Login
Amor Yaoi
Fanfics yaoi en español

Un pedido, una escena por Anashi

[Reviews - 28]   LISTA DE CAPITULOS
- Tamaño del texto +

Notas del fanfic:

-Este es un fanfic donde se aceptan solicitudes de One shots, sólo con una condición, tiene que ser uke!Gray, si el pedido es seme!Gray, no se aceptará. La razón es simple, hay muchos fics donde Gray ya es el seme y a mi personalmente no me gusta, así que no voy a escribir algo que no me guste aunque sea un pedido, espero que podáis entenderlo. :)

 

- Cuando se haga un pedido, intentad ponerme todos los datos posibles. (¿Humor?, ¿Drama?, ¿AU?, ¿mpreg?, ¿Pareja principal?, ¿Lemon? ¿Qué es lo que ocurre principalmente?)

 

- Se intentará colgar un pedido cada semana (cada domingo).

 

- Cada semana se cambiarán las advertencias y el resumen del One shot ^^.   

Notas del capitulo:

Dedicado a Sasukita, que me pidió un one shot con uke!Gray Yandere. Debo admitir que fue gracioso explicarlo, es la primera vez que lo escribo tan celoso :')

Gray se despertó y se sintió extraño.  ¿Qué hacía en la enfermería del gremio? Él estaba completamente bien, así que... ¿Qué hacía allí? 


Escuchó voces y miró hacia el pasillo, al parecer aún no se habían dado cuenta que se había despertado. Lucy estaba hablando con Natsu, y de pronto colocó una mano en el hombro del dragon slayer. Gray frunció el ceño de manera descarada. ¿Qué se creía esa chica para estar cerca de su Natsu? Natsu era sólo suyo, nadie más le tocaba.


Gray movió su cabeza nerviosamente. ¿Qué estaba pensando? ¡Era Lucy, por Dios! Sabía perfectamente que Lucy no iba a hacer nada con Natsu. Pero Lissana también estaba cerca de él.  Tenía que admitir que siempre se había sentido celoso de Lissana. Estaba mejor muerta, así no tenía que preocuparse de que le fueran a robar a su Natsu.


El mago de hielo suspiró, él no podía pensar eso, Lissana era su nakama, no su rival o algo así... Pero mejor que estuviera lejos de su Natsu. De pronto entraron en la habitación los tres, y su Natsu le estaba mirando con una mirada preocupada.


— Gray, ¿Te encuentras bien? — Preguntó preocupado su novio. — Te desmayaste de pronto, al parecer algo te picó en medio de la misión y eso te produjo fiebre. Polyska-san se llevó una muestra de sangre para ver que todo estaba bien. — Oh, eso explicaba sus enrojecidas mejillas y su dolor en el cuello, donde parecía tener una pequeña herida. — ¿Te encuentras bien? — Volvió a preguntar. Gray sonrió. Que lindo era su novio, siempre preocupándose por él. 


— Estoy bien, Natsu. Lamento haberte preocupado.— Contestó con una sonrisa animada. Natsu se extrañó. ¿Desde cuándo Gray sonreía de esa manera, tan alegre y tan dulce?  


 — ¿Seguro que estás bien? —


— Perfectamente. — Comentó. Estuvieron un rato hablando,  o más bien Natsu, Lucy y Lissana, porque Gray sólo se dedicaba a observar atentamente a las chicas hasta que Lucy y Lissana decidieron irse. Lo único que pidió fue que cerraran la puerta de la enfermería, ya que quería algo de intimidad con Natsu. Su dragon slayer le miró preocupado.


— ¿En serio estás bien? ¿Cuándo has querido tú intimidad? — Preguntó preocupado. Gray sonrió de manera sexy.


— Natsu... Yo… Quiero intimidad porque te necesito, ahora. — Susurró, mientras se acercaba con un sonrojo, pasando sus brazos por el cuello del chico del pelo rosa, besándole. Aquello extrañó aún más a Natsu. Gray, ¿diciendo que le necesitaba? ¿En la enfermería?  ¿Cuándo normalmente sólo quería si estaban en su casa y en momentos puntuales? ¿Cuándo normalmente era Natsu quién daba siempre el primer paso?


