Habia pasado un buen rato desde que sebastian se habia ido y luego de curar mi pie y calmarme pude limpiar el desastre de vidrios y dedicarme a hacer mi almuerzo.
Moria de hambre y no soy demasiado diestro en la cocina asi que pense en una tortilla, simple, pero delicioso.
El resto de la tarde transcurrio sin mayor problema viendo tv en la sala, revisando mi pc, chateando con amigos, en fin lo que haria cualquier dia normal entonces mire hacia el reloj de pared en la sala y me di cuenta de que eran mas de las 7:00 pm. ¿Que no dijo que vendria en un hora? estara bien?
De pronto la puerta comenzo a abrirse.
- Hola cariño
- hola mama, que tal el dia
- asqueroso, estamos teniendo problemas de personal en la editorial, esta semana sera critica, pude escaparme de milagro, pero estoy segura que pronto me pediran que me quede.
- Claro, quien puede hacer el trabajo mas efecientemente que tu?
- ¡JA! ojala eso me consolara, odio dormir en esa maldita oficina. ¿en fin como ha estado tu dia?
- Pues tranquilo, desperte, prepare algo de comer y...
- ¿de comer, acaso quedaron con hambre? estaba segura que con la comida que deje ambos quedarian satisfechos
¡Maldito cerdo, prepotente, gloton! ¡me habia dejado sin desayuno! Basta no hagas sentir mal a mama.
-Ah si, claro, solo senti un huequecito en mi estomago y comi algo luego de que sebastian se fuera.
- Si me escribio y dijo que saldria a echar un ojo al vecindarion, le dije que te avisara y me dijo que con gusto lo haria ¿Porque no has ido con el?
- Eh no lo se
- Seguro tu mala actitud lo espanto.
Oh madre, si alguien tiene problemas de actitud, es tu hermanito.
- No lo creo, adem...
La puerta se abrio de nuevo. Esta vez era sebastian.
-Buenas noches.
- Hola cariño ¿como te ha ido? ¿que tal has visto el vecindario?
- Encantador. Ya le eche el ojo a algunos locales que seguro visitare a partir de mañana.
- pues eso suena esplendido, estoy convencida de que en el trabajo me haran tomar dobles turnos...
- La vida del editor querida hermana.
- Si exactamente, asi que seria maravilloso que salieras con ciel a divertirse, estoy segura de que lo pasaran bien.
- Por supuesto Ammy (Solo por si no lo habia mencionado, el nombre de mi madre es ammy) Seguramente al pequeño ciel le encatara que lo saque a pasear no es asi?
Mi madre sonrio enteramente complacida
- Oh claro te lo agradecere enormemente sebas!
Sebastian removia mi cabello con su mano y senti que del encabronamiento me iba a estallar un cojon. a penas mi madre dio la vuelta para ir a la cocina. me sacudi violentamente su mano y en susurros para que mama no me escuchara le dije un par de cosas.
- Eres un desgraciado acabaste con la comida de esta casa y ahora juegas al tio amable.
- no seas escandaloso mocoso ignorante.
- Maldicion te dije que dejaras eso!
- Y yo te dije que tuvieras cuidado, cambiate el vendaje del dedo antes de que llenes todo de sangre. o ¿quieres que le avise a mami, para que te ayude, pequeñin?
Su maldita sonrisa burlona estallo en una carcajada, mientras veia como mi rostro se retorcia de rabia, me di la vuelta y camine con puños apretado y cojeando para evitar que el vendaje que comenzaba a sangrar de nuevo manchara el piso. a mis espaldas su risa se hacia mas fuerte.
- ¿que pasa sebastian, te lo estas pasando en grande?
- De eso no cabe duda.
En mi baño pude quitar el vendaje usado y colocar uno nuevo, se habia dado cuenta de que me corte y ahora me fastidiaria el resto del verano con esa idiotez, esto va de mal en peor.
- Debe ser el viejo mas inmaduro del mundo.
El dia termino con una cena los tres juntos, cuando mi madre se descuidaba, sebastian me sonreia burlonamente y yo le dedicaba mi dedo medio, como si fuera la mayor de las obcenidades, pero segun yo creo, mi rabia lo hacia disfrutar mas.
descubri que cuando se reia, la pesadez de sus ojos disminuia, podia verle sin paralizarme y creo que asi era mas facil odiarlo, agradeci por eso mientras me acomodaba en mi cama el incidente de la noche anterior cada vez quedaba mas enterrado en mi mente, luego me deje ir en un profundo sueño.