-Mi turno. –Declaro limpiando de nuevo su majestuosa y privilegiada boca. Volviendo a un rudo beso para que Kai pudiera degustarse. Sin embargo en cuanto Jongin procesaba las palabras sus nervios volvieron.
¿A qué se refería Sehun con su turno? ¿Iban con todo? Kai quería caer en cama después de esta experiencia.
A esa declaración, Sehun se levantó, tirando a un lado su corbata que lo hacía ver elegante. Ajustada camisa quedaría suelta la grama y su pantalón de vestir de costoso diseñador seguiría el paso. Dejando ver su lechosa piel y sin olvidar su gran miembro.
Kai en vista de esto estaba excitado de nuevo. Definitivamente incitado para la segunda ronda.
Sehun volvió abajo y coloco sus manos a los lados de la cintura del mestizo, devolviendo besos y ese movimiento tan exótico con su lengua. Presionando su miembro contra la pierna de Kai. El peli-plateado dejando salir un gemido agudo, después de todo estaba sensible.
-Di-dime que trajiste lubr… -Jadeaba Jongin preocupado, pero sin olvidar buscar tocar el miembro de Sehun a ver que sentía o le podía causar.
-¡A-argh…! –Sehun definitivamente necesitaba correrse, después de desahogar un quejón suspiro de adentro al sentir los dedos curiosos de Kai. –En mi pantalón… Solo… Maldición eso ah… -Sehun no evitaría expresar su disfrute de como hacia Jongin tratando de obviar sus lloriqueos. Al fin encontrando el tubo de lubricante entre sus pantalones. Tiro la tapa en quién sabe dónde y sin pensarlo dos veces tomo la mano libre de Kai, introduciendo sus dedos para que se empaparan del contenido. Seguido de el en mojarlos igual.
-Kai… Sera mejor que te prepares… -Si Jongin seguía estimulando su miembro de esa manera Sehun no pensaría en nada más que tomarlo por la retaguardia.
Kai con suficiente conocimiento teórico de lo que se refería el menor, sabía que sin preparación ardería más de la cuenta. Así que llevo sus propios dedos a su parte más íntima y con el vigor que su cuerpo emitía en ese momento introdujo dos dedos sin pensarlo. Fue extraño y nada cómodo pero no dolía y las ganas de ser tomado por Sehun lo eran aún más. Sehun en tortura, se apretaba de arriba abajo lentamente no muy fuerte, evitando ver que hacia Jongin aunque era muy obvio. Pero Sehun descuidadamente devolvió sus ojos al mayor y quedo casi perplejo, Al parecer Kai era la cosa más sensual y maravillosa del mundo en ese estado. O al menos para Sehun.
-Uhm… ah-… Sehun… -Kai gemía, la única manera de disfrutar esto era pensando que aquellos tres dedos eran Sehun y empujarlos con vigor, lo suficiente como para poder aguantar. –Ya Sehun… Ya-…. –Jongin no quería esperar más.
Pero Sehun sabía que esto era una oportunidad de una en un millón y las experiencias quedaban. Con unos de sus dedos buscando la boca de Jongin coloco su dedo en los labios del peli-plateado entre jadeos, ampliándose. No entendía, hasta que vio la perversa mirada que tenía Sehun en sus ojos. Abriendo su boca comenzó a chupar lo mejor que podía, para después recorrer todo el digito con su lengua lo suficiente como para considerarse lubricado. Sehun rápidamente con una fuerza y agilidad inexplicable con su dedo y tres dedos de Kai en su entrada, lo introdujo para expandirlo más.
-Ah…Maldición Sehun…
-¿Cómo se siente? –Sehun en tono masoquista, no perdía un segundo de ver las expresiones que mostraba el rostro de Kai. Exigía una respuesta.
-B-bien…Oh ¡Sehun! –Sacando ese dedo junto con los otros tres suyos, De un jalón Kai agarro el cuello de Sehun para un rudo beso. Sehun tomo las caderas de Kai.
-Mierda…Jongin… tus piernas.
-L-Lo siento –Jongin abrió sus piernas abrochándolas a la cintura de Sehun para estar más cómodo.
Sehun se despegó del beso para tomar aire, una mano hacia la mejilla trasera derecha de Kai y la otra tomando su propio miembro alineándolo para poder entrar en Jongin.
Kai sentía la punta anclarse en él y era malditamente increíble.
-Ugh…Sehun solo entra… Estoy listo…- Dijo al ver la inseguridad del menor y eso fue todo para Sehun, solo necesitaba esa señal.
-Ahg… Kai como-… tenías cuatro dedos allí, ¿cómo estas tan apretado? –Sehun en la lucha de entrar se dio cuenta que esto no era como una chica por nada en el mundo.
-Lo siento, Sr. Enorme. –Kai dijo en sarcasmo -¡A-ahhh…! –Arrepentido pues a medio camino de tener el miembro de Sehun este terminó de entrar con un empujón.
-Maldición… -Sehun hundía cabeza en el cuello de Jongin, la presión que tenía allí era perfecta pero lo estaba comiendo vivo no poder moverse –¡Jongin…!
-S-solo un mi-minuto. –Ambos cuerpos sudaban sin parar y Sehun solo apretaba la parte trasera de Jongin con sus manos para conformidad. –Ya Sehun, muévete.