— ¿Estás seguro que quieres esto, Gray? — Preguntó con nerviosismo, sin saber si realmente este era su mago de hielo u otro. Aunque la verdad es que la excitación le complicaba bastante detenerse. Colocó sus manos en el trasero de Gray, haciéndole sonreír.


— ¿Crees que ahora podrás detenerte, Natsu? — Susurró en su oído. Natsu sonrió de manera pícara, antes de apretar el trasero de su novio.


— No sé si esto es producto de tu fiebre o qué,  pero no voy a desperdiciarlo.— Bromeó,  haciendo reír a Gray.


— Eso es, Natsu. Marcarme como tuyo, que todos sepan que soy tuyo y tú eres sólo mío.— Susurró. Natsu se sorprendió. Gray solía odiar que Natsu fuera tan posesivo. En serio, la fiebre le estaba haciendo ver una faceta bastante curiosa de su novio, aunque no se quejaba. 


 


Besos, gemidos y jadeos sonaron por toda la enfermería. Natsu sonrió cuando llenó por completo a Gray. Parecía que Gray lo había disfrutado y eso le alegraba mucho. Salió deleitándose por la sensación y sonrió cuando Gray demandó sus labios, saboreando su boca helada.  


— Venga, vamos al gremio o se preocuparán por nosotros. — Bromeó Natsu, mientras se vestía. Gray puso una cara molesta, sabiendo que entonces Natsu vería a Lucy, Lissana y los demás. Y Natsu era sólo suyo, no de nadie más. — ¿Gray? ¿Te encuentras bien para ir al gremio? — Gray asintió. ¡Por supuesto que se encontraba bien! No iba a dejar a su Natsu solo con esas arpías. 


 


Tal y como lo había supuesto, Natsu se puso a hablar animadamente con Lucy y Lissana. Incluso le tocó ligeramente el cabello a Lissana. ¿Por qué? Siempre había sido celoso de Lissana, pero ahora mucho más. ¡Ella estaba muerta! ¡Sólo era un recuerdo del pasado! Entonces, ¿Por qué su Natsu hablaba con ella?  


Quizás... Él debería llevarle de vuelta a donde pertenecía... 


— Gray-san, ¿estás bien? — Preguntó de golpe la joven Wendy, que estaba a su lado. Tsk, Gray se quejó interiormente. No podía llamar la atención si quería hacer su maravilloso plan para quitar de en medio a sus posibles rivales.  Entonces sonrió animadamente. 


— Estoy mejor que bien, Wendy-chan. — Contestó, aún sonriendo, despeinando el cabello de Gray. — ¿Sabes? Hoy estás más linda de lo usual. — Wendy palideció por tres cosas. La primera, Gray le había llamado 'Wendy-chan', la segunda, estaba sonriendo de una manera muy diferente a la habitual, y la tercera, de pronto le había dicho que estaba linda. Gray nunca hacía eso. ¿Qué demonios le sucedía? — ¿Wendy-chan? ¿Estás bien? — Preguntó. Wendy asintió, pero aún se quedó mirando al mago de hielo. Nunca en su vida se hubiera imaginado que Gray con fiebre cambiara tanto, siendo bastante más... ¿Dulce, lindo? Se fijó como de pronto su rostro cambiaba a uno serio cuando miró de nuevo a Lissana. ¿Qué tenía Gray en contra de Lissana? 


Pasaron cuatro días y todos se dieron cuenta del cambio del mago de hielo. De pronto, Gray saludaba a todos, con una gran sonrisa, diciéndole a todos halagos, y en cuanto tenía un momento a solas, besaba a Natsu, algo que normalmente no haría, de echo, era Natsu quien normalmente le robaba los besos, pero ahora no.


 


Lissana regresaba después de una misión algo complicada ella sola, cuando se encontró a Gray en la entrada del gremio. 


— Hola, Lissana-san. ¿Qué tal tu misión? — Preguntó, con una sonrisa. Lissana se sorprendió por la preocupación de Gray, tanto, que ni siquiera se dio cuenta que utilizó un sufijo en su nombre que nunca antes había usado. Ella sonrió, ¡Qué buen novio tenía Natsu, tan preocupado!


—Ha ido bien. Gracias por preocuparte.— Respondió, lista para ir al gremio, cuando Gray le cogió del hombro, sorprendiéndole. 


— Lissana-san, ¿Puedes venir conmigo? Yo... Quiero decirte algo...— Susurró con un sonrojo. Lissana lo encontró tierno, ¿quizás Gray tenía alguna duda sobre Natsu? 


 


Natsu suspiró, buscando con la mirada a su novio. Hacía un rato que no le veía y la verdad es que le preocupaba, Gray había estado demasiado extraño. ¿Dónde estaba su chico tímido pero amoroso en la privacidad? Ahora repartía su amor con todo el mundo. En serio, ¿Era por la fiebre? O quizás simplemente había cambiado. Él no lo entendía. De pronto, llegó Polyuska, jadeando.  


— ¿¡Dónde está Fullbuster!? — Preguntó, sorprendiendo a la gente del gremio. 


— Creo que había ido a hablar con Lissana... — Comentó Lucy, preocupada por la reacción de Polyuska.


— Esto es malo... ¡Esa chica va a ser asesinada por Fullbuster! — 


— ¿¡Qué!? —


 


Lissana estaba extrañada. Gray no había hablado durante todo el camino, dejándola un poco nerviosa. Y se asustó aún más cuando le llevó a un sitio completamente aislado y con una sonrisa macabra.


— ¿Gra-Gray? ¿Te ocurre algo? — Preguntó de manera nerviosa. Se asustó completamente cuando Gray le congeló, dejándole a partir del pecho sin congelar. Luego hizo una daga de hielo. — ¿Gray...? ¿Qué estás...? — 


— Dime, Lissana-san... ¿Te gustó robarme a mi Natsu-kun? — 


 


Natsu comenzó a correr de manera exagerada mientras llevaba una pequeña jeringuilla con antídoto. ¡Ahora lo entendía todo! ¡Gray había sido infectado con la enfermedad del yanderismo! 


— Para ser clara, esta enfermedad hace que por delante sea la persona más cariñosa y dulce del mundo, pero por detrás... Odia a todo lo que se acerca a su persona querida, en este caso Natsu. ¡Probablemente lleva desde que despertó preparando su asesinato contra esa chica! 


Natsu chasqueó la lengua, sonaba totalmente ridículo, pero... Ahora todo cuadraba. Por suerte, siguió el olor y allí los encontró. Por unos pocos minutos y la historia habría acabado diferente, pero por suerte, llegó a tiempo. Tiró a Gray al suelo y luego le inyectó el antídoto. De pronto, se quedó dormido.  Y Lissana se puso a llorar como una magdalena, aunque por suerte Natsu le pudo contar la verdad a la chica. Acarició el cabello de Gray, pensando que era muy lindo que fuera tan celoso con Lissana. 


...Después de todo, él también había tenido instintos asesinos contra Lyon y Loke alguna vez. 


 


Gray se despertó y se sintió extraño.  ¿Qué hacía en la enfermería del gremio? Él estaba completamente bien, así que... ¿Qué hacía allí? Y, ¿Por qué sentía que había dormido demasiado? No recordaba nada desde que acabó esa estúpida misión. 


De pronto llegó Natsu y le explicó todo. Al parecer había estado a punto de asesinar a Lissana. Bueno, Gray siempre admitió que era celoso de Lissana (e incluso un poco de Lucy) pero nunca se le ocurriría hacer nada así, ¡Eran sus nakamas! 


Se sonrojó cuando Natsu mordió su oreja, ¿Qué se creía su novio? ¡Estaban en la enfermería! 


— ¡Na-Natsu! — Jadeó completamente rojo, haciendo a Natsu sonreír. Sí, este era su verdadero Gray.


— Honestamente, Gray, me gusta más cuando eres un tsundere. —


Aquello, por alguna extraña razón, le hizo sonrojarse.


— Estúpido cerebro de llama. — 


Natsu sonrió satisfecho, sí, mucho mejor eso que 'mi Natsu-kun'.

Notas finales:

Se me borró el capítulo antes de enviarlo y fue totalmente frustrante... Por suerte conseguí escribirlo antes de acabar el día X_D 

Espero que os haya gustado, es divertido hacerlo yandere, pero creo que todas adoramos a tsundere Gray :P 

Un saludo! ^.^


Si quieres dejar un comentario al autor debes login (registrase).