-Agh mierda, s-si… -Sehun quien gemía en medio silencio, a pesar de lo comprimido alrededor de su miembro, manejo muy bien el vaivén de caderas. Jongin quien recostaba en el piso recibía cada choque de piel, rodo su cabeza hacia atrás por segunda vez a medida que Sehun aumentaba sus movimientos.
Embestidas de animal. O así llego a pensar Kai que eran.
-¡Ah! Sehun… ¡Justo a-allí ugh…! –Las embestidas eran más fuertes y no sabía que era pero estaba seguro que Sehun tocaba un punto allí, tal vez su próstata, una y otra vez.
-Jo-Jongin- oh mierda Jonginnie… -Sehun sudaba concentrado en las embestidas gemidos silenciosos pero lo suficientemente altos como para que Kai los oyera. Las embestidas seguían y Kim Kai era un desastre en gemidos y jadeos.
-Ugh- ¡Sehun…! M-Mas- Oh por favor, ¡mas…! –Sehun en medio de las embestidas maniobro morder los labios de Jongin de nuevo lográndolo callar y solo gemir en su boca para terminar de sofocarlo.
-Ya-…Uhgm ¡Se-Sehun…! –Ambos estaban al borde, las embestidas a pesar de ser irregulares no dejaban de ser fuertes.
La espalda de Kai se arqueo a tal punto que sus músculos se contrajeron.
-Aghh…!Ahhh…! ¡Oh Sehun…! –El mejor orgasmo en mucho tiempo.
Sehun entre los gemidos de Jongin consiguió correrse y terminar muy duro dentro de él tomando su tiempo. Rodando su orgasmo lo mejor posible. No que su cuerpo le diera mucho para ello pero aun así. Minuto después de rodar sus caderas hasta lo último, sus respiraciones se podían oír claramente. Fue allí donde Sehun pudo recordar que Kai se había terminado por segunda vez esa noche, ahora en su estómago. Pues el líquido ya no era tan caliente, cada gota se volvía fría a la temperatura de la intemperie. Después de que su miembro se volviera lo suficientemente flácido para salir de Kai, se lanzó a un lado. Agotado.
Kai aún no había hablado, siendo francos ninguno de ellos dos tenía la energía. Su cara era in-leíble. Sehun prefirió obviar eso y mejor enfocarse en que estar desnudo por tanto tiempo no era tan agradable, y lo friolenta que se encontraba la noche no era tampoco la mejor, se preguntaba si Kai tenía frio. Sehun recogía sus cosas a vestirse. Jongin notando su presencia, lo devolvió a sus cinco sentidos, permitiéndole hablar.
-¿Sehun? –Voz somnolienta y fina a su típica ronca voz.
-¿Uhm…? –Sehun tomado de sorpresa giro a prestarle atención, levantando sus cejas, Kai trago duro.
-¿So-somos algo? Digo-… Después de esto…
-Oye. –Sehun interrumpió, tomando en cuenta que era lo mejor para decir –Todo depende de ti Jongin, después de todo… siempre quise estar-… sabes… ¿contigo…? Solo que no sabía si estabas de acuerdo con todo esto. –Sehun explico todo como si fuera la cosa más normal del mundo aun así sonando inseguro.
-¡E-Espera! –Kai abrió sus ojos, exaltado, seguro había oído mal. -¿Estar conmigo? ¿¡A-A que te refieres!? –Sehun reía amargamente.
-Dime, ¿Por qué habría un chico de mi estatus compartir habitación, cuando podría comprar mi propio departamento y ser escoltado hacia mi aula de clases? ¿Uh? –Arrogante Oh Sehun volvía a la vida. Este volteo completamente su cuerpo para estar cara a cara con el mayor -¿Por qué estudiar en una universidad si puedo tener profesores particulares…?
-Sehun yo-… -Kai ni pudo hablar atorado, a la proximidad del rostro de Sehun y lo que estaba soltando de su boca.
-¿Por qué crees que nunca estaría en la habitación y me iría con cualquiera Jongin? ¿Uhm? ¿Por qué estar tan excitado todo el tiempo? –Sehun sonreía esta vez, después de tener una seria y larga cara. -¿Por qué te molestaría y te pondría en una estúpida apuesta para que nadie te tocara? –Sehun tomo con sus dos manos el rostro de Jongin, delicadamente.
-Todo es por ti, Kim Jongin. –Sehun no pudo evitar y rosar sus labios con los de Kai. Solo para terminar dándole un agraciado beso. –Todo… Todo eres tu Jongin.
Un momento…
-Ugh, despierta. Si no te levantas no llegaremos a la graduación –Sacudía Sehun el cuerpo dormido del peli-plateado.
-¿Bo-boah? –Jongin ni siquiera podía despegar sus ojos. ¿Qué clase de sueño era ese? Por supuesto que Oh Sehun jamás sería tan dulce
-¿Qué esperas? ¿Un beso? ¡Ya despierta!
-Ya ya, ya voy ugh que molesto…
-Vamos, hay que cargarte.
-¿Cargarme? ¿Por qué? Yo puedo moverme so… -Un adolorido espasmo lo tumbo.
-¿Crees que después de anoche… tendrías fuerza? –Sehun doblo su cuerpo para estar cabeza a cabeza con Jongin. –Buenos días Jonginnie. –Sehun con un pico en los labios sonrió soberbiamente. –¡Ahora levántate! –Con un jalón de sus cobijas Jongin cayó torpemente en el suelo.
-¿O te cargo?
-¡Maldito seas Oh Sehun!